Novela Kenzo El Matem Tico

8/16/2019 Novela Kenzo El Matem Tico

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Primera Edición

K,

Carlos Alberto

Nava Fonseca


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Para mi esposa

y por aquellos que soportaron mis delirios.


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AVISO

El presente libro es una obra de ficción. Los nombres, perso-najes, lugares e incidentes son productos de la imaginación delautor o son usados de una manera ficticia. Cualquier semejanzacon eventos y/o incidentes actuales o pasados, personas vivas

o muertas es pura coincidencia.


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NOTA DEL AUTOR

El Instituto Tecnológico de Tokio, Mitsubishi, . . . son distintasorganizaciones/sociedades civiles, comerciales, mercantiles,educativas, públicas, que existen. Algunas de las tecnologíasque se describen en esta novela existen pero otras que se

narran aquí utilizan el marco de referencia anterior y sonproducto de un concepto imaginario.


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Índice general

Índice general

I El inicio

Como el viento, el bosque, el fuego y lamontaña

Sueños del universo

Medidas drásticas


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Carlos Alberto Nava Fonseca Kenzo, el matemático

II El viaje

Una vez en la vida

La negrura del abismo

Estudia el pasado, entiende el futuro

Sic transit gloria mundi

III El regreso

No sólo una cara bonita

La vida tiene altibajos

Fantasma electrónico

Los grandes talentos tardan en madurar

El hombre sabio se adapta rápido

Así pasa la gloria del mundo


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Introducción

Non scholae sed vitae discimus.

–Seneca

Kenzo el matemático nació como idea cuando estudiaba la

Maestría en Investigación de Operaciones. Desde ese entonces,estuvo rondando la idea de una novela que se enfocara enla vida y la personalidad de una personaje que utilizara laoptimalidad y la lógica para tomar decisiones sin llegar a serrobotizado. Al final de cuentas cada decisión que tomamosestá influenciada por la temporalidad y espacio de cada uno denosotros. Además, tenemos muchas influencias externas. Peropara Kenzo sus influencias eran internas, en otras palabras,

No aprendemos de la escuela, sino de la vida


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los resultados de sus decisiones son con base en deduccionesque él tiene a los eventos que ha vivido.

A través de los años, ese concepto fue madurando juntoconmigo. Adicionalmente, tuve la oportunidad de viajar a Japón. Esta experiencia me dio la oportunidad de dar más vidaa Kenzo y cómo sería su vida siendo estudiante, su transición ala vida laboral, sus viajes y hasta sus cavilaciones en ambientes

internacionales. Dando un entorno donde él se enfrentaba apensamientos regionales y su lucha en lograr encontrar unpensamiento universal y transcultural.

La idea se complementó al comprender la filosofía orientalque involucra el ying y el yang . No sólo la perspectiva de

Kenzo sería la que nutriría su personalidad, sino que tambiéndebería de exponer la forma en que otros ven su forma depensar y las posibles críticas que llega a tener la optimalidady la lógica en ciertas situaciones.


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Parte I

E


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Capítulo

Como el viento, el bosque, el fuego y la montaña

— —

Mi familia me cuidaba, se interesaba en mi salud, bienestary felicidad. Perno nunca me comprendió.

Número limitado de recuerdos. Es más directo.


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Capítulo

Sueños del universo

— —

De entre todos sobresale Kenzo.Durante nuestra carrera como matemáticos, en el Instituto

Tecnológico de Tokio, fue donde conocí a Kenzo. Kenzo es ungran compañero y su sueño está más allá de las estrellas. Yo loveo, busca algo enorme, algo trascendente. Tal vez aún no lo haencontrado, porque sigue divagando, es errático. Ha enfocadosu conocimiento en la electrónica y el diseño de hardware para

realizar sus algoritmos. Cómo lo hizo Turing con ACE en laposguerra. Para ambos campos, su conocimiento es amplio. Meha comentado algunas veces, que cuando estuvo estudiandoy era estudiante de la preparatoria. Kenzo era fan de crear sus


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propios algoritmos e inclusive los conjuntos de instrucciones ylos kernel de algunos procesadores abiertos. Algunas veces iba

al club de microcomputadoras a construir el procesador basadoen transistores y lógica. Luego empezó a adentrarse a diseñarhardware, igual con el club de microcomputadoras. Sus logrosincluyen: tener K en EPROM, K en RAM estática, puertos deentrada y salida, así como un teclado y un display básico tipo cal-

culadora. Era miembro activo de foros en internet. Le tomó sóloun intento para ingresar en el Tokio-Tec. El nunca compaginocon el modelo de una universidad. Al ingresar al Departamentode Matemáticas, propuso una tesis de investigación innovadoraayudando a sincronizar los múltiples relojes de un sistema

multinúcleo de cómputo en paralelo. En el Departamento deMatemáticas Computacionales, el cuerpo de profesores, recono-cieron su potencial para revolucionar la tecnología como cuan-do generó los algoritmos y el diseño para sincronizar los relojespara procesadores en paralelo. A Kenzo le emociona los retos.Imaginar que puede crear, lo motiva. El universo es su frontera.

Iniciaba el semestre. Pasó la “Golden Week” con poco descanso.Kenzo y yo comenzamos a buscar donde iríamos para seguir connuestra vida profesional. Por mi parte ya no era posible continuar

por razónes económicas. Mi familia ya no podía seguir pagando


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la universidad. Kenzo aún no me daba sus razones. Tras conocerlo

unos años, lo mejor es esperar a que él lo diga. Después de revisar

cómo se encontraba el calendario de conferencias de reclutamien- to, elegimos presentarnos en Mitsubishi Research Institute (MRI).Asistimos juntos. En lo personal, el ponente no me dejó convencido,

pero para Kenzo, quien tal vez pudo ver algo más que yo, asentó que era muy buena opción. También aprovechamos para asistir a

la conferencia que dio NTT (Nippon Telegraph and TelephoneCorporation). A Kenzo también le gustó. Saliendo hablamos de eso.- Kenzo-kun, a ti todo te gusta. - hablé en tono de burla.

- Hiro-kun, ¿no lo ves? - preguntó casi en tono de incredulidad.

- Hay un reto en la electrónica de las comunicaciones.- ¿En qué sentido? - pregunté casi perplejo.

- Recuerda: “Philosophiæ Naturalis Principia Mathematica”- ¡¿Qué?!, ¿qué es eso?

- El trabajo más excelso de Sir Isaac Newton. Los “Principios Ma- temáticos de la Filosofía Natural”. Poco después de que discute

con Gottfried Wilhelm Leibniz temas de matemáticas, se toma un tiempo para madurar el cálculo y explica sus teorías matemá- ticas con aplicaciones físicas, dando lugar a que naciera la física newtoniana.


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- ¡Ah! Ahora lo recuerdo y ya te entendí.

- Más aún. Mira cómo en esa época la frontera entre una disciplina

y otra no tenía fronteras. Pero entendían que los descubrimientos matemáticos eran directamente atribuibles a conceptos físicos.Tanto es así que el nombre del trabajo no es “Leyes de la Física” o similares. Lo nombró en honor de las matemáticas.

- ¡Exacto!

- Creo que el campo de la electrónica y las comunicaciones tienenel potencial para desarrollar: lógica matemática, optimizacióncombinatoria, algoritmos, ecuaciones diferenciales y tal vez más.- Te creo. Ahora que lo mencionas tienes mucha razón. - dije con

convencimiento total a su argumento.

- Pero para llegar a esos descubrimientos, necesitamos más teoría y no pudimos entrar con Inamura-sensei. - dijo con un tono de molestia.- No nos aceptó por que ya está a punto de retirarse. Ya no formará

más estudiantes. - era una excusa pero también lamento no haber entrado a ese laboratorio.

- Hiro-kun, piénsalo. Quiero entender la teoría. Quiero elaborar mis propias ideas y principios. Para poder enfrentarme a los problemas reales. Justo como Newton.

- Buscas el mejor reto que te pueden dar.


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- ¡Correcto!

- Kenzo-kun, la verdad es que tienes razón. Ahora que lo pienso,

te debo confesar que en el laboratorio me entretengo mucho, tal vez por que entiendo a Okumura-sensei. El tiene mucha teoría pero sólo para él mismo. ¿No debemos cultivarnos así? - pregunté para analizar su postura.

- Él busca el problema práctico y luego la teoría aplicable. Pero

pregúntate, ¿realmente esa es la mejor forma de resolver un problema? - respondió con tesitura.- Puede ser. Tal vez.- Eso me dice que no hay certeza, en cambio, cuando la inves-

tigación en papel es concluyente, entonces siguiendo el ejemplo

de Newton, el principio matemático es aplicable. Sólo hay que descubrir en qué área.- Ya veo. - dije con asombro ante el argumento que había presen- tado. - Por eso querías ir con Inamura-sensei.

- Así es. Supongo que hubiese llegado hasta el doctorado con él.Ya que los descubrimientos teóricos tenían que ser postulados enuna aplicación. Así que Inamura-sensei te mandaba a los centros de investigación multidisciplinarios o con otros profesores para poder darte el grado.

- ¿Crees que hubiésemos descubierto algo en la frontera del co-


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nocimiento?

- Sí, yo pienso que sí. Porque ahora estoy estudiando electrónica,

me estoy dando cuenta que es aplicable mucho. No en el sentido de entender. Sino en el sentido que la matemática tiene el poder de interpretarse electrónicamente.- Cierto. Muy cierto. Tengo yo una idea. Pero no la he dicho por que

pensaba que era una locura. - dije con un poco de timidez. - Kenzo,

tu argumento me ha enseñado que de cierta forma pienso como tú.Creo que hay topología en ciertas bases de datos. Eso puede generar funciones que describan geometría a nivel multidimensional.- ¡Hiro!. Eso tiene potencial. - dijo sonriendo. - Definitivamente

tienes que explorar esa opción.

- Lo se. Deja te planteo mi postulado.- Adelante. Te escucho.

- Los datos son multidimensionales. A un dato en específico se en- cuentra en los dominios de los reales “ene-dimensionales”, aunque algunos son tipo cualitativos pero se pueden generar alternativas.Cómo el nombre o direcciones. La geometría nos dice que las

proyecciones pueden darnos la relación de conexiones no apa- rentes. En términos de cálculo, tenemos las derivadas parciales.También pueden haber otras propiedades matemáticas de esas hiper-superficies.


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- Matrices de matrices en espacios distintos. - dijo Kenzo mirando

el horizonte. Había comprendido el concepto y estaba imaginando

soluciones.- También lo he pensado, pero debe haber funciones continuas si no hay una relación que no conocemos. Si la tenemos, se verá.Si no, ¿cuál es y dónde están esos datos?

- Podemos simular que existe. Luego con el patrón buscar qué es.

¿No? - ya estábamos filosofando del tema.- Entiendo tu punto, imagine que pudiera servir usar un camino hamiltoniano de un grafo para probar la conectividad. Pero eso computacionalmente es extensivo y requiere muchos recursos.- Eso es una técnica exploratoria y no nos garantiza el éxito. Más

bien la usaríamos para asegurar la relación topológica.Nuestras ideas fluían y nos detuvimos en un café para continuar con las implicaciones teóricas, afinar conceptos, explorar otros ángulos para análisis y cualquier otra cosa que nos sirviera para el marco de la hipótesis que tenía. Kenzo siempre podía aportar en los temas que hablábamos. Tenía gran dominio de

varios temas, pero siempre partía de uno: la lógica matemática.La parte que yo considero más abstracta de la matemática. A partir de ese punto entendió lo que quería hacer e imaginaba

conmigo como implementar la topología en las bases de datos.


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Continuamos atendiendo a otras sesiones de reclutamiento, pero al final sólo nos convencieron las primeras a las que fuimos.

MRI y NTT. Ambos preparamos nuestros currículum para enviarlos a ambas empresas. Fueron las que más nos llamaron la

atención. Por lo mismo, fueron a las primeras a las que asistimos.Kenzo hizo su último esfuerzo con Okumura-sensei para

no dejar la academia y preguntó sobre seguir con algoritmos,

técnicas de control óptimo y optimización combinatoria. Sólo le dijo que se concentrara en su tesis y eso era materia para desarrollo de clase, y no para una investigación en el laboratorio.Con esa respuesta, Kenzo puso los timbres postales en las cartas de solicitud de empleo y las depositó en el buzón. Confesó que ese

fue el momento en que lapidó la oportunidad de ir a la maestría en ese laboratorio. Pregunté si consideraría ir a otro laboratorio en otra universidad, pero consideró que ya era tarde y que esos desafíos con Okumura-sensei no lograrían que le diera una buena

recomendación para otra universidad.Continuamos la primera mitad el cuarto año, o sea, el semestre

de primavera con dos clases. La clase de Okumura-sensei, que era

una tradición tomar debido a ser miembros del laboratorio y el seminario de investigación. También con Okumura-sensei. Kenzo

lo usaba para experimentar y diseñar circuitos electrónicos bajo


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métricas y resultados de diversas teorías matemáticas. Tambiénlo vi alterando o jugando con las secuencias lógicas de los BIOS,

y también la manipulación de la memoria RAM. Además, tenía varios correos electrónicos, dos de ellos eran buenas noticias.Habían aceptado su artículo en una revista arbitrada. Los demás correos iban llegando para que formulara las correcciones y

soporte que necesitaba realizar por parte de los revisores. Con

esto, Kenzo había garantizado que al menos dos de sus capítulos de tesis tenían soporte. Uno para las hipótesis en general y otro para los resultados obtenidos.

Kenzo ahora estaba relajado en cuanto a la graduación.

El hecho de que le hayan dado el reconocimiento de publicar

garantizaba que su tesis era de calidad. También estaba tranquilo por que había tomado la decisión de irse al mundo laboral. Pero algo dentro de él lamentaba irse. Seguramente quería desarro- llarse con Inamura-sensei y no se pudo. Al querer realizarlo conOkumura-sensei, tampoco lo pudo lograr. Por dentro tiene algo de frustración. Yo lo comprendo.

Las hojas de cerezo caían y pronto las lluvias comenzaron.

Recuerdo ese seminario. Afuera llovía copiosamente. Kenzo había preparado su presentación de avances con tiempo. Supe que algo

pasó, ya que el día anterior estaba realizando modificaciones. Eso


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no era propio de él. En el seminario abrió con la teoría de rem-

plazar páginas y peticiones para el manejo de memoria virtual

para optimizarla. Este concepto soportaba el problema de la tesis de Kenzo, en generar espacio para coordinar varios relojes de los procesadores para realizar tareas en sistemas multiproceso convarios núcleos multitareas. Okumura-sensei comenzaba a apretar

los labios en desacuerdo con ese concepto y cómo lo generó. Sin

embargo, ese punto era el más crítico dentro de su tesis, y por su fuera poco, también era su parte más innovadora. Una lámina después, dejo ver que su hipótesis era óptima y el mundo europeo había reconocido el trabajo de Kenzo. Presentó y también pre- sumió que fue aceptado su artículo en una revista internacional.

No sólo eso, había citado a Watando-san y a Hirouchi-san como parte desarrollo conceptual del modelo, montar un marco teórico y con ello, citar el desarrollo que llevavan de sus tesis de maestría.Okumura-sensei se sorprendió, más no dejó cabida a la emoción.Reconoció a su manera el talento de Kenzo felicitándolo por su artículo y guardó sus comentarios ácidos a las hipótesis de Kenzo

ya que éstas postulaciones ahora se incorporaban a la frontera del

conocimiento, toda vez que había probado que eran correctas ante matemáticos europeos. Yo expuse de forma tradicional. Aunque logré que aceptaran mis hipótesis en una revista arbitrada de


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Japón, no tuve el tiempo de adentrarme con mi hipótesis al ruedo

internacional. Fui más conservador y seguí los lineamientos de

Okumura-sensei. También hizo pocas observaciones a mi presen- tación. Tanto Kenzo como yo salimos satisfechos del seminario.Kenzo por su parte comenzó a hacer su correcciones. Tambiénempezó a codificar más. Por dentro yo sabía que estaba motivado.

El verano llegó tarde. Además, este año fue menos caluroso

durante julio. Lo malo es que fue mucho más lluvioso. Enel Laboratorio de Matemáticas Aplicadas, acordamos que elviernes sería el barbecue de verano. El semestre había termi-nado y nuestro seminario de investigación había terminadocon buenos resultados. En el laboratorio, Kenzo trabajaba

con ahínco sus programas y pulía su código. Tenía nuevosresultados y estaba haciendo nuevas gráficas para sus artículosque habían sido aceptados en las revistas arbitradas. Uno en elJapanese Journal of Mathematics y otro, para sorpresa de todosen el Acta Mathematica . Este hecho garantizaba su graduación.Para Okumura-sensei fue una sorpresa. Después de presentarestos resultados en el seminario, sin decirlo, Kenzo había rea-lizado algo que los estudiantes de maestría y Sakamoto-senseiestaban por hacer en este nuevo laboratorio: publicar bajoel nombre del nuevo laboratorio. Más aún, Kenzo invitó a


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Sato-san y Kimura-san a colaborar con él y aparte ellos yapodían continuar con la investigación. Para mí, y seguramente

para muchos más, era la primera vez que un estudiante depregrado publicaba antes que sus compañeros de laboratoriode maestría. Una semana antes del barbecue, Kenzo terminó lascorrecciones de los artículos y los avances a su tesis. Pero siguiótrabajando en su código personal. Así continuó hasta el jueves.

El viernes llegó. Al mirar el cielo, el clima estaba muydespejado. Lá última lluvia fue el miércoles en la noche, asíque, era un calor muy húmedo. Hoy sería un buen día parael “barbecue” del laboratorio.

Me cité con Kenzo en la estación de Ikebukuro a la salida

este de la línea Yamanote. Cómo somos los últimos en haberingresado al laboratorio, estamos a cargo de las compras. Esteaño nos acompañará Nanami y Ryo. Ambos entrarán en abrildel siguiente año al Laboratorio de Matemáticas Aplicadas conel Profesor Okumura.

Kenzo llegó a la hora indicada. Él venía revisando una listaen su mano. Seguramente era lo que teníamos que comprar.En cambio, yo traía una mochila además de unas plegables.También tenía un sobre con lo que se recolectó de los miembrosdel laboratorio. Kenzo guardó su lista y sacó una pequeña caja


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negra. Miraba un led verde que parpadeaba.- Kenzo-kun, ¿qué es eso? - pregunté con curiosidad.

- Un GPS personal. - respondió aún sin verme, estaba contandolos destellos verdes con su mano.- ¿Tú lo hiciste?- Sí. - expreso una sonrisa de orgullo. - Hasta guarda coorde-nadas. Lo estoy probando para ver funcionalidad.

- Increíble - respondí con asombro. En menos de cinco minutos,Nanami y Ryo llegaron también. - Hola Nanami-chan. HolaRyo-kun.- Buenos días Tanaka-san, Kotani-san. - adornando su saludocon una reverencia.

- Vayamos al mercado “Natural House”. Tienen muy buenosingredientes en general, podemos comprar salsas ahí. La carnela podemos comprar en Hanamasa por que venden a buenprecio si llevamos mucho. En este caso espero que tengantodos mucha hambre.- Kotani-san, ¿sabes cocinar? - le preguntó Nanami a Kenzo.- Sí. Mi hermana menor y yo vivimos con nuestros abuelos.Mi abuelita me enseñó a cocinar. En caso de que tuviera queayudar en la cocina mientras ella cuidaba a mi hermana menor.- respondió.


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- ¡Asombroso! - Kenzo hizo una pequeña reverencia paraaceptar el cumplido, pero ya no dijo más. Se quedó pensando.

Comenzamos a caminar en grupo con dirección a las tiendasque Kenzo había señalado. Todos descubrimos que Kenzo era ca-paz de comprar con soltura todo lo que buscábamos. Al términode un par de horas teníamos varios cortes de carne para todos

los gustos. También vegetales, salsas y una botella de sake para

nuestros profesores. Nos repartimos las compras equitativamen-te y nos fuimos a nuestro siguiente destino: el Parque Nacional Conmemorativo Showa . Elegimos ese lugar por que podemosrentar todo lo necesario para tener una parrilla de carbón porpoco dinero y no preocuparnos por traerlo para nosotros.

A nuestra llegada de mi mochila saqué manteles, lonas,servilletas y vasos. Una vez que mi mochila estaba vacía le dijea Ryo que me acompañara por cervezas y bebidas. MientrasKenzo encendía el fuego, preparaba la parrilla y Nanamiayudaba a disponer de los cortes, vegetales y salsas para estarlistos. En el fondo el canto de las cigarras invadía el parque.El día esta muy caluroso.

A nuestro regreso, Watando-san y Sakamoto-sensei yahabían llegado. Kenzo tenía el fuego a punto, en unos minutoslas brasas listas para empezar a cocinar. Watando-san de su


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mochila sacó el arroz y junto con Nanami empezaron a servirloen tazones. Mientras, Kimura-san llegó y diligentemente

comenzó a ayudar con las bebidas. No tardaron en llegarHirouchi-san y Okumura-sensei.Una vez que todo los integrantes del laboratorio estaban

reunidos, comenzaron a comer y beber. Nanami y Ryo ayu-daban a servir comida, cerveza y bebidas a sus próximos

senpai y sensei como cortesía por haberlos aceptado en ellaboratorio. Mientras, Kenzo se encargaba de la parrilla y yo delos vegetales, arroz e ir limpiando conforme iban terminando.Después de un rato, volvimos a repetir el procedimiento, todavez que volvió el hambre. Todos admiraron el trabajo de Kenzo

en la parrilla, los cortes elegidos, las salsas para la carne asaday los complementos. Poco a poco con el atardecer en el fondo,se fueron retirando poco a poco, una vez que satisficieron suhambre y sed, y también agotaron su plática y canciones. Kenzo,Ryo y yo nos quedamos a limpiar. Guardamos lo que noshabían rentado y Ryo fue a entregarlo, mientras, yo guardabalas lonas y manteles que había traído. Kenzo se desplomócerca de un árbol. Ryo regresó a despedirse de nosotros yagradecernos por haber cocinado. Cerró su discurso diciendoque sería buen elemento para el laboratorio e hizo su reverencia.


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Tal vez era el alcohol hablando por que estaba muy rojo de lacara. Kenzo estaba igual, pero era por las quemaduras del sol y

de estar todo el día en la parrilla. También emanaba un intensoolor a carbón y humo. Me quedé con Kenzo bajo un árbol.- Se terminó el verano escolar. - dijo Kenzo con algo demelancolía.- ¿Estás nervioso? - pregunté inquisitivamente. Sabía por

dentro que los recursos del laboratorio ayudaban a que Kenzoexperimentara sus ideas.- ¿Lo dices por Mitsubishi y NTT?, no, la verdad es que no. Esono me preocupa en lo absoluto. - dijo con franqueza y aplomo.- ¿Entonces?

- Es el Obon.- Cierto, ya lo recuerdo. ¿Qué tal te parece una cerveza? -mientras tomaba una Asahi Premium de mi mochila que habíareservado para el final.(Kenzo estaba sólo en Tokio. Cuando regresara a su casa, nosería para ver a sus padres, sino para ver a sus abuelos. Hacíatiempo atrás que Kenzo los había perdido. A mi en lo personalno me ha contado la historia, pero se que lo deja pensativo.Es raro, por que la mayoría de la gente se entristece.)- Está bien, un trago por mis padres. - respondió con más


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ánimo. Cada uno abrió su lata y brindamos.- ¡KANPAI! - dijimos al unísono.

Después de nuestro trago juntos y hablar de lo que haríamosen el Obon, nos despedimos. Nos veríamos hasta la últimasemana de agosto. Kenzo se iría a Kyoto y yo a Yokohama. Medio su GPS para que lo llevara conmigo.

Después de las vacaciones de verano, nos inscribimos a las

materias que esperaban en el laboratorio que cubriéramos. Kenzo por su parte lo hizo, pero incluyó dos materias más. Me comentó

que no desafiaría la forma en que programaron sus cursos pero no había forma que le prohibieran tomar más. Por supuesto

que incluyó la clase de Inamura-sensei, a sabiendas de que el

trabajo final que pedía era un reto. También incluyó la materia de métodos numéricos que también requería de un proyecto final muy extenso y pesado. Kenzo estaba planeando su revancha, pero ya la empezaba a ver con tintes de venganza. Una muy sutil

para ser vista por otros. Tal vez soy el único que la pudo percibir.El seminario para hacer la presentación de nuestros temas

de investigación fue después de las presentaciones de Kimura-san,

Watando-san y Hirouchi-san. Ellos tenía que presentar sus temas de investigación ante el cuerpo de profesores del Departamento de Matemáticas para que fueran aceptados dentro del programa


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de maestría. Todos las presentaciones se veían sólidas salvo la

de Watando-san que necesitaba más valor en cuanto a la inves-

tigación tecnológica. Para ser del Laboratorio de Matemáticas Aplicadas, tenía tintes muy científicos, eso no lo pasó por alto

Okumura-sensei. Mientras, Kenzo tomaba notas y yo también.Había que lograr nuestro objetivo. Cuando presentamos, ambos lo hicimos bien. Fueron observaciones más de forma que de fondo.

Ver a nuestros “senpai” presentar nos dio la pauta para hacerlo tan bien como ellos. Para nosotros significaba que estabamos dentro del laboratorio y que nuestra investigación, de llevarla a cabo bien garantizaría nuestra graduación.

Nuestras labores con la escuela continuaron. Yo planteaba

más de mi tesis para avanzar. Pero reconozco que Kenzo se concentraba en sus clases extra. Mientras me divertía con mis

amigos. El se quedaba en casa haciendo sus deberes. Trabajaba arduo para los proyectos finales. Mientras tuve la oportunidad

de relajarme en mi pueblo natal en Yokohama, la razón era para salir a ver el cambio de hojas de los árboles. El Momiji ( ). En cambio Kenzo rondaba las calles y mercados de Akihabara.

Estaba buscando hardware. ¡Yo no lo podía creer!. ¿Se estaba adelantando a su tesis? Era lo más seguro. Sólo él le preocuparía en armar un plan tan intricado. Sabía que esto tenía que ver con


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igual forma presentó un trabajo similar en métodos numéricos para encontrar raíces de funciones complejas polinomiales.

Tuve que trabajar dos turnos completos una vez que terminó el semestre para ahorrar. Ya venía el cuarto año y debía de buscar un trabajo para asegurar tener uno después de la graduación. Eso significaba viajar para las conferencias y atender entrevistas. Eso significaba gastos. Kenzo también hizo lo mismo. Pero él estaba

ahorrando para su trabajo de investigación. Tomó un empleo enAkihabara para entender sistemas operativos, hardware y diseño de equipos de cómputo de alto rendimiento. Se estaba preparando para el siguiente año y estaba adquiriendo habilidades que

luego usaría. Esos meses que pasamos trabajando valieron la

pena. Ahorré lo suficiente para el año que venía y Kenzo hizo recuento de todo lo que aprendió por allá. También destacó

porque lo invitaron a quedarse trabajando medio tiempo. El aceptó. Empezamos el cuarto año. Sabía de mi decisión de ya buscar trabajo. En soporte a mi decisión el también iría conmigo,tenía dudas en cuanto a que hacer este cuarto año y buscar

trabajo estaba en sus opciones. Iniciando el semestre ya eramos miembros oficiales del Laboratorio de Matemáticas Aplicadas.

Kenzo y yo regresamos un par de días antes de lo planeadoa Tokio para atender a las entrevistas de Mitsubishi. Fue una


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gran noticia para ambos y su interés en nosotros. Su viaje fuemás largo pero también estaba preparado. Al contrario de mí,

el aprovecho las ofertas de verano para comprar su traje ycorbata para las entrevistas. Yo tuve que llegar a Tokio a cazarofertas. Pero al final estábamos listos. Nos vimos en la estaciónde Shinyuku y de ahí partimos hacia “Mitsubishi ResearchInstitute”. Kenzo me pidió traer su GPS.

- Kenzo-kun, ¿para qué usaste el GPS? - pregunté con curiosidad.- Para hacer una prueba para mi tesis. Parece que el consumo deenergía es óptimo. Soportó este periodo sin recarga o cambiode pila. - respondió. - ¿Lo trajiste todo el tiempo?- Por lo general así fue, un par de días lo olvidé, nada más. -

respondí con franqueza.- Gracias. - dijo inclinando su cabeza. - ¿Quieres los datos paratu proyecto personal? Tal vez sean de ayuda para genera tumatriz multinivel.- ¿Cómo lo usaría?- Tienes patrones tuyos, de mis abuelos y míos. Todos con geo-rreferencia. Puedes simular algunos parecidos y dar atributosa visitas, lugares, residencia, salida a comer, etc.- Entiendo. Puedo generar un patrón de comportamiento ydistinguir casos de causalidad y casualidad.


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- Exacto. Si se ven dos personas más de una vez en un restorán,entonces no es coincidencia. Yo plantearía a que se conocen.

- Con eso puedes armar perfiles, ¿sabes eso?- Yup. Tal vez por este proyecto tengas que accesar a redessociales.- En su momento. Primero la factibilidad de mis hipótesis, luegovemos la aplicabilidad. Pero la que mencionas es muy buena

opción. - dije con emoción. - Kenzo-kun, ¿porqué hiciste unGPS? ¿Fue para mí? - En parte, sí. Por otra parte, quería empe-zar a entender la comunicación y negociación que se da entreel circuito de GPS, sus datos, negociar con la red de telefonía,tener el túnel GPRS y enviar información. Aprendí mucho de

paramatros como latencia, tiempo de vida de paquetes, etc.- Sigues en la parte electrónica, ¿verdad?- Yup.- La verdad agradezco que me hayas considerado en tus pro-yectos. - dije con franqueza.- De nada. No tienes por que agradecer. Me gustó también tuproyecto. Tal vez podamos usarlo algún día en una empresadigital, ¿no crees?- Yo lo usaría, de forma de perfilamiento, para cuestiones demarketing publicitario.


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- Buena idea. Yo pensaba usarlo para análisis de cobertura demedios.

- Kenzo-kun eso también es muy buena idea. - dije con emoción.- Tengo mis momentos. - sonrió nervioso. - Siguiente estaciónHiro-kun. Espero estés más calmado. Te vi nervioso en la es-tación.- La verdad esto es importante para mí. No puedo fallar.

- Hiro-kun. Si me preguntas, tienes mucho potencial. ¿Te hasoído a ti mismo? Tienes como proyecto personal, sin guía, sinsanción de Okumura-sensei y por iniciativa propia, investigarbases de datos multidimensionales.- ¿Servirá lo que hago?

- Como todos los descubrimientos de la ciencia y la tecnología,tardará un poco en que te lo reconozcan. Por eso creo que nodeberías regalarlo a una compañía que no sea tuya. La otra op-ción es regalarlo al mundo. - explicaba Kenzo sobre su filosofíade utilidad. - Si lo piensas, algo así tiene el potencial para quesea una herramienta que quieran muchos. Pero depende de tisi quieres que sea tuya o la liberas para que quien tenga interésen ella, la explote como le parezca.- Ya entiendo. Fue lo que sucedió con Linux. O los lenguajesde programación cómo C y Python. ¿No?


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- Sí, así pasa. Por eso la decisión la tienes que tomar ahora.¿Quieres que el mundo vea tu creación? ¿Quieres que el mundo

compre tu creación? Eso sólo tú lo sabes.- Aún no lo sé. - respondí tímidamente.- Yo creo que sí la sabes. Deja la pongo en otros términos...¿Quieres llevar el nombre cómo Toshiba, National o Mitsu-bishi?, o ¿quieres llevar tu nombre sobre todo aquel que use tu

código? - estaba planteando una especie de paradoja: el tiempoinvertido contra fama y madurez. - Será como una espada. ¿Lavas a esgrimir tú mismo con tu técnica?, o ¿vas a crear la mejorespada que sólo puedan manejar los mejores sin importarteel fin?

- Creo que haré lo segundo. - dije decidido. - El mundo tiene de-recho al conocimiento de frontera y aplicarlo en lo que necesite.Yo participaré en grupos de discusión y llevaré las versionesen línea de Linux para que haya una versión unificada en unaplataforma de software libre. Los binarios de Windows y Macque sean creados por otros, será para ellos y por ellos.- Cuando necesites ayuda, sólo dime. Yo te apoyo.- Gracias Kenzo, eso significa mucho para mi.- De nada.


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Llegamos a la estación Tameikesanno en Chiyoda. Salimoshacia el “Edificio Capitol” caminando. Llegamos con tiempo de

anticipación. Tomamos un té frío de una máquina expendedoraen la calle. En mi caso lo necesitaba, sentía la garganta seca delos nervios. Pero me relajaba saber que podía tener un proyectode vida alterno. Tal vez no muy redituable al inicio, pero al cabode unos años podría ser una versión canónica. Hasta ser posible

una alternativa de vida. Muy escueta pero algunas fundacionesde software le pagan a sus ingenieros a través de donaciones.Podría ser así. Mientras dejaba volar mi imaginación, Kenzome regresó a la realidad diciéndome que ya era hora de ir. Meapresuré a tomar un último trago. Entramos a recepción.

El proceso de entrevista varía entre empresas. En lo personalsupuse que pasaría por el proceso de dos entrevistas. Aún así mepreparé también para el caso de que fuera una sola. Nos dividie-ron a los aplicantes en varios grupos que pasaríamos segun nosnombraran. Kenzo fue primero por su apellido. Así que al termi-nar y con un grupo intermedio me mandó las preguntas que lehicieron por el celular. Luego pasó a otra parte que sin ser entre-vista era para cotejar papeles de identidad, certificados escolares,entre otros. Luego me mandó un mensaje para que supiera queaquellos que tuvieran conocimientos del uso del inglés u otro


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idioma serían entrevistados en ese idioma. Kenzo, así como yoy otros matemáticas, prefieren una lengua distinta al inglés o

complementaria al inglés. En la universidad aprendí francésy durante mi vida en Yokohama tuve la oportunidad de teneramigos hijos de las fuerzas de EEUU que vivían al sur de la ciu-dad. Entonces para mí no había problema en aprender francés.

En cambio Kenzo, sólo había aprendido inglés. Usó algunos cré-

ditos para aprender algo de alemán, pero no era tan constante.Al entrar a mi entrevista ya tenía preparado mentalmentemis respuestas. Cómo era una entrevista grupal, no busquéel protagonismo sino llevar una cordialidad entre un grupopara formar parte del equipo. También supe mirar a todos

directamente aunque sea un momento al dar mis respuestas, yaque dentro de todos podía haber algunos gerentes, directivose inclusive alguien de la junta del consejo. Es difícil estimarlopero un indicativo es la vejez y el silencio. Me cercioré de ello.Adicionalmente, hice las preguntas adecuadas en torno a lostemas de investigación relevantes que llevaban y las áreas pordesarrollar para los siguientes años con sus prioridades. Creoque fue de agrado de los presentes tener esa agudeza.

Al salir, tenía mensaje de Kenzo en cuanto a la siguienteparte. El ya la había terminado y dejó mensaje en mi celular. Por


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fortuna había dejado el celular en modo silencio. El ya estabafuera en un café almorzando algo en lo que yo salía. Me invita-

ría a comer. La siguiente entrevista fue fácil. Las respuestas quedaba eran fluidas en idioma, la lectura precisa y podía ponermis ideas en orden en cuanto a escritura. Adicionalmente, teníami TOEIC en buen puntaje así como mi TOEFL. Pude alcanzara ver que mi puntaje en dominio de otra lengua era alto. Al

final entregué las copias de mi certificado. Salí a ver a Kenzo.- ¿Cómo te fue? - preguntó Kenzo.- Bien, creo que no lo hice tan mal. - respondí tranquilo. - ¿Ytú?, ¿cómo te fue?- Creo que me fue mal en la entrevista grupal y bien en la

entrevista de idioma. La verdad no me esperaba nada de esto.- dijo un poco desanimado - Bueno, entonces es hora de comer.- OK. ¿Qué se te antoja? - pregunté por que no tenía tanta ham-bre yo mismo. Tal vez al oír algo sabroso se me abrería el apetito.- ¡Ramen! - dijo casi gritando. - Muero por un ramen. Hiro-kun. . .yo invito.- Hecho.- Vamos al mejor que conozco. Pero si cuentas el secreto, vasa sufrir. - dijo con un semblante sombrío, casi diabólico. - Esmi lugar. Donde voy para recuperarme de un mal día. Ahora


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necesito un ramen para levantar mis ánimos.- ¿Pasa algo? - pregunté sin la esperanza de respuesta.

- De hecho sí, pero vayamos. Te cuento en el camino.Lo curioso es que no regresamos al metro, sino empezamosa caminar. Después de un rato llegamos. El local abierto desdelas once de la mañana según el letrero. Afuera decía: “Ikaruga() ”. Nos saludaron efervescentemente al entrar. Kenzo

me dijo que su especialidad era el “Tonkotsu ( ) Ramen”.Entonces le dije, que si él era el experto, el debía de ordenary yo acompañar. Plena confianza en su juicio. Gritó al de labarra que quería dos platos, los fideos duros y con un huevo.Al mesero que nos sirvió agua le pidió dos cervezas de barril.

- Hiro-kun. Festejemos. Por que no importa si el resultadoes bueno o malo, nos presentamos a tomar la prueba y lasobrevivimos.- De alguna u otra forma crecimos.- ¡KANPAI! - dijimos al unísono.

Comimos el mejor “ramen” que haya probado en mi vida.Ahora entiendo que lo haya ocultado todo este tiempo. Escomo descubrir una joya en medio de la ciudad. Tanto elsabor, como la presentación y el ambiente. Al salir, todos nosdespidieron efusivamente. Sentía el agrado de haber comido


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con satisfacción. Las fuerzas me regresaron y no sentía nervios.Kenzo tenía razón, habíamos sobrevivido a una prueba. Tal

vez la pasamos a la primera, tal vez no, pero sin lugar a dudasla enfrentamos y el miedo era menos.Al cabo de unos días también nos llamaron de NTT para la

entrevista con ellos. Lamentablemente era clase de Okumura-sensei. Tuvimos que pedir permiso de faltar al laboratorio y

esa clase para ir a nuestra entrevista. Okumura-sensei no senegó pero tuvimos que pagar un precio al final. Kenzo más queyo. Nos pidió redoblar esfuerzos para el siguiente seminario.Aunque Kenzo ya tenía ganada su graduación, Okumura-senseiquería ver a nivel detalle la tesis de Kenzo. Conmigo fue

más condescendiente. Pero el avance tenía que ser sustancial.Ambos sentimos que no disfrutaríamos del fin de semanapara terminar lo que Okumura-sensei solicitó para el siguienteseminario. Cuando obtuvimos el permiso Kenzo había perdidola ventaja ganada en las vacaciones del Obon. Ahora no teníaventaja sobre Okumura-sensei. Eso lo molestaba. Dijo que estonecesitaba medidas extremas. Se llevó sus deberes a Akihabaracon riesgo de que perder su trabajo de medio tiempo y sunueva fuente de información, pero debía tener ventaja dealguna u otra forma. Creo que fue un poco paranoico en ese


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sentido. Desde su perspectiva, se preparaba. Para él debía deestar preparado y tener un plan de contingencia.

En esta ocasión llegamos más temprano. Fue idea de Kenzo.También venía más decidido y confiado. Aunque en su semblan-te había algo de cansancio por reponer el tiempo que utilizópara no perder ventaja sobre Okumura-sensei. Me comentósu fin de semana en Akihabara.

- Hiro-kun, ésta vez tome ventaja sobre mis “senpai” del trabajo.- dijo un tanto satisfecho.- ¿Qué te dijeron? - pregunté con mucha curiosidad.- Sobre cómo obtener un trabajo.- ¡Ah! ¿Sí? Y, ¿qué te dijeron?

- Aparte de que no valía la pena. Uno de ellos fue quién meorientó más por qué ...- ¿No vale la pena? - interrumpí.- Espera a que te cuente y verás su historia. - respondió. - Con-tinuo ...Abe-senpai, estudió en la Universidad de Tokio y segraduó después de terminar la maestría en ingeniería en elec-trónica e hizo lo conducente para entrar a Panasonic. Lo cualfácilmente logró.- Ajá, ¿y luego? - esperaba ansioso la respuesta que me debía.- Al mes renunció.


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- ¿¡QUE!? ¿¡Un mes!? ¿¡Qué pasó?!- No era lo que esperaba.

- ¿¡Qué?! ¡No lo creo!- Bueno, su historia es una dentro de miles y miles que cada añodespués de graduarse, entra a un empleo. Pero deja termino.Imagina alguien con años de educación superior, posgrado,publicaciones, viajes de presentación para su investigación y

cuando decide emplearse llega a Panasonic y lo que le pidenes limpiar los laboratorios y organizar lo necesario para losinvestigadores experimentados. Simplemente, no pudo con eseesquema.- ¿Entonces que hizo?

- Empezó algo el solo. Donde trabajo, ahí en Akihabara es eldueño, promotor, gerente y líder. Es quien me vendió mi laptopde su taller. Claro que al final dijo que debió permanecer mástiempo en Panasonic.- ¡Claro! Era una opción de vida.- No, no fue por eso. Fue por que de haberse quedado y ahorradolo suficiente, su taller, café internet y su servicio web hubierannacido un poco antes y serían más redituables ahora. Pero esono lo sabía en el momento. Dijo que se apresuró a salir y fueuna decisión más visceral en ese entonces.


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- Interesante historia.- La verdad sí. Además de inspiradora. - Vi que Kenzo analizaba

las palabras de la conversación que había tenido con su jefeAbe-san.- Y, ¿qué te aconsejaron?. - pregunté debido a que eso era loque necesitaba saber.- Los consejos generales son: mira a todos en la entrevista gru-

pal, en eso fallé en la entrevista pasada, sólo me dirigí al queme hizo la pregunta. También, mantener la pose y la posturasiempre. Eso sí lo hice. Decir que esta es la opción que quiero devida hasta el retiro. Eso también fallé. En este caso voy a resaltarlo que logré en el laboratorio con mis artículos, eso me dará más

puntos, pero también que se trabajar en equipo. Y cómo cerezadel pastel, es no ceder a la presión. Estar siempre animado.- Son buenos consejos. - comenté pensando a fondo los con-sejos que recibió. No estaban del todo mal. - De hecho lo creo.- Kenzo-kun, es hora. - dije mirando el reloj de mi celular. -Vamos.- Sí, vamos. (Kenzo tenía esa mirada cuando ha programado algo insólito. Ese brillo en los ojos con un toque maléfico detrás. Algo había planeado. Pero sin más información, no podía pronosticar que era. Habría que esperar.)


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- Esto va a ser excelente.Me recordó mucho el proceso que tuvimos con Mitsubishi.

Fue similar la dinámica. Nos dividieron en un par de grupos.Seguramente ésta era la semana de entrevistas, por que noeramos muchos. Me dio oportunidad de poner atención. Estabamás relajado que la primera vez. También Kenzo. En mi grupovi a una chica que llamó mucho mi atención. Me distrajo

completamente. Cuando entramos en la entrevista y se nospidió presentarnos, supe su nombre Kato () Akane () . No se que fue pero ella me atrajo desde el momento quela vi. Algo tenía que no dejaba de mirarla, salvo en el momentoque podían cruzarse nuestras miradas. Sólo puedo decir que

debido a ello, esta entrevista me fue mal. Tanto que no lleguéa pasar a la siguiente ronda. Me lamento por ello. Perdí unaoportunidad aquí. Me sentí mal por ello. No estaba enfocado. Alcontrario de Kenzo, el tardó mucho en salir. Ahora yo fui quiénlo esperaba en la calle mirando un café en lata que me compré.

Kenzo salió un par de horas después, eso fueron cafés. Medijo que estaba tan feliz que esta ocasión sería un “unagi bento”() . Una caja de madera con el platillo hecho abase de arroz, anguila dulce y vegetales de montaña preparadosen en diversas formas.


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- Akane te vio mirándola. - dijo a la mitad de la comida. Meatraganté y comencé a toser.

- ¿Cómo sabes de ella? - pregunté cuando recuperé el aliento.- Por que me preguntó si te conocía. Ya que venimos del Tokio-Tec. - dijo con indiferencia mientras tomaba un poco de algacon un bocado de arroz.- ¡¿QUÉ?! - pregunté con asombro.

- No te preocupes, compuse tu imagen y reputación. Luego tela presento. - ese comentario me dejó mudo y con la espaldahelada.(Kenzo es extraño. ¿Cómo logró conocer a Akane? No entiendo.¿Valdrá la pena preguntar? O sólo será una broma. ¿Hablará

en serio? Creo que sí, pues Kenzo no hace bromas. Es sarcástico,irónico, pero no bromista. Vale la pena preguntar.) - ¿Qué le dijiste de mí? - pregunté cuando recobré la compostura.- Lo que es en realidad. Le dije que somos amigos, tu estás enla parte de cómputo matemático y yo del lado de matemáticasaplicadas. Ambos aplicamos a Mitsubishi y a NTT Labs.- ¿Nada más?- Creo que está más interesada en mí, pero aún así, saldremoslos tres cuando sepamos en donde nos contraten. - hizo unapausa para tomar un bocado de anguila. - Eso fue todo. Palabras


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más, palabras menos.- Kenzo ...- no puede continuar por que me interrumpió.

- Espera, lo olvidaba. Ella viene de la Universidad de Waseda.De ciencias computacionales. Está en el club de Aikido y unode sus pasatiempos es cocinar.- ¡¿Todo eso sabes!?- Yup.

- Kenzo, ¿cómo lo logras?, ¿cómo puedes tener una conversa-ción tan casual y llena de información?- Solamente pongo atención y pregunto cuando es debido. Porlo regular, obtengo buenas respuestas. Sin embargo, esta técnicasólo funciona cuando es uno a uno. En otras circunstancias,

como en el seminario, no es posible.- Te entiendo. Entonces, ella fue la que se acercó a ti.- Yup. Supongo que es por que le agrado. O en realidad tú leagradas y puso atención cuando te presentaste en la entrevistapasada. Eso lo tomó de excusa para habalrme.- ¿Cuándo hablaron? - pregunté usando la misma táctica queme acababa de enseñar. - En la entrevista de idioma y entregade papeles.- Ya veo. - me quedé pensando que estuve fuera mucho tiempoy Kenzo siguió con el proceso de entrevista. Ahí fue cuando


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pasó. Era obvio pero no lo pensé antes.- Por cierto, practica más. Reconozco que aprendes rápido. -

dijo al ver que aplicaba lo que me enseñaba. Inclusive sonrió.Con lo que dijo Kenzo sabía que había fallado la entrevista deNTT Labs. Eso no me agrado por que mis opciones bajaban aMitsubishi. Por lo que tenía que buscar más opciones de trabajo.No podía dejar sólo una. Eso me preocupaba ya que no podía de-

jar un hueco entre mi salida de la universidad y la contratacióna un trabajo, eso disminuye mi probabilidad de entrar a unabuena empresa. Por lo que busqué en otras más y a mandar lonecesario. Kenzo, estando en la misma situación sólo pensó enNTT Labs. Confiado en que lo lograría. Según el, los consejos

de Abe-senpai eran suficientes para entrar. Así que ahora teníaque concentrarse en el seminario de Okumura-sensei.Cuando recibimos la noticia la tomamos con filosofía. Iríamos

al nuevo Laboratorio de Matemáticas Aplicadas con Okumura- sensei. Su cartera de proyectos contemplaba que Kenzo tomara el curso de lógica matemática para procesadores y que yo tomara el curso de matemática combinatoria durante nuestro tercer año.

Ambos cumplimos diligentemente. Aunque Kenzo no tan cabalmente, propuso tomar el curso de diseño de circuitos y sistemas operativos del Departamento de Ciencias de la Computación. Claro


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que tenía una gran justificación. A través de Inamura-sensei, supi-

mos que Okumura-sensei empezaría proyectos relacionados con di-

seño óptimo de computo en paralelo, en serie, clusters, entre otros.El laboratorio estaba iniciando labores en un lugar nuevo.

Okumura-sensei y Sakamoto-sensei estaban en sus respectivas oficinas y éstas comunicaban al Laboratorio. Watando-san,

Hirouchi-san y Kimura-san, como alumnos de cuarto año, al

terminar sus clases estaban en el laboratorio trabajando ensus tesis para poder graduarse. Todos ellos continuarían en el

programa de maestría, por lo que tendrían que esforzarse más para conseguir una tesis que respaldara una continuidad dentro de los programas de posgrado.

Nosotros íbamos de vez en cuando. Principalmente a los seminarios para ver la dinámica que tenía Okumura-sensei.

Adicionalmente se nos permitía participar con preguntas y respuestas para entender los temas de investigación. Kenzo y yo no nos perdíamos ninguna oportunidad de ver las presentaciones de Okumura-sensei y de Sakamoto-sensei. Nos daba mucha

oportunidad de aprender tanto su estilo cómo sus intereses en el ámbito de la investigación. En cambio, al inicio de los seminarios

de los demás, eran básicos. Con el tiempo y la presión que tenían para sus tesis empezaron a notar cambios a los pocos meses.


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Para cuando terminamos el semestre de primavera ya se veíanlos postulados, las hipótesis, los primeros ejemplos numéricos

de todos los integrantes. Sakamoto-sensei estaba guiando las investigaciones de todos y con ello daba su seminario. Eran temas

de investigación teóricos para implementación en un mediano

paso. En cambio Okumura-sensei presentaba los retos del siglo XXI en téminos de Matemática Computacional. Era un trabajo

más de filosofía. Eso nos agradaba a Kenzo y a mí.Al inicio de septiembre, con el semestre de otoño, Kenzo to-

maba clases en el Departamento de Ciencias de la Computación.No lo veía mucho en las mañanas, pero sí durante el almuerzo.Ahí nos dabamos tiempo para intercambiar ideas.

- Kenzo-kun, ¿cómo van tus materias? - pregunté por que si no lo hacía, él nunca lo diría.- Bien, no vas a creer lo que enseñan. En términos de sistemas operativos está muy interesante.

Lamentablemente todos siguen una misma idea y corriente. - decía con cierto tono de decepción. - Creo que se han encasillado en un método y no salen de ahí.

- Es la moda en la investigación, ¿no crees? - Más bien creo en la flojera o en el pronto resultado.

- Entiendo el pronto resultado. Pero, ¿cómo se manifiesta la flojera?


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- pregunté al no poder seguir la lógica de Kenzo.

- Piensa en el tiro parabólico.

- Ajá.- Sin mucho adorno ni complicaciones. Como una canica ...¡No! Piensa en una esfera de vidrio, pulida, de un milímetro de diá- metro, rodando hasta el filo de una mesa, y luego cae.- Sí, ya entendí. No tomo en cuenta la forma para la resistencia

del aire y si milares. Continua.- Pues tienes una ecuación de aceleración por gravedad. ¿Cierto? - Cierto.- ¿Puedes en cualquier instante conocer su velocidad? - preguntó de forma retórica, Kenzo aún no se ponía sarcástico. Ya sabía que

eso vendría después.- Sí, sí puedo.

- Entonces, hay una ecuación de movimiento asociada. Ahora bien, ¿en qué momento dejamos de usar las ecuaciones continuas

para usar estimaciones? - Déjame ver ...- me quedé pensando un momento, veía que

Kenzo me miraba sin parpadear. Era una prueba, lo sabía. - Si no me equivoco y tengo que opinar ahora, diría que fue cuando cuando entramos a la era digital.(Sólo espero no equivocarme. Que esa sea una buena deducción o


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al menos me acerque a la respuesta de Kenzo.) - ¡Exacto! - exclamó

Kenzo.

(¡Uf! Me salvé.) - Entonces pensarás así como yo, que por culpa de unos flojos ahora suframos en términos discretos simulando que son continuos.- Calma Kenzo-kun. No soy tan rápido como tú. Esto ya lo pensaste

con calma. Yo aún no. Tengo una preguntas. - interrumpí a Kenzo

antes que él tomara mucha delantera y luego no entendiera nada.- Perdón. Pregúntame.

- Propones que, ¿la era digital es un proceso retrógrado? - pregunté con algo de incredulidad.

- Por supuesto. - cuando dijo esto no pude más que levantar mis

cejas.- Bueno, otra pregunta.

- Adelante, las que gustes.- Si admitimos que es un proceso retrógrado, ¿cómo calificas los avances de la ciencia? - La clasifico como mutación, no como evolución.

- Explícame tu definición para ambos.

- Para mí, la mutación es un proceso por el cual hay un avance aparente, aunque en realidad es una desviación que a la larga acarrea más problemas que soluciones. En cambio, la evolución


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es un efecto de más tiempo en donde se da una transformacióntotal. En el conocimiento y en nuestras vidas.

- ¡Oh! Ahora entiendo. Continua.- Decía que ...- se tomó una pausa - dejamos atrás los medios

continuos y la era digital nos dio discretos.- Ajá.

- Si recuerdas, tenemos muchos avances significativos cuando hay

un avance en la ciencias puras. Pero cómo es difícil llevarlo a la práctica, elegimos llevar una parte de este avance científico a la tecnología. Por ejemplo, tu walkman.- Ajá. ¿Qué tiene?

- El origen de las grabaciones eran medios analógicos. La cera,

el metal, el cristal, el plástico y el disco de vinilo. El cassette fue lo mismo en diferentes tamaños. Pero luego vino la digitalización,había que cambiar de modos análogos a digitales. Más fácil para compactar.

- Yo veo eso como un avance, no cómo un retroceso.

- Pues responde, ¿puedes hacer un disco de vinilo? Lo dudo. Pero un cassette sí. Ese fue el principio de la piratería. Ahora con los medios digitales es fácil duplicar cualquier cosa. Ese invento trajo más problemas que soluciones.

- Ya veo. - dije con asombro.


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Otra actividad que incluí en mis ratos libres con mi laptop fue

volver a programar algoritmos y técnicas de solución. Esto me dio

la oportunidad de revisar si realmente conocía el concepto a detalle y criticar si era la solución óptima. Para sorpresa mía, descubrí que podía reducir el tiempo de cómputo de algunos algoritmos de búsqueda siempre y cuando las bases de datos tengan un arreglo bajo índices. Eso podría servirme para mi tema de tesis. De ahí

me surgió la idea de agrupamientos en racimos. Pero no sería criticado por Kenzo. No haría análisis estadístico o probabilístico de los racimos. Yo construiría la forma determinística de los racimos para realizar búsquedas por árboles y encontrar los racimos o grupos adecuados. Una vez que tuve el prototipo, escribí el proto-

colo de investigación. Me guíe con lo que aprendí del seminario y tomé algunos elementos del seminario y del tema de investigación

de Kimura-san. Sabía que era forma de me vieran como parte del laboratorio. De esa forma sería más fácil que Okumura-sensei

apoyara mi tema de tesis y por lo mismo mi graduación.Al cierre del semestre de primavera llegó tuvimos nuestra pre-

sentación de tema de tesis. Una forma de examen para probarnos

que nos habíamos ganado el honor de trabajar con Okumura- sensei. La prueba era proponer algo en la línea de investigación del

laboratorio, seguir los pasos de nuestros predecesores y cooperar


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con lo que se solicitara al laboratorio para generar más susten- tabilidad. Esto era apoyo a convocatoria de fondos nacionales e

internacionales. Mi aportación fue directa con lo que Kimura-sanhabía planteado para su tesis. De hecho, estaba alineada con el tema de investigación de Kimura-san. No tuve problemas en la pre- sentación. Kenzo fue más ambicioso en su presentación. Primero planteó algo novedoso en términos de investigación teórica. Luego,

continuó con su aplicación a sistemas distribuidos. Finalmente sus resultados serían los que tendrían que ser corroborados por Watando-san y Hirouchi-san. Kenzo lo había hecho al revés. Al terminar su exposición, el seminario se tornó tenso. Okumura-sensei criticó arduamente la propuesta de Kenzo. Trató de defender su

postura pero no había que discutir. Afortunadamente Sakamoto- sensei intervino con preguntas acertadas y atinadas de los postu-

lados que planteaba Kenzo. Esto dio pauta a la reflexión por parte de Kenzo. No lo ayudó a entender la reacción de Okumura-sensei,

pero sí para vislumbrar que su propuesta estaba incompleta. Veía su cara y conocía esa expresión. Estaba buscando la revancha.

Iba a ceder por el momento pero volvería y con más fuerza. Fue tomando nota de las recomendaciones de Sakamoto-sensei. La tensión se disipaba y era turno de los involucrados: Watando-san y

Hirouchi-san. Ellos expusieron los fines de sus tesis y cuales serían


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las lineas de investigación que seguirían el siguiente año. Kenzo a su vez anotaba todos los comentarios. Una vez terminada el

bombardeo de críticas a Kenzo, Okumura-sensei pidió que hiciera correcciones para el periodo otoñal. Eso fue una orden aunque

no la expresó como tal. Kenzo aceptó y dijo que así se haría.

Kenzo regresó a la rutina mientras que yo aplicaba a otroslaboratorios de investigación en Tokio. No tenía lo suficiente

para viajar a otras ciudades como Osaka. Aunque si logré ira Yokohama por la cercanía. Pero eso me costó un día fuera deTokio-Tec para tomar los trenes locales que son más baratos.Cuando tuvimos el seminario de medio semestre, estoy seguroque Kenzo se enfocó en lo que Okumura-sensei le había dicho

que corrigiera, más todo lo que le pidió por ir a la entrevistade NTT Labs. No presentó avances. Para mí, fue su tácticapara volver a tomar ventaja, lo noté por que hizo extensivo elseminario profundizando a detalle lo que se le había pedidoque corrigiera, modificara y ampliara con detalles que a vecesyo calificaría como innecesarios. Al fin del seminario, todosestábamos cansados. Incluyendo Kenzo. Por dentro sabía queera parte de su plan. Okumura-sensei no comentó mucho y dijoque ya veía más forma a la investigación, tesis y su presentación.Eso lo esperábamos todos, toda vez que Kenzo agotó todos los


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comentarios y peticiones. Okumura-sensei cerró diciendo queya sólo restaba terminar el documento y presentar los avances

del documento en la siguiente presentación. Kenzo respondiócortésmente: “Gracias por su ayuda” e inclinó su cabeza. Creeríaque fue mi imaginación pero estoy casi seguro que en algúnmomento Kenzo sonrió cuando su cabeza estaba abajo.

Mi caso fue similar, ya tenía lo necesario para la tesis y para

graduarme. Okumura-sensei destacó que mis avances no eransuficientes y habría que trabajar más. Al término del seminariofui convocado a su oficina. Intuí que eran malas noticias. Estono es usual. Toqué la puerta de su oficina.- ¡Hai! - respondió Okumura-sensei. Tomé el picaporte y abrí.

- Disculpe las molestias. dije al entrar.- Adelante Tanaka-kun. Pasa y toma asiento por favor. - dijoinvitándome a su oficina.- Gracias.- Tanaka-kun, cuando aplicaste para Mitsubishi y vi tu resul-tados en el seminario de verano, me tomé la molestia de llamara un alumno mío de la Universidad de Hokaido. El ya tieneunos años ahí. Le pedí que hablara a recursos humanos y quepresentara su recomendación para ti.(De todo lo que esperaba que me dijera, esto fue una total sorpresa.


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Era obvio que Okumura-sensei tenía conocimiento pleno de

nuestros planes para poder asignar carga de trabajo en sus lineas

de investigación. Esto me dice que me ha elegido para entrar a Mitsubishi. Las implicaciones eran muchas. Empezando por

Kenzo, no recibiría el mismo beneficio.) - Muchas gracias por el gesto. No era necesario. - respondí contoda humildad.

- Ya sólo queda presentar tu tesis para el fin de año. Laspresentaciones en enero y estarás listo.- ¡Hai! Daré mi mejor esfuerzo. - asenté con aplomo y fuerza.(Esto me alegraba por dentro. Ya no necesitaría seguir buscando opciones, lo que había hecho Okumura-sensei era darme la

oportunidad de entrar a Mitsubishi, siempre y cuando cumpliera cabalmente y superara las expectativas para con el laboratorio.Inclusive después de salir de aquí.) - Es todo, Tanaka-kun. - dicho esto, me levanté de mi asientoy me dirigí a la puerta.- Gracias por su tiempo y disculpe las molestias. - respondí alsalir.

Al salir, sentía un extraño sentimiento dentro, no podíaentender que había pasado. Tampoco la razón del porqué nimucho menos cómo sentirme. Experimenté una distracción


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el resto del día e intranquilidad al día siguiente. Pasados estosdos días después que tuve mi reunión con Okumura-sensei en

el almuerzo, hablé con Kenzo de mi episodio con él.- Kenzo-kun, ¿qué tal? - pregunté retóricamente.- Bien. ¿Y tú? - preguntó de vuelta.- No me puedo quejar. Creo que mejora mi suerte. - comenté.- ¿En qué sentido?

- Me reuní con Okumura-sensei. - dije con nervios. - Me apoyó.- ¡¿En serio?! En verdad no lo creo. - contestó con asombro.- Así es. Llamó a uno de sus estudiantes de la Universidad deHokaido que está ahora trabajando en Mitsubishi. El comentóque me conocía y dio buena palabra de mí. - me quedé a la

expectativa para ver alguna reacción de Kenzo.- Hiro-kun ...- habló con una voz muy peculiar.(Creo que me llegó la hora. Tal vez ha terminado mi amistad conKenzo. No debí decirle lo que pasó con Okumura-sensei.)

- Kenzo-kun, ...- tuve que tragar saliva - Yo ...- ¡Felicidades! - dijo casi gritando. - Eso es una muy buenanoticia para ti. Me da mucho gusto por ti.(¡¿Qué es esta reacción?! No entiendo nada.) - ...- me quedé mudo un instante y luego dije lo más lógicoque se me ocurrió. - Gracias Kenzo.


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- Ya no debes preocuparte, el siguiente año en abril ya estarásen Mitsubishi. - dijo con mucho ánimo y hasta casi ríe. Creí des-

conocerlo. Nunca había hecho tales gestos de júbilo conmigo.- Kenzo, ¿tú no estás preocupado? - pregunté también.- Nop. ¿Adivina qué me pasó? - respondío en forma de acertijo.- Ni idea.- A ti te apoyó Okumura-sensei, a mí sin quererlo me ayudó,

Sakamoto-sensei. - dijo con un tono de orgullo.- ¿Qué pasó? - pregunté con curiosidad.- Tenemos una patente. Bueno, más bien el Laboratorio deMatemáticas Aplicadas tiene su primera patente. Sakamoto-sensei tomó las notas del seminario y generó la patente para el

laboratorio. Yo desconocía el procedimiento, pero como lo queproducimos en ese laboratorio es de Tokio-Tec puede patentaren nombre del Departamento de Matemáticas. Ahora está enproceso.- Esas son buenas noticias también.- Así sucedió ...- hizo una pausa para tomar aire y me expli-có. - Ayer me topé con Inamura-sensei. Él me felicitó pero nosupe de que hablaba, así que puse mi cara más seria que tenía.Acepté la felicitación pensando que era por mi proyecto finalcon él. Luego me dijo que había visto el formato de aplicación


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de nuestro laboratorio en la oficina del decano.- ¡Wow! Impresionante. - dije al oír la parte del decano.

- Espera, eso no es todo. - respondió a mi comentario y continuó.- Tengo parte de la autoría intelectual, pero los derechos sondel Departamento de Matemáticas y de Tokio-Tec. Al menoses algo, ¿no crees?.- Eso creo.

- Lo mejor de saber esto es que puedo usarlo en NTT Labs.Pero no sabré si pasa a patente plena hasta dentro de dos añosaproximadamente.- Aún así tiene potencial.- Así es. - respondió con confianza y sus ojos estaban tomando

un brillo. - ¿Sabes qué es lo mejor de que haya sigo Sakamoto-sensei quién hizo el trámite?- No, ¿qué es?- Mi referencia es ella y no Okumura-sensei. - dijo con unamirada casi malévola.- Ya veo. - ahora caía en cuenta de por que estaba doblementefeliz. - Entonces, esta situación es excelente para ambos entodos los sentidos. Mientras Okumura-sensei no creía en tuinvestigación, Sakamoto-sensei aprovecho la oportunidad deescalar tu investigación para generar la patente, adjudicarlo al


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laboratorio, incluirte por ser el que dio la idea principal y tú alsaber esta información la explotarás en NTT Labs sin pedirle

a Okumura-sensei una recomendación. Es más, no tienes quepedirle nada. Debido a que lo hizo Sakamoto-sensei.- Hiro-kun, me enorgullece ser tu amigo. Lo que dijiste es en-teramente correcto.- Gracias. Lo aprecio mucho.

(Me quedé pensando en una cosa sin decirla. ¿Habrá sido Ken- zo lo suficientemente maquiavélico para pensar en esto desde

el momento que escribió su artículo para Acta Mathematica? ¿Será posible que Kenzo puede vislumbrar cómo actuará la gente?

Lo dudo. Sin embargo, parece que todo se ha resuelto para él.

Simplemente no puedo creer que conserve la calma y sea frío.Aunque, pensándolo bien, eso le ayuda a estar más atento a todas

las opciones en su panorama.) - Hiro-kun. ¿Cómo vamos a festejar?, más aún, ¿dónde vamosa festejar? - preguntó con mucha alegría.- No se. No lo he pensado. Apenas empiezo a darme cuenta queya tenemos trabajo para abril. No me he detenido a asimilartodo. Mucho menos que hay que festejar. - la pregunta no laesperaba y tenía que pensarla.- Tengo una idea Hiro-kun. - sus ojos empezaban a delatarlo.


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- Kenzo-kun, no empieces, conozco esa mirada diabólica.- Vamos a esperar a los contratos. Deben ser por diciembre. Así

festejamos el año nuevo también. ¿Qué te parece? - dijo contono casi de burla.- Me parece bien, pero hay algo que no me has dicho. ¿Qué es?- dije antes que cambiara el tema.- Invitaré a Akane.

(Me quedé helado, no se si era una prueba, pero en esta ocasiónno pude responder. Ahora sí me quedaba claro que Kenzo tiene mucho en la mente. Tiene planes dentro de sus planes. Sólo me quedó aceptar.)

- Claro. Está bien. - dije con voz entrecortada.

- El siguiente año, va a ser el mejor año para nosotros. Ya loverás.Ya teníamos fechas para la presentación final en el seminario,

también fecha para ser examinados por el cuerpo facultativo.Okumura-sensei nos había pedido la entrega del borrador detesis y si estaba bien, presentaríamos el original para el trámitede graduación. Kenzo estaba feliz toda vez que llamó a NTTLabs y acompletó la información de la patente y dio comoreferencia a Sakamoto-sensei y el número de aplicación que usóServicios Escolares para con la Oficina de Propiedad Intelectual


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para registro internacional. Desde la ventana del laboratorio seveía un viento fuerte. Las gente que caminaba cubría sus rostros.

El inverno se adelantaba. Entonces, el fin de año se acercaba.Cuando comenzó el segundo año seguimos viéndonos por las materias comunes. Así que nos veíamos casi diario. Salvo por el club de micro-computadoras y mi trabajo en el bar como mesero. Es curioso, pero en el instante que Kenzo comentó algo,

en ese instante supe que era diferente. Por que su lógica no obedecía a la de los demás. Un poco como la mía. En realidad

yo me sentía en un limbo. Un lugar intermedio entre lo que es el “status quo” y lo radical. En el caso de Kenzo, era radical. Conideas nuevas y revolucionarias. En algunas clases era criticado,

pero después de alineaba, sabía que por dentro se alineaba, pero después de meses regresaba. Era su forma de probar que estaba en lo correcto. De desafiar al sistema y de que podía cambiarlo.Tarde o temprano congeniamos. Fue la clase de Akamatsu-sensei donde comenzamos a trabajar en equipo.

En la clase de Akamatsu-sensei se programaban algoritmos y métodos matemáticos. Nuestra misión era programar algo para la resolución de problemas con un punto de equilibrio según las condiciones de restricción de un problema de minimización o su contra parte de maximización. Así fue como Kenzo y yo empe-


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zamos a trabajar juntos a sugerencia mía.- ¡Oii!, Kenzo-san, ¿me permites un momento? - le pregunté a la

salida de la clase de Akamatsu-sensei.- Por supuesto, ¿es por el proyecto final de algoritmos? - preguntó como si fuera lo más obvio del mundo. (Fue directo al grano.Interesante. Me pregunto qué tendrá en mente.)

- Así es. ¿Qué piensas al respecto? - también fui directo al grano.

- Vamos a tener que sentarnos a discutirlo. ¿Vamos a una cafetería? - Adelante. Yo te sigo.

Caminamos por el campus hasta salir y luego camino a la estación de Okayama entramos a una cafetería. Durante el

camino hablamos poco hasta sentarnos y entrar en materia.

- ¿Qué tienes pensado para el proyecto? - fui el primero en preguntar antes que que su forma tan directa de abordar los

temas me cuestionara.- Espera un poco. - respondió a la par que comenzaba a buscar un cuaderno dentro de su mochila. Buscó unas hojas al final del mismo y me las mostró. - Mira.

(Una prueba a mi prueba. Kenzo, he de reconocerlo. Eres bueno.) -Veamos que tenemos aquí. - Tomé el cuaderno y comencé a leer sus notas. Hice una pausa miré al techo y continué. - Kenzo, creo que tomaré un té chai.


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- Está bien. Iré por uno igual. - se retiró de la mesa y fue a ordenar

nuestras bebidas.

(También saqué una hoja para descifrar lo que Kenzo estaba proponiendo. En realidad tenía puntos válidos aunque tambiénincluía algunas hipótesis que sabía que no darían ningún

resultado. Todo lo fui anotando para cuando volviera. Tambiénalgunas ideas mías.)

- ¿Qué opinas? - dijo mientras me extendía mi bebida. La acepté y le di un sorbo. Luego pude comenzar.- Tengo algunas observaciones que deben ser aclaradas. Otras tendría que ver cuáles son tus hipótesis para tales aseveraciones y

también tomé notas de cómo podría complementar unas ideas. Por

ejemplo aquí. - Señalé un postulado con su lenguaje matemático.- No siento que haya una estructura de base de datos que soporte una conversión que propones aquí. Yo optaría por la segmentacióndel núcleo y luego tratar la validez de las restricciones.

- ¡Oh! Ya veo. Es cierto.- ¿Se puede optimizar?

- Adelante. ¿Cuál es tu propuesta? - Una doble base de datos. Una para esta hipótesis en cuestión ...- ...y una para el problema dual! - interrumpió con euforia. -

Hiro-kun, así lo haremos.


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- Creo que necesitamos averiguar que nos puede ayudar. No

tenemos tiempo para crear una estructura así para el fin de

semestre. Tendríamos que dedicar muchas horas diario para lograrlo.

(Luego me miró. Profundamente, como si tratara de llegar al fondo de mi alma. Se que buscaba algo. Se que no lo encontró

por lo que dijo.)

- No te preocupes, podremos. - me sonrió con su media sonrisa diabólica. - Empecemos lo más pronto posible.

- Está bien. Supongo que vale la pena esto.- Puedes apostar a que sí. Ya lo verás. - me dijo lleno de brío

y entusiasmo. - Mañana en la biblioteca para afinar detalles.

Cuando esté lista la teoría nos pasamos a programar.- Mientras continuaré con lo que se puede hacer a nivel memoria

para este algoritmo.- Excelente. Hasta mañana.

- Hasta mañana.Así fue como me despedí de algunos fines de semana para

estar con Kenzo estudiando o visitando algunos café internet con

las herramientas de programación que necesitábamos. Discutimos mucho sobre el poder de procesamiento, el volcado de pila y la memoria a usar. También como usar las bases de datos y cuando


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escribir en el disco para liberar memoria. Finalmente un cuidado en los resultados que debiera proporcionar el algoritmo.

Después de un par de meses de arduo trabajo tuvimos lo necesario para comenzar el código. Era la primera vez para mí que debía de compartir código con alguien más. La gran ventaja era que Kenzo tenía buenos métodos para comentar código y se apegaba a la estructura del algoritmo. También creaba funciones

y librerías según se necesitara. Accedía bien a las entradas y salidas de hardware y memoria. Eso facilitó que yo pudiera

concentrarme en las bases de datos y las estructuras teóricas de los cubos y matrices multidimensionales. Los núcleos, las matrices

de matrices y todo con bases de datos dinámicas.

Llegó el día de la presentación final. En cuanto al sustento teórico, fuimos masacrados por Akamatsu-sensei ya que no teníamos el soporte teórico en ese momento. Los postulados que propusimos sólo tenían lógica y bajo esa perspectiva habíamos programado. Mientras que faltaba el soporte teórico, tomamos muchos puntos a favor en la parte computacional. Demostramos tener habilidad en la parte de código a falta de teoría. Pudimos,de una forma empírica, ganar un paso a los comentarios de Akamatsu-sensei. Cuando demostramos los resultados y las

comparativas con respecto a los algoritmos estudiados, lamen-


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tablemente no alcanzamos a sentir un poco orgullo en nuestras conclusiones. Si bien era la clase de algoritmos, habíamos ganado

poco en cuanto al orden computacional y poder de procesamiento,Akamatsu-sensei criticó que nos orientamos en optimización de código. Así que por el esfuerzo nos fue bien, por lo que pudimos lograr, pero intentó sepultar los logros computacionales ya que no

formaban parte de su materia. Kenzo trató de resaltar algunos

puntos a favor pero, Akamatsu-sensei era implacable. Guardamos silencio. Al final nuestra calificación fue de las mejores.

Vimos las demás presentaciones del resto de la clase. Ninguna tan interesante cómo la que nosotros presentamos. De la misma

forma corroboramos que nuestra calificación debió de haber sido

de las más altas. En una forma equiparada, algunos proyectos fueron buenos, cumplieron con el objetivo de la clase y fueron

calificados igual. Cuando salimos comentando el resultado que obtuvimos, había algo de enojo en la voz de Kenzo.

- Fue injusto al habernos medido con el “objetivo” de la clase.- Tienes razón.

- Espero que al menos haya aprendido algo de nosotros. ¡Maldito! - era claro el enojo de Kenzo - Creo que lastimamos su ego, eso fue lo que pasó.

- Me pregunto, ¿qué no debería ser más receptivo? ¿qué no debería


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cultivar el custionamiento y la búsqueda de la verdad?

- Cierto. Siento que está ensimismado en su camino y su verdad.

- pensaba en las palabras de Kenzo - Alguien así debe ser obstinado. Creo que está eliminado de mi lista de laboratorios para el cuarto año.- ¿Ya empezaste a buscar laboratorio? ¡No lo puedo creer! - me

sorprendió que Kenzo a esta altura buscara las posibilidades de

entrar a un laboratorio y la forma de graduarse.- No es algo definitivo, pero ya tengo algunas ideas. No quiero

terrminar haciendo algo que alguien me pide sólo por el hecho de

que estoy dentro de un laboratorio. Al menos quiero hacer algo que me ayude, crecer en algún aspecto propio.

- Pero, ¿qué sucede con sus lineas de investigación? - Lo que dijimos, tienen que reformarse, cuestionarse, dar un paso

atrás y tener un nuevo panorama y retomar el camino. De lo contrario, están condenados a quedarse petrificados en el tiempo y sólo sobrevivir con lo poco que nosotros o algún otro estudiante

pueda lograr en sus laboratorios. - Kenzo tenía mucha lógica enque hay que evolucionar para adaptarse.

- Entiendo. Eso puede pasar.- Hiro-kun, he aquí un reto para ambos. Debemos localizar

el laboratorio que necesitamos para cuarto año con base en


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experiencias de los estudiantes de maestría, con los artículos que publican y las empresas que los han contratado.

- Suena sensato. Hagámoslo.Al término de los proyectos ya sentíamos un alivio. Nuestras calificaciones eran de las mejores, lástima que la clase de algoritmos no representaba lo que sabíamos por que se notaba un

tinte personal que detectamos en nuestra exposición. Vendrían los

exámenes pero en general no aportaban mucho a la calificación final. Los proyectos lo eran todo. Ahora era momento de relajación.Íbamos a la universidad sólo para trámites de inscripción. Kenzo a aprovechar el tiempo en casa o el club. Y yo en trabajar dos turnos

cuando podía. También buscábamos la forma de pasar el rato

y estar distraídos. Fue así como Kenzo y yo estábamos buscando una nueva laptop para él en Akihabara. En realidad no iba a comprar nada aún, era para las ofertas de año nuevo. Lo hacía de esa manera para poder obtener mayor beneficio por su dinero.También revisamos algunas opciones de laptops usadas. En reli- dad no buscaba algo novedoso, sino algo potente que pudiera usar.

- Hiro-kun ...- me dijo llamando mi atención de todo lo que estaba a mi alrededor. Yo estaba distraido. - ¿Te das cuenta que ya el siguiente año empezamos el proceso de graduación?

- Sí, lo tengo presente. - contesté regresando mi vista a él.


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- Yo también. Por eso estamos aquí.

- ¿Qué esperas de estos dos años?

- Espero que podamos entrar a un buen laboratorio. Por eso me estoy preparando desde ahora.- Es poco tiempo el que queda, ¿verdad?. - dije con algo de sar- casmo.- Aún cuando no lo creas es verdad. Yo tendré que dejar algunas

actividades para poder dedicarme de lleno a mis clases, aprender, para luego entrar a la investigación y la tesis.- No creo que necesites tanto, es el tercer año.- Hiro-kun, piénsalo bien. - me dijo con su voz calmada y serena.

Esto era serio. - Llevamos casi dos años, ¿cierto?

- Cierto.- Las materias generales ya terminan en enero o febrero. ¿Cierto? - Cierto.- Viene el año de especialización. ¿Cierto?

- Cierto.- ¿Quiénes van a ser nuestros maestros?

- No sé. Los tienes que elegir. ¿Cierto? - dije en tono de venganza.- Cierto. Parafraseando la pregunta, entonces, ¿qué cargo tienenlos profesores de especialidad durante el tercer y cuarto año?

(¡Aaaaah! Ese es su punto. Maldigo cuando tiene razón. Todos


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tienen algo en común. Los que nos van a dar clase durante el

tercer y cuarto año son los profesores que fungen como titulares de

los laboratorios del posgrado del Departamento de Matemáticas,así cómo los profesores eméritos, el jefe del Departamento de Mate- máticas y el Decano. Por si fuera poco, hay algunos profesores que están adscritos a los centros de investigación multidisciplinarios.Todos ellos son los que nos darían clase de elegirlos. Eso sin contar

las clases de los otros departamentos a los que queramos asistir como formación complementaria de investigación que dicte el laboratorio al que ingresemos.) - Ahora entiendo el punto. Y, ¿eso que tiene que ver con tu nueva laptop? - pregunté al no entender razón aparente.

- Qué los profesores que elijas en estas materias de especialidad,van a ser los profesores que posiblemente te examinaran al tér- mino de tu tesis. Desde ahora hay que presumir las capacidades que tienes en sus clases y los proyectos del semestre. Al final,

conoceran cómo eres en tu exámen profesional.- Tienes toda la razón. No lo había visto así. - contesté algo ape- nado.

(Debería tener más fé en Kenzo. Siempre se ha adelantado al futuro. Lo hace con coherencia y muy focalizado. Eso que me

dice, significa que desde ahora debo de

Novela Kenzo El Matem Tico

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