Iósif Stalin; A dónde concudce el nacionalismo del grupo de Tito en Yugoslavia, 1948.pdf
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Bitcora Marxista-Leninista
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A dnde conduce el nacionalismo
del grupo de Tito en YUGOSLAVIA
Publicado en Pravda, 8 de septiembre de 1948
Isif Vissarinovich Dzhugashvili
Stalin
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EDITORES
Equipo de Bitcora Marxista-Leninista
Editado el 09 de Mayo del 2014
La presente edicin, sin nimo de lucro, no tiene ms que un objetivo,
promover la comprensin de los fundamentos elementales del
marxismo-leninismo como fuente de las ms avanzadas teoras de
emancipacin proletaria:
Henos aqu, construyendo los pilares de lo que ha de venir.
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Contenido
Introduccin de Bitcora (M-L)----------------------------------------------pg.01
A dnde conduce el nacionalismo del grupo de Tito en Yugoslavia---------pg.06
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Introduccin de Bitcora (M-L)
El presente artculo esta extrado de la versin en castellano publicada en Mundo Obrero, peridico del Partido Comunista de Espaa. El artculo fue publicado en Pravda el 8 de septiembre de 1948 y la autora de Stalin solo fue descubierta a su muerte, sabindose que dicho artculo iba a incluirse en su tomo 15 de obras escogidas pero finalmente fue puesto en el tomo 18, el cual no vera jams la luz en castellano. El contenido del artculo se basa en recalcar la va nacionalista y burguesa adoptada por el Partido Comunista de Yugoslavia bajo la direccin de Tito, Rankovi, ilas, Kardelj, Popovi, etc. En especial se hace mencin a varios factores que sostienen a esta tendencia y la hacen posible:
1) La incapacidad para hacer autocrtica de sus errores sealados en las cartas
entre el Comit Central del Partido Comunista (bolchevique) de la Unin
Sovitica y el Comit Central del Partido Comunista de Yugoslavia entre marzo
y mayo de 1948, la resolucin de la Kominform sobre la situacin en el Partido
Comunista de Yugoslavia de junio de 1948 y las sucesivas crticas de todos los
marxista-leninistas y partidos comunistas del mundo:
En lugar de reconocer honradamente esta crtica y de utilizar la va de la
correccin bolchevique de los de los errores cometidos, los dirigentes del
Partido Comunista de Yugoslavia, posedos por una ambicin sin lmites de
arrogancia y presuncin, han acogido la crtica con animosidad, han
manifestado hostilidad hacia ella y se han lanzado por una va antipartido,
negando completamente sus errores, infringiendo la teora marxista-leninista
relativa a la posicin de un partido poltico respecto a sus errores; agravando
as sus errores contra el partido. (Kominform; Resolucin: Sobre la situacin
en el Partido Comunista de Yugoslavia, 22 de junio de 1948)
2) La actitud chovinista y provocativa sobre territorios de las circundantes
democracias populares ante las cuestiones de reivindicaciones territoriales:
En sus discursos Tito, ilas, Tempo, Kulishevsky, y Vlahov escupieron su
veneno chovinista contra Bulgaria apuntando siempre concretamente y para
que no hubiera dudas contra nuestro partido, cuyo defecto, segn les parece,
es nuestro rechazo de dejarles que se apoderen del distrito Pirin y que
condenemos su traicin. (...) Para nosotros estaba claro que tales difamaciones
pueden tener slo un objetivo: enojar a los pueblos yugoslavos contra el pueblo
blgaro, crear un abismo entre los dos pueblos vecinos y proporcionar
propaganda gratuita a los imperialistas que se usara como arma para
amontonar un nuevo cmulo de mentiras y difamaciones sobre Bulgaria. (...)
La poltica nacionalista y chovinista de Tito y Kulishevsky, que no es sino el
otro lado de la moneda de su ya vista alineacin antisovitica, no slo es
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dirigida contra Bulgaria y los blgaros, sino tambin contra los macedonios.
Esta poltica ha tomado prestado los mtodos de los nacionalistas blgaros y
serbios, la cual siembra el odio entre los macedonios, incitando a una parte
contra la otra, recurriendo al terror y la persecucin contra los que
desaprueban del curso oficial de los presentes lderes yugoslavos. De este modo
la realizacin del sueo histrico de los macedonios su unificacin nacional,
est siendo artificialmente retrasada. La gente del distrito Pirin, sin embargo,
rechaza enamorarse de esta propaganda antiblgara que pretende
quebrantar la unidad entre macedonios. Ellos se oponen a la inclusin de su
tierra en Yugoslavia antes de la realizacin de una federacin entre
Yugoslavia y Bulgaria, porque a partir de tiempos inmemoriales ellos se han
considerado econmicamente, polticamente y culturalmente atados a los
blgaros y no desean por el momento que esto cambie. Adems, entre ellos
estn todava vivas las tradiciones del movimiento macedonio revolucionario
y, en particular, de su ala en Serres, encabezada por Yane Sandansky, que
siempre abogaba por la federacin como la nica solucin correcta a la
famosa cuestin macedonia. (Georgi Dimitrov; Informe al V Congreso del
Partido Obrero (comunista) Blgaro, 1948)
3) La falta de democracia interna de sus miembros, por la presencia en el
Comit Central de miembros cooptados y no elegidos democrticamente, y
sobre todo por la incapacidad interna para exponer a su rechazo o solidaridad
en las polmicas, recompensando a quin se atreviera a juzgar la poltica
interior y exterior titoista con la mordaza y la represin bajo la etiqueta de
kominformistas, como muestran los casos de Arso Jovanovi, Sreten ujovi
y Andrija Hebrang, etc., situacin permitida y promovida por Tito por el hecho
de dejar que el Ministro de Seguridad del Estado Aleksandar Rankovi fuera
a la vez el Secretario del Comit Central del partido:
Es caracterstico el hecho de que el secretario de organizacin del Comit
Central del partido es el Ministro de Seguridad del Estado. En otros trminos,
los cuadros del partido se someten de hecho a la vigilancia del Ministro de
Seguridad del Estado. Segn la teora marxista, el partido debe controlar
todos los rganos del Estado, incluido tambin el Ministerio de Seguridad del
Estado, mientras que en Yugoslavia ocurre lo contrario, siendo el partido
controlado de hecho por el Ministerio de Seguridad del Estado. Como se ve,
esto explica que la iniciativa de las masas del partido en Yugoslavia no est al
nivel requerido. Se comprende que no podemos considerar marxista-leninista
y bolchevique tal forma de organizacin del partido comunista. (Partido
Comunista (bolchevique) de la Unin Sovitica; Carta del Comit Central del
Partido Comunista (bolchevique) de la Unin Sovitica al Comit Central del
Partido Comunista de Yugoslavia, 27 de marzo de 1948)
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4) La continuacin de la vieja teora de la especificidad nacional, para justificar
presuntamente que en Yugoslavia existen condiciones especiales para que las
clases explotadoras se integren pacficamente en el proyecto del socialismo:
En el Partido Comunista de Yugoslavia el espritu de la poltica de la lucha de
clases est ausente. El aumento del nmero de los elementos capitalistas tanto
en el campo como en la ciudad prosigue rpidamente, y la direccin del
Partido no toma medidas para limitar a estos elementos. El Partido Comunista
de Yugoslavia se adormece con la podrida teora oportunista de la integracin
pacfica de los elementos capitalistas en el socialismo, tomada prestado de
Bernstein, Folmar, Bujarin. (Partido Comunista (bolchevique) de la Unin
Sovitica; Carta del Comit Central del Partido Comunista (bolchevique) de la
Unin Sovitica al Comit Central del Partido Comunista de Yugoslavia, 27 de
marzo de 1948)
5) El rechazo de participar en sesiones conjuntas con el resto de los partidos
comunistas para evaluar la situacin creada en el Partido Comunista de
Yugoslavia, derecho a ejercer la autocrtica que los yugoslavos s ejercieron en el
pasado con otros partidos hermanos:
La famosa resolucin [de la Kominform] dej bien claro que el Partido
Comunista de Yugoslavia no fue expulsado de la Kominform debido a sus
errores y poltica incorrecta. Cualquier individuo comunista, Comit del
Partido Comunista o Comit Central del mismo puede cometer errores. Ni
siquiera fue expulsada porque no quiso aceptar las crticas. A menudo se debe
tomar tiempo, un perodo prolongado de discusin profunda para que una
organizacin del partido o miembro individual pueda llegar a comprender y
corregir una poltica equivocada. Pero al negarse a discutir las crticas hechas
por algunos de los comunistas ms destacados y con experiencia en el mundo,
sobre todo partiendo dichas crticas tambin del Comit Central del Partido
Comunista de la Unin Sovitica, el hecho de rechazar discutir esas crticas de
los miembros de dichos Partidos, negarse a venir y reunirse con los
representantes de los otros ocho partidos comunistas, era una accin
despectiva que no poda sino colocar el lder comunista yugoslavo fuera de la
familia de los partidos comunistas. () La lgica de la historia era ineludible.
Entre el campo de la paz y el campo de guerra no hay tercer camino. Y la
poltica nacionalista de la banda de Tito llev directamente al campo de la
reaccin a Yugoslavia.. (James Klugmann; De Tito a Trotski, 1951)
6) Esta lucha no solo tocaba de lleno al Partido Comunista de Yugoslavia, sino
que al haber sido parte de la Komintern y despus participe de la Kominform, se
quisiera o no las desviaciones de un partido de tales caractersticas tocaba de
lleno al resto de partidos comunistas, por lo que la desviacin nacionalista-
derechista del grupo de Tito redund en una crtica y autocrtica generalizada de
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todos los partidos comunistas para liberarse de concepciones iguales o
similares, o para evitar precisamente la aparicin de dichas desviaciones en su
casa, y para tal camino era necesario comprender que los errores de los
yugoslavos no eran casualidades ni un par de errores, sino errores de gran
calado que suponan un completo abandono de los principios ms elementales
del marxismo-leninismo:
La cuestin sobre la situacin en el Partido Comunista de Yugoslavia no
puede ser reducida a un malentendido o a una informacin inexacta, como los
lderes del Partido Comunista de Yugoslavia reclaman: cuando lo cierto es que
se trata de unas serias diferencias de principios. Los lderes del Partido
Comunista de Yugoslavia han tomado el camino del nacionalismo burgus. Su
teora de que el programa del Frente Popular y el programa del Partido
Comunista son uno y el mismo conduce a la liquidacin del partido. Su teora
del crecimiento pacfico de los elementos capitalistas en el socialismo, in el
periodo de transicin entre el capitalismo y el socialismo, no est acorde con la
teora marxista-leninista. E incompatible con el espritu del marxismo-
leninismo es la declaracin de los lderes del Partido Comunista de Yugoslavia
de que los campesinos son la fuerza bsica, decisiva y lder, por el cual
radicalmente se niega la hegemona del proletariado. Los lderes del Partido
Comunista de Yugoslavia ha renunciado a los principios marxista-leninistas
de crtica y autocrticas y han burlado las reglas elementarles de la
democracia interna. (Mtys Rkosi; Discurso en la II Conferencia de la
Kominform, 21 de junio de 1948)
Y a la vez, todos estos sntomas desviaciones, confirmados antes, durante, y
despus de la polmica, fueron el caldo de cultivo para la solidificacin y
constitucin de esta rama del revisionismo moderno.
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Por ello, todas estas actitudes nacionalistas, hacan que como justamente
sentenci poco despus Vulko Chervenkov, se dijera que:
El nacionalismo es la ideologa de la traicin al campo de la paz, la
democracia y el socialismo, la constatacin de la salida de este campamento y
transferencia al campo del imperialismo, de la restauracin, de la
contrarrevolucin bonapartista. (Vulko Chervenkov; Georgi Dimitrov y la
lucha contra el titoismo en Bulgaria, 1950)
Estamos de acuerdo por tanto, en que:
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El ejemplo yugoslavo nos ense que quien se separa de la gran familia de los
pueblos defensores de la paz y edificadores del socialismo se transforma
inevitablemente en sirviente del imperialismo y ser tratado con el desprecio
reservado a los traidores y renegados, tanto por sus amos imperialistas como
por los pueblos liberados. (Mtys Rkosi; El camino de nuestra democracia
popular, 1952)
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Isif Vissarinovich Dzhugashvili
Stalin
A dnde conduce el nacionalismo del grupo de Tito
en Yugoslavia
La resolucin de la Kominform: Sobre la situacin en el Partido Comunista de
Yugoslavia adoptada en junio de 1948 sealaba que los elementos
nacionalistas haban alcanzado situacin predominante en la direccin del
Partido Comunista de Yugoslavia. Estos elementos nacionalistas existan ya de
una forma disfrazada. La direccin del Partido Comunista de Yugoslavia ha roto
con las tradiciones internacionalistas del partido y ha emprendido el camino del
nacionalismo.
Todos los partidos comunistas, todo el campo de la democracia popular y del
socialismo, han aprobado unnimemente la resolucin de la Kominform Sobre
la situacin en el Partido Comunista de Yugoslavia. Los partidos comunistas
del mundo entero han reconocido que, por su poltica nacionalista, la actual
direccin de Yugoslavia, es decir, el grupo de Tito, hace el juego a los
imperialistas, asla a Yugoslavia y la debilita.
Ha deducido el grupo de Tito de ese hecho las enseanzas que se imponen?
Ha comprendido el grupo de Tito que la poltica nacionalista lleva a la prdida
de los aliados ms fieles de Yugoslavia, los partidos comunistas del mundo
entero, que esta circunstancia ha provocado ya el aislamiento del Partido
Comunista de Yugoslavia, su debilitamiento, tanto en el exterior como en el
interior del pas?
Ha comprendido el grupo de Tito que la nica salida a la lamentable situacin
a que ha llevado al partido y al pas sera el reconocimiento de sus errores, la
ruptura con el nacionalismo y el retorno al seno de los partidos comunistas?
No. El grupo de Tito no ha sacado las enseanzas que se imponen y no parece
comprender estas cosas sencillas y claras.
Muy al contrario. A las crticas justas impregnadas de camaradera de los
partidos comunistas hermanos, del campo de la democracia popular y del
socialismo, este grupo responde, por medio de la prensa de Belgrado, con soeces
injurias, atiza la hostigad nacional hacia los pueblos de los pases democrticos
vecinos, recurre en amplia escala a la represin, a las detenciones y al asesinato
de los comunistas y no comunistas que se atreven a expresar sus dudas sobre la
justeza de la poltica nacionalista del grupo de Tito. Recientemente los agentes
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del ajunto de Tito, el clebre Aleksandar Rankovi, han asesinado al camarada
Arso Jovanovi, general del Ejrcito Yugoslavo, hroe de la guerra de liberacin
en Yugoslavia, ex jefe del Estado Mayor durante los aos de la guerra de
liberacin, y Jefe de la Escuela Militar Superior de Yugoslavia. Ha sido
asesinado porque dudaba de la justeza de la poltica nacionalista y terrorista del
grupo de Tito. A propsito de esto, se dice abiertamente en Yugoslavia que el
grupo de Tito degenera en banda de asesinos polticos.
Como se ve, el grupo de Tito no tiene la intencin de reconocer y rectificar sus
errores. Es ms justo decir que tiene miedo y que no tiene el valor de
reconocerlos, ya que es preciso tener valor para reconocer y enmendar los
errores. Aun ms, en su miedo, ejerce su represin sobre cuantos se atreven a
mencionar sus errores. Lenin deca:
La actitud de un partido poltico ante sus errores es una de las pruebas ms
importantes y ms fieles de la seriedad de ese partido y del cumplimiento
efectivo de sus deberes hacia su clase y hacia las masas trabajadoras.
Reconocer abiertamente los errores, poner al descubierto sus causas, analizar
la situacin que los ha engendrado y examinar atentamente los medios de
corregirlos; esto es lo que caracteriza a un partido serio, en esto es en lo que
consiste el cumplimiento de sus deberes, esto es educar e instruir a la clase
primero, y despus a las masas. (Vladimir Ilich Ulinov, Lenin; La
enfermedad infantil del izquierdismo en el comunismo, 1920)
Es evidente que no podemos colocar al grupo de Tito entre esos dirigentes
valerosos y honrados amantes de su partido de los cuales habla Lenin.
En vsperas de la convocatoria del Bur de la Kominform, en la primavera de
1948, fue cuando se produjo la principal cada del grupo de Tito en el
nacionalismo.
El comienzo de la poltica abiertamente nacionalista del grupo de Tito se seal
por su negativa a participar en la Conferencia de la Kominform y de examinar
con los partidos hermanos la situacin en el seno del Partido Comunista de
Yugoslavia. A pesar de las reiteradas invitaciones a enviar a la conferencia una
delegacin del Partido Comunista de Yugoslavia y de presentar su punto de vista
de modo anlogo a como tuvo lugar en la conferencia precedente con respecto a
otros partidos comunistas, el grupo de Tito se neg rotundamente a participar
en las labores de la conferencia. Se hizo evidente que el grupo de Tito no daba
ningn valor a la amistad de los partidos comunistas y entre ellos del Partido
Comunista (bolchevique) de la Unin Sovitica. Era una ruptura abierta con el
frente nico de los partidos comunistas. Era una ruptura con el
internacionalismo y el paso al camino del nacionalismo.
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El peridico de Belgrado Borba afirma que Tito y sus partidarios estn en
favor de un frente nico antiimperialista. Naturalmente, eso es una mentira
destinada a engaar a las gentes sencillas. En realidad, de qu posicin
antiimperialista del grupo de Tito puede tratarse cuando ese grupo no puede ni
siquiera vivir en el seno de la familia de los partidos comunistas de los pases
prximos a Yugoslavia?
El segundo hecho fundamental demostrativo de que el grupo de Tito se ha
hundido en el nacionalismo es su actitud indigna, hipcrita, antileninista en el
V Congreso del Partido Comunista Yugoslavo de julio de 1948. Los ingenuos
esperaban que los trabajos del congreso iban a desarrollarse bajo la bandera de
la amistad con los partidos comunistas, bajo la bandera de la consolidacin del
frente antiimperialista de los pases de democracia popular y de la Unin
Sovitica. En realidad, ocurri una cosa diametralmente opuesta. En realidad, el
grupo de Tito transform el congreso en arena de lucha contra los partidos
comunistas de los pases vecinos, en arena de lucha contra el frente nico
antiimperialista de los pases de democracia popular, de sus partidos
comunistas, contra la Unin Sovitica y su partido comunista.
Naturalmente, no se puede hablar sin riesgo en Yugoslavia de una cruzada
contra la Unin Sovitica y los pases de democracia popular, porque los
pueblos de Yugoslavia son firmes partidarios de la alianza con la Unin
Sovitica y los pases de democracia popular. Por eso el grupo de Tito ha
recurrido a una astucia fcil y ha decidido enmascarar ese camino reaccionario
tras frases pomposas sobre el amor y la amistad hacia la Unin Sovitica y el
papel preponderante jugado por la Unin Sovitica en el movimiento de
liberacin, etc.
Los partidarios de Tito llegaron a proponer a Stalin que interviniera en esta
cruzada vergonzosa y que tomara la defensa del grupo nacionalista de Tito
contra las crticas de los partidos comunistas, de la Unin Sovitica y de los
dems pases democrticos. Los colaboradores de la Prensa de Belgrado han
recurrido a toda clase de tretas y maquinaciones, han realizado las acrobacias y
los saltos mortales ms inesperados y ms ridculos para demostrar al pueblo
yugoslavo que lo negro es blanco y que lo blanco es negro, que la cruzada del
grupo de Tito contra el socialismo y la democracia tiene una importancia
secundaria, pero que la alianza con la Unin Sovitica y el frente nico con
ella constituye la preocupacin predominante del grupo de Tito. Pero en
realidad, el grupo de Tito se ha colocado durante esos das en el campo de los
imperialistas cubriendo de injurias a los partidos comunistas de los pases de
democracia popular y a la Unin Sovitica, para la mayor alegra de los
imperialistas de todos los pases. En lugar del frente nico con los partidos
comunistas se ha realizado el frente comn con los imperialistas. El V
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Congreso del Partido Comunista de Yugoslavia ha aprobado y consolidado la
poltica nacionalista del grupo de Tito.
Los acrbatas polticos del peridico Borba piden que los partidos comunistas
cesen de denunciar los errores del grupo de Tito, que presten su confianza y su
apoyo a este grupo diciendo que, en caso contrario esa campaa contra el
grupo de Tito puede causar a Yugoslavia serios perjuicios. No, seores! Los
partidos comunistas no pueden prestar al grupo poltico nacionalista de Tito ni
confianza ni apoyo. Es muy posible que esto origine un perjuicio a Yugoslavia,
pero no hay que culpar de ello a los partidos comunistas, sino al grupo
nacionalista de Tito que ha roto con los partidos comunistas y que les ha
declarado la guerra.
Los acrbatas del peridico Borba deben percatarse de que el marxismo y el
nacionalismo son incompatibles, que el nacionalismo en tanto que ideologa de
la burguesa es enemigo del marxismo. Deben percatarse de que el marxismo-
leninismo no puede pactar con el nacionalismo, o con las desviaciones
nacionalistas en los partidos comunistas, que su deber es destruir el
nacionalismo, bajo cualquiera de sus formas, en nombre de los intereses de los
trabajadores, en nombre de la libertad y de la amistad de los pueblos, en
nombre de la edificacin victoriosa del socialismo. Lenin deca:
El nacionalismo burgus y el internacionalismo proletario son dos consignas
irreconciliables y enemigas que corresponden a los dos grandes campos de
clase del mundo capitalista y que expresan dos polticas aun ms: dos
concepciones del mundo. (Vladimir Ilich Ulinov, Lenin; Notas crticas
sobre la cuestin nacional, 1913)
Cuando el poder de la burguesa es derrocado, las clases explotadoras y sus
agentes intentan utilizar el arma emponzoada del nacionalismo para
restablecer el antiguo rgimen. A este respecto dice Stalin:
La desviacin hacia el nacionalismo es una acomodacin de la poltica
internacionalista de la clase obrera a la poltica nacionalista de la burguesa.
La desviacin hacia el nacionalismo refleja las tentativas de la propia
burguesa nacional para restablecer el capitalismo. (Isif Vissarinovich
Dzhugashvili, Stalin; Informe al XVII Congreso del Partido Comunista
(bolchevique) de la Unin Sovitica, 1934)
El nacionalismo en el Partido Comunista de Yugoslavia asesta un golpe no
solamente al frente general antiimperialista sino ante todo, a los propios
intereses de Yugoslavia, a los intereses de los pueblos de Yugoslavia, a los
intereses del Partido Comunista de Yugoslavia tanto en la esfera de la poltica
exterior como en la esfera de la poltica interior.
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En la esfera de la poltica exterior, el nacionalismo del grupo de Tito lleva a la
ruptura con el frente nico del movimiento revolucionario mundial de los
trabajadores, a la prdida por Yugoslavia de sus aliados ms fieles, al
aislamiento de Yugoslavia. El nacionalismo del grupo de Tito desarma a
Yugoslavia ante sus enemigos del exterior. En la esfera de la poltica interior, el
nacionalismo del grupo de Tito lleva al pacto entre los explotadores y los
explotados, hacia una poltica de unin de los explotadores y de los
explotados, en un frente nacional, hacia una poltica de abandono de la lucha
de clases, hacia la preconizacin embustera de la posibilidad de edificar el
socialismo sin lucha de clases, de la posibilidad de una integracin pacfica de
los explotadores en el socialismo, hacia la desmovilizacin del espritu de
combate de los trabajadores yugoslavos.
El nacionalismo del grupo de Tito desarma a los trabajadores ante sus enemigos
del interior.
Hace un ao, cuando el grupo de Tito no daba todava muestras de aspiracin
nacionalista y colaboraba con los partidos hermanos, Yugoslavia, segura de s
misma, marchaba resueltamente hacia adelante apoyndose en sus aliados ms
prximos, los partidos comunistas del extranjero. Tal era la situacin en un
pasado reciente. Pero ha cambiado completamente despus del paso del grupo
de Tito al camino del nacionalismo. Cuando el grupo de Tito reneg del frente
nico de los partidos comunistas y adopt una actitud arrogante con relacin a
los pases de democracia popular, Yugoslavia perdi poco a poco sus aliados
ms fieles para encontrarse aislada ante sus enemigos exteriores e interiores.
Tales son los desgraciados resultados de la poltica nacionalista del grupo de
Tito.
El grupo de Tito no ha comprendido lo que es claro y evidente para cada
comunista. No ha comprendido la sencilla verdad de que en las condiciones
actuales de la situacin internacional, la solidaridad fraternal de los partidos
comunistas, la colaboracin mutua y la amistad de los pases de democracia
popular, la colaboracin y la amistad con la Unin Sovitica, son las condiciones
esenciales de la reconstruccin y desarrollo de los pases de democracia popular
en el frente de la edificacin del socialismo, la garanta esencial de su
independencia nacional y de su independencia con respecto a los ataques del
imperialismo.
Los acrbatas polticos del peridico Borba pretenden ms adelante que la
crtica de los errores del grupo de Tito se ha transformado en una campaa
contra el Partido Comunista de Yugoslavia, contra los pueblos de Yugoslavia.
Esto evidentemente, es inexacto; ninguna campaa se ha realizado ni se realiza
contra los pueblos de Yugoslavia. Hubiera sido criminal realizar ninguna
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campaa contra los pueblos de Yugoslavia cuyas heroicas hazaas son por todos
conocidas. Tambin se sabe que los pueblos yugoslavos son firmes partidarios
del frente nico con los pases de democracia popular y con la Unin Sovitica.
Ellos no son responsables, en modo alguno, de la poltica nacionalista del grupo
de Tito. Nosotros consideramos a los pueblos yugoslavos como nuestros aliados
fieles. Tampoco se ha realizado ni se realiza ninguna campaa contra el Partido
Comunista de Yugoslavia en su conjunto. Sabemos perfectamente que la
mayora del Partido Comunista de Yugoslavia quiere fuertemente la amistad con
los partidos comunistas de otros pases, la amistad con la Unin Sovitica, y su
partido comunista.
No puede caber ninguna duda sobre la existencia de tradiciones
internacionalistas en las filas de la mayora del Partido Comunista de
Yugoslavia. Sabemos muy, bien, asimismo, que la mayora del partido
Comunista de Yugoslavia no aprueba la poltica nacionalista del grupo de Tito,
sabemos que precisamente por esto se ejerce contra ella una represin feroz por
el grupo de Tito y sus agentes.
La pretendida campaa es realizada no contra los pueblos yugoslavos y el
Partido Comunista de Yugoslavia en su conjunto, sino contra el grupo
nacionalista de Tito. Se realiza para ayudar al Partido Comunista de Yugoslavia
a ver claro en los errores del grupo de Tito y liquidar la poltica nacionalista de
los diligentes yugoslavas.
Los acrbatas polticos del peridico Borba afirman por ltimo, que el grupo
de Tito es inseparable del Partido Comunista de Yugoslavia, que representa a la
mayora del Partido Comunista de Yugoslavia.
Esto es tambin falso. Es posible que nace un ao el grupo de Tito representara
la mayora del Partido Comunista de Yugoslavia, pero eso era hace un ao.
Ahora, despus de la ruptura con todas las Repblicas vecinas, despus de haber
pasado al campo del nacionalismo, el grupo de Tito no representa ya a la
mayora del partido. Ahora el grupo de Tito no es ms que una fraccin titoista,
que no goza de ms de ms confianza que la de la minora del partido y que
utiliza el aparato del Estado para aplastar la voluntad de la mayora
internacionalista del partido. La fraccin de Tito se ha colocado por s misma
fuera del partido, entregando ste a la vigilancia del verdugo Rankovi e
instituyendo en el partido un rgimen de terror con sus represiones, sus
detenciones en masa y sus asesinatos.
De hecho la fraccin de Tito se encuentra ahora en estado de guerra contra su
partido. Slo los ciegos pueden no verlo. Si la fraccin de Tito se ha mostrado
incapaz de asegurar el orden en el partido por los mtodos democrticos
habituales y se ha visto obligada a recurrir a una represin en masa, esto
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significa que desde hace mucho tiempo ha perdido la confianza de la mayora
del Partido Comunista de Yugoslavia.
La fraccin de Tito no representa ms que una minora del Partido Comunista
de Yugoslavia, que se apoya no en la confianza del partido, sino en el aparato
administrativo y policiaco yugoslavo.
FIN
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Equipo de Bitcora (M-L)
Bitcora Marxista-Leninista