CAPÍTULO 1

A DIOS SEA LA GLORIAA DIOS SEA LA GLORIAA DIOS SEA LA GLORIAA DIOS SEA LA GLORIA

I . A Dios sea la g lor iaI . A Dios sea la g lor iaI . A Dios sea la g lor iaI . A Dios sea la g lor ia La Gloria de Dios y las MisionesLa Gloria de Dios y las MisionesLa Gloria de Dios y las MisionesLa Gloria de Dios y las Misiones

Las misiones comienzan con el propio Dios. Dios tiene la pasión de recibir la honra y la gloria de todos los grupos étnicos de la tierra. Pero Satanás y sus fuerzas han robado parte de la gloria que sólo le pertenece a Dios. Él quiere restaurar Su propósito original a Su creación.

¿Hay algo en su relación con Dios que usted quisiera contar a todo el mundo? Si es así, ¿qué es?

A. ¿Qué propósito tiene Dios para todas las naciones de la tierra? Salmo 86:9

B. ¿Qué nos exhorta a hacer el salmista tocante a Su gloria en el Salmo 96:3?

C. Medite en Isaías 40:3-17. ¿Por qué puede Dios llevar a cabo su plan misionero sin la ayuda de los seres humanos?

D. ¿Por qué cree usted que Dios nos ha escogido a nosotros los seres humanos? 2 Corintios 4:7-12; 5:14-21

E. ¿Para qué nos creó Dios, según 2 Corintios 3:18 y Efesios 1:4:6, 11-14? (Véase también Isaías 43:7)

F. ¿Qué significa “gloria” para usted?

El diccionario define la palabra “gloria” como “esplendor radiante”. La raíz de esta palabra deriva de “peso”, el “peso de la importancia”. Incluye claramente la noción de “reputación”. Glorificar a Dios significa, en parte, ensalzar Su reputación.

¿Qué significa la “gloria de Dios” para usted?

Según el Salmo 96, ¿qué espera Dios que usted haga acerca de Su gloria y Su reputación en toda la tierra? (Los gentiles, las naciones y los grupos étnicos pueden significar lo mismo, ya que son sinónimos en el hebreo original.)

El entendimiento y el aprecio de la gloria de Dios pueden llevarnos a adorar al Señor y a extender Su adoración entre todos los pueblos.

© 1997 Jonny Hawkins. Usado con permiso.

Confío en que sus corazones estén bien concentrados

en lo que el Señor tiene que decirnos esta noche, y

no en la dolorosa derrota que han sufrido esta tarde

los Leones frente a los Osos por culpa del injusto

penalti que pitó el árbitro a un minuto con quince

segundos del final del partido.

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G. ¿Cómo responde Dios a la idolatría? Isaías 42:8; 44:6-20

¿Qué perjuicio causa la idolatría a la reputación de Dios?

Podemos creer que no somos tentados a adorar ídolos, pero, según Colosenses 3:5, ¿qué es la codicia o la ambición?

El último objetivo de la iglesia no es la misión, sino la adoración. Las misiones existen porque la adoración no existe. El objetivo último es la adoración, no la misión, porque Dios, no el hombre, es el objeto último. Al final de este siglo, cuando los millones de redimidos caigan de rodillas, y se postren ante el trono de Dios, las misio-nes ya no existirán. La misión es una necesidad temporal, pero la adoración permanecerá para siempre.

Por lo tanto, la adoración es el combustible y la meta de la misión. Es la meta de la misión porque el propósito de ésta es simplemente llevar a las naciones al usufructo candente de la gloria de Dios. El fin de las misiones es el gozo de la gente en el reconocimiento de la grandeza de Dios…

Pero la adoración es también el combustible de las misiones. La pasión por Dios en la adoración precede ofre-cer a Dios por medio de la predicación. Uno no puede recomendar lo que no ama.

—John Piper2

Guillermo Carey y miles como él se conmovieron ante la visión de un Dios grande y triunfante. Esa visión tiene que amanecer primeramente sobre nosotros. Antes se aprecia en la adoración a Dios y después se propaga a través de la misión. La historia entera se mueve hacia una gran meta: la adoración ferviente a Dios y a su Hijo Jesucristo de todos los habitantes de la tierra. Las misiones no son la meta; son el medio. Por esa razón, la misión es la segunda actividad más importante del mundo.

—John Piper3

H. ¿Qué efecto produce la cruz del Señor Jesucristo en su gloria o jactancia personal? (Tómese la libertad de ver cómo afectó a Pablo en Gálatas 6:14.)

I. En Romanos 15:9-12, los cuatro textos citados de Pablo vienen de las cuatro secciones y los cuatro tipos de literatura del Antiguo Testamento. ¿Qué nos dice del corazón de Dios?

J. ¿Qué relación observa usted entre el celo por la gloria de Dios y la predicación (misión) a las naciones en Romanos 15:4-21? (Gentiles, naciones y grupos étnicos pueden significar lo mismo en el griego original.)

K. El humanismo exalta o adora al hombre. El materialismo ocasiona que la pasión fundamental de la vida sea la adquisición y la posesión de bienes materiales temporales. El budismo da culto a Buda (que fue un hombre) y a los ancestros (muchos practicantes del budismo creen que no existe ningún Dios). Los hinduistas adoran a muchos ídolos, e incluso a animales, como el pavo real, la vaca, el mono, la cobra y el elefante. Muchos que profesan ser cristianos también adoran cosas indignas como la libertad, la democracia, las posesiones materiales, el poder, el sexo, el orgullo, la seguridad, la diversión, el deporte, o la familia.

Muchos musulmanes dan culto a las tumbas de sus santos, creyendo que de ellas emana un poder especial, respuestas a la oración y bendiciones. Muchos musulmanes creen que obtienen la salvación por obras, no por gracia, y rechazan la deidad de Cristo, que él sea Hijo de Dios, la crucifixión, la resurrección, la Trinidad y la fiabilidad de la Biblia de hoy.

¿Qué gloria recibe Dios a través del humanismo, el materialismo, el budismo, el hinduismo y el Islam según Romanos 1:21-25?

¿Qué efecto causan los sustitutos religiosos sobre la gloria de Dios?

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L. ¿Cómo glorificaría a Dios si el evangelio fuera predicado y vivido en medio de estos pueblos, para que el Espíritu Santo les diera convicción y fe y fueran plantadas iglesias entre ellos? (2 Corintios 4:3-6, y especialmente el v. 15)

M. ¿Qué relación nota usted en Apocalipsis 5:8-14 entre la adoración y la gloria dada al Cristo crucificado y resucitado y los pueblos de toda tribu, lengua y nación que aceptan y creen en él?

N. ¿Cómo piensa que esta adoración sonaría en el cielo?

Refleje lo que piensa sobre las misiones a todos los grupos étnicos y la gloria de Dios.

Dios quiere restaurar Su creación frente a un imperio maligno y hostil entregado al proceso de degradarla y destruirla. ¿Cómo debemos relacionarnos con este Dios y con Su gloria?

Dios es un Dios de misiones. Él desea las misiones. Las encomienda. Las exige. Las hizo posible a través de Su Hijo. Las hizo efectivas al enviar al Espíritu Santo. El cristianismo bíblico y las misiones están orgánicamente interrelacionados. —George W. Peters4

Intente memorizar el Salmo 96:3. “Proclamen su gloria entre las naciones, sus maravillas, entre todos los pueblos.”

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