8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
1/167
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
2/167
Michel
Gauquelin
LOS RELOJES CSMICOS
JtL
PLAZA
JANES S.A
Editores
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
3/167
Ttulo original:
THE COSMIC CLOCKS
Traduccin de
JESS
PARDO
Primera edicin: Febrero, 1970
Copyrigh t 1967, Henry
Regnery
Co m p a n y
1970, PLAZA JANE S, S. A., Edi tore s
Virgen de Guada lupe , 21-33. Esplugas de Llobrega t (Barce lona)
Este l ibro se ha publ icado orig ina lmente en
Ingls
con e l t tu lo de
THE COSMIC CLOCKS
Printed in Spain
Impreso en Espaa
Depsi to Le ga l : B. 6 .978 - 1970
S U M R I O
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
4/167
" v
;
P R L O G O
.
*
i
>
i * . , . , . . , .
.*
1 3
INTRODUCCIN
. . . . . . .
25
CRONOLOGA .
, , t t
*
*
33
PRIMERA PARTB
I. La religin ms antigua
i
(
* >
41
I I .
La ciencia m s antig ua 57
I I I . D e l a a r m o n a d e l as e s fe ra s a l h o r s c o po . . . 75
IV. In term edio bri l lan te 93
V. Psicoanlis is as tro lgico . . . . . . . . 105
V I.
El pro ceso cientf ico . . . . . . . . . 129
MATR ICES OBSTRUIDAS
t i
* t 147
SEGUNDA PARTB
VIL Pronst icos meteoro lgicos . .
VII I. Ri tos misteriosos
IX. Los sen t idos desconocidos del hombre .
X . La e sta ci n d el n ac im ie nto . . . .
X I .
Los p la ne ta s y la he re nc ia . . . .
XI I. El fluido vital
57
83
2 9
249
263
287
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
5/167
EPLOGO
De
los
dioses
de luz a los
relojes planetarios*
307
Apndice primero: Metodologa
y
anlisis esta
dstico . . . . . . . . . . . .
315
Apndice
II: Los
experimentos qumicos
de
Pic-
cardi
.
*
> .
, . ,
323
.
i
. t
-
, .
Hemos recibido permiso
de los
editores para citar pasa
jes de las obras siguientes: Astrology de Louis MacNeice
(Doubleday &Company); Astrology
and
ReliginAmong
the
Greeks
and
Romans de Franz Cumont (Dover Publi-
cations);
Cycleset
rythmes
de R.
Tocquet (Dunod
di-
teur); Cycles in your Life de
Darrell Huff
(W. W.
Nor
ton Co);The
Sleepwalkers
de Arthur Koestler (The
Macmillan Company);
The Sea
around
us
deRachelCar-
son, (Oxford University Press);
Expos Introductif
de
G. Piccardi,
en
Symposium internationale
sur les
relations
phenomenales solaire
et
terrestriale (Presses Acadmiques
Europennes); The Chemical Basis of Medical Climato-
logy de G. Picardi (CharlesC.Thomas); Season
of
Birth
de E. Huntington (John Wiley & Sons).
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
6/167
O
r
O
O
O
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
7/167
Lo que aqu nos narra Michel Gauquelin a su manera
tan interesante como estimulante es la larga historia de las
incursiones imaginativas y cientficas del hombre en la ob
servacin y contemplacin de sus relaciones con la bveda
celeste. La historia abarca, desde las primeras especulacio
nes astrolgicas, incluso las que precedieron con mucho a
la ciencia astronmica moderna, hasta el presente. Es una
narracin llena de inters y viveza de la evolucin del pen
samiento humano sobre esta cuestin desde el tiempo en
que los cielos eran considerados simplemente con temor,
perplejidad y reverencia, hasta la era actual, que comienza
a penetrar en el espacio exterior, cuando nuestro conoci
miento, aumentando explosivamente, ha demostrado que
los seres vivos estn vinculados a su universo por lazos su
tiles que hace unos pocos aos ni se sospechaba siquiera
que existiesen.
El hombre, desde su primer amanecer mental, en el pa
sado remoto, indudablemente ha tratado por todos los me
dios a su alcance de comprender su posicin en la jerarqua
natural. Ha luchado de manera constante por concretar su
relacin con el universo quele rodea, un universo sobre el
cual crea no ejercer ninguno o casi ningn control y por
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
8/167
16
MICHEL GAUQUELIN
el que intuit ivamente se senta dominado de un modo ine
xorable. La parte ms inaccesible y aparentemente inevita
ble de este universo eran los movimientos del Sol, la Luna
y dem s cuerpos celestes. La presencia y movim ientos, siem
pre los mismos, de stos podan ayudarle a relacionar el
da, la noche, las mareas y las estaciones.
Buscando seguridad y comprensin, es natural que el
hombre se volviese hacia los cielos, en apariencia omnipo
tentes, permanentes, siempre ante l . Pero por falta de me
dios con que l legar a conocer realmente las cosas, invent
relaciones que le daban cierta confianza en s mismo, jus
t if icada o no. Y es que para el hombre existe una necesidad
muy honda de creencia. Cuntos de nosotros permanece
mos completamente ajenos a alguna de las innumerables
supersticiones populares o no guardamos en secreto cier
tos nmeros que nos dan suerte o amuletos de un t ipo u
ot ro?
Para el hombre moderno y civil izado, la ciencia ha
susti tuido en gran parte a las supersticiones. Constante
mente, recurre a la ciencia en busca de solucin para to
dos sus problemas, igual que antes recurra a los cielos y
a su s dioses. Pero la ciencia, basa da en verdades ra
cionales que se derivan de observaciones cada vez ms exac
tas de la naturaleza y con frecuencia susceptibles de ser
comprobadas una y otra vez, obteniendo resultados previ
sibles de condiciones preparadas experimentalmente, no es
muy distinta de las mismas supersticiones cuyo lugar ha
ocupado, sobre todo si tenemos en cuenta que las verda
des son inciertas como arenas movedizas. Las verdades
de una generacin pueden convertirse en los absurdos de
la generacin siguiente. Nuestros tratados cientficos re
quieren revisiones no slo con objeto de aadirles nuevas
verdades, sino casi en la misma medida para podarles de
LOS RELOJES CSMICOS
17
lo que ha dejado de ser verdad en el nterin. La historia
de la Humanidad ha sido un tantear continuo, constante,
hacia la comprensin de la verdadera naturaleza de las
cosas. Y en cada alto en el camino han surgido unas ver
dades ms duraderas que otras.
La Humanidad ha hecho tremendos progresos en las co
sas que ahora se consideran como dominio de la ciencia,
antes de que l legara a existir la ciencia moderna. Por no
citar ms que unas pocas: la domesticacin de los anima
les y las plantas, la prediccin de los fenmenos celestes y
el descubrimiento del uso prctico de agentes naturales far
macolgicos, como, por ejemplo, el curare *. La ciencia, de
finida como el conocimiento del ambiente interno y exter
no del hombre y el uso de ese conocimiento en beneficio
propio, es, indudablemente, tan antigua como el hombre
mismo.
Como las verdades de la ciencia moderna pueden con
vertirse en algo muy distinto en el transcurso de unos po
cos aos, cabe esperar que, en cientos o miles de aos de
historia, sufran cambios mucho ms importantes. No es
de extraar que el hombre contine tanteando ms all de
los lmites de la ciencia moderna si los cientficos hacen
constantemente lo mismo, tanto como seres humanos que
como cientficos.
Aunque el hombre l leva mucho tiempo especulando so
bre los cielos y suponiendo que stos, de alguna manera
misteriosa, controlan su ser y sus actividades, tal cosa les
_ * Voz amer icana . Sustanc ia neg ra , res inosa y amarg a , que los
indios de Amrica del Sur extraen de la raz de una planta y de la
que se s i rven para emp onzo ar sus a rm as de caza y de guer ra . Es
un veneno muy ac t ivo que slo obra cuando se inocula en la san
gre ;
sus ant dotos son e l c loro y e l bromo.
N del T
2
2.795
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
9/167
13
MICHEL G UQUELItf
pareca imposible a los cientficos modernos, que continua
mente trataban de averiguar por qu causas y efectos se
regulan. En ausencia de medios de contacto evidentes, la
existencia de cualquier relacin directa entre los seres vi
vos y los cielos era puesta seriamente en duda, duda que
se vea reforzada por el descubrimiento de que, una tras
otra, las relaciones enunciadas por los astrlogos eran in
capaces de resistir un examen crtico.
Los bilogos concentraban cada vez ms su atencin en
el estudio del papel biolgico de los factores evidentes del
medio ambiente, factores que podan cambiar experimen-
talmente con facilidad y cuyas acciones eran fciles de re
solver. Entre stas estaban la luz, la temperatura y ciertos
factores mecnicos y qumicos. La ciencia segua avanzan
do con tanta rapidez y con tanto xito, que por parte de
casi todos exista la firme conviccin de que, por fin, podra
explicarlo todo en trminos de interacciones entre los se
res vivos y esos factores evidentes y de todos conocidos.
Cualquiera que se atreviese a sugerir la posibilidad de bus
car sutiles influencias celestes se enfrentaba con la ms
clara y decidida hostilidad. Esa zona de investigacin esta
ba prohibida a todo investigador biolgico que se respe
tase.
A comienzos de los aos 50, dos nuevos campos de in
vestigacin comenzaron a abrirse ante el hombre: los fe
nmenos de las brjulas y los relojes biolgicos.
Se descubri que toda una amplia gama de especies de
animales y plantas eran capaces de saber los perodos
de los das, las mareas, los meses e incluso los aos, hasta
cuando se vean privados de toda pista evidente que pu
diera ayudarles a hacerlo. De acuerdo con la conviccin
general de que todo era explicable en trminos de interac
cin de organismos con los factores evidentes de su medio
LOS RELOJES SMI OS
.19
ambiente, se teoriz que, como ninguno de estos factores
daba al organismo informacin sobre el tiempo, era lgico
suponer que cada organismo contena en s un sistema cro
nomtrico independiente. Admitir la otra alternativa, o sea,
que los organismos recibiesen informacin oculta sobre el
tiempo, era abrir una caja de Pandora y arrojar sobre la
biologa problemas insolubles, adems de los ya muy com
plejos que tenan planteados.
La existencia de cierta capacidad vital cronomtrica mis
teriosamente exacta fue siendo reafirmada a medida que
los investigadores que estudiaban la capacidad de orienta
cin de pjaros, peces, insectos y crustceos comprobaban
que esos seres vivos parecen practicar el arte de la nave
gacin celeste. El Sol, la Luna o las constelaciones podan
ser usados como brjula. Pero, por supuesto, la orienta
cin geogrfica por medio de puntos de referencia requie
re que el animal sepa la posicin que tienen en el cielo
esos cuerpos celestes en un momento determinado. Los
cronmetros internos de los animales salieron a relucir
como solucin de este problema. Tenan que ser relojes
que midieran la rotacin de la Tierra en relacin con el
Sol veinticuatro horas), con la Luna veinticuatro horas
y cincuenta mi nutos) y con las estrellas veintitrs horas y
cincuenta y seis minutos); se trataba, pues, necesariamen
te , de un verdadero sistema no solamente de calendario
sino tambin de reloj.
Pero, entretanto, la investigacin de los relojes biolgi
cos estaba descubriendo que los relojes mismos eran,
probablemente, ajustados por sutiles y penetrantes varia
ciones de la atmsfera terrestre causadas por los movi
mientos relativos de la Tierra, el Sol y la Luna. Slo se
poda explicar racionalmente muchas de las caractersticas
demostrables de los relojes en trminos de la constante
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
10/167
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
11/167
22
MICHEL
GAUQUELIN
fsicas del ambiente. No es necesario,
como
muchos estu
diantes de los relojes biolgicos querran dar por supues
to , que cada semilla contenga individualmente su propio
sistema independiente de cronometracin, capaz de medir
de modo inexorable, ao tras ao, los perodos. Un cono
cimiento inculcado de la secuencia de los sucesos que se
producen en esos ciclos naturales del ambiente explica la
bien conocida capacidad de los organismos de adaptar por
anticipado su conducta en relacin con sucesos cclicos ex
ternos.
Ahora, se han forjado claros vnculos entre los organis
mos y las fuerzas fluctuantes electromagnticas de su am
biente. No podemos negar que el organismo vivo es un
sistema receptor tan sensible como el conjunto de toda la
maquinaria electrnica artificial con que el hombre obtie
ne informacin geofsica y astrofsica. Los geofsicos estn
desentraando la multiplicidad de maneras con que esas
fuerzas atmosfricas se relacionan con las actividades y mo
vimientos de la Tierra, el Sol, la Luna, los planetas e inclu
so las lejanas estrellas. Ahora bien, con estos continuos
descubrimientos, nos llegan problemas paralelos e inevita
bles de posible importancia biolgica.
El hombre no apareci de pronto y e novoen el planeta
Tierra. Surgi gradualmente, llegando a lo que ahora es
por medio de una transformacin ordenada, probablemen
te comenzando como consecuencia de complejos qumicos
producidos por el azar en los clidos ocanos primitivos al
aparecer en ellos el primer signo de vida en pedazos primi
genios de barro. Es natural, por lo tanto, que el hombre
busque races csmicas en su largo pasado evolutivo. Los
relojes biolgicos vinculados a las principales periodicida
des csmicas son omnipresentes en todos los seres vivos. Su
existencia abarca desde las formas monocelulares hasta las
LOS RELOJES CSMICOS
23
plantas y los mamferos, incluido el hombre. Esto indica
el carcter antiguo y hondo de las relaciones entre el hom
bre y el Universo.
Cuando miramos ms lejos y observamos que animales
tan diversos como los insectos y los crustceos por un lado,
y los peces y los pjaros por otro, son capaces de navega
cin celeste, vemos de nuevo una relacin csmica antigua.
El origen comn de estos dos tipos tan distintos de seres
vivos se remonta probablemente a ms de un billn de
aos. En esos tiempos antiguos, los ojos de los organismos
vivos estaban ya volvindose hacia el cielo en busca de
ayuda con que poder satisfacer las exigencias de sus vidas
terrestres, o bien
la
propensin o posibilidad de hacerlo
estaba ya presente y comenzaba a desarrollarse. Con tan
hondas races de relaciones celestes en el pasado del hom
bre, cabe esperar que no sea difcil comprender el motivo
de que, a medida que fue evolucionando su capacidad de
razonamiento, tratase de conseguir ms y ms ayuda de
los cielos.
Un nuevo campo de investigacin cientfica lleno de in
ters y dificultades aparece ahora ante nosotros. En qu
medida son afectados los seres terrestres, animales y plan
tas,
e incluso el hombre, por esas sutiles fluctuaciones cs
micas? El hombre est indudable e inevitablemente vincu
lado por muchos hilos al resto del Universo, no slo gra
cias a los instrumentos fsicos que ha inventado y construi
do ,
sino tambin por causa de las sorprendentes sensibili
dades de su propia sustancia vital. Michel Gauquelin ha
presentado
magistralmente
ante nosotros un breve esque
ma de la historia de este problema, enfocndolo en un solo
cuadro, cosa que slo podra hacer una persona que le ha
dedicado muchos aos de estudio y examen crtico y cuyas
investigaciones le han sugerido la existencia de las relacio-
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
12/167
24
MICHEL GAUQUELIN
nes celestes ms inquietantes, emocionantes y estimulantes
que han aparecido hasta ahora ante los ojos del hombre.
Franz Z. Brown, Jnior.
Profesor de BiologaNorthwestern University
Evanston
Illinois.
INTRODU IN
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
13/167
El tema de este libro es el efecto que el Cosmos ejerce
en la vida humana; es un tema que siempre ha obsesionado
la imaginacin del hombre. Seguiremos aqu la historia de
las ideas que han sido aceptadas sucesivamente, desde los
primeros modelos astrolgicos hasta los ms recientes des
cubrimientos de la ciencia moderna. Parece ser que existe
una contradiccin bsica entre las interpretaciones mgi
cas de los siglos pasados y las actuales explicaciones racio
nales; y, sin embargo, en realidad, a pesar de las eviden
tes diferencias, ambas se unen con slida consistencia. Es
elhombre mismo quien h creado esta unidad en su cons
tante bsqueda de una respuesta al secreto del lugar que
ocupa en el Universo.
La gente de los siglos pasados se senta mero juguete
entre las fuerzas csmicas que haba a su alrededor. Para
reducir esta inquietud y dar un significado a su existencia
trataban de comprender las leyes por las que se regan
estas fuerzas. Hace cinco mil aos aproximadamente, los
caldeos resolvieron el problema de manera satisfactoria y
as naci el concepto astrolgico de las influencias csmi
cas. La astrologa caldea se serva de la magia como expli
cacin y vea en la posicin del planeta una pista para la
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
14/167
8
MICHEL GAUQUELIN
prediccin del futuro. Tal interpretacin se adaptaba ex
traamente al pensamiento humano. Las civil izaciones sub
siguientes de Grecia y Roma, en vez de abandonar estas
creencias mgicas, continuaron desarrollndolas y codifi
cndolas.
Despus de las invasiones brbaras que destruyeron el
Imperio Romano, el fuego de la astrologa pareci haberse
extinguido. Pero lo cierto es que segua ardiendo lentamen
te bajo las cenizas: en el siglo xv, el Renacimiento i tal iano
atiz sus l lamas, hacindolas m s altas que nu nca. Gran
des pensadores recogieron los problemas cientficos all
donde haban sido abandonados por los antiguos. En astro
nom a
la hermana de la astrologa, el xito fue total:
Coprnico desencaj la Tierra del centro del Universo; Ty-
cho Brahe calcul las rbitas planetarias con una precisin
que antes hubiera sido inconcebible; Kepler descubri las
leyes de los movimientos planetarios, remplazando con
ellas los viejos sistemas del pasado; Galileo, estudiando las
manchas solares, debil i t la creencia en la inmutabilidad
de los cuerpos celestes; y, por fin, Newton formul la
ley de la gravedad universal , que prepar el camino para la
gran sntesis que Einstein habra de conseguir a comienzos
del siglo xx. Todos esos grandes hombres se interesaban
tambin por el concepto astrolgico del mundo. Ms que
ningn otro, Kepler trat de forjar una nueva astrologa
que progresase paralelamente a la astronoma. Pero su in
tento fall, porque no pudo desprenderse del inters que
senta por la posibil idad de predecir el futuro basndose
en el movimiento de las estrellas. La astrologa, por lo tan
to ,
volvi a caer en la supersticin. Fue rechazada por las
Universidades, y los hombres de ciencia dejaron de intere
sarse por ella. Al mismo tiempo, su popularidad entre la
muchedumbre aument. A mediados del siglo xx, l leg a
LOS RELOJES CSMICOS
29
degenerar ms que nunca en una mera prediccin del por
venir, explotada desvergonzadamente por los sacamuelas.
Y, sin embargo, los estudios sociolgicos indican que apro
ximadamente un cincuenta por ciento de la gente cree en
cierta medida en los horscopos. La falsedad de tales creen
cias tendr forzosamente que ser demostrada.
Pero, ms all de la supersticin pasada de moda, cier
tos pensadores sensatos han razonado intuit ivamente que
tiene que haber influencias que afecten a la vida humana.
Esta intuicin es, y siempre lo ha sido, bsicamente co
rrecta. El error ha consistido en tratar de explicar acciones
csmicas en trminos mgicos, dando a los cuerpos celes
tes caracterst icas que, evidentemente, no pueden poseer.
Este error, sin embargo, no t iene por qu persist ir .
En la actualidad, el Cosmos se ha puesto de moda. Gra
cias al progreso de la astrofsica, los seres humanos estn
penetrando en el espacio exterior. Y, sin embargo, apenas
conocemos las leyes que rigen la influencia del espacio en
el hombre. En toda la historia del pensamiento, slo hay
unos pocos ejemplos de tan sorprendente contradiccin.
Todo esto t iene que cambiar. En estos lt imos aos, la in
vestigacin ha comenzado a l lenar el vaco dejado en la
escena cientfica por la desaparicin de la astrologa como
ciencia. Los cientficos modernos han acabado por hacerse
la misma y antigua pregunta de una manera ms signifi
cativa: cmo se relacionan los relojes csmicos con los
ri tmos biolgicos de los organismos vivientes? El xito o
fracaso de la exploracin espacial puede depender de la
respuesta que se d a esta pregunta.
La NASA ha estudiado la fascinadora sugerencia de
Frank A. Brown, profesor de Biologa de la Northwestern
University. Consiste en transportar por el espacio exterior
durante un largo per odo de t iempo var ios organismos ,
co -
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
15/167
3Q
MICHEL GAUQUELIN
menzando por plantas sencillas. La construccin de una ca
bina espacial de patatas ser el primer paso. Qu les ocu
rrir a esas patatas en el espacio, durante un perodo inde
terminado de tiempo? Quiz no les ocurra nada. Pero si las
patatas muriesen, segn presume Eugene R. Spangler, bi
logo,
miembro del Instituto Norteamericano de
Aeronu-
tica, ello significara que el viaje prolongado por el espacio
sera tambin peligroso para el hombre. Por qu? Porque
este proyecto, humorsticamente llamado Spudnik I
1
,
gira en torno a un problema fundame ntal: si los relojes
csmicos que marcan el ritmo de la vida terrestre
los
movimientos del Sol, de la Luna y de los planetas son
indispensables para toda vida biolgica. Quiz, si el ritmo
es
cambiado
radicalmente, la patata sea incapaz de adap
tarse al cambio. Y dado que el hombre es mucho ms sen
sible que la planta, resulta esencial averiguar si ste puede
dejar los ritmos de su ambiente terrestre durante un largo
perodo de tiempo sin sufrir, como resultado de ello, gra
ves consecuencias.
ste es el problema que ha acabado por inducir a los
hombres de ciencia a explorar las influencias csmicas que
durante seis mil aos esperan a ser investigadas sistem
ticamente. Y, sin embargo, el viaje espacial no comenz con
el primer astronauta; siempre hemos viajado en una nave
espacial. Durante largo tiempo, el hombre ha vivido sin
darse cuenta de este hecho, porque
las
condiciones de vida
en la Tierra son, sin lugar a dudas, ms cmodas que en
el interior de una cpsula espacial; pero ahora ya sabemos
que nuestra nave espacial, la Tierra, perfora incesantemen
te el espacio interestelar. Como dijo Giorgio Piccardi, jefe
del Instituto de Qumica Fsica de la Universidad de
Flo-
1.
Juego de palabras. Sputnik, nave espacial, en ruso. Spud,
en ingls, significa patata.
N del T
LOS RELOJES CSMICOS
31
renda:
Para verse sujeto a efectos csmicos, el hombre
no tiene necesidad de lanzarse al espacio exterior; no tiene
ni siquiera que salir de su casa. El hombre siempre ha vi
vido rodeado por el Universo, ya que el Universo est en
todas partes.
El Cosmos que nos rodea no es inalterable ni est va
co.
Los satlites artificiales han demostrado claramente
que el espacio est poblado por infinidad de corpsculos y
ondas que golpean la Tierra, afectando de esa forma todo
cuanto vive en su superficie. En los treinta aos, ms o
menos, que los investigadores llevan estudiando esta cues
tin cientficamente, han sido descubiertas extraas rela
ciones entre la vida y el Universo. Paso a paso, con el apoyo
de disciplinas de validez reconocida, emerge una nueva
ciencia. La parte ms importante de este libro est dedi
cada a narrar las conquistas de esta nueva rama del cono
cimiento humano.
En primer lugar, tenemos los sorprendentes vnculos
que unen a los hombres con el Sol. El Sol no es, como
imaginaban los pitagricos, una esfera dorada e inmvil;
est cubierta de m anchas y se producen en l vastas explo
siones. Y las ondas de esos cambios cataclsmicos reverbe
ran entre nosotros. Hoy, la Luna, siempre rodeada de creen
cias legendarias, comienza a revelar sus verdaderos secre
tos. El profesor
Brown
ha estudiado los efectos de la Luna
sobre las formas inferiores de vida, y ha encontrado que
varias especies de animales son sensibles a sus misteriosos
mensajes. Receptores sensorios antes desconocidos han sido
descubiertos en todas las formas vitales, el hombre inclui
do ,
sentidos que permiten al organismo recibir tales men
sajes y ajustar su conducta al rayo de los relojes csmicos.
Viene luego la antigua cuestin, cuyo origen se pierde
en los primeros sueos humanos: influye el cosmos en
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
16/167
3
MICHEL GAUQUELIN
todos los hombres de manera parecida? Los astrlogos, que
haban formulado esta pregunta ingenuamente, fueron in
capaces de darle una respuesta satisfactoria. Los hombres
de ciencia actuales t ienen la esperanza de haber encontrado
una respuesta mejor. La maravillosa complejidad de la ma
quinaria humana parece ser sensible a influencias csmicas
extremadamente suti les que emanan de planetas cercanos
a la Tierra. Recientemente, se ha descubierto un nuevo fe
nmeno llamado herencia planetaria: como parte de la
funcin de su consti tucin gentica el organismo humano
recibe al nacer mensajes csmicos de una manera espec
fica, personal. Tal vez parezca increble que organismos vi
vos sean capaces de percibir las acciones infinitamente d
biles de los cuerpos planetarios. Piccardi, creador de una
nueva disciplina, la Qumica Csmica, ha explicado esto
mostrando que el Cosmos afecta al hombre a travs de la
accin mediatriz del agua, el l quido esencial para la per
manencia de la vida en nuestro planeta. El agua t iene ex
traas propiedades fsicas que nos vinculan ntima y per
manentemente a las fuerzas csmicas. Gracias a la Qumi
ca Csmica estamos empezando a comprender lo que hasta
hace muy poco era incomprensible.
La astrologa, la antigua religin universal , el primitivo
y majestuoso esfuerzo por conseguir una sntesis csmica,
ha cado por completo en manos de sacamuelas. En su lugar
ha nacido una ciencia nueva. Esta ciencia no debiera des
preciar el pasado; despus de todo, debemos el nacimiento
de la astronoma al celo astrolgico de nuestros predeceso
res.
Es justo que esta ciencia, en su madurez y despus de
un rodeo de dos mil aos, nos ayude ahora a descubrir los
verdaderos vnculos que unen al hombre con el Universo.
CRONOLOG
2 795
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
17/167
25 000 10000 a. de C. aproximadamente): Muescas en huesos de
reno y en colmillos de mamut representan las fases de la Luna.
6000
a. de
C ;
Comienzan las observaciones del cielo por los
s
menos.
3
000
a. de
C :
Predicciones astrolgicas de Sargn
l
Viejo.
2073 a. de
G;
Chun, el primer emperador de China, hace un
sacrificio a los siete rectores los planetas).
1800 a. de
C :
Construccin de los megalitos de Stonehenge, cerca
de Salisbury Sur de Inglate rra).
Siglo xrv a. de C ; Los grande s dioses sumerios son Sin, el dios
lunar; Shamach, el dios solar; e Ishtar, la diosa de Venus.
1375 a. de C: Himno al sol del faran
Ekhnatn.
700400 a. de C : Descubrimiento y descripcin del zodaco por
los babilonios.
Siglovi a. de
C ;
Doctrina de la armona de las esferas, por Pit-
goras Samos, Grecia).
Siglo v a. de C: Primeras mximas astrolgicas en Caldea, ba
sadas en el nacimiento del rey.
409 a. de C. Fecha del horscopo babilonio ms antiguo que se
conoce.
331 a. de
C :
Conquista de Caldea por Alejandro de Macedonia.
280 a. de C ; Publicacin de
Babyloniaca
por Beroso, sacerdote
de Marduk en Babilonia.
220 a. de C.: El griego
Carnades
critica la astrologa en nombre
de la razn.
70 a. de C : Los prim eros horsco pos griegos que tienen en cu enta
la hora exacta del nacimiento.
40 a. de C ; Cicern publica
De Divinatione
en donde expone las
principales crticas cientficas de la astrologa.
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
18/167
6
M1CHEL GAUQUELIN
30 a. de C.: El emperador Augusto manda hacer su horscopo al
astrlogo Thrasyllus; sus sucesores siguen su ejemplo.
10 d. de C.; Publicacin de
Astronomicon
por Manilius, la prime
ra obra, griega de astrologa.
140 . de C : Publicacin de
Tetrabiblos
por Tolomeo, el libro
ms famoso de astrologa.
Siglo iv d. de C.; San Agustn critica la astrologa en nombre de
la fe cristiana en sus
Confesiones.
700-1200 d. de C : El Isla m perpe ta la antigua tradicin astrol
gica.
1400-1600 d. de C.: En la religin azteca de Mxico,
Quetzalcoatl,
la
serpiente emplumada, es considerada como el dios del planeta
Venus.
1543 d. de
C ;
Con la publicacin de
De Revolutionibus
rbium
Caelestium
de Coprnico, la Tierra deja de ser considerada como el
centro del Universo.
1555 d. de C : Prim era edicin de las profecas de Nostrada mus
Lyon, Francia).
1571-1630 d. de
C ;
Tiempo de vida de Johannes
Kepler
quien des
cubri las leyes de los movimientos de los planetas y persigui ac
tivamente la creacin de una astrologa nueva.
1666 d. de C : Condena oficial de la a strologa por Colbert, minis
tro de Luis XIV, en Francia. La astrologa es prohibida en la Acade
mia de Ciencias y la Universidad.
1749-1832 d. de C : Tiempo de vida del gran poeta Goethe, quien
estudi astrologa.
1828 d. de C : El astrlogo ingls Raphael publica su
Manual of
Astrology.
1898 d. de C.: El sabio sueco Svanthe Arrhenius, ganador del pre
mio Nobel de Fsica, emprende la primera obra estadstica sobre la
influencia de la Luna en el tiempo y en los seres vivos.
1920 d. de C ; Reaparicin del horscopo. Gran xito de los saca-
muelas, ayudados por la Prensa y dems medios de comunicacin
de masas.
1920-1940 d. de C : Obra es tads tica de A. I. Tchijevski sobre elpapel que juegan en la vida humana las manchas solares.
1922 d. de C.; Memorndum de los doctores Faure y Sardou a la
Academia de Ciencias sobre la influencia de las manchas solares en
las enfermedades repentinas.
1938 d. de C.: Publicacin de
Season of Birth
por E. Huntington.
1939-1945 d. de C.; Los nazis tratan de interpretar en favor suyo
las profecas de Nostradamus.
1941 d. de C ; El japons Maki Takata demu estra la influencia
LOS RELOJES CSMICOS
7
que ejerce un rayo desconocido del Sol en el suero de la sangre
humana.
1948 d. de C : Frank A-Brown descubre misteriosos ritmos ex-
genos en las plantas y los animales.
1950 d. de C.J Giorgio Piccardi comienza a estudiar las relaciones
entre el Cosmos y los experimentos qumicos.1950-1955 d. de C : Publicac in de esta dstic as cientficas dond e
se demuestra la falsedad de los horscopos.
1957 d. de C ; Se lanzan al espacio exterior satlites que descu
bren interacciones hasta entonces desconocidas entre los cuerpos del
sistema solar.
1960 a. de C: Primeros estudios sobre la correlacin entre los
planetas y las leyes de la herencia.
1963 d. de
C.
El Instituto Francs de Opinin Pblica revela que,
a pesar de los esfuerzos de la ciencia, el 43 por ciento de la pobla
cin cree an que la astrologa es una ciencia verdadera.
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
19/167
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
20/167
CAPTULO PRIMERO
L A R LIGIN M A S A N T I G U A
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
21/167
Dnde comenz la astrologa? La respuesta es : en to
das partes. Cundo comenz? Ha existido desde que el
hombre existe, mejor dicho, antes an de que el hombre
existiese. Cuando el Sol se eclipsa, los animales se vuelven
inquietos y como angustiados; parecen temer un peligro
inminente. Los pjaros dejan de cantar y los monos aban
donan sus rboles, juntndose para sentirse ms seguros,
en completo silencio.
La astrologa naci del encuentro entre una inteligencia
todava incapaz de imaginarse el mundo por s misma y el
temor que tal mundo le inspiraba. Para el hombre primi
tivo, el cielo estaba lleno de maravillas extraas y temi
bles. Este temor y admiracin no eran del todo injustifi
cados: el poder de los cielos era muy real. Las primeras
civilizaciones humanas dependan del pastoreo y la agri
cultura, la pesca o la caza, y, por lo tanto, estaban a mer
ced de los caprichos de la Naturaleza. El cielo se llenaba
de nubes, el rayo caa hendiendo el espacio, el trueno lle
naba el aire. La lluvia vena en pos del viento y las cose
chas eran destruidas. Si los cielos se mantenan serenos, la
sequa secaba las cosechas y atraa la plaga de la langosta
migratoria. En invierno, el aire helado converta las gotas
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
22/167
44
MICHEL G UQUELIN
LOS RELOJES CSMICOS
45
de l luvia en cristales saltarines que cubr an la tierra con
una capa espesa y blanca.
Todo cuanto alcanza la memoria est l leno de huellas
de los esfuerzos humanos por interrogar los cielos. Alexan-
der Marshac k, el 6 de noviem bre de 1964, escriba en la re
vista
Science
que las muescas halladas en ciertos huesos de
reno y marfiles de mamut procedentes del Paleol t ico su
perior representan las fases lunares. De esa forma vemos
que, hace aproximadamente de diez mil a veinticinco mil
aos, el hombre con toda probabilidad, observaba y anota
ba ya los ciclos de la
L u n a
1
.
A diecisis kilmetros de Salisbury, en el sur de Ingla
terra, est Stonehenge, una extraa coleccin de menhires
de tres metros y medio de altura rodeados por cincuenta y
seis pequeos pozos, l lamados los agujeros de Aubrey.
Se piensa que este monumento se remonta al ao 1800
a. de C. El profesor G. S. Hawkins, de la Universidad de
Boston, con ayuda de una IBM, ha demostrado que esas
primitivas ruinas pueden ser uti l izadas para fi jar la posi
cin del Sol y de la Luna con sorprendente precisin, con
un margen mnimo de
error
2
.
Exis te menos de una proba
bil idad por milln de ellas de que la correlacin hallada
por el profesor Hawkins sea casual. El mismo Hawkins es
cribe:
Los agujeros de Aubrey constituyen un sistema para contar
los aos, un agujero por cada ao, y predecir los movimientos de la Luna Quiz se celebrasen incineraciones en un deter
minado agujero de Aubrey en el transcurso del ao, o, posi
blemente, el agujero contuviese una piedra movible. Stonehen
ge puede ser utilizado como un gigantesco computador di
gital
3
.
Parece ser, por lo tanto, que Stonehenge era una espe
cie de observatorio de la Edad de Bronce en el que los
sacerdotes anu nciaban la l legada de las estaciones y los eclip
ses del Sol y de la Luna. Esta actividad cientfica no era
en modo alguno incompatible con los ri tos religiosos que
tambin se celebraban all ; ms bien al contrario, ambas
cosas se relacionaban estrechamente.
Stonehenge nos muestra las dos clases de inquietudes
que nuestros antepasados sentan cuando levantaban la vista
hacia los cielos. Una, cientfica; la otra, religiosa. El
munr
do ,
hosti l o favorable, era siempre indispensable. El hom
bre primitivo saba que tena que controlarlo de alguna
manera. Para conseguir este objeto poda servirse de dos
tcticas: adorarlo o penetrar en sus secretos. La astrologa
naci como un medio de combinar estas dos maneras de
ejercer cierta medida de control sobre el mundo. No es exa
gerado decir , con la mayora de los historiadores, que la
astrologa fue, al mismo tiempo, la primera religin y la pri
mera ciencia del hombre.
El Sol, la Luna, las estrellas, todos los cuerpos celestes
se convirt ieron en objeto de adoracin, miedo, esperanza.
Su influencia pareca afectar no slo el destino del hom
bre ,
sino tambin el futuro del mundo, amenazndolo con
destruccin y prometindole vida nueva. Afectaban a las
lluvias, los vientos, los terremotos, las catstrofes inespe
radas .
Esta creencia sincretst ica, expresada ingenuamente
por medio de la incesante interaccin entre el Cosmos y la
vida terrestre, se encuentra en todos los pueblos primi
tivos.
El Sol
La vuelta del Sol todas las maanas, su renacer des
pus de su muerte la tarde anterior, era saludada con
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
23/167
46
MICHEL GAUQUELIN
LOS RELOJES CSMICOS 47
ritos religiosos por los pueblos ms antiguos de que tene
mos noticia y an lo es hoy en las sociedades primitivas:
Las madres piel rojas levantan en sus brazos a sus hijos
recin nacidos, hacia el Sol. Entre los indios navajos, las mu
chachas que llegan a la pubertad tienen que preparar un enor
me pastel; mientras est hacindose, deben correr hacia el
Sol naciente y volver al punto de partida, vestidas de fiesta.
Saludar al Sol naciente era una costumbre normal. Griegos
como Scrates y Dion lo hacan; y tambin los chinos, los ja
poneses y los indios brahmanes*.
En Egipto, el faran
Amenofis
IV tom el nombre ofi
cial de Ekhnatn, en honor del Sol; este nombre significa
Rayo en el rostro del Sol. En el ao 1375 a. de C, Ekhna
tn compuso un himno famoso en honor de Atn, el gran
vnculo vivo del Sol:
Este dios nico ha hecho la Tierra lejana, los hombres, los
pjaros, los animales... Cuando l se muestra, todas las flores
crecen y viven, los campos florecen cuando se levanta y se re
gocijan con su presencia, todas las bestias saltan para saludarle
y los pjaros en los pantanos baten sus
alas
5
.
Enterrados bajo sus gigantescas pirmides, los cadve
res de los faraones Keops, Kefrn y Mikerinos iban, en opi
nin de sus contemporneos, a compartir la vida eterna del
Sol. Las pirmides mismas eran un smbolo del Sol. La
fachada ms prxima a la entrada de cada tumba est per
fectamente orientada hacia el Sol naciente. Por lo que se
refiere a la gran pirmide de Keops, el error es de slo tres
grados de arco, cosa casi increble. En AbuSimbel,en cier
to momento, los rayos del Sol entran en la cmara misma
donde est la tumba de
Ramss
II. Las grandes pirmi
des, as como las pequeas y doradas que estn situadas en
la punta de los obeliscos, eran representaciones de los ra
yos del Sol descendiendo hacia la Tierra.
6
El dios Sol poniente presentaba un triste contraste. El
Sol descenda hacia la tierra de los muertos. Cualquier
hombre que se cruzase en su camino desapareca para no
volver. De ah la creencia, hallada en todas partes, desde
Nueva Zelanda hasta las Nuevas Hbridas, de que una mi
rada del Sol poniente poda ser causa de la muerte del
hombre que la
recibiese
7
.
Pero, al mismo tiempo, el Sol
poda escoltar las almas de los muertos por las regiones
infernales y traerlas de nuevo, a la maana siguiente, con
la luz del da.
La Luna
La conducta de la Luna, ms extraa an que la del
Sol, fue constante causa de perplejidad para sus primeros
observadores:
La Luna tambin se mova a travs del cielo, entre las estre
llas cruzndolas noche tras noche, mientras que su aparicin
sufra un cambio misterioso, pasando de ser una dbil hoz en
el cielo nocturno a convertirse en el brillante disco de la Luna
llena, que dominaba la noche iluminando la Tierra hasta que
comenzaba a desvanecerse, para convertirse de nuevo en una
estrecha cinta de plata y desaparece con la aurora. Este pro
ceso continuaba repitindose en un ciclo equivalente, segn
parece, al perodo menstrual de la mujer ' .
Por todas partes, en la Tierra, la Luna ha sido relacio
nada con los mismos procesos csmicos: lluvia, plantas,
fertilidad animal. Estas correspondencias se encuentran
incluso en religiones tan arcaicas y horras de influencias ex
tranjeras como la de
los
pigmeos. La fiesta de la Luna nueva
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
24/167
48 MICHEL GAUQUELIN
celebrada por los pigmeos de frica tiene lugar justo antes
del comienzo de la estacin de las lluvias. La Luna, que ellos
llaman Pe, es, segn estos salvajes, el principio de la gene
racin y la madre de la fertilidad'.
Ent re los habi tantes de
Papua
la Luna es el primer
marido de las mujeres. Segn ellos, la menstruacin es
prueba de las relaciones que existen entre las mujeres y
la Luna
10
.
Entre los hit i tas, la Luna reciba el nombre de Arma,
que significa grande, embarazado. En la India, se crea que
la Luna era rey de todo cuanto crece en la Tierra y pro
tector de todas las cosas vivas. Su desaparicin era consi
derada como una verdadera enfermedad. En Camboya, la
Luna llena equivala al comienzo de la buena suerte, la cs
pide en donde todas las cosas tenan su buen momento.
En el antiguo Egipto, la influencia de la Luna se haca
sentir en todas partes: se pensaba que estaba representada
por varios dioses. Su crecimiento era l lamado el abrirse
del ojo de Horas. Cuando el ojo del halcn-dios estaba
completamente abierto, comenzaba la Luna l lena. Los vein
ticinco das del ciclo lunar eran comparados a una escalera
con catorce escalones: primero se suba la escalera hasta
llegar a la apertura completa del ojo, y, luego, se bajaba,
hasta que el ojo quedaba completamente cerrado. Esto
equivala a los catorce das que tarda la Luna en crecer
y, luego, los otros catorce que culminan con la Luna nueva.
Los eclipses lunares eran considerados presagio de sucesos
luctuosos. Con frecuencia, la Luna misma era considerada
peligrosa. La media Luna se comparaba a veces con un
cuchillo, una hoz de oro en el campo estrellado. Un ma
nuscrito egipcio pregunta: No es la Luna un cuchillo?
Pues, por lo tanto, puede castigar a los culpables.
u
LOS RELOJES CSMICOS
49
Las estrellas
Las principales estrellas y constelaciones tambin han
sido objeto de adoracin. Sus formas y movimientos han
dado lugar a numerosos mitos y ri tos. En China
la Osa Mayor o Carro es adorada como deidad propicia. Las
mujeres que quieren tener hijos la adoran. Las coronas epita-
lmicas estn adornadas con la Osa Mayor, hecha con perlas
y esmeraldas. Una pintura antigua de la dinasta Han mues
tra a la Osa Mayor como monarca en un carruaje, con varios
espritus rindindolehomenaje
a
.
En P om er a n i a , t odav a se cuen t a l a s i gu i en t e h i s t o r i a :
La Osa Mayor recibe tambin el nombre de
Duemkt.
Duemkt
era un granjero malvado que sola tratar a sus ser
vidores y su ganado con la mayor crueldad. A modo de cas
tigo,
fue puesto en el cielo despus de su muerte y all conduce
ahora su carro con la misma temeridad que en vida. Su carro
es tirado por tres caballos y Duemkt cabalga en el de enmedio,
pero el grupo va de la manera ms desordenada, como si
estuviera a punto de caer sobre la Tierra en cualquier mo
mento
u
.
En Egipto, el
Nilo,
que daba de comer a todo el pas,
era considerado dios de la fert i l idad:
Pero no era el cielo lo que haca crecer tan favorablemen
te el ro? Todos los aos, las aguas crecan cuando la relu
ciente estrella Sirio se levantaba al mismo tiempo que el Sol.
Esto indicaba que las inundaciones del Nilo eran causadas por
la alianza entre las acciones propicias del Sol y de Sirio, alian
za que ocurra tan slo una vez al ao. Entonces, era el mo
mento en que el suelo reseco de Egipto cobraba nueva vida.
Por eso, el Ao Nuevo egipcio tena lugar en la fecha en que
Sirio se levantaba con el
Sol .
4
2.795
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
25/167
5
MICHBL GAUQUELIN
Las siete estrellas de las Plyades han sido adoradas
desde el comienzo de la Historia. Los griegos les dieron los
nombres de las siete hijas de Atlas, que se suicidaron y fue
ron convertidas en estrellas. Una narracin popular danesa
cuenta de esta
manera
el motivo de que la constelacin sea
invisible parte del ao:
Haba una vez una muchacha que tena siete hijos ileg
timos. Un hombre la vio y le dijo: Buenos das tengis, t y
tus siete bastardos. Para castigarle, Dios le convirti en cuco.
Los hijos fueron convertidos en ngeles y puestos en el cielo.
Durante la estacin veraniega, cuando el cuco canta, las Pl
yades se vuelven invisibles
15
.
Entre los aztecas de Amrica Central, las Plyades eran
usadas como pretexto para celebrar los ritos ms
horribles
El paso de las estrellas a travs del meridiano era seal de]
comienzo de los sacrificios humanos:
En el fondo de sus almas, los antiguos mexicanos no po
dan tener confianza en el futuro. Su mundo era demasiado
frgil, siempre expuesto a una catstrofe. Cada cincuenta y dos
aos, el pueblo de todo el Imperio sucumba al terror, temiendo
que a la ltima puesta de sol de aquel siglo no siguiese una
nueva aurora. Los fuegos se apagaban en las ciudades y en el
campo, mientras las muchedumbres, aterrorizadas, se congre
gaban en torno de la falda del monte Ulxachtecatl. En su cima,
los sacerdotes observaban la constelacin de las Plyades.
A una seal del sacerdote-astrnomo, un prisionero era extendi
do sobre el altar. Despus, le clavaban un cuchillo de piedra
en el pecho con un sordo ruido y sobre la herida abierta se
pasaba
un palo encendido. Y, entonces, la llama se agitaba,
como si surgiese del pecho hendido, y entre el clamor jubiloso,
los mensajeros encendan antorchas y corran a propagar el
fuego sagrado a los cuatro extremos del valle central. El mun
do , una vez ms, haba escapado a la destruccin .
LOS RELOJES CSMICOS
51
Religiones indias
Desde el comienzo de
la
historia, el pensamiento huma
no se ha visto dominado por la creencia de que los movi
mientos astrales estn relacionados con todos los fenme
nos terrestres, que son ellos quienes dirigen la agricultura,
la labranza, la salud y el orden social. Berthelot ha dado
a esta creencia el nombre de astrobiologa. Las grandes re
ligiones de la Humanidad estn impregnadas an de esta
primitiva astrologa. Los textos antiguos de la India y China
son buena prueba de ello.
Es fcil encontrar ideas astrolgicas en los libros reli
giosos hindes. Los Vedas dicen que la fecha de los sacri
ficios son la Luna nueva y la Luna llena. Los cuerpos ce
lestes son los guardianes de
rita,
que ha nacido de la unin
de los rdenes csmicos y social: A travs del cielo, va el
camino duodcuplo de
rita,
que nunca envejece: el ao.
Para el hombre vdico, el cielo y la Tierra, los bosques y las
montaas, las aguas de los mares y los ros, las plantas y los
animales estn habitados por el espritu de las fuerzas csmi
cas,
dirigidas por la fuerte personalidad de
Indra,
dios del
trueno y el rayo, que gobierna desde su trono, situado en las
nubes. Bajo l, estn los ocho Adityas, los cuerpos celestes, que
son hijos de la diosa Aditi. Entre ellos, est
Mitra-Varuna,
la
pareja primigenia, que representan la Tierra y el cielo; luego,
los cinco planetas y Surya, el Sol. Ushan, la aurora, camina
ligeramente todas las maanas hacia el este, para abrir las
puertas celestiales con el fin de que su amante, Surya, pueda
entrar; todas las noches, Ratri vuelve a cerrarlas, dejando pe
netrar en su dominio a la noche
.
En los Upanishads,
Brahma
es llamado el hlito domi
nante del Cosmos. La famosa danza csmica de Shiva, tan
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
26/167
52
MICHEL GAUQUELIN
frecuentemente plasmada en la escultura, es smbolo de los
movimientos r tmicos del Universo, a los que el hombre se
asocia por medio de la danza. La svstica o cruz
gamada
es tambin un antiguo smbolo csmico y religioso de la
India. Representa el curso circular del Sol en torno de los
cuat ro puntos cardinales .
Filosofa china
En China, los ri tmos csmicos
revelan
el orden, la ar
mona, la permanencia y la fert i l idad. El Cosmos en su to
talidad es un organismo vivo, real y sagrado
18
.
Ya ms de
dos mil aos antes de Cristo, la astrologa era la base del
orden establecido. El t tulo del emperador era Hijo de los
Cielos. Una de sus principales
funciones
consista en cui
dar de que continuasen las buenas relaciones entre los mo
vimientos celestes y los asuntos humanos. El emperador
era objeto de predicciones astrolgicas y celebraba sacri
ficios a los dioses del cielo:
La mencin ms antigua que se conoce de esos sacrificios
est en los Anales de Bamb, un manuscrito muy antiguo des
cubierto en la tumba de un prncipe que data del ao 281
d. de C. En l se menciona que en el ao 2073 a. de C, cuan
do Chun sucedi a Yao, el primer emperador histrico de Chi
na, inaugur su gobierno ofreciendo un sacrificio al Soberano
del Cielo. Chun visitaba con frecuencia las cuatro montaas
sagradas situadas en
los .cuatro
puntos cardinales, examinandola situacin propicia de los Siete Rectores (la Luna, el Sol y
los cinco planetas), y haca un sacrificio a los seis meteoros
(el viento, las nubes, el trueno, la lluvia, el fro y el calor) .
Las grandes religiones chinas estn empapadas de ideas
astrolgicas como el emperador mismo. A este propsito,
Confucio dice: El que gobierna por medio de la virtud es
LOS RELOJES CSMICOS
53
como la estrella polar, que est siempre inmvil en su si t io,
mientras todas las dems giran en torno a ella. Otro mo
ralista chino aconseja: Amad todo lo que hay en el Uni
verso,
porqu e el Sol y la Tierra son uno y el mism o cuerpo.
Kuan-Tse, el famoso escritor taosta, dice: El Tao (el
camino) que es revelado por la direccin del Sol a travs
de los cielos tambin se revela en el interior del corazn
del hombre. . . Es la energa vital que da existencia al ser.
En la t ierra, hace crecer las cinco cosechas; all arriba,
rige el camino de las estrellas. El Tao, por lo tanto, es la
energa vital de todo el Universo y tambin del hombre. En
China, como en la India y en otras culturas, se crea que
el aire estaba l leno de granos de vida que descendan del
cielo y, por esta razn, se consideraba importante hacer
ejercicios respiratorios.
Esta teora, vinculando el macrocosmos (el Universo)
con el microcosmos (el cuerpo humano), tena ciertas apli
caciones prcticas. Como explica el famoso orientalista
Henr i Maspero:
Los magos taostas de los primeros siglos de nuestra era
pensaban que en las diversas partes del cuerpo humano vivan
dioses que, al mismo tiempo, eran dioses tambin de los cie
los,
la Tierra, las constelaciones, las montaas y los ros. Por
medio de la meditacin se poda ver a los dioses csmicos que
habitaban fuera del cuerpo y tambin se poda aprender as
de ellos los preceptos fisiolgicos de cordura moral y salud
que permitan al hombre echar de su cuerpo a los malos esp
ritus y dainas influencias. Alimentndose de aliento y no
de bastos alimentos uno poda purificarse; exponindose a la
luz del Sol o de la Luna, uno se poda llenar el cuerpo de in
fluencias celestes. As, purificado y fortalecido, uno poda as
cender a los cielos, donde se gustaba la vida eterna con cuer
po y alma
20
.
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
27/167
54
MICHEL GAUQUELIN
En t odas e s t a s r e l i g i ones , l a p r i nc i pa l p r eocupac i n e s
a r m on i za r a l hom br e con e l Cosm os , e l e spac i o y e l t i em
p o . E s t o s s i s t e m a s s o n t a n c u r i o s a m e n t e s e m e j a n t e s e n s u s
t anc i a com o d i ve r sos en f o r m a . s t e e s e l m o t i vo de que
no se pueda hab l a r de una so l a a s t r o l og a , s i no de m uchas :
l a eg i pc i a , l a m ex i cana , l a i nd i a , l a ch i na . . . P e r o n i nguna
de e l l a s se ocupa de l o r ea l m en t e a s t r o l g i co , e s t o e s , de
l a p r ed i cc i n con ayuda de l a s e s t r e l l a s . En t r e t odas e s t a s
r e l i g i ones an t i guas s l o una , que con t en a l o que aho r a l l a
m am os as t r o l og a , ha sob r ev i v i do has t a nues t r o s d a s : e l
concep t o ca l deo de l Un i ve r so .
NOTAS DEL
CAPITULO
PRIMERO
1.
The Complet Calendar,
The Sciences,
IV (1965), N.
8,
1 .
2. G. S. Hawkins,
Stonehenge Decoded
(Nueva York: Double-
day,
1965).
3. Stonehenge: A Neolithic Computer,
Nature,
CCII (1964),
1258.
4. E. Zinner,
The Stars Above Vs
(Londres: Alien and Unwin,
1957).
5. R. Berthelot,
La Penses de VAsie et VAstrobiologie
(Par s:
Payot, 1949).
6.
Ibid
7.
M. Eliade,
Traite
d histoire des veligion s
(Pars: Payot,
1959).
8. Zinner,
op. cit.
9. Trilles,
Les Pygmes de la fort
quatoriale
(Pars, 1933).
10.
Op. cit.
11. La tune,mythes et vites
(Pars; Le
Seuil,
1962).
12. Zinner,
op. cit.
13.
Ibid
14. M. Gauquelin,
L astrologie devant la science
(Pars: Plane-
te,1965).
LOS RELOJES CSMICOS
55
15.
Zinner,
op. cit.
16.
J. Soustelle,
La vie quotidienne des
Azteques
(Pars: Ha-
chette , 1969).
17.
A. Migot,
Cinq
millnaires
d astrologie,
Janus, N. 8
(1965),
53.
18.
M. Eliade,
Le
sacre
et le profane
(Par s :
NRF, 1965).
19. Migot,
op. cit.
20. Berthelot,
op. cit.
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
28/167
CAPITULO
I I
L A C I E N C I A M A S A N T I G U A
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
29/167
En Babilonia, el antiguo imperio de Mesopotamia, muy
por encima del trfago urbano, estaban los observatorios,
mgicas atalayas desde donde los sacerdotes estudiaban da
y noche, sin interrupcin, los movimientos de las estrellas.
Esas torres eran llamadas
zigurats,
o sea, montaas cs
micas. Las de Ur,
Uruk
y Babilonia tenan, segn parece,
ochenta y tres metros de altura. Constaban de siete terra
zas superpuestas, representacin de los siete cielos plane
tarios. Subiendo a la cima, el sacerdote poda llegar a la
cspide del Universo como lo conceban los caldeos. Esta
arrogante creencia fue ridiculizada por la Biblia en la le
yenda de la Torre de Babel, que era el nombre antiguo de
Babilonia
*,
que se pretenda hacer llegar hasta el mismo
cielo. Los sacerdotes, que hacan de mediadores entre los
cielos y el rey, tenan que observar el curso celeste de las
estrellas con objeto de averiguar la voluntad de los dioses.
As naci la astrologa, hace cinco mil aos, en Caldea.
La astrologa fue la primera ciencia de los cielos. Esta
ba impregnada de magia, indudablemente, pero a pesar de
* Babel es Babilonia en hebreo , y el autor del Gnesis la
hace derivar de Balbel (confundir) pero realmente viene deBal-Ha,
o sea, Puerta de Dios.
N. del T.
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
30/167
60
MICHEL GAUQUELIN
todo era una ciencia. Los caldeos desarrollaron el sistema
zodiacal, que an es usado por los astrnomos modernos,
y percibieron la diferencia que existe entre los planetas y
las estrellas fi jas. Pero, al mismo tiempo, atribuyeron tanto
a los signos del Zodaco como a las estrellas poder sobre
los destinos humanos. Pequeas tabli l las de arcil la con ins
cripciones cuneiformes, an intactas, han conservado una
serie de predicciones sistemticamente codificadas que
consti tuyen los primeros elementos de la astrologa. As,
al comienzo de su largo viaje, la ciencia emerge en forma
de Jano, el dios de las dos caras, guardin de puertas: el
rostro delantero, alerta y observador, mientras que el otro,
soador y de ojos vidriosos, mira en direccin opuesta
1
.
Los descubrimientos astronmicos de los caldeos y sus
transcripciones astrolgicas fueron un avance fundamental .
Gracias al trabajo imaginativo y paciente de muchos orien
talistas, sobre todo A. Sachs y B. van de Waerden, las ta
bli l las de arcil la nos han revelado sus secretos, permitin
donos exponer el desarrollo de la astrologa caldea.
Los signos celestes
En el mapa moderno, Caldea ocupara aproximadamen
te la extensin de Irak. Muchas civilizaciones se han suce
dido en esa parte del mundo. Hace ms de seis mil aos,
estaba habitada por los sumerios, pueblo de pastores y agri
cultores. Los sumerios adoraban sobre todo las fuerzas vi
tales de la fert i l idad. Tambin conocan el vnculo miste
rioso que existe entre los ciclos anuales de crecimiento y
los ciclos celestes: las cosechas dependen de las estaciones
y las estaciones dependen de los movimientos del Sol.
Y adems, por supuesto, est la Luna, cuya aparicin en
LOS RELOJES CSMICOS
61
el cielo nocturno trae consigo la dulzura de
la
noche y el
descanso despus de la ardiente luz del da. Haba tambin
una gran diosa, hija o esposa del cielo, que no tard en
convertirse en la diosa de la
fertilidad
2
.
Su hogar se pen
saba que era el planeta Venus. La gran trada de aquel
pas eran Sin, el dios lunar, masculino, y el ms poderoso
de todos, Shamach, el dios solar, femenino, e Ishtar, la dio
sa del amor. Los smbolos de estas tres divinidades apa
recen en relieve, en piedra, desde el sigloxiva. de
C.
3
A Sin se le representaba como un hombre fuerte, con
barba de lapislzuli, que cruzaba el cielo en su lancha, la
media Luna. Shamach, su hija, rega el ao, decidiendo su
longitud por el sistema de girar en torno al cielo en 365
das. Ishtar enviaba su luz desde el reluciente planeta Venus.
Los babilonios, que sucedieron a los sumerios, desarro
llaron considerablemente el arte de la prediccin. Intenta
ron por todos los medios imaginables predecir el futuro.
La informacin que hoy deducimos del manejo de com
plicados instrumentos se obtena en otros t iempos a travs
de los sacerdotes babilnicos. La adivinacin era una cere
monia oficial.
4
Algunas de las maneras que se uti l izaban
entonces para predecir el futuro eran la interpretacin de
los sueos, el anlisis de hgados de animales, nacimientos
anormales, el vuelo de las aves y sntomas fsicos. Por ejem
plo, en una tabli l la de arcil la se lee: Cuando la oreja de
recha de un hombre si lba es indicio de que ha sido l igado
por un encantamiento mgico.
5
Sin embargo, los sucesos
realmente importantes eran anunciados por el cielo. Los
signos celestes eran considerados de mxima importancia,
y para gobernar bien el pas era necesario saber predecir
sus movimientos, lo que implicaba el estudio concienzudo
de los ciclos celestes; la repeticin de los movimientos estela
res anunciaba la vuelta de sucesos anteriormente relaciona-
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
31/167
62
MICHEL G UQUELIN
LOS RELOJES SMI OS
03
dos con esos movimientos. Esta perentoria necesidad ex
plica el descubrimiento por los caldeos de los movimientos
celestes.
El o rigen del Zodaco
Los sacerdotes-astrnomos caldeos dividan el cielo en
tres largas franjas, que llamaban los caminos celestes:
en el medio estaba el camino de Anu, flanqueado por los
caminos deEnlil y Ea. Vigilando el cielo noche y da, esos
sacerdotes acabaron dndose cuenta de que tanto el Sol
como la Luna se movan siempre a lo largo del camino de
Anu. Por eso, dieron particular importancia a la franja ce
leste que estos dos grandes dioses escogan para sus viajes.
Las constelaciones que el Sol y la Luna cruzaban en su
camino adquirieron tambin un significado especial para
los caldeos.
El camino de Anu no era sino la primera versin del
Zodaco que los astrnomos modernos usan ahora: un es
pacio de diecisis grados de anch ura que contiene el camino
constantemente repetido del Sol, la Luna y los planetas.
Los caldeos observaron esto con gran exactitud. Van der
Waerden, especialista en textos cuneiformes, dice en su His-
tory of Zodiac:
El
cinturn
zodiacal, con sus constelaciones, ya era cono
cido en B abilonia en el ao 700 a. de C. La primera tablilla
de la serie llamada
MulApin
menciona Las constelaciones
del camino de la Luna de la siguiente manera:
el arbusto peludo = Plyades.
el toro de Anu = Tauro
el verdadero pastor de Anu =
Orion
el viejo = Perseo
hoz-espada = Auriga
los grandes gemelos = Gminis
Prokyon
o Cncer
len o leona = Leo
surco = Spica
balanza = Libra
escorpin = Escorpin
arquero = Sagitario
pez caprino = Capricornio
gran estrella o gigante = Acuario
las colas = Piscis
la gran golondrina = Pegaso
la Diosa Anunitum = Piscis + la parte media de Andrmeda
el alquiln = Aries.
De hecho, todas las constelaciones mencionadas correspon
den al cinturn zodiacal, con la excepcin de Orion, Perseo
y Auriga
6
.
Poco despus, los doce signos aparecieron en la misma
forma que tienen actualmente para nosotros. Son mencio
nados por primera vez en el documento VAT 4924, con fe
cha del ao 419 a. de C. y con los nombres de Aries, Plya
des, Gminis, Praesepe, Leo, Spica, Libra, Escorpin, Sa
gitario, Capricornio, Acuario y Piscis. Como indica Van der
Waerden, esos signos babilonios son todos estrictamente
de la misma longitud, o sea, al igual que hoy. Era un
notable marco abstracto de observacin. El nico cambio
en la nomenclatura tuvo lugar cuando los griegos sustituye
ron las Plyades, Praesepe y Spica por Tauro, Cncer y
Virgo respectivamente
7
. Sachs dice a este propsito que la
invencin del Zodaco, que ha resultado ser tan fructfera
para la astronoma y la astrologa, es un indicio del esp
ritu nuevo e indagador que rein durante este perodo
(600-300 aos a. deC.)
8
Los nombres de los doce signos fueron dados a los ra
cimos de estrellas que se encuentran en el camino de Anu
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
32/167
6
MICHEL GAUQUELIN
siguiendo ciertas reglas mgicas. La fantstica mitologa de
los babilonios, descrita por primera vez en la famosa
Epo
peya de la creacin,
dio los extraos personajes. Pero, por
qu doce signos? Van der Waerden dice que, originariamen
te ,
correspondan a los doce meses del calendario babil
nico: La idea de que existe cierta correlacin entre los
meses y las constelaciones es muy antigua.
Se
remonta a
las l lamadas l istas del
Astrolabio
(1100 a. de C, o antes
incluso).
9
Pero el uso del Zodaco no se limit al calen
dario; su influencia creci con el t iempo. Se supona que
cada uno de sus signos ejerca influencias muy definidas
sobre la Tierra. Las reglas por las que se rega el arte de
la prediccin eran una mezcla de observaciones y analogas.
Por ejemplo, la forma de Escorpin recordaba al sacerdote
caldeo el odiado insecto cuyas tenazas parecan diseadas
en el cielo por dos estrellas bril lantes. El escorpin celes
t ial era considerado tan temible como el venenoso escor
pin del desierto: Si Marte se acerca a Escorpin el rey
tiene que morir de una picadura de este insecto.
10
Spica,
o el surco (que ms tarde pas a ser el signo de Virgo),
era relacionado con la cosecha. Los caldeos cosechaban en
febrero, poca en que Spica era el signo que se apareca
sonriente a los agricultores en cuanto el Sol se
pon a .
u
W. Peuckert propuso una explicacin para la influencia
del signo de Piscis:
Se crea que cuando, un ao cualquiera, los peces no se
reproducan normalmente, la constelacin de Piscis apenas re
luca. Por lo tanto, viendo en esto una causa, dedujeron la
frmula: Cuando Piscis se vela, los peces
escasean'
2
.
De la misma manera, la posicin de Libra (la balanza)
influa en el peso del trigo y en el precio de las cosechas.
Tambin se puede aadir que los signos que corresponden
LOS RELOJES CSMICOS
65
a la estacin invernal en nuestro hemisferio, que es un pe
rodo de l luvias frecuentes, se relacionan sin excepcin con
el agua: Capricornio (pez caprino), Acuario y Piscis obs
truyen el camino solar entre el 20 de diciembre y el 20 de
marzo.
A trav s de los siglos, los significados asocia dos a los
signos de las constelaciones en el camino que cada ao re
corre el Sol fueron hacindose cada vez ms preciosos.
Cuando Alejandro de Macedonia conquist Caldea en el
ao 331 a. de C, los griegos codificaron el sistema en la
forma en que an lo usamos nosotros. En el prximo ca
ptulo volveremos a tratar de este perodo.
Los seres brillantes
Escrutando el camino de Anu los sacerdotes notaron
que haba algunas estrellas que se movan a lo largo del
Zodaco de la misma manera que el Sol y la Luna. Estos
misteriosos objetos, que relucan ms que la mayora de
las estrellas, eran los planeta s. A causa de su extraa con
ducta recibieron el nombre de
bibbu,
o sea, chivos salva
jes,
como contraste con el rebao tranquilo de las estrellas
fi jas, que siempre estaban en el lugar del f irmamento que
les corresponda. No slo los bibbu pasaban por entre las
constelaciones, igual que Sin y Shamach, siguiendo una
ruta de lo ms irregular, sino que, a veces, uno se detena
o incluso volva sobre sus pasos en el camino de Anu, es
tndose luego quieto durante unos meses antes de volver
a ponerse en movimiento. La astronoma moderna ha ex
plicado el cambio de velocidad de los planetas calificn
dolo de ilusin ptica: Es la rbita anual de la Tierra la
que cambia la perspectiva de los planetas vistos contra el
5
2.795
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
33/167
66
MICHEL GAUQUELIN
teln de fondo de las constelaciones. La velocidad de la
Tierra, combinada con la propia velocidad del planeta, de
cide los movimientos aparentes de ste.
u
Pero lo que los
caldeos vean era tan slo el movimiento aparente, y les
interesaba sobremanera. Los planetas se conducan como
seres vivos: eran, evidentemente, la morada de dioses cuya
aparicin en el cielo anunciaba intenciones favorables o
desfavorables. Por ese motivo, cada planeta fue relacionado
con un dios cuidadosamente seleccionado de la mitologa
caldea. La nomenclatura no era producto del azar. Se es
coga
sobre la base de semejanzas imaginadas entre la luz, el color,
la posicin, la conducta
iba
a decir las costumbres de
esos planetas vagabundos
reyes
de las estrellas y las ca
ractersticas de los dioses creados por la misma imagina
cin .
Venus, el ms brillante de los planetas, fue el primero
en recibir sus atributos. Era, como hemos dicho, la mora
da de Ishtar, diosa de la fertilidad y de la fecundidad desde
los tiempos ms remotos. Los sacerdotes experimentaban
ciertas dificultades en seguir a Mercurio, ya que este plane
ta, el ms cercano al Sol, est oculto con frecuencia tras
la luz solar, que es ms fuerte. Los caldeos decan que era
la morada de
Neg,
un dios muy poco de fiar, tmido, as
tuto e inconstante. El planeta Marte se convirti en la mo
rada de Nergal, el dios de la guerra, peligroso, malo y vio
lento.
Su luz rojiza y sus repentinos cambios de direccin
crearon una impresin muy desfavorable en los observado
res de los zigurats. El planeta Jpiter tiene una luz clara
y cruza el camino de Anu siguiendo una rbita majestuosa
que es la que ms se aproxima al eclipse. Por lo tanto, fue
relacionado con Marduk, el rey de los dioses, cuya clera
LOS RELOJES CSMICOS
67
era terrible y cuyo poder no conoca lmites. Tambin se
convirti en el planeta del rey caldeo, cuyo destino se poda
leer en su carrera.
Finalmente, en los bordes helados del horizonte, se mos
traba vagamente Ninib, nuestro plido y amarillo planeta
Saturno, el ltimo planeta visible al ojo humano. Su lenta
carrera a lo largo del Zodaco, por causa de la distancia
que le separa de la Tierra, le daba el aspecto de un hom
bre viejo y renqueante. Los caldeos crean que Ninib sus
titua al Sol cuando ste se pona y llamaron al fantasma
sustituto del dios Shamach el sol de la noche. se es el
motivo de que pasara por ser poderoso, a pesar de su ta
mao, y se le echara la culpa de tempestades y catstrofes.
Cada uno de los cuerpos celestes era rey de una planta,
una especie animal, una piedra preciosa y un color. Ade
ms,
ciertas acciones, funciones y profesiones, as como
tambin cada da y cada hora, estaban asimiladas al ciclo
de una divinidad
15
.
Las primeras mximas astrolgicas que poseemos se re
mon tan al ao 3000 a. de C. Las ms famosas son las predic
ciones de Sargn lViejo (2470-2430 a. de C). Se refieren
casi exclusivamente a presciencias basadas en la aparicin
del Sol y de la Luna:
Si la Luna es visible la primera noche del mes, el pas vi
vir en paz; el corazn del pas se regocijar. Si la Luna
aparece rodeada de un halo, el rey reinar sin rivales.
Si el Sol poniente parece el doble de grande que de cos
tumbre y tres de sus rayos son azulados, el rey del pas est
perdido.
Si la Luna es visible el dcimo da, hay buenas noticias
para la tierra de Akkad, malas noticias para Siria
16
.
Gradualmente, estas predicciones fueron siendo codifi
cadas y divididas en varias secciones. La coleccin babil-
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
34/167
68
MICHEL
GAUQUELIN
nica l lamada
Anu-Ea-Enlil,
por ejemplo, t iene toda una sec
cin, l lamada Adad, el nombre del dios de las montaas,
dedicada a predecir el t iempo:
Si la Luna est rodeada de un halo oscuro, el mes ser
nuboso y lluvioso.
Si truena en el mes de Shebat, habr plaga de lan
gosta.
Otras secciones estn dedicadas a pol t ica exterior:
Si Marte es visible en el mes de Tammuz (junio-julio),
el lecho del guerrero seguir fro (es decir , que habr
guerra).
Si Mercurio es visto al Norte, habr muchos cadveres;
el rey de Akkad invadir un pas extranjero.
Tampoco se olvidaba la pol t ica local:
Si Marte se acerca a Gminis, morir un rey y habr
rivalidades.
Algunas predicciones se referan a la economa y al costo
de la vida:
Si Jpiter parece entrar en la Luna los precios ba
jarn.
A medida que transcurra el t iempo, la astrologa con
tinu creciendo en influencia. Los reyes mismos coopera
ban en esto haciendo preguntas a los sacerdotes sobre el
futuro del pas. Sabemos algunas de las respuestas que
daban los astrlogos reales gracias a las cartas conserva
das en tabli l las de arcil la. He aqu la prediccin de un cier
to Zakir, enviada al rey Senaquerib (carta 1214):
En el mes de Tammuz, en la noche del dcimo da,
Es
corpin se aproximar a la Luna. Esto significa que si Escor
pin se acerca al cuerpo derecho de la Luna creciente,
el ao ver el comienzo de una plaga de langosta que des
truir la cosecha.
LOS RELOJES CSMICOS
69
Ms adelante, los reyes, no contentos con predicciones
tan impersonales, comenzaron a desear, junto con sus prin
cipales dignatarios, levantar los velos del destino y averi
guar su hado personal.
El futuro del rey
Alrededor del siglo v a. de C, aparecieron por primera
vez mximas que relacionaban el da del nacimiento de
cada hombre con su posible destino. Al principio, estas pre
dicciones estaban dedicadas, como es lgico, slo a los re
yes. Las predicciones se basaban en los movimientos de
los planetas. He aqu unos ejemplos, traducidos por Sachs:
Si un nio nace cuando ha salido la Luna (su vida ser),brillante,excelente, regular y larga.
Si un nio nace cuando ha salido Jpiter (su vida ser),
regular, buena; ser rico, envejecer, (sus) das sern nume
rosos.
Si un nio nace cuando ha salido Venus (su vida ser),
excepcionalmente
tranquila; en dondequiera que est, todo le
ser favorable, (sus) das sern numerosos .
En general , la subida por el cielo de los cuerpos celes
tes era considerada como favorable porque, entonces, las
caracterst icas posit ivas de los dioses estaban en su apo
geo. Por el contrario, la puesta de los mismos cuerpos ce
lestes se consideraba de mal agero. Las tabli l las de arcil la
en que estaban inscritas las predicciones basadas en la pues
ta de los planetas se han perdido, pero sabemos la
mala influencia que se atribua a la puesta de los planetas
por predicciones basadas en los movimientos de dos pla
netas al t iempo, uno de los cuales sube mientras el otro
desciende:
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
35/167
7Q
M I H E L G UQUELIN
Si un
nio
nace cuando Jpiter sale y Venus se ha
puesto, todo le ir excelentemente bien a ese hombre; su
esposa le abandonar y... El resto del fragmento se ha
perdido, pero su significado est claro. Hemos visto que
Jpiter representa al rey. Sale cuando Venus, su esposa,
desaparece en el horizonte: Su esposa le abandonar, es
decir, morir antes que l.
La puesta de Jpiter es de mal agero para el rey: Si
un nio nace cuando sale Venus y Jpiter se pone, su espo
sa ser ms fuerte que l. Venus, cuando asciende, domina
al esposo, Jpiter, que est desapareciendo en la oscuridad.
Han sido halladas algunas predicciones reales basadas
en los doce signos del zodaco. No sabemos en qu circuns
tancias fueron hechas exactamente, pero muestran algunas
diferencias claras en el significado que tena cada signo
para el destino humano:
El lugar de Aries: muerte en su familia,
El lugar de Tauro: muerte en la batalla,
El lugar de Gminis: muerte en la
pr i s i n .^
Por otra parte:]
El lugar de Leo: envejecer,
El lugar de Libra: das gratos...
a
.
As, pues, todo estaba en orden; los planetas y las cons
telaciones tenan cada uno su sistema propio de influencia.
Los primeroshorscopos
Poco a poco, el deseo de conocer su futuro personal
hizo que la gente aceptara la creencia de que, al nacer, el
LOS RELOJES SMI OS
71
cielo,
con todos sus componentes, contena una sntesis de
las intenciones del dios, y tambin que la posicin relativa
del Sol, de la Luna y de los planetas en la fecha del naci
miento o de la concepcin de cada uno poda indicar el
curso de su vida. As, los horscopos
que
han influido en
nosotros hasta nuestros das deben su origen a los babi
lonios. Es ineludible la conclusinafirma Van der Waer-
den de que la astronoma horoscpica tiene su origen en
Babilonia durante el reino persa
21
. En Babilonia, la domi
nacin persa comenz en el ao 539 a. de C.
La coleccin de horscopos babilnicos traducida por
Sachs data del ao 409 al 141 a. de C, y es una fuente insu
perable de documentacin. No son todava horscopos
como los que nosotros conocemos, ni como los que cono
can los griegos. Como escribe Sachs: Ningn horscopo
babilnico menciona el Horoscopus (el signo zodiacal cal
culado o el punto que ascenda en el momento del naci
miento), como tampoco ninguna de las posiciones astrol
gicas secundarias que tienen un papel importante en la
astrologa grecorromana
n
A pesar de todo, la estructura
esencial es la misma. He aqu un ejemplo de horscopo pu
blicado por Sachs. El nacimiento a que se refiere tuvo lu
gar el 3 de junio del ao 234 a. de
C:
'
Ao 77 de la Era selucida, mes de Siman, desde el cuar
to da, en la ltima parte de la noche del quinto da, naci
Aristcrates.
Ese da: la Luna en Leo. El Sol en 12,30 en Gminis.
La Luna vuelve su rostro desde el centro hacia arriba;
(habr) destruccin.
Jpiter en 18 Sagitario. El lugar de Jpiter significa; (su
vida ser) regular, buena; ser rico, llegar a viejo. (Sus)
das sern numerosos.
Venus en 4. Tauro . El luga r de Venus significa: donde
quiera que est todo le ir bien; tendr hijos e hijas.
Mercurio en Gminis con el Sol. El lugar de Mercurio sig-
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
36/167
7
MICHEL GAUQUELIN
nifica: el valiente ser el primero en categora, serms im-
portante que sus hermanos.
Saturno; 6
o
Cncer. Marte: 24 Cncer... el resto de las
prediciones ha sido destruido).
Con el comienzo de
la
historia de los horscopos, la
de la astrologa caldea, que comenz en el tercer milenio
a. de C. con predicciones sobre el tiem po, el xito de las
cosechas y el destino del pas en su conjunto, termina. Ms
tarde incluir en su objetivo la prediccin del destino
de los reyes. Con la conquista de Caldea por los guerreros
griegos de Alejandro de Macedonia en el ao 331 a. de C,
pas a predecir tambin el futuro de los individuos. sta
es la astrologa que los griegos aprendieron y transforma-
ron, con su genio excepcional, en un conjunto de conoci-
mientos complejos y precisos. Hicieron de la astrologa y
el arte de hacer horscopos una rama del conocimiento
casi idntica a la que se practica en la actualidad.
NOTAS AL
CAPITULO
II
1. A.Koestler,
The
Sleepwalkers (Nueva York:
Macmillan,
1959).
2. M.
Rutten,
La Science des Chaldens
(Pars: PUF, 1960).
3. L. McNeice,
Astrology
(Londres: Aldus Books, 1964).
4. Rutten,
op. cit.
5.
Ibid.
6. B. L. Van derWaerden,
History
of theZodiac, Archiv
fr
Orientforschung,
216, 1953.
7.
Ibid.
8. A.Sachs, B abylonian Horoscopes,
Journal of Cuneiform
Studies,
VI (1952), N. 2, 49.
9. Van der Werden,
op. cit.
10.
W.Peuckert , L astrologie (Pars: Payot, 1965).
LOS RELOJES CSMICOS
73
11. A.Bouch-Leclercq, L astrologie grecque (Par s :
Leroux,
1899).
12.
Peuckert ,
op. cit.
13.
P.
Courderc,
L astrologie
(Pars: PUF, 1951).
14. Bouch-Leclercq,
op. cit.
15.
Rutten,
op. cit.
16. Lenormand,
Histoire ancienne des peuples de l Orient,
V, Pars.
17. Rutten,
op. cit.
18. G. Conteneau, La
divination chez
les
Assyriens
et les Baby-
loniens
(Pars: Payot, 1940).
19. Sachs, op. cit.
20.
Ibid.
21. Van derWaerden, op. cit.
22. Sachs,
op. cit.
23.
Ibid.
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
37/167
C PITULO III
D E L
RMON
D E L S E S F E R S
L
HORSCOPO
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
38/167
v
: .
Hasta el siglo ix a. de C, aproximadamente, no apren
dieron los griegos a reconocer los cinco planetas. Llama
ron a cada uno de ellos guindose por su aspecto, sin rela
cionarlos con conceptos astrolgicos. Homero, por ejem
plo, dio a Venus dos nombres: Heraldo de la Aurora y
Vespertina, segn fuese visible por la maana o por la
noche. Los griegos, en aquel t iempo, no se haban dado
cuenta an de que las dos estrellas, dist intas en aparien
cia, eran en realidad el mismo planeta, que preceda unas
veces y otras segua el curso del Sol. Mercurio era llama
do La Estrella Pestaeante; Marte, La Estrella Fiera,
por causa de su color rojo; Jpiter, Estrella Luminosa, y
Saturno, Estrella Bril lante.
Los griegos no eran observadores tan pacientes como
lo haban sido en su t iempo los caldeos. Distinguan las
constelaciones de manera vaga y apenas saban distinguir
los planetas de las estrellas:
Incluso el Sol y la Luna, aunque son considerados divinida
des igual que
los
poderes todos de la Naturaleza, ocupan un
lugar muy secundario en la religin griega. Selene (la Luna)
no parece haber sido objeto en ningn sitio de un culto orga
nizado, y en los pocos lugares donde Helios (el Sol) tena
8/10/2019 Michel Gauquelin - Los Relojes Cosmicos
39/167
78 MICHEL GAUQUELIN
templos, como, por ejemplo, la isla de Rodas, cabe sospechar
razonablemente la existencia de una influencia extranjera'.
Por el c ontrario, los griegos, mucho ms que los caldeos
se interesaban por encontrar la causa final de las cosas.
Muchos pensadores comenzaron a representar el Universo
por medio de modelos mecnicos, abandonando las primi
tivas explicaciones mitolgicas. Anaximandro (610-547 a. de
C), por ejemplo, vea a la Tierra en forma de cilindro ro
deado de aire, y en el Sol no vea otra cosa que el agujero
axial de una gigantesca rueda. Anaxmenes, contemporneo
suyo,
pensaba que las estrellas estaban como clavadas a una
esfera de cristal transparente que rotaba en torno de la Tie
rra.
Estos antiguos filsofos fueron seguidos, en el siglo
vi
a. de C, por Pitgoras de Samos. Su famosa teor
Top Related