KIT - Cluster del Corcho de Extremadura · El corcho es uno de los productos naturales más...

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K I T TÉCNICO S O B R E TAPONES DE CORCHO

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K I TT É C N I C OS O B R ET A P O N E S

DEC O R C H O

edita

ASECOR

diseño gráfico

PABLO HUESO A.C.&S.L.

todos los textos son propiedad de

ASSOCIAÇÃO PORTUGUESA DE CORTIÇA

para esta edición en castellano

AGRUPACIÓN SANVICENTEÑA DE EMPRESARIOS DEL CORCHO - ASECOR -

PRESENTACIÓN 3

EL CORCHO. UN PRODUCTO NATURAL

CON CUALIDADES ÚNICAS 5

TAPÓN DE CORCHO. UN PRODUCTO INCOMPARABLE 9

LOS ÚLTIMOS GRANDES AVANCES

DE LA INDUSTRIA DEL CORCHO 13

TIPOS DE TAPONES DE CORCHO 21

EMBOTELLAR, TRANSPORTAR

Y ALMACENAR EL VINO 39

SÍMBOLO DEL CORCHO,

GARANTÍA DE LA NATURALEZA 57

EXTRAER EL TAPÓN.

UN RITUAL CON REGLAS 61

INDUSTRIA DEL CORCHO.

UN SECTOR MODERNO Y AMIGO DEL AMBIENTE 67

Presentación

En estas páginas, encontrará informaciones útiles, consejos prácticos y

enseñanzas que le ayudarán a conocer un poco mejor este aislante

incomparable y obtener un mayor provecho de sus cualidades únicas

Vino, botella y tapón de corcho. Una combinación natural perfeccionada

a lo largo de muchas generaciones y casi cuatro siglos, un referente

cultural fundamental que se encuentra en las raíces mismas de nuestra

civilización.

Los tres elementos conforman una tradición que refleja como ninguna

otra una interacción sostenible y respetuosa entre el ser humano y la

naturaleza: vida y alegría de vivir.

El carácter tradicional no debe ocultar que esta actividad también

encierra una búsqueda constante de progreso, de calidad, un esfuerzo

continuo por aplicar los avances de la ciencia y las innovaciones

tecnológicas. Tanto es así que el mundo del vino ha evolucionado más

en las últimas décadas que en varios siglos de su historia.

Los fabricantes de tapones de corcho no han permanecido ajenos a este

progreso. Desde la extracción del corcho en el alcornoque, hasta los

procesos de transformación de la materia prima; desde la creación de

nuevos productos, hasta la puesta en marcha de rigurosos procesos de

calidad… Las industrias corcheras españolas y europeas han realizado

avances espectaculares a favor de la calidad de sus productos, que son

la mejor garantía para que el corcho siga asociado indisolublemente al

ritual del vino por muchas generaciones más. Uva y corcho, dos productos

naturales, frutos del esfuerzo de la tierra y de la inteligencia humana

para transformarlos y mejorarlos.

En estas páginas, encontrará informaciones útiles, consejos prácticos y

enseñanzas que le ayudarán a conocer un poco mejor este aislante

incomparable y obtener un mayor provecho de sus cualidades únicas.

EL CORCHO.UN PRODUCTO NATURAL

CON CUALIDADES ÚNICAS

El corcho es el nombre dado a la corteza del alcornoque (Quercus Suber

L.), un árbol que se encuentra esencialmente en el mediterráneo occidental,

donde forma poblaciones denominadas dehesas. Entre las muchas

características únicas que lo distinguen de los restantes árboles de su

especie, sobresale su facultad para regenerarse naturalmente después de

cada extracción de su corteza, el corcho. Al acto de extraer el corcho

del alcornoque se le denomina descorche o saca. S e trata de una operación

muy delicada que obedece a estrictas normas legales que regulan, por

ejemplo, la periodicidad entre cada descorche, la intensidad de la saca

de la corteza y las condiciones climáticas. Es realizado sólo por

profesionales con experiencia, en intervalos mínimos de 9 años, y no

provoca ningún daño en el árbol. La primera extracción de corcho tiene

lugar cuando el árbol alcanza un perímetro de 0,70 cm a una altura de

1,20 m. del suelo. Sin embargo, el corcho con características para fabricar

tapones sólo se obtiene a partir del tercer descorche, lo que en general

acontece cuando el alcornoque tiene una edad próxima a 40 años. El

tiempo promedio de vida de un árbol de esta especie oscila entre los 170

y los 200 años, lo que significa que un alcornoque podrá generar corcho

apto para la fabricación de tapones cerca de 17 veces.

Leve, impermeable a líquidos y gases, compresible, elástico, buen aislante

térmico y acústico, prácticamente incorruptible y muy resistente a la

fricción, el corcho es un material muy

apreciado desde los albores de la historia

humana. Las primeras referencias datan de

3000 a.C., en la China, donde era empleado en

utensilios de pesca. Pero sus propiedades

únicas fueron también conocidas por Egipcios,

Babilónicos, Asirios, Fenicios y Persas.

Durante el período clásico greco-latino, fue

utilizado con frecuencia para la construcción

de boyas de varios tipos, colmenas y suelas

para zapatos de mujer.

Pero el corcho mantiene su relación más fuerte y expresiva con el vino:

desde que el hombre pasó a producir y a consumir vino, el corcho surge

como el material más apropiado para cerrar los recipientes utilizados en

su conservación (vasijas, barriles, botellas). Sin embargo, el

aprovechamiento industrial del corcho a gran escala sólo comenzó a

vislumbrarse en el último cuarto del siglo XVIII, estimulado por el uso

creciente de los recipientes de vidrio para el envasado individual en

pequeñas cantidades.

TAPÓN DE CORCHO.UN PRODUCTO INCOMPARABLE

El corcho es uno de los productos naturales más apreciados que existen.

La relación que mantiene con el vino desde hace tres siglos le garantiza

un lugar destacado en el universo de las referencias culturales.

Características del tapón de corcho

Las propiedades naturales del corcho ofrecen a la industria vinícola un

aislante de características incomparables.

Las más importantes son:

Levedad

El corcho pesa apenas 0,16 gramos por centímetro cúbico. Un tapón

contiene cerca de 89,7% de un gas parecido al aire.

Flexibilidad, elasticidad y compresibilidad

Estas propiedades son dadas por los cerca de 750 millones de células

(40.000.000 células/cm3) que componen un tapón de corcho. Estas células

son estáticas y con una mezcla gaseosa en su seno, semejante al aire, lo

que permite que un tapón pueda ser comprimido fácilmente (para ser

totalmente insertado en la boca de la botella) y recupere su forma inicial

una vez descomprimido, garantizando una perfecta adaptación al cuello

de la botella. Esta adaptación es también dinámica a lo largo del tiempo,

pues acompaña las dilataciones y contracciones que el vidrio sufre debido

a las variaciones de la temperatura ambiente,

asegurando el aislamiento de la botella.

Impermeabilidad

El corcho es impermeable a líquidos y

prácticamente impermeable a gases, gracias a

la suberina y cerina presentes en la consti-

tución de sus células.

Incorruptibilidad

Debido a su constitución química y

estructural específica, presenta una

elevada resistencia a la acción de

la humedad y, consecuentemente, a

la oxidación que ella ocasiona.

Reciclable, reutilizable

y renovable

Los tapones de corcho pueden ser

reciclados, siendo triturados para

ello.

El granulado resultante puede ser utilizado en otros productos, como

por ejemplo paneles de revestimiento, suelas de zapato, boyas de pesca,

etc. El corcho reciclado no se volverá a utilizar en la fabricación de

tapones. La utilización industrial del corcho garantiza el sustento de

las dehesas, contribuyendo a una relación equilibrada con la naturaleza

y a la manutención de los ecosistemas que le están asociados.

LOS ÚLTIMOS GRANDESAVANCES DE LA INDUSTRIADEL CORCHO

Cruzando el saber ancestral con los modernos conocimientos y

tecnologías, la industria del corcho es hoy uno de los sectores

industriales más avanzados e innovadores.

Las innovaciones representan una apuesta positiva por parte de la industria

en todas las expresiones de la calidad. Esta apuesta culminó en la

implementación del CIPT – Código Internacional de Prácticas Taponeras

y en el sistema de certificación, el Systecode.

La certificación Systecode es el mayor paso de la industria para combatir

el TCA. En los años 90 fue lanzado el proyecto Quercus (1992-1996), una

iniciativa de la C.E. Liège (“Confédération Européenne du Liège”), en la

que participaron siete países y varios laboratorios públicos y privados,

destinada a estudiar con mayor profundidad los

efectos negativos sensoriales relacionados con el

aroma/gusto a moho en el vino.

Partiendo de estudios anteriores y con los nuevos

descubrimientos de dicho proyecto, el conocimiento

de las causas de éstas deficiencias sensoriales fue

identificado, pasando a denominarse 2,4,6 -

Tricloroanisol (TCA), el Tetracloroanisol (TeCA) o

el Pentacloroanisol (PCA).

A partir de Quercus fue posible tener una idea más

clara sobre los mecanismos de formación y

contaminación del TCA y formular las reglas

básicas para evitarlos. Es a partir de aquí que surge

el Código Internacional de Prácticas Taponeras

(CIPR), un conjunto de normas prácticas para la

fabricación de tapones de corcho, cuya adopción

por la industria de corcho ha permitido

homogeneizar la calidad en todo el sector.

El código pasó a ser una referencia internacional a partir de 1997. Se

trata de un código dinámico que tiene siempre en cuenta los más recientes

descubrimientos y avances tecnológicos. Actualmente, ha alcanzado su

4ª edición.

Surgido en 1999, SYSTECODE es la certificación internacional que

distingue las empresas que operan de acuerdo con el Código Internacional

de Prácticas Taponeras.

En 2000, dentro de la primera edición de SYSTECODE, 71 empresas españolas

fueron certificadas. En 2004, este número creció a 87, un 40% de las cuales

pertenece a ASECOR.

Actualmente el CIPT y la consecuente certifi-

cación SYSTECODE constituyen uno de los

factores de modernización más importantes en

el seno de la industria de tapones de corcho.

Implican la adhesión de las empresas a las más

avanzadas técnicas productivas, además de exigir

un amplio y profundo conocimiento de los

materiales y el respeto absoluto por las

reglas ambientales, de higiene y seguridad en

el trabajo por su parte.

SYSTECODE es una garantía de calidad y

fiabilidad que el mercado ya comienza a sentir

en los vinos embotellados a partir de 2001.

El TCA (2,4,6 - Tricloroanisol) es un compuesto químico con presencia común

en la Naturaleza. Puede estar presente en maderas, en los vinos, en el agua,

en la tierra, en legumbres y frutas, y también en tapones de corcho.

El TCA es uno de los principales responsables de los problemas organolépticos

asociados al aroma y gusto a moho en el vino. A este nivel, es una sustancia

altamente contaminante que puede ser detectada en dosis muy pequeñas, tan

pequeñas como 3 a 6 nanogramos/litro, solamente encontradas por expertos.

El nivel de detección del TCA varía según cada persona, pero en general,

un consumidor normal sólo detecta la presencia de este cloro-

anisol en cantidades que sean superiores a 10 nanogramos por litro

de vino, o sea, más o menos el equivalente al contenido de una cuchara

de té dentro de una piscina olímpica.

Es muy frecuente que el consumidor utilice el término “gusto a corcho” para

describir los desvíos aromáticos relacionados con el aroma/gusto a moho.

Sin embargo, esta expresión es incorrecta porque, a pesar de que el tapón de

corcho puede ser una posible causa del TCA encontrado en algunos vinos, no

es la única. De hecho, la contaminación puede venir de las barricas donde el

vino envejeció, de botellas contaminadas por palets de madera usados en su

transporte, y en botellas mal lavadas/desinfectadas o mal secadas.

El TCA es un compuesto que no causa absolutamente ningún problema a

la salud, pero su poder aromático aliado a su fuerte poder de contaminación

hicieron que, tanto la industria del vino como la industria de corcho,

tomasen las medidas adecuadas para su erradicación.

Los consejos prácticos referidos en este manual son una buena ayuda

para prevenir la contaminación de sus tapones y de su vino por el TCA o

por otros cloroanisoles, como por ejemplo el Tetracloroanisol o el

Pentacloroanisol.

Mecanismos de formación y contaminación del TCA

El TCA es un producto exógeno al vino, a las maderas o al tapón de

corcho. Sin embargo, tiene un alto poder contaminante, transfiriéndose

de un material a otro con relativa facilidad. Estando presente en la

atmósfera, se transferirá fácilmente a las botellas de vidrio, barricas,

tapones de corcho o vino. Estando presente en el agua, este mismo proceso

de contaminación ocurrirá si entra en contacto con los productos antes

mencionados.

Sin embargo, puede acontecer también que el TCA se forme directamente

en el producto elaborado. Esto acontece, en la mayoría de los casos,

cuando existe en uno de estos productos algún tipo de triclorofenol.

Para el surgimiento de triclorofenoles, es necesario que una sustancia

que contenga fenoles entre en contacto con una sustancia clorada. Si,

por ejemplo, lavamos una barrica de madera con un producto de limpieza

que contiene cloro, estamos aumentando las probabilidades de que esto

ocurra. De la misma forma, si lavamos un tapón de corcho con cloro,

estamos posibilitando el eventual aparecimiento de clorofenoles.

La industria del corcho prohibió a través del Código Internacional de

Prácticas Taponeras (CIPT) la utilización de cloro o una solución de este

producto en cualquier fase de la fabricación de tapones. El Código

recomienda el peróxido de hidrógeno para el lavado de los tapones.

La transformación de los Clorofenoles en Cloroanisoles ( los verdaderos

responsables del aroma/gusto a moho) se da en la mayoría de los casos

por la acción de ciertas familias de hongos. Esos hongos, sólo pueden

encontrarse en los tapones de corcho.

Si las buenas prácticas de fabricación

no fuesen correctamente seguidas,

principalmente las relacionadas con

la cocción de la materia prima y a su

posterior estabilización.

Además de las normas preconizadas

en el CIPT, algunas empresas han

desarrollado individualmente téc-

nicas para la erradicación de los pre-

cursores del TCA.

TIPOS DE TAPONESDE CORCHO

La industria del corcho posee una gama completa de tapones, disponibles

en innumerables calibres y formatos, de modo a que se adaptan a la enorme

diversidad de botellas y a todo tipo de vino. Los tapones de corcho pueden

agruparse en las siguientes categorías:

Tapones naturales

Tapones Naturales Multipieza

Tapones Naturales Colmatados

Tapones de cava y vinos espumantes

Tapones Técnicos

Tapones Aglomerados

Tapones Cabezudos

TAPONES NATURALES

Los tapones de corcho natural aseguran la estanqueidad del vino

dentro del recipiente de vidrio. Este aislamiento, de prolongarse en

el tiempo, promueve la maduración del vino, o sea, su envejecimiento

noble a través de innumerables procesos físico-químicos que ocurren,

ya sea entre sus componentes, o entre estos y las sustancias que

componen el ambiente interno de la botella.

Esta evolución gradual del vino en botella se da en un ambiente con

bajísimo contenido de oxígeno, pero el necesario y suficiente para hacer

evolucionar el vino correctamente. Hasta este momento, sólo el tapón

de corcho natural consigue proporcionar ese equilibrio perfecto,

permitiendo una correcta evolución del vino y la formación del tan

apreciado “bouquet”.

El “bouquet” está constituido por un conjunto de aromas agradables

que se desarrollan durante la estancia del vino en la botella. Es un

elemento de valor que depende de la calidad intrínseca del vino y de

las condiciones en que se produce la conservación en la botella.

La hermeticidad asegurada por el tapón de corcho es no sólo indispensable

para los vinos de crianza, sino también para los vinos de consumo rápido.

Con el tapón natural es posible asegurar una excelente conservación de

los vinos sin que exista interferencia en la armonía de sus componentes,

otorgando al vino una señal de calidad.

El tapón de corcho natural, por sus características de elasticidad,

compresibilidad y constitución celular, es el único cierre capaz de

asegurar este tipo de conservación en cualquier tipo vino.

Además, sólo sus componentes naturales son capaces de adaptarse

correctamente a las irregularidades internas del cuello de la botella,

garantizando un perfecto aislamiento durante el almacenamiento, incluso

aunque el vidrio se dilate o se contraiga, lo que puede acontecer con la

alteración de la temperatura ambiente.

Podremos esperar un aislamiento perfecto a lo largo de algunas décadas.

Este aislamiento puede prolongarse aún más en el tiempo desde que el tapón

sea de corcho de elevada calidad y las condiciones de almacenamiento del

vino sean ideales (temperatura, presión y humedad adecuadas y sin grandes

amplitudes térmicas diarias y durante las estaciones del año).

El tapón de corcho natural es percibido por el consumidor como signo de

calidad y un elemento imprescindible para el ritual de apertura y del

consumo de una botella de vino, contribuyendo significativamente para su

valorización y diferenciación positiva (Moulton Hall, Diciembre de 2002).

Formatos: Los tapones naturales son fabricados por perforación a partir de

una pieza única de corcho. Existen en forma cilíndrica o cónica y en varias

dimensiones. Las medidas más comunes son las abajo indicadas (longitud x

diámetro), aunque pueden variar según el fabricante.

Botella tipo Burdeos, Borgoñao Reno (75 cl) con las especificacionesde terminación del cuellode la botella del CETEI* o italiano

Botellas de 50 cl con la mismaterminación

Media botella de 37,5 cl

Cierre prolongado

Cierre medio

*CETEI – Centro Internacional de Embotellamiento y Embalaje

54 x 24a

26 mm.

49 x 24a

26 mm.

45 x 24a

26 mm.

38 x 24a

22 mm.

33 x 21a

22 mm.

38 x 24a

26 mm.

OK

OK

OK

OK

OK

OK

OK

OK

OK

OK

OK

OK

OK

OK

OK

OK

OK

OK

Es común que se utilicen tapones de corcho más largos en vinos asociados

a una conservación en botella más prolongada. Sin embargo, es necesario

precisar que la calidad del aislamiento a lo largo del tiempo depende

más de una elección apropiada del diámetro del tapón de corcho de que

de su longitud. Lo ideal es usar un tapón de corcho que como mínimo

supere en 6 mm. el menor diámetro interno del cuello de la botella,

teniendo en cuenta que no se necesite comprimir más del 33% de su diámetro

al insertarlo, ya que podríamos dañar su estructura celular.

Clasificación de los Tapones Naturales

Según la clasificación más común es frecuente encontrar las categorías

definidas con los siguientes nombres, según criterios visuales:

“Flor”; “Extra”; “Super”; 1º; 2º; 3º; 4º; 5º.

La clasificación se realiza sobre la base de una muestra de varios tapones

que sean representativos de la totalidad (varía según el fabricante) y con

intervalos de variabilidad aceptados. Como alternativa, es el cliente que

hace la muestra y busca un proveedor para realizar el pedido.

Muestras de la calidad del corcho:

Masa Volumétrica – La masa volumétrica de los tapones de corcho

aglomerado y técnico permite observar la consistencia del proceso de su

elaboración de los tapones. Además, su compresibilidad y elasticidad se

pueden evaluar según esta propiedad.

Humedad – La humedad del tapón deberá estar situada entre 5% y 9%.

Tratamiento de Superficie – Existen dos tipos de productos que se utilizan

en el tratamiento de superficie: parafina y silicona. Los tratamientos con

parafina permiten la impermeabilización, además de proporcionar una

cierta lubricación. Los tratamientos con silicona tienen como objetivo

la lubricación del tapón, lo que facilitará su utilización en el proceso

de embotellamiento y en el momento de su extracción. El tipo de

tratamiento a aplicar y su dosificación depende del tipo de vino, del tipo

de botella, del tiempo de permanencia en botella y del tipo de

embotelladora. Para los vinos que necesitan una crianza en botella (supe-

rior a 18 meses), deberá realizarse primero un tratamiento de la superficie

con parafina y enseguida aplicarse un tratamiento con silicona. Cualquiera

que sea el tratamiento a aplicar, es necesario garantizar que sea de la

mayor calidad, pues de nada sirve tener un tapón de buena calidad con

un acabado deficiente, capaz de debilitar la calidad final del producto.

Fuerza de extracción – La fuerza de extracción del tapón tiende a bajar

a medida en que permanece en la botella. Los valores aconsejados se

sitúan entre los 20 daN y los 40 daN a las 24 horas del embotellado.

Patrón Visual – La clase visual de los tapones depende de la cantidad y

tamaño de los poros (lenticelas) que presente su superficie.

Muestreo – Para el muestreo

debemos siempre tener en cuenta

el tamaño de los lotes y seguir

las tablas de muestreo de una

norma aceptada, como por ejemplo

la UNE (Norma Española), UNE

56921, la NP (Norma Portuguesa

NP 2922) o las normas ISO 3951,

ISO 2859 ó ISO 4707.

TAPONES NATURALES MULTIPIEZA

Los tapones naturales multipieza son fabricados a partir de dos o más

mitades de corcho natural pegadas entre sí a través de una cola aprobada

por el “Food and Drug Administration” (FDA) para ser utilizada en

contacto con alimentos. Son tapones hechos de corcho más delgado que

no sirve para la fabricación de tapones naturales de una única pieza. Son

tapones con características de densidad más elevadas.

Tanto las medidas más comunes como las clases son

básicamente las mismas que las existentes para los

tapones naturales de una sola pieza. Los tapones

multipieza son también muy usados en botellas de gran

formato, pues estas botellas exigen calibres de tapones

mayores y, como tal, más difíciles de fabricar en una

sola pieza natural.

Los tapones multipieza no son recomendados para

permanencias prolongadas en botella.

TAPONES NATURALES COLMATADOS

Los tapones naturales colmatados son tapones de corcho natural con

los poros (lenticelas) rellenos exclusivamente con polvo de corcho

resultante de la rectificación de los tapones naturales. Para la fijación

del polvo en los poros es utilizada una cola a base de resina y de caucho

natural y aprobada por el FDA. Actualmente, en este proceso, también es

utilizada una cola a base de agua.

El colmatado sirve esencialmente para dos fines: mejorar el

aspecto visual del tapón y su rendimiento.

Los tapones naturales colmatados son tapones con una

apariencia visual bastante homogénea y con buenas

características mecánicas. Se fabrican en las formas más

variadas y en diversas dimensiones. Sin embargo, en la

forma cilíndrica, las medidas más comunes son las

indicadas en la página siguiente (longitud x diámetro),

aunque puede haber variaciones según el fabricante del

que se trate.

Botella tipo Burdeos, Borgoñao Reno (75 cl) con las especificacionesde terminación del cuellode la botella del CETEI* o italiano

Media botella de 37,5 cl

Permanencia media

*CETEI – Centro Internacional de Embotellamiento y Embalaje

45 x 24 mm. 38 x 24 mm. 38 x 22 mm. 33 x 21 mm.

OK

OK

OK

OK

OK

OK

OK

OK

En cuanto a la calidad:

Deben observarse las variables tradicionalmente usadas para determinar

la calidad general del corcho. Además de esto, existe una clasificación

que se divide en tres clases (A, B, C o I, II, III), según el nivel de colmatado.

Independientemente de esta clasificación, cada fabricante tiene productos

específicos que pueden no responder a ninguna de estas clases.

TAPONES DE CAVA Y VINOS ESPUMOSOS

como sugiere su propio nombre, se trata de tapones especialmente

concebidos para ser usados en cavas, vinos, vinos espumosos (gasificados)

y sidras. Los tapones de cava se pueden considerar como parte de la familia

de los tapones técnicos, pues son producidos a partir de un cuerpo formado

por aglomerado de granos de corcho, al cual se le aplica en uno de sus

extremos uno, dos o tres discos de corcho natural selecionado mediante

una cola aprobada por el FDA.

Los tapones de cava tienen un diámetro mayor que los tapones normales.

Este mayor diámetro es imprescindible para soportar las elevadas

presiones existentes en las botellas de vino con gas. Para obtener los

mejores rendimientos físicos, químicos y microbiológicos, estos tapones

están sujetos a una fabricación minuciosa y a un control de calidad

ajustado.

Los tapones de cava son básicamente presentados en las clases:

“Extra”, “Superior”, 1º y 2º, pudiendo sin embargo variar según el

fabricante.

TAPONES TÉCNICOS

Los tapones técnicos fueron concebidos para embotellar vinos destinados

a ser consumidos en un plazo medio de 2 a 3 años.

Están constituidos por un cuerpo de corcho aglomerado muy denso, con

discos de corcho natural pegados en su extremo – o en ambos extremos.

Los tapones técnicos con un disco en cada extremo son denominados

tapones técnicos 1+1. Con dos discos de corcho natural se llaman tapones

técnicos 2+2, y con dos discos sólo en uno de los extremos se llaman

tapones técnicos 2+0.

Para pegar los discos de corcho a los extremos del cilindro de corcho

aglomerado, se usan aglutinantes aprobados para ser utilizados en

productos que van a estar en contacto con alimentos.

Este tipo de tapón es químicamente muy estable y mecánicamente muy

resistente. Se comportan de manera ejemplar con respecto a la

torsión/fricción a que son sometidos en las fases de embotellamiento y

desarrollo. Además, han demostrado ser excelentes aislantes a lo largo

del tiempo (Australian Wine Research Institute, Wine Bottle Closure

Trial), consiguiendo mantener la concentración necesaria de SO2 (dióxido

de azufre) libre en la botella, evitando la oxidación prematura del vino

sin desarrollar aromas de reducción desagradables.

Los formatos más comunes en el mercado son los siguientes:

Como son tapones de cuerpo aglomerado, la calidad del tapón técnico

es bastante homogénea. Sin embargo, el patrón visual de los discos de

corcho natural utilizados en sus extremos varía. Habitualmente ese

patrón es clasificado en tres clases: A, B y C, siendo la clase C la más

baja. Esta clasificación puede variar según el fabricante.

Botella tipo Burdeos, Borgoña o Reno (75 cl)con las especificaciones de terminación del cuellode la botella del CETEI* o italiano

Media botella de 37,5 cl

Estancia corta en botella

*CETEI – Centro Internacional de Embotellamiento y Embalaje

44 x 23,5 mm. 40 / 39 x 23,5 mm.

OK

OK

OK

OK

OK

TAPONES AGLOMERADOS

Los tapones aglomerados son íntegramente fabricados a partir de

granulados de corcho con los materiales no utilizables de la producción

de tapones naturales. Los tapones aglomerados pueden ser fabricados

con un molde individual o por extrusión, y en ambos casos, agglutinados

con sustancias aptas para su uso en contacto con alimentos.

Los tapones de aglomerado son una solución económica para asegurar

un cierre perfecto por un período que no deberá superar, en general,

los 12 meses. Además de las ventajas económicas que representan para

vinos de bajo precio y de alta rotación, estos tapones tienen también la

ventaja de constituir completamente lotes homogéneos. Este producto

es el resultado de un proceso altamente industrializado y la única

variación entre las clases de tapones está en la elección del calibre del

granulado de corcho y, posteriormente, en el tratamiento de superficie

utilizado.

Se fabrican esencialmente en las siguientes medidas:

En cuanto a la calidad deben observarse las

variables tradicionalmente usadas para medir el

corcho. En lo relativo a la clasi-ficación, estos

tapones presentan categorías que varían según el

peso específico y dimensiones del granulado

utilizado.

Botella tipo Burdeos, Borgoñao Reno (75 cl) con las especificacionesde terminación del cuellode la botella del CETEI* o italiano

Media botella de 37,5 cl

Estancia en botella

*CETEI – Centro Internacional de Embotellamiento y Embalaje

44 x 23,5 mm. 38 x 23,5 mm. 33 mm.

OK

NO

OK

NO

OK

NO

TAPONES CABEZUDOS

El tapón con cápsula (cabeza) es un tapón de corcho natural (o un tapón

colmatado) en cuyo extremo superior es colocada una cápsula. Esta cápsula

puede ser de madera, PVC, porcelana, metal, vidrio u otros materiales.

El tapón con cápsula es generalmente utilizado en licores, o en bebidas

espirituosas que cuando salen al mercado, están listas para ser consumidas.

Los ejemplos más conocidos son el brandy y vino de jerez, moscatel, vinos

de oporto y también Whisky, Vodka, Cognac, Armagnac, Calvados, Licores

y Aguardientes.

Este tapón es muy práctico para los camareros y para los consumidores,

pues permite una reutilización fácil – un factor importante para botellas

cuyo contenido no es consumido de una sola vez.

En el mercado, se presentan las dimensiones adaptadas a los tamaños del

cuello de las botellas más comunes. Nótese que, en este tipo de tapón,

ya no es necesario un diámetro de 6 mm mayor al diámetro interno del

cuello de la botella. Sólo dos milímetros son suficientes para, sin

comprometer una correcta estanqueidad, permitir una fácil reutilización

en la botella.

Medidas más comunes:

27 x 20 mm. 27 x 19,5 mm. 27 x 18,5 mm. 24 x 17 mm.24 x 17 mm.

(botellas

20 cl.)

18 x 13,5 mm.

(botellas

miniatura)

EMBOTELLAR,TRANSPORTARY ALMACENAR EL VINO

El embotellamiento existe fundamentalmente para cumplir dos propósitos:

1. fraccionar los vinos y, así, poder transportarlos y almacenarlos

más fácilmente y en buenas condiciones de conservación;

2. y permitir el mantenimiento del vino en la botella, mejorándolo.

Reglas Básicas para embotellar, transportar y almacenar el vino

Embotellar, transportar y almacenar el vino son etapas fundamentales

para su conservación.

En ese sentido, y para sacar el máximo provecho de las propiedades de los

tapones de corcho, se deben cumplir algunas reglas básicas.

Estas reglas básicas deben ser tomadas en consideración:

La correcta selección de los tapones, su dimensión y clasificación,

apropiados a las botellas usadas y al tipo de vino a embotellar tiene

una importancia significativa;

El correcto almacenamiento de los tapones de corcho antes del

embotellado;

Las mejores prácticas de embotellado, transporte y almacenamiento

del vino tienen un importancia fundamental para que el vino sea

vendido al consumidor con la mejor calidad.

Selección de los tapones de corcho

Los tapones a usar deben ser elegidos teniendo en cuenta el tipo de

embotelladora, el tipo de botella y la dimensión del cuello, así

como el tipo de vino a embotellar y su periodo de evolución.

Para la gran mayoría de los vinos, y sin dejar de atender al perfil interno

del cuello, el diámetro del tapón debe ser por lo menos 6 mm. mayor que el

menor diámetro interno del envase. Para permanencia en botella muy prolongada,

se aconseja un diámetro superior a 6mm, no debiendo exceder los 8mm.

El tapón podrá ser más largo y mayor en diámetro cuanto mayor sea el

tiempo de estancia en botella programado para el vino. Sin embargo, con

relación al largo del tapón, deberemos respetar siempre el espacio

necesario entre su extremo inferior y la superficie del vino (cerca de,

como mínimo, 15mm.).

Para vinos con algún gas (presión

interna por encima de lo normal),

se deben elegir tapones de corcho

con un diámetro superior al

recomendado para vinos tran-

quilos. En general, y como ejemplo,

para vinos con cerca de un bar de

presión interna, se recomienda un

diámetro de 8mm mayor al menor

diámetro interno del cuello de la

botella.

Almacenamiento de los tapones de corcho

Siempre que sea posible, los tapones de corcho deben ser utilizados

inmediatamente después de ser recibidos en la bodega. Deben evitarse

largos períodos de almacenamiento. El período máximo aconsejable es

de hasta 6 meses, en condiciones de almacenamiento apropiadas.

Los embalajes de tapones sólo deben abrirse cuando llegue el momento

de utilizarlos. En general, los tapones son embalados en bolsas que

contienen SO2 (dióxido de azufre). Este gas actúa simultáneamente

como un antiséptico y antioxidante, protegiendo los tapones.

Los tapones no usados deben embalarse nuevamente en bolsas con SO2

(entre 0,5g y 4 g de SO2 por bolsa de 1000 tapones).

El almacenamiento de los tapones debe ser efectuado:

En locales frescos y secos, con una temperatura estable entre los 15

ºC (59F) y los 20 ºC (68F) y una humedad relativa entre 40% y 70%.

En locales libres de olores y alejados de mohos, de todo tipo de

combustible, y de productos que contengan químicos, como por

ejemplo productos de limpieza o pinturas.

En locales en que no existan maderas tratadas con productos

clorados (como por ejemplo en las estructuras de los techos recién

construidos, o en palets de transporte).

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La observación de todas estas recomendaciones es esencial para que en el momento

del embotellamiento, los tapones sigan teniendo las mismas características físicas

y químicas y estén exentos de cualquier tipo de contaminación exterior.

Embotellado, transporte y almacenamiento del vino

Valiéndose de la compresibilidad del corcho, la embotelladora comprime

el tapón para que sea fácilmente introducido en el cuello de la botella.

Una compresión adecuada es aquella 2mm. menor que el diámetro menor del

cuello de la botella. Así, un tapón de 24mm. de diámetro debe ser comprimido

a 16,5 mm. para entrar en un cuello de 18,5mm. de diámetro.

Nunca se debe realizar una compresión superior al 33% del diámetro del

tapón de corcho, pues existe el riesgo de dañar la estructura interna del

corcho, comprometiendo su elasticidad y, consecuentemente, el correcto

aislamiento de la botella. Así, para un tapón de 24mm. de diámetro, la máxima

compresión posible es de cerca de 8mm.

Valiéndose de su elasticidad, el tapón recupera su volumen en los primeros 5

a 10 minutos que se siguen al taponado, adaptándose a todas las irregularidades

del cuello y ejerciendo una fuerza uniforme a lo largo de toda la superficie

del vidrio. Para esto, es aconsejable no colocar la botella en posición horizontal

inmediatamente después de haber sido taponada.

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En el caso de las líneas de embotellado en las que después del taponado

se procede de inmediato al acondicionamiento horizontal de las botellas

en sus cajas es posible atenuar este mal prolongando el tiempo de

permanencia de la botella en la cinta de circulación que va desde la

máquina de taponar a la máquina de etiquetar. Para ello, bastará agregar

más secciones de cinta, organizándolas en forma de “S”, para no

ocasionar desaprovechamiento de espacio.

Durante el transporte e incluso cuando ya está en los almacenes de los

distribuidores, salvo raras excepciones, el vino embotellado no está

inmune a las variaciones de la temperatura ambiente.

Estas variaciones de temperatura pueden traer consigo:

la variación del diámetro del cuello de la botella debido a los efectos

de contracción o dilatación del vidrio;

las variaciones del volumen del vino. Como indicación, puede decirse

que el vino se expande en promedio cerca de 0,2 ml. por cada grado

Centígrado (33,8F) de aumento de temperatura, aumentando en

consecuencia la presión interna.

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Si bien las variaciones del diámetro del cuello pueden ser naturalmente

compensadas por las excelentes propiedades elásticas del corcho, no se

puede decir lo mismo con respecto a la variación del volumen del vino y

la consecuente variación de la presión interna. Para evitar este problema,

deben darse atención a las siguientes recomendaciones a seguir en el

proceso de embotellado:

Embotellar el vino a una temperatura ambiente entre 15º a 20º Cen-

tígrados (59F a 68F) para conseguir un volumen apropiado de vino.

La embotelladora debe ser calibrada para permitir un espacio

de, como mínimo, cerca de 15mm entre la superficie del vino y el

tapón (valores para botellas de 750ml.). Este espacio libre es

esencial para permitir la expansión del vino en el caso de un

aumento de temperatura durante el transporte o almacenamiento.

El tamaño y la cantidad del vino a colocar en la botella deben

ser determinados para garantizar la existencia de un espacio

libre para la expansión del vino, no olvidando las especificaciones

normativas del país dónde el vino va a ser comercializado.

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En los vinos espumosos este espacio debe ser superior.

Para disminuir los efectos de las alteraciones de la presión interna

que podrían llevar a la fuga de vino, es aconsejable que el llenado

se haga al vacío o con la inyección de CO2. El CO2 es gradualmente

absorbido por el vino, acabando por hacer bajar la presión interna

en la botella. El embotellamiento al vacío o con inyección de CO2

protegerá mejor al vino contra oxidaciones prematuras o reacciones

microbianas aeróbicas.

Es necesario controlar frecuentemente la presión interna de las

botellas que salen de la línea de embotellado para ver si el sistema

de llenado al vacío o inyección de CO2 funciona correctamente.

Las presiones internas, en el caso de los vinos tranquilos, deben

ser lo más próximas posible a cero.

En condiciones límite, las presiones internas elevadas dificultan

una perfecta adaptación del tapón a la boca de la botella después

del embotellado y tienden a forzar la salida de vino para que la

presión interna se equilibre.

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6

En estos casos, no existe una salida continua de vino, sino sólo una

expulsión de algunos mililitros hasta el restablecimiento de la presión

interna. No existe un problema en el tapón, sino en la presión interna de

la botella. Muchas veces el vino es expulsado por un aumento de la

presión interna de la botella, normalmente originado por un incremento

de temperatura, causando problemas en la capacidad de aislamiento del

tapón de corcho. Esta situación origina que la botella siga liberando

vino, muy lentamente, incluso después de que la presión interna de la

botella se haya estabilizado.

Otros cuidados que se deben tener en la fase de embotellado

En cuanto al local de realización, debemos prestar atención a que:

- Esté libre de insectos, especialmente “lepidópteros” (mariposa de cave).

- Esté correctamente ventilado, a través de orificios de ventilación/

extracción de aire.

- Esté a una temperatura ambiente constante entre los 15 y 20 grados

Centígrados (59F a 68F).

Las botellas deben ser retiradas de los palets cuando vaya a producirse

el embotellado y deben ser muy bien lavadas y secadas antes del proceso

(casi todas las embotelladoras hacen esto automáticamente).

Los palets con botellas deben ser guardados en un depósito con

temperaturas estables y ambiente seco, sin mohos ni maderas tratadas

por compuestos clorados. Los palets deben tener, entre cada fila de

botellas, planchas de otro material que no sea cartón, madera o sus

derivados.

Nunca se debe pasar los tapones por agua o vino antes del taponado. En

el pasado se recurría a esta técnica para limpiar los tapones o facilitar

su introducción en el cuello, pero esto hacía que estos líquidos se

acumulasen en los poros del tapón y desarrollasen gustos y aromas que

podían lentamente migrar al vino. Actualmente los tapones vienen ya

completamente preparados para ser utilizados, no necesitando de ningún

tratamiento u operación adicional. Si, por cualquier otro motivo fuera

necesario limpiar los tapones, entonces se aconseja una solución de

sulfito liberando SO2 (dióxido de azufre).

El interior del cuello de la botella debe estar limpio y seco.

De no ser así, existiría una fina película líquida imperceptible

que dificulta la expansión del tapón, además de disminuir su

adherencia al vidrio.

En las botellas normalizadas, el extremo del tapón no debe

quedar a más de 1 mm. por debajo del extremo del cuello.

Idealmente, la distancia debería ser de +/- 0,5mm. Si el tapón de

corcho se ha introducido demasiado se provoca más presión

interna (en caso de que no haya embotellado al vacío o CO2)

y se crea un espacio entre el tapón y la cápsula que no servirá

más que para facilitar la formación de hongos.

Si el tapón no está suficientemente introducido, en el momento

de colocar la cápsula habrá dificultades.

Los tapones con una humedad inferior al 4% deben ser

rehidratados en las instalaciones del proveedor.

Los tapones con una humedad superior al 9% deben ser

secados.

+/- 0,5mm.

no

Mantenimiento del equipamiento de embotellado

El mantenimiento de la embotelladora es fundamental para obtener un

buen rendimiento de los tapones y, consecuentemente, prolongar la vida

de un vino. A continuación se presentan algunas recomendaciones al

respecto:

Mantener los canales de alimentación de los tapones muy limpios, así

como todos los mecanismos de la máquina.

Asegurar la alineación del pistón, así como el estado de conservación

y de alineación del cono de centrado. Esto es esencial para una correcta

introducción del tapón en el cuello de la botella.

Verificar frecuentemente el nivel de desgaste de las mordazas de

compresión, pues el mínimo desgaste o defecto puede provocar surcos

laterales en el tapón que podrían dar origen a fugas de vino o a

infiltraciones de aire.

La embotelladora debe trabajar con suavidad, especialmente durante

la compresión del tapón, pero también con agilidad, sobre todo hasta

el momento de la introducción del tapón en la botella.

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Mantener limpias todas las superficies por donde pasa el tapón de

corcho con productos libres de cloro.

Antes de comenzar el embotellamiento, la máquina debe sufrir un

proceso de esterilización. Se aconseja pulverizar una solución de agua

a 80 grados Centígrados (176F) con metabisulfito y, enseguida, secar

eventuales condensaciones de agua.

Rezume o fuga contínua

El Rezume o “Couleuse” es el defecto por el cual el vino pasa entre el

vidrio y el tapón. Este problema puede tener varias causas, evitables si se

cumplen las reglas anteriormente enumeradas.

Las causas de este problema son:

Presión interna excesiva en la botella. Una presión interna excesiva

no da origen a una fuga continua de vino, pero sí a una pérdida temporal

de algunos mililitros de vino. Esta fuga se mantendrá sólo hasta que

la presión interna de la botella llegue a cero.

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Defectos en las mordazas de compresión. desgaste

que termina provocando surcos en la superficie de

los tapones.

Diámetro del tapón inadecuado, ejerciendo una fuerza

insuficiente contra el cuello de la botella y poniendo

en peligro la estanqueidad.

“Verde”. Es un problema que surge en un tapón

producido a partir de corcho que no fue debidamente

secado. El rezume se produce sólo cuando el “verde”

está presente en un tapón en gran cantidad. Un tapón

con “verde” va disminuyendo su volumen en el interior

de la botella, muy probablemente arrugándose en sus

laterales, por lo que dejará pasar el vino. Es un

problema completamente aleatorio que aparece muy

raramente en los tapones ter-minados, pues éstos son

minuciosamente controlados en las diferentes

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diámetro inadecuado

mordaza en mal estado

etapas de producción, desde la inspección de las planchas al control

visual de los tapones terminados.

Canales. Provocados por insectos cuando el corcho está en el árbol. Este

defecto es detectado fácilmente después que la corteza ha sido extraída,

por lo tanto, es extremamente raro que aparezca en un tapón terminado.

Defectos de fabricación. Son problemas que pueden surgir durante el

proceso de producción, pero que son de fácilmente detectables debido

a la existencia de un riguroso control de calidad durante las diferentes

fases del proceso de fabricación.

Otras recomendaciones para un correcto transportey almacenamiento del vino embotellado

Transporte de vino embotellado

Debido a las condiciones adversas a las que el vino embotellado se ve

sometido durante los largos viajes que tiene que realizar hasta llegar

a su destino, se aconseja que las botellas sean siempre transportadas en

posición vertical.

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Se recomienda el uso de contenedores aislados térmicamente o elegir siempre

las estaciones del año más frescas para proceder al transporte de los vinos,

especialmente para los que son transportados entre continentes.

Si el vino va a ser transportado en contenedores marítimos, se deberá

saber cual fue el tipo de carga que ese mismo contenedor transportó en

su último servicio. En caso de que el contenedor no se encuentre limpio,

libre de olores y completamente seco, deberá ser rechazado. De no poder

rechazarse, se deberá proceder a su limpieza con, por ejemplo, un chorro

de una solución de metabisulfito, teniendo la precaución de secar el

contenedor convenientemente, una vez que, durante el transporte, la

humedad resultante de fenómenos de condensación facilita la aparición

de hongos que pueden generar la formación posteriorde cloroanisoles

u otros compuestos responsables de olores no deseados.

Almacenamiento del vino embotellado

La expresión "la bodega hace al vino" es tan antigua como cierta. La

temperatura, humedad e higiene de una bodega ayudan a determinar la

calidad final del vino.

La bodega debe poseer las siguiente características:

- Temperatura ambiente entre los 15º C (59F) y los 20º C (68F), sin grandes

amplitudes térmicas, ya sea durante el día como durante el año.

- Humedad entre 40% y 70%.

- Debe estar libre de insectos y roedores. No se incluyen aquí las arañas,

pues son excelentes predadoras de insectos indeseables.

- No deben tener maderas tratadas con productos químicos.

- Deben estar libres de olores fuertes o viciados.

- En ella no se deben guardar productos químicos, como pinturas o

productos de limpieza.

Durante la maduración del vino, las botellas deberán

mantenerse en posición horizontal. Además, el vino almacenado

para envío puede estar en una posición vertical, siempre que

sea por un periodo corto de tiempo. En estas circunstancias,

el vino tiene volatilidad suficiente para mantener la parte

inferior del tapón de corcho suficientemente húmeda,

garantizando las excelentes propiedades elásticas del tapón

y proporcionando un aislamiento perfecto.

SÍMBOLO DEL CORCHO,GARANTÍA DE LA NATURALEZA

El corcho es uno de los productos naturales más apreciados por los seres

humanos en todos los tiempos y de todos los lugares. La relación que

desde temprano estableció con el vino le garantiza un sitio muy destacado

en nuestro universo de referencias culturales, además de la preferencia

del consumidor.

De hecho, el corcho es el único material que es natural, renovable y

totalmente reciclable. El único cuyas propiedades físicas, mecánicas y químicas

ofrecen una calidad de estanqueidad compatible con las rigurosas exigencias

de la moderna industria vinícola. Por eso, el tapón ocupa el lugar más

destacado dentro de las preferencias de los consumidores, constituyendo

el mejor indicador de calidad de un vino. En realidad, cualquier experto

sabe que un buen vino exige siempre un tapón de corcho. Sin embargo, la

mayoría de los consumidores no posee ninguna garantía en cuanto al tipo

de tapón presente en los vinos que adquiere.

Por ello, la “Confédération Européenne du Liège” (C.E. Liège), en conjunto

con la “European Forestry Comission – Food and Agriculture

Organization” (FAO), creó el “Cork Mark”, el símbolo internacional que

identifica los productos de corcho o con corcho, especialmente los

tapones de corcho. Esto significa que las botellas portadoras del Cork

Mark fueron embotelladas con tapones de corcho genuino, producidos

de acuerdo con las más rigurosas normas de calidad.

Por ello, este símbolo contribuye también a

ennoblecer y prestigiar los buenos vinos y

permite que el consumidor haga una elección

consciente. Una elección a favor de la calidad,

de la cultura y de la naturaleza.

La utilización del símbolo del corcho obedece a determinadas normas

gráficas definidas por la “Confédération Européene du Liège” (C.E. Liège).

Para información más detallada sobre las reglas gráficas del símbolo

consulte el sitio de la C.E. Liège em www.celiege.com.

EXTRAER EL TAPÓN.UN RITUAL CON REGLAS

Beber una copa o una botella de buen vino proporciona un enorme placer.

Sin embargo, existen algunos aspectos importantes a tener en cuenta si

se quiere sacar el máximo partido a este momento único en lo que respecta

a los cuidados de la extracción del tapón de corcho.

Dependiendo de la antigüedad de la botella, vamos a encontrar tapones

en los más diversos estados. Así, en los vinos jóvenes, el tapón será aún

muy robusto. En los vinos más antiguos, estarán más delicados; y, por

último, en los vinos muy antiguos, generalmente con más de 35 años,

encontraremos tapones muy debilitados debido a una estructura interna

ya muy frágil. Estos tapones son más difíciles de retirar porque se podrán

partir mientras se realiza su extracción. En los casos de vinos muy

antiguos, podrá ser usada, como alternativa al sacacorchos, una tenaza

incandescente para cortar el cuello, sin la necesidad de extraer el

tapón. De cualquier forma, cuando se usa un sacacorchos ya sea con

vinos jóvenes o muy antiguos, deberá prestarse atención siempre a

que esta herramienta tenga un poder de extracción totalmente

vertical.

Los sacacorchos “sommelier” de doble impulso son bastante comunes y

permiten extraer el tapón con facilidad y siempre en vertical. Existen

otros modelos que no utilizan el impulso, pero que funcionan siempre en

vertical. Para una extracción realmente rápida y eficaz, existen los

sacacorchos modelo “Rabbit” de la

fabricante MetrokaneTM que hacen el

trabajo en apenas algunos segundos y sin

gran esfuerzo. Los sacacorchos de

láminas, que extraen el tapón por los

lados, o sea, sin dañar su estructura

interna, pueden ser usados en vinos de

cualquier edad, pero en especial para abrir

vinos más antiguos, que presentan tapones

más frágiles.

Una de las piezas principales de un sacacorchos es su espiral. Para poder

funcionar con sacacorchos, debe tener por lo menos 7 cm. de longitud

y una extremidad puntiaguda perfecta. En términos de material, la espiral

debe ser completamente lisa, poco espesa, sin asperezas, y hecha en una

única pieza. Las espirales con la superficie de PTFE (TeflónTM) o materiales

semejantes son las más aconsejadas, pues recorren el tapón con suavidad,

sin dañar su estructura interna.

La apertura de la botella debe hacerse con precaución y serenidad. En

primer lugar debe quitarse la parte de la cápsula que protege el cuello,

más o menos un centímetro por debajo del extremo; enseguida, y especialmente

si la botella es antigua, deberá limpiarse cuidadosamente el gollete y la

parte superior del tapón con un paño limpio; se introduce entonces el

sacacorchos en el centro del tapón, lo más profundo posible, pero

procurando evitar perforarlo. Esta operación no se puede realizar cuando

se utilizan algunos tipos de sacacorchos que no funcionan por impulso,

por lo que, para la extracción correcta del mismo, será siempre necesaria

la perforación integral. El inconveniente es que con estos sacacorchos,

puede caer alguna partícula de corcho en el vino, especialmente en el caso

de tapones más antiguos. Sin embargo, es conveniente destacar que estas

pequeñas partículas son organolépticamente inofensivas. De producirse la

caída, saldrán en la primera copa que se sirva, por lo que esa primera copa

deberá ser la del anfitrión.

En el caso de un espumoso, la botella debe ser abierta con mucho cuidado,

evitando agitarla, para así poder disfrutar de todas las cualidades del

vino. Se debe tomar el tapón con firmeza después de retirado el muselet.

Enseguida debe girarse la botella, nunca el tapón, de modo que se evite

una torsión exagerada del mismo. Al ser expelido, el tapón emitirá un

sonido inconfundible, motivo de alegría, enriquecedor de los sentidos,

y sólo posible gracias al tapón de corcho natural.

INDUSTRIA DEL CORCHO.UN SECTOR MODERNOY RESPETUOSOCON EL MEDIOAMBIENTE

La industria del corcho garantiza la subsistencia del alcornoque y,

consecuentemente, la preservación de las especies de fauna y flora que

en él habitan, gracias a la fabricación de tapones.

Los bosques de alcornoques y el ecosistema agro-silvi-pastoril que coexiste

a su alrededor adquieren una importancia crucial, en la medida en que

contribuyen a la preservación del medioambiente, sustentan la fauna y

flora existente y además consiguen asegurar la vida de las poblaciones.

De hecho, a pesar de que sólo cerca de un cuarto de la producción de

corcho es usada para la manufactura de tapones, a través de ella que

obtiene cerca del 70% del valor añadido en el sector.

Pero hay aún un motivo más que convierte en única a esta industria: su

notable eco-eficiencia. Efectivamente, a lo largo del proceso productivo

todos los desperdicios resultantes de la fabricación de tapones son

transformados en productos útiles y de excelente calidad. A partir de

los granos obtenidos por la trituración de desperdicios y de los corchos

de poca calidad, son producidos, entre muchos otros productos, tapones,

paneles para pavimentos y revestimientos, toda clase de artículos

decorativos para el hogar y escritorio, piezas de arte y diseño, suelas

para zapatos, aplicaciones para el sector automóvil y las industrias militar

y aeroespacial, productos químicos para fines farmacéuticos, etc. Dicho

en otras palabras, durante el proceso de transformación del corcho no

se desperdicia un sólo gramo de materia prima. Incluso hasta el polvo de

corcho es utilizado en la generación de energía eléctrica. Por otro lado,

el reciclado de tapones de corcho usados es una actividad en fuerte

expansión. A pesar de que no pueden ser reutilizados en la industria del

vino, los tapones usados son triturados y aprovechados para la fabricación

de muchos otros productos destinados a los más variados fines,

conservando las mismas características del corcho natural. Esto significa

que el tapón de corcho es el único aislante totalmente natural, renovable

y reciclable.

ASECOR

Ctra. De Badajoz, s/n.

06500 SAN VICENTE DE ALCÁNTARA (Badajoz - España)

Tel. y Fax: +34 924 41 00 00

e-mail: [email protected]

www.asecor.com