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SENTIDO DE UN LIBRO, HASTA DONDE EL AUTOR PUEDE ORDENARLO.

ENTRE TÚ Y YO.

El sentido de la edición escrita, es distinto, y casi contrario a la primera inercia de escribir. Al menos en mi caso. Empecé a escribir por puro desahogo personal, como expresión de la vivencia interna, y cuando me di cuenta, estaba transcribiendo lo escrito, para alguien, probablemente para ti, que tienes en las manos este libro. El 'desahogo' íntimo, se había convertido en instrumento de comunicación, y así lo acepto. Lo acepto porque no es una edición abierta, para todo el que quiera leerla, simplemente porque puede comprar el libro. Es una edición limitada, abierta solo para ti que has entrado a ver mi desnudez de alma, y la forma que tengo de codificar en palabras y sílabas ritmadas las tensiones y fuerzas de la vida, que se me han ido acumulando en el tiempo de historia personal, dedicado a conocer los caminos de Dios. En realidad, es un libro de oración. La pasión de escribir, como necesidad urgente, sin consideración alguna de si sabía o no, de si estaba preparado o no, para escribir según los cánones de nuestro castellano, la descubrí en la cama de un hospital al día, o quizás mejor a la noche, siguiente a mi infarto grave de miocardio. Casi a las puertas de la muerte, descubrí que la vida, mi vida, seguía intacta en la palabra. Y desde entonces para mí el escribir, no dependió de los cánones y reglas de ese arte, sino del propio impulso. Los cánones y reglas vendrán después, y tendré que aprenderlos, pero el impulso ya está aquí y tengo que plasmarlo. Eso es lo que tienes en las manos, un impulso primario, de niño que empieza a jugar con la vida de la palabra, aflorando por el ritmo de las sílabas, sin otra pretensión que ese juego de comunicación en código de letras. Quizás lo único importante sea haber descubierto el signo del impulso creador del hombre, inteligible para el hombre mismo, el impulso que conocemos como Palabra, o Verbo de la vida. Esa Palabra, en sí misma es alguien. Pero cuando, cumpliendo su sentido de vida, se dirige a otro alguien, a otra persona, que la entiende, afortunadamente se produce el mejor fenómeno de vida que puede conocerse, la oración. Comunión con el amor del Padre en su Palabra. Si puede hacerse con un ritmo de cadencia interior, en la idea, y exterior en medidas de sílabas y acentos, entonces sale un canto. Y eso he querido hacer, cantos de amor en fe, y en esperanza viva.

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Realmente el fenómeno, que para mí es aún un misterio, es este:

Tengo el alma tan llena de tus versos

que hasta en el cuerpo duele si no digo, si no dejo que salgas como quieras

y digas lo que quieras,... si no escribo.

No es fácil comprender este fenómeno

de ausencia y de presencia al mismo tiempo, en el mismo interior.

No es aún medio lleno, ni aún medio vacío,

sino lleno total, y en plenitud vacío.

He visto hombres que tienen tu presencia, y ni lo saben.

He visto en otros latir su corazón,

pero no corre el ritmo de tu sangre por sus venas. ¿Cómo creas así?

¿Cómo te haces río que va lleno de vida y en la orilla del cauce siembras penas?

Latido de mi luz...........,! manuel requena

------------------------------------------- CANTOS DE AMOR, EN FE,

Y EN ESPERANZA VIVA.

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Centinela del alba de su día, déjame entrar,

déjame que me bañe de armonía

antes que se despierte, el mar.

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(185)

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¿Qué haré sin ti?

¿Qué haré mientras tu vienes?

No encuentro otro remedio, que morirme de amor,

ahogado en un pantano de esperanza. -----

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ANGELES

(26) 2

Decidnos hermanos que le veis, dónde esconde la llave de su puerta. Ya percibimos la esencia de su Ser, y queremos llegar a su presencia .

¿Es quizás la Palabra, el lecho del encuentro?

¿Es su revelación en ella, como un beso?

Sello de luz

has clavado en mi vida, pendiente de una cruz.

Nunca lo olvido, si tengo que salir

salgo contigo. ------------------------

(27) 3

Domingo en primavera, de mañanita

nos has dado en tu beso

que resucita,

tu milagro de vida, sigue existiendo

mientras voy de camino, redescubriendo.

Cuando te nombro.... voy andando camino

hombro con hombro.

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Pegadito a tu reja,

paso la noche en vela, hasta que amanezca.

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(31) 4

Mientras vivo en la carne, déjame hacerte homenaje de palabras.

Como un altar, un templo revestido de alabanza.

Déjame hacerte un puente

de voz y de suspiros, cruzando por la fuente

de mi amigo.

Será puente de amor a tu Palabra

en mi voz.

Será noche fecunda, serena, sellada,

como tumba.

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(40) Eres hermoso Dios, lo reconozco.

Eres lo mas hermoso que he vivido,

Limitada experiencia de tu rostro, tenemos en tu Hijo.

Limitada exigencia del principio

que busca plenitud, y hasta en las grandes cosas de este mundo,

siempre le faltas tu.

Puedo tener aplausos y lisonjas

puedo tener escarnios y torturas... Si tú no estás,

en nada me aprovecha

¡Auténtica aventura! el gozo de ser tuyo, y de sentirte nuestro.

¡Auténtica locura!

que Tú teniendo todo, y siendo omnipotente, eterno,... permanente...., para ser todo en todos,

aún te falte yo.

Todo está en tu presencia. todo lo puedes,

y me has cogido fuerte de la mano. Si quieres que te viva en la armonía,

en ese cielo azul, aquí estoy..... Si! .. Vamos!

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6

(45) Cuando llegas de noche con tus amores,

como sol de mi alma, aquí amaneces. Me llenas la memoria de resplandores

y con ellos pernocto, hasta que vuelves.

Entre la lluvia vienes, ¡luz de la vida! ¿y no te compadeces de mi alma herida?.

Limpia con tu saliva mi ojo enfermo, y así podré yo verte bajar del cielo

Cuando ya estés muy cerca,

seré como tu cuerpo, Tú, mi cabeza. Y nos verá tu Padre como una Iglesia.

Para gloria perpetua de su gran nombre,

seremos arco iris de mil colores, signo de unión y Paz, ¡Dios en su hombre.!

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(46) Tu cuerpo en sangre huele a pan y a vino,

a hogar, a calma, que entre tus montes santos; saben a pascua, a fuerza del camino, chorreando alegría nuestros cantos.

Eucaristía viva de los pobres,

al Padre donador de santos bienes, líbranos de los fríos a los hombres,

en cada vez que vienes.

Llénanos de tu amor para el camino, pon en la alforja la medida llena

que prometiste a los que van contigo

Si quieres de los frutos de mi higuera, aquí tienes también el pan y el vino,

hagamos refrigerio a tu manera. ---------

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(47) ¡Aquí estas!

No solo eres, y también haces ser, sino que estás.

Es lo mejor que has hecho para mí,

mejor que el sol y el firmamento entero, mejor que el agua y sus formas de vida

mejor que amores de mujer y de amigo, has hecho la locura mas hermosa:

Estar conmigo.!

Gracias Señor, por hacerte en mi altar

eucaristía de amor. ------------

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(48) Noche de amor,

de paz y de tortura al mismo tiempo. de vida y de la muerte,

de ser y de no ser en el mismo momento.

Noche de amor estéril y fecunda, como el viento.

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(49) Toda la presencia enamorada

se engendra en mi interior, cuando brota por dentro, en la mañana,

tu voz .

Luciérnaga serena de mi alma, lamparilla de amor,

testigo del aroma y de la calma

de Dios.

Acércate al cristal de mi ventana

que espera tu calor, empañado aún por la manzana

No te importe el dolor,

de quitarme la marca de la nada

que envaha el corazón. -----------------

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(50) Deja que me brote libremente

el agua que tu llamabas vida, que forme una laguna inteligente

donde apagar la sed, herida.

Sin mas orden que amar, sin mas ley que tu voz,

zarza ardiendo, en luz del corazón.

Sinaí del desierto,

compañía de mi soledad, fortaleza.

Azul de mi silencio,

cielo de mi orfandad, tu grandeza

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(51) Palabra es el agua de la vida. Si el cuerpo casi todo es agua,

en el alma, casi todo es palabra, con la virtud y fuerza de tu herida.

Herir para la carne es como muerte.

Para el alma, tu herida es pura vida.

OH! sangre derramada en alianza.

Si hombre derrama sangre, brota guerra, si la derrama Dios, brota esperanza.

Guerra del hombre, fuego sin sentido,

solo se encuentra un agua que la apague, y es la que brota de tu pecho herido.

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(60) Viviendo de tu Amor,

justifico la fe enmigo mismo. Soy semejante al Dios de Jesucristo:

Fuerza del Padre,

Palabra que lo explica, y Espíritu que dulcemente arrulla.

Todo está en mí.

Me voy haciendo yo, tú y él, creándome en la imagen de ese Dios.

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(61)

Qué luz tenía..¡ y se me ha ido

ya no quiere asomarse a mi pupila interna. Pero yo la persigo

y espero el sortilegio de encontrarla.

De pronto, cuando quiere,

aparece escondida en los ojos de un niño

o en el sol, o en el aire,

y seguro, seguro que la encuentro

en tu cuerpo

y tu sangre, en tu mirar de fuego

y en tu aliento

cuando te engendra ¡Vida! nuestro Padre

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(63) Armonía del alma

luz de la vida, llévame hasta la sala

de tu comida. De noche,

mientras la luna brilla... antes que el alba anuncie la despedida,

quiero cantarte yo, en mi destierro.

Después,

en cuanto brille el sol y venga el día, sabrán cantarte todos,

pero ahora... en esta oscuridad que enciende el alma,

eres tan solo mía. ¡Armonía del alma! ¡Luz que me guía!

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(77)

(TABOR) Camino hacia la luz es mi camino, pasando por la muerte, como Tú,

pero sabiendo ya que nuestro sino

no termina en la cruz.

Cuando me llamas a subir al monte, a revelar allí tu condición

antes me has dado la salud del hombre: tu gracia y tu perdón.

Mándame ya subir a tu presencia

entrar en esa nube de la fe, que explique mi querencia

Quítame el miedo de escuchar al Padre,

para que vaya acostumbrando el corazón, a la experiencia que tu luz nos abre.

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(79) Libertad de cantar tu nombre quiero

con la fuerza que brota del encuentro, y amor se vuelva dentro.

Mi ángel de cantor sabrá ofrecerte,

un sacrificio entero: viviré para siempre si me muero.

Así será mi canto,

que goza con la suerte

de estar ya redimido por tu muerte .

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(81) Cuando me han anunciado la partida, me voy a preparar para dejarlo todo,

menos tu amor, y en la palabra viva

conservada en el centro de la frente, traspasará mi alma redimida,

la cita ineludible con la muerte.

¿Por qué quieres batirme en la pelea

si yo no se vivir, ni pelear, sin ti?- Ábrame ya los ojos a tu encuentro,

y entonces, sin la lucha, seré tuyo,

me envolverá el misterio, dire,....... SI!

Y seré tuyo eterno, ¡siempretuyo!

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(84) La lucha cotidiana, esa es también tu lucha.

Así te haces presente en nuestros días, no solo cuando envías Espíritu del Padre,

sino Tú mismo, en cuerpo y sangre, eres Eucaristía,

Miedo de no agradarte dificulta el camino, hace lenta la marcha hacia lo eterno.

Esa es mi lucha,

agradarte o ser agradecido, como dicotomía del tiempo en que se pierde

tu presencia inmediata.

Estar contigo es lo único que vale, y el camino, la técnica perfecta.

Aquí me tienes,......

Caminemos, en una vida eterna. ------------

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(85) Me pediste mis manos, y aquí están, chorreando la gracia del encuentro,

déjame recibirte en mi diván, y sea ya de tí todo mi cuerpo.

Tu presencia, más grande que los cielos,

encierra en sí a todo el universo, ¿Cómo agradarte con cosas de la tierra, si no fuera fundiéndome en tu cuerpo?

Unidos para Dios tras el encuentro,

yo cuidaré tu carne, y tú la mía, que eternamente te llevará ya dentro,

haciendo luminosa nuestra vía.

Como aurora que me introduce al día, así me llevas limpio hasta tu Padre, ¡Oh Luz indeficiente que me guía!

acompáñame siempre hasta la tarde.

Y a la tarde, en una aurora nueva de otra noche, tráeme calor del cielo, en tu presencia,

que cierre como un broche, la bendición perfecta de tu Iglesia.

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PASCUA

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(90)

Vestirme de cantor y abrirte el canto

que brota de tu eterna compañía, así es la vida que he buscado tanto

y ahora me regalas cada día.

Sentir tu aroma

que inunda mi sentido y que me deja inútil para todo,

menos para cantarte. Ofrecer cada palabra en sacrificio,

como hacían los antiguos con los toros, con los machos cabríos y las aves. Cada palabra abierta y entendida,

perfumada de esencia de tu Espíritu, llegando al corazón de tu presencia

en cada oído abierto.

¡Alabanza de Dios! Eres el gran misterio de la vida,

en mí resucitando. -----

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(93) Luz de alborada, mañanita de abril

que lo sacaste de su tiempo

y lo trajiste a mí, resucitado y nuevo,

te bendigo, bebo la vida que sale de su soplo,

y te lo dejo, que lo lleves por siglos de los siglos

presentándolo a otros que lo amen, y sean mis hermanos de su amor.

Permíteme tan solo mañanita,

que cuelgue de su cuello un verso, luciente para los tiempos muertos

y las mañanas vivas, en almas que ven su amanecer.

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(95) Pascua sagrada,

gracias por ser aún de luz para nosotros, mas allá de la noche y las estrellas.

Tiempo de tiempos muertos por la aurora,

amaneciendo sangre, en vivo mar de simas suntuosas

abiertas para amarte. Déjame ser esencia viva, ser un hombre,

similitud de silueta eterna, que traduzca a tu Padre.

¡Vente a vivir conmigo eternamente!

Dame tu voz, la escuchará el silencio de mi tarde,

y seré amor. --------

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(96) Oscuridad cercana, ábreme un hueco

para que entre el mensajero inerme de la paciencia. Oscuridad divina,

ábreme al eco de una voz que conozco porque sale de ti

como luz de infinito.

Oh¡ abismo de la jara en los montes que corres la noticia,

saltando las cabezas de los hombres, para llevar directamente al corazón,

infusión de aleluya, en sangre suya.

Oh¡ misterio de amores

que suenas como el viento, en el frío cristal de mi ventana,

oigo tu voz, huelo tu aliento de historia, de los tiempos

en que mi corazón te conocía como un pájaro en vuelo, y te llamo al encuentro.

.......

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(97) CADA UNO,

SEA LO QUE QUIERA. CADA UNO,

QUIERA LO QUE SEA, Y YO,

CRISTIUNO. ........

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(98) ¡Cómo será quererte, sin otro amor por dentro?

¡Cómo, llevarte en la memoria viva?

Será calor, inicio de la vida. Será si tu lo quieres,

cuando llegues hasta mi ser de hombre, que pueda yo mirarte, si vinieres,

en mi alma convertida.

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(99) Eternidad del tiempo remecido en mi sangre, que va subiendo a borbotones de conciencia,

dando noticia de otros mundos en los que se prolonga mi existencia.

Traes noticias en tiempo de mis venas,

de amores y de odios, de soledad en la carne, y sobre todas, me traes simplemente la Noticia:

“Ha estado aquí, ha dejado su encargo,

y se ha marchado, y antes de que existieras, ya preguntó por ti”.

Después de todo,

mas alla del genoma

incluso de la muerte... ¡ hay Alguien para mí!.

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(100) Sé que eres.

No se ni donde estás, ni si piensas en mí, ni si puedo llamarte.

Tan solo sé, que eres.

Siendo tan pobre, saber eso, es bastante!.

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(101) Cuando el amor se hace rosa en el pecho,

floreciendo de sombra en la noche, y nace la palabra de su manto de luces,

en virgen que somete su cerviz a la voz... Entonces vives tú, y solo entonces

rompiendo los esquemas y haciendo libre el alma que duerme entre cadenas

de otros sabores tintos, sin cuándos ni porqués.

Libertad de los versos de mi canto,

que tienen tu varilla de medir, distancias de penumbras,

sin enojos, me das siendo de tí.

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(104) Cuando el amor se despedaza hora tras hora,

en el recuerdo eterno de tus ojos, como si fueras yugular de luz,

riegas el corazón.

Así sostiene el hálito de vida

la cumbre del misterio que sabe describirte y que no quiere,

porque le da vergüenza de tu nombre.

Amor de antaño y fresco, ¿qué tienes en la aurora

que te nombra en cada amanecer levantando tus luces, como sangre?

Déjame entrar a ti,

desde la soledad de la ignorancia, y encuéntreme tu amor entre los lazos

que me han atado al mundo.

Noche que acaba al alba, ya no me asustas,

porque conozco tu luciérnaga rota por mi amor.

Levánta ya, oh! sol de mi universo, y asoma por la esquina de mi calle,

como si fueras hombre que busca la corriente, para empapar la sangre

del corazón abierto, herido en la palabra.

Música sacra,

misterio y verso del amor, eres tu para mí.

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Azotea temprana de las horas donde abro el espejo de mi alma

recordando su nombre. ¡Ábrete entera,

a la jornada eterna de su rostro! ----

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(111)

Reunirse en el trueno del nombre, donde suenan las voces del Padre,

cayendo la luciérnaga

en brazos de la tarde, las puertas de la noche, membranas del silencio,

nadando en la abundancia de la vida, me dan ganas de amar,

esperanza de amar seguridad de amar, del alma convertida.

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110

Rediviviendo. Amar, reír, jugar y fuego.

Rezar, penar, sanar y escarcha, rizando el rizo del camor al conjugar tus verbos,

en la acción y pasión de tu mirar de fuego, que acaricia y castiga al mismo tiempo.

Eternidad forjada en un secreto a voces,

escondida en las voces

asombrada de voces, que llaman sin cesar a la existencia:

¡Eres tú! ¡Al fin tú!

Rediviviendo.-- ----------------------

Neologismo: CAMOR = amor en la cama. ---------------------

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(112) Corazonada.

Fuente de la vida, antes del corazón

ya chorreabas vida, latiendo junto al Padre.

Así te conocimos, chorreando,

vida de sangre y agua, supervida.

Nada te puedo dar que tu no tengas,

pero sí puedo recibirte entero, aquí, en mi sima,

donde no salen agua, ni sangre, ni la vida, pero entran las tuyas y la inundan,---

como una fosa inmensa. Aquí se vuelven fértiles,

y alcanza, ya por fin, sentido pleno,--- el mito del cordero.

Si gustas de quitarme con tu sangre

la falta original y la presente, aquí tienes un grande privilegio creado por tu Padre

un centro de tu amor manchado por la culpa, un abismo de muerte

que llama sin pudor la vida tuya, derramada en la sangre y en el agua.

¡Ven! Enseñorea la tierra que te empapa, convirtiéndose en luz cuando recibe

un latido de amor de tu frecuencia. ¡Sagrado corazón en vos confío¡

Bien dicho está

ahora y por los siglos,

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así sea. .......

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(113)

Fuerza y divinidad del sacramento; asombro, eternidad adormecida,

noticia inmensa de tu paz venida,--- regalada, por fin, al universo.

Señorío de amor, resquebrajando

el castillo de arena del pecado, que el hombre en su soberbia estaba amando

en despojos que tu le habías creado.

Señorío de amor, resucitando

la vida de lo auténtico, en tu Hijo, que se convierte en lanza de mi pecho,

y con su soplo sigue traspasando

hasta el centro donde habitáis de fijo, haciéndolo de amores vuestro lecho.

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(114) Si alguna vez he visto la Palabra,

y no la conocí como camino, es que el mundo cegóme la ventana

por donde atisbo, la luz de mi destino.

Hoy en vez de ventana, tengo puerta, abierta al mas allá de la existencia

en la carne, por tu Palabra muerta, resucitada, al fin, en otra esencia.

No tengo compromiso con la muerte,

tan solo con la vida quiero tratos. Me morderá la muerte en lo que pueda,

la vida curara desde lo alto.

Y así se hará lo que propuso el Padre al crear a su hombre en semejanza, viendo a su hijo allá, en lontananza:

La vida, por la muerte, la salud por la herida,

Dios mismo convertido para el hombre en tierra prometida

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( 116 y 117) Volver a tus manos desde el barro,

y convertirse en hombre entre tus dedos, es gracia que sigues derramando,

cuando te haces viviente, en este suelo.

Rompe la roca que cierra tu camino, y sal al cielo abierto de mi alma.

Hazte por fin aquello que dijiste cuando tuviste sed, hazte en mí, agua.

Excelsa infinitud, fuerza de aroma,---

que anuncia en el sentido tu presencia, descárgame a la puerta de tu aurora,

de la tensión que me dejó su ausencia.

Fortaleza de la debilidad,-- que diriges el canto hacia tu Padre,

agiganta tu toque delicado, y llega hasta la iglesia, que te sabe.

Caridad que te entregas en la sangre

como un río de amor, penetra hasta los pliegues de mi hambre,

y enséñame a ser Dios, como imagen perfecta de tu madre,

la Iglesia del dolor.

Resucita de nuevo,-- en esta carne

que quisiste llamar a tu esplendor, ¡Hijo del Padre¡

hazme en ti redención.

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(118) Oh! luz brillante esencia de mañana

que amanece, al día de --su voz, ábreme el alma, penetra mis entrañas

y hazlo--- de nuevo entre nosotros, Dios.

Acuarela divina, agua tintada de pasión

y de amor, pigmento de la luz que enseña al Padre,---

desde siempre escondido en tu interior,

aquí tienes un lienzo emborronado

mil veces de pecado, repíntalo de nuevo,--

en tu sabor. ---------

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(119) Hasta tu altura derramas mi esperanza,

hasta ese hueco inmenso, principio de la vida

donde te esconde el Padre

al que llega mi amor nacido del Espíritu, y espera.....

-- Esperanzado, marcha.

--- Y se parece a tí cuando vivías

en esta zona neutra que llamamos el tiempo. --En Él pusiste tan alta nuestra vista,

que te alcanzó, mas allá de la puerta de la muerte,

mas allá de --su ausencia, que llega hasta nosotros ya sin miedo,

con el aroma de tu plenitud. Luz de la fe:

¡Ahí estás Tú! --------

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(122)

Amor, en el azul del cielo que me envuelve,

Amor, en el azucar suave de tu alma,

Amor de amar, Amor de ser amado.

Ay! Amor de mi esperanza.

Amor, -- cuando te escondes,

como sol de una tarde ya sin calma, nunca lo haces de pronto,

vas suavemente ennegreciendo el alma, haciéndote de noche,

poco a poco, dejándome pegado a tu ventana

atisbando rendijas de tu esencia, que me traigan aromas de tu alba.

Y aromando te espero.-- --

Amor, ¡hasta mañana!

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(123) (Escrito tras la muerte de D. Luis Expósito, un asilado pobre, centenario, pequeñito de cuerpo,

pero que resumía con solo verlo todas las tragedias del siglo XX) (Le he puesto el tratamiento de Don, para dignificar,por fin su pobreza)----

Trayectoria final, la vida eterna. Fin y camino eterno en un solo deseo.

Dicotomía perenne que se hace trinidad en la experiencia. Eso es ser hombre,

pasar desde ser piedra a ser camino

que sale de las sombras a la luz, en ese solo acto que llamamos vida.

Así lo entiendo hoy al regresar del-- cementerio:

creo,-- en la fe que deja al hombre ante la vida eterna, en la puerta del llanto y la alegría,

de la pena y el gozo, de la luz y la sombra, de la muerte y la vida

en ese solo acto del suspiro final.

Se fue Don Luis Expósito, un siglo de penas se llevó a su nicho

en su pequeño rostro, hinchado por la gloria de ser pobre.

La inclusa, el orfanato,

la cárcel y la guerra, y hasta el hogar de todos,

como un entrenamiento para llegar al Reino, hasta hoy que se fue.

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(124) MARIA

Fuente de gracia, referencia perfecta del Jaris que brota de tu seno,

mojado de agua viva. Cuerpo y alma entregada al misterio de la plenitud.

Por fin, pudo ser alguien desde dentro hacia fuera,

sacando al verbo eterno, la imagen de la gloria,

hacia el pobre de Adán, perdido en la nostalgia de su tiempo.

Y fuiste tú,

creada en gracia simple, sin saberlo siquiera,

la fuente que nos dio al Verbo de Luz. -------

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(125) Introito del amor,

abre la puerta al beso de la muerte, préndeme en fuego vivode su voz, y quema la nostalgia de tenerte.

Introducción es todo lo que he hecho.

¡Ahora ... empieza la vida!, justo cuando se acaba,

porque ya no hay futuro en quien Te mira, solo presencia eterna,

acoplado y conformado a ti, sin mas conjugación, ni tiempos de tu Verbo,

que el inmenso gerundio del Espíritu: ¡TÚ........ SIENDO!

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(126) Ser como Tú, de Amor,

es la transformación que estoy buscando. La puerta es muy estrecha, ya lo se,

pero la encontraré resucitando.

He de morir un poco cada día, y hoy le tocó la muerte al corazón,

a sus sueños y fuerzas, a sus ansias, que arrastran con su vela, la pasión.

Amanecer en Tí, quiere mi vida,

ser luz de la luz, que nace de tu herida.

En bendición eterna deshacerme,

y ya que he de morir, !que sea de verte!

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(128) Cuando me atrevo a responder tu vocación de padre,

y sigo la llamada de tu voz

entonces, solo entonces, soy de los tuyos, que son los del amor.

Cuando los ritmos de la palabra vibran

en las entrañas fértiles de luz del corazón, entonces, Verbeando, me hago Hijo de Dios.

Ser vivo no es hablar, ni hablar es estar vivo.

Vivir, solo es amar en el centro del alma, lo divino,

La esencia viva, de luz vivificante,

azulyviva

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(129) ¿Por qué te escondes Luz?

¿En donde te entretienes mas allá de la noche de mi alma?

¿Por qué no vienes hasta la misa eterna

que digo cada día, en tu ventana?

Si quisieras sacar el dedo de alegría

que signa la verdad de tu presencia, viviría hacia fuera en mi creencia,

y te harías de nuevo cercanía

Sería ya de amor, hijo del alma de la fe,

gustando para siempre tu sabor,---

cantando lo que sé, prendido a tu dolor:

Que creyendo en tu nombre, Dios se ve. -----------

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(130)

¿Dónde estás amor?

¿Dónde te encuentro?

Sé que estás cerca, porque huelo tu nombre en el viento,

porque toco tu rostro en la rosa, y tu pie deja huella en mi adentro.

Pero sé aún mejor que estás lejos, porque el viento se lleva tu nombre,

y la rosa se seca en mi centro, y tu huella, me tiene muriendo...

¿ Dónde estás amor?

¿Dónde te encuentro?

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(131) AMOR CRUCIFICADO

Cerca de tí, pero sufriendo lejanía eterna de tu alma.

Toco tu cuerpo a través del cristal que me separa,

y rechinan mis dedos, sobre la superficie lisa de tu calma.

Te tengo y no te tengo, en el mismo momento, te quedas y te escapas,

en la misma palabra que nos une, te mueres y revives,

en la misma presencia que me aturde, me vives y me matas.

Sola, sigue creciendo la semilla, hecha fruto de amor crucificado,

y viven juntas, en la misma gavilla

la gracia y el pecado.

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(134) (To be or not to be, this isn´t the cuestion) Ser o no ser, no es la cuestión eterna, la auténtica cuestión, la que nos duele,

es ser y no ser al mismo tiempo. El gran drama de la vida del hombre.. ser principio y ser fin al mismo tiempo,

ser camino y llegada

ser vedad y mentira ser vida muerta, y muerte que da vida

(to be or not to be

at the holly same time.) Ser o no ser, en el mismo sagrado momento.

Es teofanía del hombre, que siendo uno,

se activa o se pasiva en cinco direcciones, como las cinco heridas de su amor:

un yo, sale hacia el tú que lo enamora, y ya renamorados, se convierten en El, camino del amor,

y allí se hacen nosotros,

amor como camino, que lleva hasta vosotros,

con otros caminantes que son ellos, buscando su destino.

En esa senda clara de la vida, pronto seremos uno,

siendo y no siendo, pero al fin, marcados por tu sino.

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(140) ¡ Cuanto tiempo sin tí !,

sin moverme en la fuerza de tu aliento. ¡Cuanta noche sin alma!,

sin bañarme de luces en tu cuerpo. ¡Cuanto viento sin soplo!

sin encontrar el brillo de tus ojos, en el reloj del tiempo. Hoy, por fin,

¡cuanto amor en tu beso! en la inocencia pura de tu alma

cuando llega el reencuentro. ---------------

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(141) AUSENCIA

Palabra de la noche de los tiempos

que se convierte en día cuando vuelves, asómate a mi alma,

remueve el humor vítreo de su esencia de Dios

donde te miro, donde te encuentro,

cuando brota en su centro como fuente de vida, la luz de tu recuerdo.

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(145) Recopilar palabras para hablarte,

como lanza que atraviese tu pecho, esencia de mi arte,

rellenando de flores nuestro lecho.

Amanecer contigo, y abrirte la ventana en la que aroma

el paisaje sin luz de mi destino, esperando tu aurora.

¡Ven ya Palabra!

Toca suave la puerta de la celda

y espera que te abra,

¡Vente ya, amigo! Descorcha la inocencia de mi alma

y cenaré contigo. ---------------

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(148)

Cielo y tierra, unidos en tu cuerpo

cuando me abrazas, y se me vuelve cosmos la experiencia de ti.

Cielo y tierra, fundidos en tu habla,

cuando en vuelo te elevas, llevándote mi tierra en tu equipaje.

Cielo y tierra, unidos en tus ojos

cuando me miras

dejándome enterrado en lo celeste, y encielado en la tierra.

Cielo y tierra, fundidos

en el celo de tu tórrida tierra.

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(149)

Luces del puerto que marcan el camino

se encendieron en el mar alborotado, llevándome, por fin, a mi destino,

en agua mansa que sale de un costado.

Como río de sangre que da vida viniste,

se me hizo la experiencia día, pronuncié tu nombre, y fui sangre contigo,

fundiéndome en la fuerza de tu esencia, me hice hombre.

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(150)

¡Subirse a tu presencia, en esa luz que vives,

y quedarse, en ese día eterno

donde moras, donde muestras el Padre

a los que amas.!

Alguna vez subí,.... pero volví a la tierra de mi gente,

a nuestro mundo, atraído por esa gravedad que asemeja al amor.

Y aquí también te encuentro, hecho de carne,

de vino y pan caliente, que me hacen,

seguro, muy seguro... ser amor, viviendo entre la gente.

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(151) (Tras un día y cien años de entrega a tu servicio)

(A las Hermanas de la Caridad)

Aprendí que tu cruz es figura

del rostro de tu Padre sobre el mundo. Aprendí que toda tu hermosura,

clavada está sobre un leño fecundo, y al que mira, lo cura,

sacándolo del sueño mas profundo

Comprendí, dónde nace la vida de tu pueblo, y entré a la habitación,

donde el hombre mas loco se hace cuerdo, comiendo de tu don,

bebiéndose la sangre de tu cuerpo, que se transforma en vida de oración,

en amor de tu esencia, donde un ciento de años no son nada.

Sorprendí al final del dolor,

solo presencia tuya en los hermanos, en los que hoy,

desechados en este mundo nuestro

son el principio y fin de nuestro amor, son ..... el Maestro.

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(157)

Ay! Quien pudiera entender los rojos de tu tarde

que completan las luces de mi día. ¡Quien pudiera!

Quien supiera leer el cielo en tu mensaje,

y en la nube del alma tu presencia

¡Quien supiera¡

Ay! si me dieras esperarte despierto, en esta noche fría que se acerca,

¡Te quisiera! -------------

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(160) Trinidad viviente de las cosas

reflejo de la gloria de mi Padre, muéstrame ya la huella de su dedo

para que pueda amarle.

Dame la clave en tres que nos sostiene

haciéndolo visible en lo inviable

sin su poder, cercano a cada cosa, creándola de balde.

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59

(161)

Presencia tuya por encima de mis males, presencia curativa, orientadora,

que marca los perfiles del camino

como aurora.

Presencia de una luz que sale de tu seno, clavándose en mi alma, me prendes en tu fuego,

que deja tras de si mi mar en calma.

Fuego de amor, presencia recreativa

de tu voz

Fuego en el agua

que junta lo imposible, en tu Palabra

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60

NAVIDAD

(16 3) (17

Aserrín, aserrán, así serán

los maderos distantes de S. Juan

¡Cómo quisiera verte en esta noche! antes que el alba venga

y te me lleve!

Aserrín, aserrán, así serán,

los sueños que se van. ------------

61

(166)

Clavellina divina

flor de azabache, negrura de la carne

y blancor del Padre.

Dios y hombre a la vez, todo en ti cabe,

alimentas a todos, sintiendo hambre.

Luz eterna, divina

ve el que te sabe, y oscuridad infinita

quien no se abre.

Entrega generosa de Dios al Hijo,

le regaló una carne, limpia, de niño.

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Ay! Niño de mi alma, que te harás hombre,

y serás la alegría

del que nombre. --------------------

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(166)

Navidad en lo oscuro del alma

donde solo tu gracia penetra, Soledad que se vuelve presencia

cuando tu Verbo entra.

Navidad como luz de la historia

de las gentes, que olvidan sus penas, con tu Verbo, viniendo a escondidas,

pero siempre cuidando de ellas.

Déjame que te ayude a cuidarlas, gritando tu nombre

tras las estrellas.

Déjanos pronunciar tu Palabra

haciéndonos hombres, tras tus huellas,

.................

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63

(167) Noche de luz con ángeles cantando, frío de carne que calienta en el cielo,

y el camino...

un hombre, una mujer con su hijo, temblando, frío de establo, encuentro sobre el suelo,

y el destino....

Llenos de luz, pastores van cantando, alegría que trae tu consuelo

¡Niño divino!

64

(168)

Luz, fuerza, canto, y la esperanza abierta hasta lo eterno. Promesa que me ciñe como un manto

de luces en tu nombre: verdadero

Enorme apareciste, como un niño, y al brillar una estrella,

enderecé hacia el Padre mi camino

cantando tras de ella .

Inteligible, vigoroso, santo, cuando comienza el frío del invierno, supimos que eras niño por tu llanto, que liberaba al hombre del infierno.

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65

(169)

Sangre de luz, tu amor,

en esa carne viva que te esconde.

Sangre de luz, tu voz,

y el eco que en mi boca te responde.

Sangre de luz, mi Dios,

será tu vida en mí, cuando te nombre.

------------

66

(172)

Atardece en el río de vida, tu Palabra,

que brota como el agua de mi centro.

Y me quedo mirando,

bebiendo, cantando,...

en un gerundio eterno.

Engendrando. ++++++

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(178)

Flores de luz, como un castillo de artificios de fuego,

provoca tu palabra

en esa zona oscura que te espera siempre, y que se sabe tuya,

por que es tuya, solo tuya.

Armas de luz

para defensa ardiente

de esa zona oscura que se enciende siempre

cuando llegas

y que no enciende nadie, sino tú, porque no es de nadie,

sino tuya

solo tuya.

Vida de luz, prendida de tu vida,

que ilumina en un mundo donde el miedo

oscurece los cielos de tu gloria, cielos de tu Palabra,

de tu amor, los cielos de mi Dios, que cantan ¡Aleluya! y de verdad, verdad, mi vida es solo tuya!

+++++++++

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68

(179)

Espero en mi rincón tu recompensa.

Espero que te mires en mi espejo

llenándolo de luz, que refleje tu rostro aquí, en mi seno.

Espero que se claven en mi centro

las lanzas de tus ojos, cuando rezo.

Espero que la luna de mi alma

se vista de tu sol, ardiendo como estoy, en la esperanza.

Espero, en el silencio y sin llamar,

que abras de pronto la puerta de tu estancia, y entrar a ti, y ya no esperar mas,

porque se han acabado las distancias. +++++++

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69

(181)

Francamente, no entiendo mi miseria. Mi carne tiende a su derecho, y mi espíritu, alumbrado por ti, ya ni tiende, solo en-ti-ende.

Así paso los impulsos de vida,

los días y las horas, amenazando encuentros,

rompiendo las coyundas que me atan,

buscando una presencia, una mano, un amigo......

Cuando lo encuentro

siempre resulta parecido a ti.

No sé ni por qué busco, si desde que comienzo

siempre te encuentro a ti.

Si no busco, me muero, si me muero te encuentro,

y si busco, también te encuentro a ti.

Ya todo me da igual ¡SIEMPRE TE ENCUENTRO!

A TI, LO ÚNICO DISTINTO DE MI VIDA

++++++

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70

(182)

Misterio, el de la luz que cada día

envuelve la corteza de mi alma, queriendo entrar a iluminarla entera, para dejarla resplandeciente y salva.

Misterio, el de la voz que empapa mis sentidos

y me lleva en su hombro hasta la sala

donde gozan los suyos, del banquete de luz y de agua clara.

Misterio, mi pecado que enciende tu piedad,

y se hace antorcha

anunciando a los cielos y la tierra

que solo vivo por tu misericordia.

Misterio de todos los misterios, tu gracia. La fuerza de tu amor resucitado

que brota en tu mirada clavada aquí en mi alma, certificando en Ti, ¡Dios se ha encarnado!

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71

(pasa al 2) 72

(186)

Sé que lo sabes todo, y eso es mucho saber.

Sé que el Padre te sabe,

y yo también.

Él, del todo,... yo un poco......, pero saber, saber,... el del Padre y el mío

son el mismo saber.

Son aguas de tu seno, y sabor a tu ser,

el que tiene mi Padre, y yo también.

Son Espíritu y vida

que gusta el que te ve, !Sabiduría divina¡, con ojos de la fe.

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(188) Cantarte cada día un canto nuevo, es obra de tu espíritu en mi alma.

"¡Sé así! ¡vive así! ¡VIVE...!"

Y yo obedezco, y canto..., y vivo ....

y viviendo tu canto

entono tu presencia. y me hago santo,

contigo en las entrañas, preñado de tu luz,

camino mío, bendición de mi Padre,

agua y rocío

de su divina esencia. Palabra de su amor,

¡querencia!, que vienes en la tarde hasta mi nada

y la dejas repleta de tus dones, y se hace altar mi alma, que canta tus canciones

con el sabor a trigo, al vino y al aceite, que chorrea tu nombre,

el que contiene en sí todo deleite

cuando lo dice el hombre. ¡ Iglesia !

Excelsitud del hombre en tu presencia

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++++++++++++++++++++

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(189)

Amor que huele a sangre, y a dolor, y a entrega.

Amor que cambia el rumbo de la vida

del que recibe tu bendición que lleva dentro de sí la fuerza de tu herida.

¡En un momento!

Signo de amor hiciste aquella Cena, y sacramento,

que sangra todavía por tus venas, en mi centro.

Verdad viva del alma que en ti halla

alimento, y en soledad fecunda encuentra,

su contento, sereno porque sabe que te lleva,

adentro. ++++++

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(190) Dejo tu luz que salga por mi verso,

y me hago verso en ti cada mañana. Me subo a la montaña henchida de palabra,

que chorrea la fuente de tu verbo y ahí me quedo,

esperando, abriendo la conciencia a tu regalo, que trae los aromas de tu aliento.

Dejo, y me dejo,

haciéndome así hombre que te espera. Quedo, y me quedo,

esperando, sabiendo lo que soy,

asemejado a ti, traducción y exégesis del Padre en la materia.

!Sacerdote del alma¡ Escondite fecundo,

que corres como un río por mis venas, para de nuevo ser,

alimento del mundo. +++++

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(191) Caído ante tus pies, arrodillado,

dejándome empapar de tu semilla

que se convierte en sangre de mi sangre

y me conforma a ti.

Abierto hasta la médula del alma, de esa forma que tú me has enseñado,

para fundir esencias de las vidas, y parecerse a ti.

Esa es la gran cuestión del universo,

su ser o su no ser, arrodillado y reabierto a ti,

o no ser nada, ni noticia siquiera de la imagen que el Padre, en aquel barro,

hizo de ti.

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(192) ¿Qué es poesía?

¡AAAAAYYYYYYYYYY!

La palabra es distinta del grito,

pero qué es poesía, el grito o la palabra?.

AAAAAAAAaaaYYY!

El suspiro es distinto del grito, pero poesía auténtica son, el grito y el suspiro.

Ay!... Ay! Ay!..... Ay! Ay!

La queja es fuente auténtica del verso,

pero poesía, no es queja sino encuentro.

¿Y una lágrima?

No es ni grito, ni queja, ni suspiro, solo, solo, es esencia,

poesía destilada, en ese alambique de versos

que es el hombre. Ser poesía,

!es ser hombre¡

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(194) Ser fuente y no poder dar agua...¡

tenerla almacenada entre las venas del monte de mi alma, y manar solo penas!.

Ha de romper la plenitud del monte,

y dar a luz la vida, dejando en negritud la cueva de la noche,

el alma convertida.

Cercanía del agua, que se convierte en sed

justo en la raya de su ausencia. Promesa del abrazo de la fe

que ya es casi presencia. -------

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79

(197) Aquí y allá,

en todas direcciones, siempre estás

haciéndote camino del hombre que te busca, y harto ya de buscar,

no te encuentra hecho sitio

sino camino mismo, al caminar.

Allá y acá,

y en todos los rincones, para ti es igual.

El tiempo y la distancia solo son ocasiones, formas de hacer encuentro con el hombre,

reflejo de tu Reino, al caminar.

Por aquí o por allá, ...

¿qué mas da?

Lo único importante es que sea en ti, por ti, y contigo,

el resto de la vida, hasta la eternidad.

Lo demás, ¿que mas da.....!

Lo único que importa es caminar.

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(203) Si fuera yo capaz, en soledad,

de rumiar el amor que me has brindado..! Si supiera sacar de mi orfandad,

toda la plenitud que has puesto en lo pasado..! Serías para mí meta y camino,

el fin de mi esperanza, lo sagrado.

Y terminado lo actual,

si se pudiera..¡ como dijo mi madre, Teresa de Jesús,

!Mucho mas que te quiero, te quisiera..¡

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81

(210) Ser noche que está llegando al día,

aurora del sentido, ya brillante, ------ sombra que empieza a deshacerse.....

Es todo lo que mi hombre espera,

deshacerse de sombras, ------convertirse en luz,

en ser hacia la vida.

Extravagante ahora, introligente,

danzando eternamente, vagando entre sí mismo,

introvagante, leyéndose en la vida, del libro de la vida,

escrito allá en su seno,--- eternamente.

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(224) NOVEDAD DE VIVIR CADA DIA

Empezar de nuevo, contigo no es difícil,

eterna novedad.

Difícil, es vivir el cada día

pegado de la tierra, sin nada que empezar.

Difícil, es que pase la esperanza

sin subirse en su carro, ni hallar con quien hablar.

Muy difícil, soportar el insomnio

del tiempo y del espacio, en negra soledad.

Fácil, AMIGO,

vivir entre tus manos, esperando empezar cada mañana

a comprender tu paz, tu Voz acompasada.-----

Fácil, Señor,

a pesar del tiempo y de los años, poner en ti los ojos,

y con la poca vista que nos queda, mirar tu caridad.

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(225) Como una loma verde,

así tu rostro, por el que suben mis palomas torcaces,

hasta tus ojos.

Como cofre de plata, así tu cara,

donde guardas la joya de inocencia, que yo admiraba.

Como límpida fuente,

así tu habla, cuando brota suave-------, henchida de lo alto,

viva, de agua.

Subo a tu monte, miro tu cara,

y me bebo la vida de tu agua, cuando me amas.

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(228) +++++++

Gracias, por este atardecer en tu presencia,

por el perdón, que limpia mi pecado, por la semilla eterna de tu nombre

que me enseña a llamarte, dejándome en tu fuerza embelesado.

Gracias,

amor, por romper mis barreras, y acercarte hasta la orilla inerte en que vivía,

llenándola de olores de recuerdo, presencia de las cosas mas sencillas

de tu casa, y la mía.

Gracias

por dejarme cada día mas tuyo

y quedar tú mas mía.

Gracias

por conocer tus pasos cuando llegas, envuelta en religión o en carne humana,

en palabras o en voces, porque en el fondo de todos mis encuentros,

lo que descubro siempre, es tu mirada.

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+++++++++++

85

(237) PALINGENESIA

Hoy empiezo, por fin,

a revivir de la presencia eterna, oculta en la fachada oscura de mis cosas.

Hoy empiezo, !por fin! a retuyar,

a vivir en lo tuyo, adentro de tu casa,

mi casa, nuestra casa,

que tienes preparada para mí en tus brazos abiertos,

elevados al Padre

desde siempre.

Hoy empieza, en la Verdad, mi tiempo, el resto de la historia de mi vida

que tiene un solo intento, una trama de amor,

solo un suceso, en tres actos de escena:

Tú, el primer acto, creando con el Padre. Tú, en el segundo, entrando en lo creado.

Tú, omnipotente, llevándote a lo eterno esta criatura

Y tiene tanta luz esta tragedia....! que se convierte en alba de mi SÍ,

en mañana radiante, en mediodía.

Y en ese SI, me quedo,

porque ya no habrá tarde, ni noche que lo acabe.

La tarde de mis años naturales,

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que ya casi está en noche, solo anuncia tu venida radiante,

y te grita al oído

¡VEN SEÑOR, NO TARDES! -----------------

86

(238)

¿Cómo me instalaré en la paz?

¿Como echaré raíces en las aguas templadas de tu reino?

¿cómo almacenaré noticias de tu rostro, del fuego de tus ojos,

del agua viva que sale de tu templo?

Te llamo y me respondes, con ese idioma tuyo que habla vida.

Te busco y me respondes, en ese encuentro tuyo que destila.

Te pido, y te me entregas

en tu cuerpo hecho pan, y en tu bebida.

Y así quedo, fundido en tu recuerdo vivo, llamándote, buscándote y pidiendo...

¡no dejes tu obra medio hecha! termina de una vez tu advenimiento.

......

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(239)

Cuando no tengo mucho que decir y no puedo callarme,

surge la voz caliente del desierto, la luna de la tarde,

que presagia las sombras. No dice nada y dice todo, expresando mi hambre,

mi imperiosa tendencia de ser hombre en mi noche,

cuajada de margaritas blancas que brillan a la luna,

adornando tu nombre.

---------

+++++++++++

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(240)

OTRO QUISIERA

Quisiera ser aroma de tu nombre.

Estar ligado a ti de tal manera que todo el que me vea no me entienda sin ti, ni pueda a mí nombrarme sin brotar tu recuerdo.

Estar en tu paisaje tan unido, que parte de tu obra se entendiera,

con solo verme a mí.

Quisiera estar aquí, donde te escribo, entre las luces de tu misericordia, viviendo de tu estancia perfumada, y no partir jamás.

Quisiera hacerme fuerte en esta soledad.

Aprender los caminos de tal forma,

que nunca me perdiera al regresar a ella, pudiendo ir venir, salir y entrar, venir solo o con gente,

¡ tu gente de la Paz!.

Quisiera en esta tarde hacerme un nido, y contigo anidar

en la alta montaña de tu gracia, y aquí, saborear las aguas que corren .....por tus cauces,

por tus ríos de amar, por la escritura fértil que te invoca,

que vuelve a hacerte hombre en mi recuerdo, y entre mis manos,

PAN.

Quisiera...... estar contigo hasta la muerte, diciéndote en mi verso sin parar,

y después de morir, tan solo siempre verte....

Te consagro esta tarde en la Palabra, viviendo en la eudokía de tu Padre,

de mi Padre,

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nuestro Padre, aprendiendo a escuchar tu caridad.

-----

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(241)

REALIDAD

++++++++++

Tu voz en mi vivencia llamándome en la tarde a los amores, y mi pecho en tu tarde resorbiendo,

buscando tu caricia, tus sabores.

Y te encuentro,

prendida de tu risa, en la inocencia pura de tu entrega,

creciendo, convirtiendo, en frutos del amor,

el cáliz de mis flores. -----------

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(242) ¡Empuja! empuja y pare,

palabra misteriosa que vienes de la sombra, palabra de mi vida, que se hace luz en ella,

contemplando

las riendas, las coyundas de la muerte

......--- y el látigo que azuza,

gracias dando.

¡Empuja! ... y déjame pariendo

la solución, que nunca me auguraste

y está ahí, cerca de los temores y los llantos,

de la tiniebla pura, y de la sombra.

Empuja hasta la muerte,

y déjame tu impulso misterioso, eterno, sin retorno.

Allí me haré yo fuerte, y no daré lugares a las ninfas,

ni a sátiros ni a dioses. Allí, dando las voces

que el verso me sugiera, me haré verso contigo,

y en el verso empujando

pariré tu presencia, buen Amigo. --------------

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(245) Fuerza enorme, invasora, penetrante

estable mas que el cielo, subyugante,

clarividente, engendrativa y lúcida, brillante.

No solo eres camino,

sino puerto final de mi llegada.

No solo eres destino, sino imagen de luz resucitada.

Así te reconozco,

acompañada imagen de mi Padre, el primero de todo,

señoreando en ti las potestades, recreando en mi alma,

los cielos y la tierra, y las edades, al renacer del alba,

principias a crear eternidades

y me dejas en calma. ----

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(246) Manantial de vida,

traes esencia de Dios hasta los hombres, limpia el barro que tengo entre mis ojos,

y no me deja verte. Limpia el polvo que sale del abismo, y me recubre de un silencio mudo.

No puedo ser del mundo, y tuyo al mismo tiempo, lo sé por experiencia.

Por eso me divido en el mismo silencio que me asfixia.

Y entonces apareces....,

me tocas con tu dedo de luz, y quedo limpio,

viendo, cantando a los hermanos tus hazañas,

testigo hasta la muerte, de tu vida. -------------

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(247) Quién pudiera escapar del desierto!

Tener alas de amor y posarse, en la cumbre boscosa, donde nace el agua,

derramada en la luz de la tarde.

Quien pudiera bañarse en el río que viene de la cumbre,

limpio aún de azares y quejas, en su cauce de nieves y luces.

Quien pudiera anidar en la ramas

de un sauce en tus aguas, y esperar tu llegada.

Si supiera cargar con tu cruz, y mirarte a la cara !,

todo eso tendría en el sueño eterno de mi alma.

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(249) Hacerse eternidad,

en el perfume limpio de tu herida. Hacerse claridad,

en el oscuro hueco de la muerte, ¡tener la vida¡

¡tener tu suerte!

Hacerse ola del mar, que corra embravecida hasta tu playa,

y termine sumisa ante tus ojos, mojándote los pies,

de lágrimas,...... de hiel.

Ay! negrura de ser y de no ser,

de estar sin revivir, ni caminar.

Ay! quejío de sangre

que sin luz, se entremezcla en la tarde

con tu sal, y se cura,

en paciencia infinita de espera y de silencio, ¡en hartura de hambre!

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( 250)

Te veo allá a lo lejos, blanco, como de luz,

asumiendo mis ansias en tu gesto, elegante hasta la muerte,

hasta tu muerte y la mía, injertada en tu noticia.

Te veo allá a lo lejos, clavado de tu cruz,

mostrando en tus heridas la fuerza llameante

de tu muerte, en mi muerte

transformando el dolor, en tu caricia.

Te veo allá a lo lejos, recortando el azul

del cielo que prometes, al hombre caminante, hasta tenerte

hasta quererte

en la ciudad de todas las delicias,

Jerusalén del alma, alegría,

con su pueblo de gozo, ¡Teofanía!

que anuncia eternidad a mi mañana. -------