Cultura y sociedad
Yi hadisrno,la nueva arnen aza te rrorista
Texto: Jav¡er Fernández Arr¡bas
I a amenaza yihadista se está hacien-
I do cada vez más fuerte en países
l-occidentales. prueba de ello son los
atentados cometidos en Francia,fúnez y0tr0s muchos países o el elevado núme-ro de personas de nacionalidad europeaque deciden dejar su vida para viajar a
Siria y unirse a la lucha de la yihad, los
llamados "desplazados". Antes lo veía-mos como algo ajeno, pero su presencia
en países vecinos y en el nuestro propioha convertido al terrorismo yihadista en
una amenaza con la que convivimos día
tras día.
Si retrocediéramos al pasado, a la Espa-
ña de 1990, y alguien nos preguntara porla arnenaza terrorista, seguramente nos
',¡endria a la cabeza la banda terroristaETA Sin embargo, si nos preguntan hoyen dÍa, posiblemente pensaremos en la
amenaza yihadista, que poco a poco se
está abriendo camino hacia nuestrasfronteras.
En 2014 se cumplieron diez años de los
:f[Ti?ili?:];i:ffi:';i,HT:Jr Los recie ntesdo ha sido testigo de nuevos atentados atentadOS eny sistemáticas amenazas por parte de
srupos yihadistas Un curso de verano FfanCia O en Tú nezde la Universidad Complutense corno r^ _ ^ _
el celebrado en san Lorenzo de Et Esco naCen pensaf qUe')ii:,li'[1,',],ry,2{:3:;i: :"n:{::íí: I a a m enaza e státimas det rerrorismo y ta Escueta de pe- máS Cefca de lOriodismo y Comunicación, ha pretendido ,evaluar esta "nueva" amenaza terroris- qUe CfelamOS
ta, dedicando una especial atención a
algunas de las facetas de este fenóme-no cuyo análisis resulta esencial para la
elaboración de una Estrategia Nacionale lnternacional para combatir el terroris-mo yihadista.
A lo largo del curso, se han analizadotambién sus repercusiones, no sólo enla actuación de las Fuerzas Armadas,Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Es-
tado y servicios de inteligencia, sino enla conciencia de la población. Lo que sebuscaba era suscitar una reflexión nosólo profesional y especializada, sinotambién colectiva y participativa, sobrediversas realidades que ocurren tantodentro como más allá de nuestras fron-teras, y que podrían afectar a la seguri-dad y a los intereses vitales de fspaña.
Una nueva amenaza terroristasi antes veíamos el asunto del yihadismo
como un problema que tenía lugar "fue-
ra" de nuestras fronteras, los recientesatentados cometidos en Francia, contrauna revista satÍrica, o en Túnez, conlraturistas extranleros, nos han hecho pen-
sar que la amenaza está más cerca de loque creíamos. De hecho, el nivel de riesgode atentado yihadista se sitúa ya en el 4,
considerado riesgo alto, y a sólo un pues-
to del máximo nivel de alerta.
En palabras del ministro del tnterio[ Jor-
ge FernándezDiaz, "no hay motivos para
el alarmismq pero España tiene derechoa conocer en qué nivel de riesgo nos en-contramos". Por mucho que ellos insis-
tan, los grupos yihadistas no luchan por
defender su geografÍa, religión o etnias;detrás se encuentra una intensa disputapor conseguir el poder político y econó-m¡co. La determinación de los ciudadanosy la movilización de los gobiernos pueden
convertirse en la fórmula para vencer esta
amenaza. Sin embargo, si no se hace fren-te a los conflictos armados y a las bandasde crimen organizado, nunca se acabaráesta arnenaza, porque, según el tenientecoronel Jesús Díez Alcalde, "entre ellos se
retroalimentan".
La potencialidad "inabarcable" y el au-mento de recursos energéticos y zonasde agua potable han situado a África en
el epicentro estratégico del mundo, conun crecimiento anual del 7o/o entre 2000y 2011. Esto está provocando que el con-
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,7 /f7r lw'
tinente africano cada vez sufra más ata-
ques violentos por parte de grupos terro-
ristas, que quieren hacerse con el poder y
las riquezas de África a toda costa.
Además del problema que supone la lu-
cha de podel en el mundo árabe el asun-
to de la "identidad" está a la orden del
día. Según explica Karim Hauser, un pe-
riodista especralizado en el mundo ára-
be y actual responsable de Gobernanza
en Casa Árabe, "muchos paÍses no han
logrado imponer diversas etnias, y esto
ha creado brechas en la ciudadanía".
Países como Siria o Libia han optado por
una sociedad centrada en la religión, lo
que ha provocado que grupos minorita-
rios no se sientan identificados dentro
de su propia región. otro rasgo de la
identidad es el "expansionismo", la idea
de conquistar territorio. Todo esto nos
lleva a los levantamientos, producto del
inmovilismo en el escenario político.
La radicalización, el principalproblemaEl concepto de radicalización puede
definirse de diferentes maneras. En pa-
labras de Luis de la Corte, profesor de
PsicologÍa Social en la Universidad AutÓ-
noma de Madrid , "la radicalización hace
referencia a esos procesos de cambio,
de conversión ideológica, por los que
personas normales toman la decisión
de unirse a estos grupos".
Es tan significativo el concepto de radi-
calización que, de hecho, se presta más
atención a la prevenclón que a la per-
secución, puesto que la radicalizaciÓn
precede a las acciones terroristas.
Son muchos los factores que contribu-yen a la radicalización; entre ellos, las
cuestrones personales, indivlduales, las
ventanas de oportunidad en las que mu-
chas personas pueden ver una salida a
sus problemas económicos, y las rela-
ciones personales. Pero, sin duda, el fac-
tor determinante sigue siendo la ideolo-
gía, que es la que otorga homogeneidad
a los perfiles heterogéneos. El proceso
de radicalizactón está muy determinado
por el entorno. El terrorismo yihadista
ofrece a los jóvenes una nueva vida,
más atractiva, llena de sexo y dinero.
Las principales preocupaciones de la
radicalización en Europa siguen siendo
las generaciones con ascendencia in-
is_,..\q
Al Sousse. Túnez. Flores en homenaje a los fallecidosen el ataque terrorista perpetrado por un asaltante
que abrió fuego contra turistas en una playa frente al
Hotel lmperial Marhaba Hotel en al-Sousse, matandoa 39 personas, incluyendo alemanes, británicos y
belgas, e hlriendo a varios otros.
Imigrante, la influencia de líderes y pre-
dicadores radicales, la difusión de pro-
paganda, los entornos marginales más
vulnerables y los voluntarios extranjerosque dejan sus vidas cotidianas para afi-
liarse al Daesh.
Son muchos los expertos que coinci-
den en la idea de que el epicentro de
la radicalización islamista tiene lugar en
la peninsula Arábica y que nuestras so-
credades no son conscientes de las in-
yecciones de recursos económicos con
las que cuentan los grupos terroristas.
Haizam Am¡rah Fernández, investigadorprincipal sobre Mediterráneo y Mundo
Árabe del Real lnstituto Elcano, explicaque "es un asunto del mundo árabe, y el
problema está en esa interpretaciÓn del
lslam que justifica la violencta y genera
fascinación".
Por tanto, la desradicalización también
debe producirse en el mundo árabe. Se-
\-
Cultura V soc ied a d
El ministro del lnterior, Jorge
Fernández Díaz,y la presrdenta
de la Fundación víctimas delTerrorismo (FVt), Mari MarBIancq antes de intervenir en el
curso sobre la amenaza globalque representa el terrorismoyihadista dentro de los cursosde verano que la universidadComplutense de N4adr|d celebraen San Lorenzo de El Escoral.EFE¡/íctor Lerena
I
gún el profesor de Relaciones lnterna-
cionales de la UNED Carlos Echevarría,"cuando hablamos de radicalización nos
referimos a una enfermedad que afecta
al lslam y que está salpicando a los paÍses
occidentales".
Redes sociales, nueva vía decaptac¡Ón
Hasta 2012, un 80% de la captación y ra-
dicalización se producÍa en los aledaños
de centros de culto y prisiones. Sin em-
bargo, hoy en día el principal motor de
captación son las redes sociales
Están cobrando un gran protaSonismoy se están convirtiendo en las prin-
crpales vías de captación de 1Óvenesmusulmanes y no musulrnanes. El
tiempo de media de gente captadaque no profesa el lslam, hasta su radl-
calización, es de dos meses.
Existen una serie de estrategias de con-
tra-propaganda que se pueden llevar a
cabo a través de internet para disminuir
la presencia yihadista En primer lugat la
negación, un proceso de eliminación depáginas web y perfiles de posibles terro-ristas en las redes soclales. También el
hecho de cuestionar la credibilidad del
mensaje y sus protagonistas, y desmi-tificar las imágenes que muchos de
estos líderes han creado en torno a sÍ
mismos, puede ayudar a hacer frentea la presencia del terrorismo yihadista
en internet. La intoxicación, es decir,
verter informacrón perjudicial para es-
tos grupos, es otro método que se em-plea para acabar con perfiles terroristas
en internet.
Últimamente se está llevando a cabo el
denominado "mimetismo fraudulento".
consiste en crear una página web apa-
rentemente de defensa yihadista, admi-
nistrada por las Fuerzas de Seguridad y a
través de la cual se permite ver qué per-
sonas se mueven en esos círculos.
Los grupos terroristas yihadistas utllizan
internet para tratar de trasladar a la so-
ciedad una narrativa que justifique sus
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acciones. Llama la atenclÓn la cantidad
de personas captadas que no profesan la
religión musulmana y que, sin embargq
dejan sus vidas de lado para unirse a la
yihad. La presencia de colectivos yihadis-
tas en las redes sociales está teniendo
mucha culpa por la facilidad que tienen
para transmitir informaciÓn de una punta
a otra del planeta y por la facilidad de los
jóvenes para acceder a ellas Según Ma-
nuel Torres, profesor de Ciencia Política
de la Universidad Pablo de Olavide de Se-
villa, "vlvimos en un rnomento en el que
lo que prima es lo audiovisual, y nuestro
mensaje tiene que ir en ese sentldo".
España, en el punto de mira de laamenaza yihadistaPese a que, tras los Últimos atentados,
el nivel de alerta en España ha aumen-
tado del 3 al 4, el Gobrerno insiste en que
es una medida de "prevenciÓn", Ya que
nuestro país no es ajeno a un posible
atentado por parte de este Srupo terro-
rista. De hecho, en varias ocasiones han
manifestado sus Sanas de recuperar
Rl-Ándalus, a través de vídeos amena-
zantes en los que recrimlnan que esta
t¡erra es suya y avisan de que no pararán
hasta hacerse con ella. Por esta y otras
razones, se ha visto cÓmo en las cluda-
des de nuestro pais han aumentado las
fuerzas de seguridad.
El problema no son sólo los desplaza-
dos que acuden a unirse a las filas de
combate en Siria o los terroristas que
actúan supuestamente por su cuenta
pero se guían por indicaciones que re-
ciben por internet, sino los retornados,
que vienen adiestrados de la guerra y
pueden formar a potenciales terroris-
tas, y los "desplazados frustrados", quo
no han podido combattr en zona de
conflicto y están esperando a atentar
en su país de residencia, constituyendo
un potencial de rtesgo muy elevado.
Según los Últimos datos, más de 10.000
personas procedentes de paÍses eu-
FVT CULTURA Y SOCIEDAD / 55
ropeos se nan desplazado a Siria para
unirse a la lucha de la yihad. Si hablamos
de España, las cifras no son menos preo-
cupantes, con un número de 118 des-plazados, cifra que podria haberse vistoaumentada de no ser por las detencionesque se han llevado a cabo, evitando el
desplazamiento de centenares de perso-
nas.
España está siendo muy cauta en estesentido, y por ello ha elaborado un plan
de Prevención, hecho por el conjuntode administraciones, la sociedad y los
colectivos en riesgo. Se centra en tresámbitos de actuación: el interno, que
consiste en llevar a cabo acciones a nr-
vel local; el externo, que se centra en
los intereses españoles y las zonas deinfluencia; y el ciberespacio, en el que
se lleva a cabo un tratamiento de la red
de internet.
Las áreas funcionales son las básicas:prevenir, vigilar y actuar Además, esteplan no identifica un colectivo de riesgoen concreto o una determinada ideo-logía, sino que está abierto a cualquierforma de rad¡cali zactón
La amenaza yihadista en el Sahel yÁfrica Occ¡dentalÁfrica se está convirtiendo en un con-tinente con una potencialidad "inabar-
cable", debido a los recursos energéti-cos que posee, sumados a las zonas deagua potable Todo esto está situandoa África en el epicentro estratégico delmundo
Puesto que detrás de los ataques te-rroristas se encuentra una ambicionpolÍtica por conseguir el podel cornoasegura el teniente coronel Jesús DÍez
Alcalde, el continente africano cada vezestá sufriendo mas ataques violentosSegún el tenrente coronel, "la causa delterrorismo yihadista no se debe ni a la
geografia, ni a las reltgiones ni etnias,puesto que detrás siempre se encuen-
5ó / CULTURA Y SOCIEDAD FVT
sMayte carrasco,Javier Espinosa,Beatriz N4esa yiavier FernándezAmbas
-
Fgeen¡¡
tra una lucha de poder". La desigualdad
y el desempleo generan frustraciÓn so-
cial, y "esto se convierte a veces en el
mejor amigo de los Srupos yihadistas".
El problema de estos grupos es la inter-
pretación que hacen del lslam, deno-
minada "yihadismo salafista", y que n0
comparten la totalidad de los musulma-
nes. Según Díez Alcalde, la soluciÓn no
está en el ámbito de seguridad, sino en
la erradicación de la capacidad de cap-
tación, radicalización y fuentes de finan-
ciación.
Para erradicar estos tres ámbitos (ca-
pacidad de captaciÓn, radicalizaciÓn
y fuentes de financlaciÓn), el teniente
coronel propone una serle de claves.
En primer lugal investigar y eliminar
las causas del reclutamiento yihadis-
ta, llevar a cabo una reforma política
que sitúe al Gobierno en una posiciÓn
de desarrollo, reformar el sector de la
seguridad, con unas fuerzas de segu-
rldad y de defensa eficaces. También
una reforma judiclal que sitúe al pais
en un estado de derecho y, por último,
erradicar las fuentes de financiaciÓn.
Este último punto es espec¡almente
relevante, puesto que las fuentes de fi-
nanciación suponen el "alimento" de los
grupos terroristas. Es de vital importan-
cia acabar con las mafias y las bandas
de crimen organizado de los países del
norte de África, ya que son ellas las que
benefician las actividades terroristas de
los grupos yihadistas facilitándoles dine-
ro y armas. Son muchos los periodistas
y corresponsales de guerra, como May-
te Carrasco, freelance especializada en
el mundo árabe, o iavier Espinosa, co-
rresponsal de El Mundo, o Beatriz Mesa,
corresponsal de la COPE en el Magreb,
que coinciden en la ldea de que detrás
de estos grupos no existe una religiÓn,
sino mafias del crimen organizado que
Únicamente buscan poder. Según Mayte
Carrasco, la yihad es "una ideología que
srrve de cobertura a estas bandas".
La directora general de RPoYo
a Victtmas del Terrorismo,
Sonia Ramos;el ministro del
lnterior, Jorge Fernánd ez Diaz Y
la presidenta de la FundaciÓn
vÍctimas del Terrorismq Mari
Mar Blancq en el curso sobre
el terrorismo yihadista que laun¡verstdad complutense de
Madr¡d celebró en San Lorenzo
de El Escorial. EFE¡/íctor Lerena
I
Los medios de comunicaciÓn, una
forma de propaganda
Los medios de comunicaciÓn desem-
peñan un papel clave en la lucha an-
titerrorista. A pesar de que muchas
cadenas de televisiÓn retransmiten
los brutales asestnatos cometidos por
FVT CULTURA Y SOCIEDAD / 57
Cultura y soc ied a d
grupos yihadistas, van en aumento las
quejas de periodistas que recriminan a
los medios que hagan propaganda del
terrorismo.
Muchos medios de prensa escrita du-
dan en hablar del Daesh, otorgándole el
nombre de "Estado lslámlco", un nombre
impuesto por ellos mismos y que no re-
presenta a la totalidad de los musulma-
nes. Los medros hacen un flaco favor
mostrando los rostros de los yihadistas y
de los líderes terroristas, además de re-
petir encarecidamente los atentados que
cometen, puesto que "lo que consiguen
es otorgarles protagonismo y hacer pro-
paganda de sus actos", según subraya el
periodista y director de la revista Atalayar
com, Javier Fernández Arribas,
Beatriz Mesa, periodista especializada
en el Sahel, afirma que el yihadismo
está haciendo un "daño inmenso" a la
información. "Los medros únicamente
transmiten la sensación de terror", no
se centran en desentrañar otros asun-
tos como cuál es el verdadero motivo
que lleva a los terroristas a corneter
atentados. Además, el hecho de que
continuamente aparezcan noticias en
televisión les otorga popularidad y pue-
de llevar a que cadavez más jóvenes se
adentren en ese mundo.
El terrorismo yihadista es la amenaza
del siglo XXl, y hay que ser consciente
de que no afecta únicamente a los paÍ-
ses orientales, sino que cada vez está
teniendo más presencia en países oc-
cidentales. Es una lucha de todos, y es
necesario hacer frente a esta arnenaza
con firmeza. España no queda fuera del
objetivo yihadista, pero, en palabras del
subsecretario del Ministerio del lnterior,
Luis Aguilera, en una de sus últimas in-
tervenciones, "contarnos con medios y
estructuras locales para acaóar con el
terror del yihadisrno". r
TESTIMONIO DE ESTHER SÁEZ, VÍCTIMA DEL TERRORISMO
"El 11-M cambió mi vida para siempre"Esther iba a trabajar como otro día cualquiera, pero
no se imaginaba que aquel 11 de marzo su vida dariaun vuelco y cambiaría para siempre. Ella iba en unode los trenes donde estalló uno de los artefactos.
n un testimonio desgarrador y
emocionante para todos los par-
ticipantes en el seminario orga-
nizaclo por la Fundación víctimas del
Terrorismo en San Lorenzo de El Esco-
rial, Terroilsmo yihadista: una amena-
za global, Esther admite que, cuando
se despertó del coma inducido al que
se vio sometida, no se acordaba ni si-
quiera de que tenÍa hijos. "Cualquier
madre sabe lo que supone un hijo y lo
duro que resulta no acordarse de que
los tienes".
Debido al atentado, ha visto reducidas
sus capacidades en un 45%, domina
el habla pero le cuesta encontrar las
palabras para transmitir lo que quiere
decir. Se vio obligada a jubilarse a la
edad de 32 años, justo antes de reci-
bir un ascenso en la compañíafarma-céutica en la que trabajaba.
Durante meses su vida pendiÓ de un
hilo, e incluso los médicos llegaron a
comunicar a la familia que no lo supe-
raría. Pero lo superó. Tras días de tra-
bajo y gracias al inmenso apoyo de su
familia, comenzó a andar y a realizar
tareas de su vida cotidiana que para
ella suponían un gran esfuerzo.
Todavía hoy le vienen a la caóeza
imágenes de aquel fatídico día, y por
ello sufre insomnio y ataques de an-
siedad. "Son las secuelas más duras,
revivir una y otra vez el horror de ese
día", asegura.
Sin embargo, el miedo no la ha hecho
más débil; es más, ese suceso le ha
permitido disfrutar aún más si cabe
de sus hijos, de su marido y sus ami-gos. "Vivo intensamente la vida y dis-
fruto plenamente de ella".
Esther reivindica el esfuerzo de todospor hacer frente a las bandas terroris-
tas y recrimrna que haya "víctimas de
primera y segunda", refiriéndose a que
lo que ocurre del Mediterráneo para
abajo "parece no interesar a nadie".
Historias como la de Esther, víctimas
del terrorismo que han superado un
trauma tan grande y han seguido
adelante con sus vidas, demuestran
a todos los ciudadanos que, unidos,
es posible vencer la lacra del terro-rismo. r
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