La Sintonización de Los Templos Masónicos

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La Sintonización de los Templos Masónicos El diseño del interior y del exterior de los Templos Masónicos debe crear un estado especial de conciencia superior en los congregantes. El aspecto externo ha de sugerir inmediatamente su finalidad general y sus diferencias con relación a los demás tipos de comportamiento humano, en tanto que el impacto interno debe despertar la intención que motiva nuestra asistencia. Es decir, los Templos Masónicos han de anunciar con gran claridad, a través de todos los sistemas de observación posibles para los mortales, no sólo su finalidad sino también su motivación y funcionamiento. Los Templos Masónicos deben exhibir un simbolismo sugestivo y claro que interese directamente a la psique del usuario de tipo medio. Por ejemplo, un Templo Masónico, al tener forma de cubo y un techo central que señale al cielo estrellado, está diciendo en silencio "Éste es el lugar donde los pensamientos racionales y las pretensiones humanas más elevadas se dirigen hacia la Divinidad", La Estrella de cinco puntas que llama a los masones a una conciencia plena actúa como mecanismo armonizador. Fija una frecuencia común que resuena como una especie de "señal buscadora" para guiar por el buen camino a los que honran a la Verdad. Existe un ritual que se realiza al abrir los trabajos, es como un llamado a un tiempo no ordinario y un activo el lavatorio del campo áurico previo al inicio de los trabajos. Asimismo, nosotros los masones cubrimos con el mandil la zona genital. Todas estas operaciones tienen como finalidad ayudar a las personas a tener el estado de ánimo adecuado antes

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La Sintonización de Los Templos Masónicos

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  • La Sintonizacin de los Templos Masnicos

    El diseo del interior y del exterior de los Templos Masnicos debe crear un estado especial de conciencia superior en los congregantes. El aspecto externo ha de sugerir inmediatamente su finalidad general y sus diferencias con relacin a los dems tipos de comportamiento humano, en tanto que el impacto interno debe despertar la intencin que motiva nuestra asistencia. Es decir, los Templos Masnicos han de anunciar con gran claridad, a travs de todos los sistemas de observacin posibles para los mortales, no slo su finalidad sino tambin su motivacin y funcionamiento. Los Templos Masnicos deben exhibir un simbolismo sugestivo y claro que interese directamente a la psique del usuario de tipo medio. Por ejemplo, un Templo Masnico, al tener forma de cubo y un techo central que seale al cielo estrellado, est diciendo en silencio "ste es el lugar donde los pensamientos racionales y las pretensiones humanas ms elevadas se dirigen hacia la Divinidad", La Estrella de cinco puntas que llama a los masones a una conciencia plena acta como mecanismo armonizador. Fija una frecuencia comn que resuena como una especie de "seal buscadora" para guiar por el buen camino a los que honran a la Verdad. Existe un ritual que se realiza al abrir los trabajos, es como un llamado a un tiempo no ordinario y un activo el lavatorio del campo urico previo al inicio de los trabajos. Asimismo, nosotros los masones cubrimos con el mandil la zona genital. Todas estas operaciones tienen como finalidad ayudar a las personas a tener el estado de nimo adecuado antes

  • de entrar fsicamente. Una vez dentro, el ambiente contribuir a aumentar la preparacin espiritual del que ha entrado. Por muy familiar que nos resulte, cada entrada deber realizarse pensando que se trata de una ocasin muy especial. No slo hay que entrar fsicamente en el Templo Masnico, tambin el Templo Masnico a su vez habr de entrar en el alma del que ha entrado y deber crear en ella sus propias condiciones mediante la estimulacin de su simbolismo. Antiguamente esto se denominaba "asumir a Dios" o adoptar el tipo de conciencia que se atribuye al Dios o a la representacin de Dios, a la que haba sido dedicado el Templo Masnico. Ms que entrar en el Templo, uno se lo pona como si se tratara de un traje, o lo asuma.

    En la antigedad era bastante corriente que los Templos tuvieran unas funciones especficas y que su interior estuviera amueblado y decorado en consonancia. Por ejemplo, un Templo de Venus albergaba una estatua de esta diosa en la entrada, y todas las imgenes que contena eran de tipo ertico. El incienso y la msica se combinaban con aromas dulces y sonidos seductores. El colorido estaba constituido por verdes de todas las clases junto con ornamentos y recipientes de cobre. Posiblemente estos Templos seran sumamente confortables, con unos asientos muy suaves y mullidos. Todos los artefactos y accesorios haban de armonizar con una frecuencia especfica utilizada para contactar con la representacin de Dios, a la que se invocaba para unos fines especficos propios de la citada Divinidad. Aunque son muy evidentes los beneficios tericos de esta metodologa inductora de humores, las dificultades prcticas con relacin a los gastos, la distribucin y otros factores asociados eran tambin evidentes. Asimismo, si la congregacin era ms bien numerosa y sus miembros tenan objetivos diferentes, el conflicto de conciencias debido a la existencia de un decorado con una nica finalidad tenda a invalidar las operaciones pretendidas. Por tanto, necesitamos bien un Templo para todas las finalidades o uno que pueda sintonizar con cualquier intencin particular con un esfuerzo mnimo. Lo mejor sera un Templo que combinara los dos servicios.

    Sintonizar un Templo en la nota requerida quiere decir hacer que todos sus estmulos sensoriales y espirituales concuerden con aquello en lo que se est trabajando. En la antigedad ello se haca clasificando todo en alguna categora planetaria y utilizando solamente aquellos objetos y temas que se consideraran idneos para ese planeta. Si hemos de adoptar una variante moderna del citado sistema, lo razonable es suponer que nuestro marco de referencia sera el rbol de la Vida con sus diez opciones de aproximacin al Absoluto, cada una de las cuales tiene toda una gama de propiedades conectadas con un tipo particular de conciencia. Despus sera sencillo decidir qu Esfera Arbrea en concreto est ms relacionada con la aproximacin que se intenta llevar a cabo, y luego

  • seleccionar de entre una lista de atributos aquello que parezca ms adecuado para sintonizar el Templo.

    Esto slo ser efectivo para quienes estn familiarizados con el marco del rbol Cabalstico, es decir, para aquellos que se han adaptado al mismo por medio de meditaciones y ejercicios que versan sobre todos los Senderos y Esferas. Sin embargo, los principios generales que se siguen son comunes a todos los sistemas espirituales. Los fundamentos implicados resultan de la asociacin de cada estado de nuestro ego con un determinado color, sonido, olor y forma, y de su vinculacin con una disposicin particular del entorno hasta que todos estos elementos lleguen a ser inter-vocativos. Es decir, hasta que la experiencia

    de una persona automticamente haga surgir la de otra persona. Por ejemplo, cuando las personas se han entrenado para vincular un estado de tristeza y pesar con los atributos de la Esfera Tres, como son el color gris oscuro, la msica triste, los aromas entristecedores y un ambiente cargado y lgubre en el que figuran elementos idneos como los sauces llorones y los cipreses, hay que saber cmo equipar el Templo de forma que armonice con el ms melanclico de los humores humanos. Y a la inversa, tambin hay que lograr contrarrestar este ambiente con el equipo de la Esfera Seis consistente en colgaduras amarillas, msica alegre, flores haciendo juego, ornamentos dorados y de latn, y otros adornos apropiados.

    Los que pueden equipararse para las diez Esferas del rbol, que abarcan todo, dispondrn de un medio para sintonizar sus Templos con cualquier tipo de ceremonia que los seres humanos pudieran desear. Aunque fundamentalmente slo existe un nico estado del ego, ste puede variar dentro de una considerable gama de experiencias y cada seccin puede ser considerada un estado del ego por derecho propio. Vamos a dar por hecho que el ser humano es capaz de vivir en el mejor de los cielos y tambin en el peor de los infiernos, y que entre aquellos dos extremos opuestos de la experiencia existe un estado de conciencia que permanece intacto, esto podra denominarse "la escala de los diferentes estados de nimo". Fuera de esa trayectoria el hombre deja de tener conciencia. En cualquier momento, la percepcin del ser humano puede estar centrada en cualquier punto de esa escala, dependiendo de las circunstancias. Esa posicin

  • exacta es el estado que tiene nuestro ego en ese preciso instante. As pues podemos sealar una conexin graduada que va desde la cima hasta el fondo de la vida que conocemos, y si lo pasamos a una escala decimal, podremos relacionarlo con el conocido rbol de la Vida. Aunque la mayora de los esotricos occidentales comprenden esto bien, no estar de ms que hagamos una recapitulacin rpida de los diez estados del ego a los que equivalen esas Esferas. Empezaremos por el cero de la escala