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6 PROPAGACIÓN DE VARIEDADES MEDIANTE INJERTO.

6.1 Definición:Una vez obtenido el patrón o portainjerto, por cualquiera de los métodos estudiados

y para terminar la formación de la planta, es preciso proceder al injerto con la variedad deseada. Según Hartmann “Injertar es el Arte de unir partes de plantas de tal manera, que se liguen y continúen su crecimiento como una sola planta”.

Se sabe que el prendimiento del injerto consiste en la unión de los tejidos de ambos individuos, sobre todo de los conductores, que evitan la desecación y muerte del injerto y hacen funcional la unión.

6.2 Condiciones para el éxito del injerto: Para que un injerto tenga éxito se han de cumplir los siguientes requisitos: Compatibilidad: la unión del injerto, para que sea funcional, solamente es

posible cuando las dos maderas son suficientemente afines o compatibles. Esta afinidad está siempre asegurada entre individuos de diferentes variedades de la misma Especie botánica; frecuentemente entre individuos de distinta especie, del mismo Género; casi nunca entre especies de diferente Género, aún siendo de la misma Familia; y nunca entre especies pertenecientes a familias distintas. A veces se producen “falsos injertos” y se pueden observar plantas de una especie viviendo sobre otra muy diferente: es frecuente que haya germinado una semilla de la primera en algún hueco del tronco relleno de polvo o tierra de la segunda, que actúa como maceta.

Proximidad: la unión de los tejidos correspondientes se lleva acabo con tanta más facilidad cuanto más cerca se encuentran, en especial los tejidos conductores y, en consecuencia, en cambium.

Época: para que se inicie la actividad meristemática necesaria para la soldadura del injerto es preciso que las plantas ( al menos el patrón ) se encuentre en un periodo de actividad vegetativa.

Protección: para evitar desecaciones y movimientos los injertos se protegen de diferente forma.

Cuidados: por último, los injertos deben cuidarse durante algún tiempo después de su ejecución.

6.2.1 Incompatibilidad:La incompatibilidad entre patrón y variedad puede ser total o parcial. En el

primer caso es inútil la ejecución del injerto, pues nunca va a prosperar. La incompatibilidad parcial puede ser de dos tipos:

Localizada, en el punto del injerto, en el cual se observa diferente grado de desarrollo de patrón y variedad, con la aparición de “miriñaques” ( bolsas de tejido de acumulación de substancias de reserva por encima del punto de injerto ) solas o acompañadas de falta de conexión entre las fibras de ambos. El primer caso ( Limonero/ Naranjo Amargo ) solo plantea un problema estético; por el contrario, en el segundo ( algunas variedades de Peral/Membrillero ) la unión tiene poca fuerza mecánica, siendo frecuente la rotura del tronco a los pocos años de cultivo. La incompatibilidad localizada se puede solucionar colocando un intermedio entre patrón y variedad, compatible con ambas maderas.

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Translocada, en la cual no se observan síntomas externos pero, el árbol se muere en el transcurso del primer año de cultivo en campo, cuando las raíces agotan las reservas acumuladas en el vivero, ya que el problema estriba en la falta de circulación de la savia elaborada a través del punto del injerto, hacia las raíces. No tiene solución.

Las causas de la incompatibilidad son múltiples, y se han citado las siguientes: Diferencias fisiológicas entre patrón y variedad, por ejemplo, en cuanto a la

época de la entrada en reposo invernal o del inicio de la actividad vegetativa en primavera. No parece muy probable. Diferencias bioquímicas, como ocurre en algunas combinaciones de Peral

sobre Membrillero que provocan incompatibilidades localizadas, se ha encontrado que del Membrillero pasa al Peral una substancia, la Prunasina, que es descompuesta por los tejidos del Peral produciendo Ácido Cianhídrico, el cual induce una disminución de la actividad del cambium en los tejidos del injerto, lo que limita la circulación de las savias. Las raíces del patrón, al recibir bajos niveles de azúcares, producen más Prunasina de lo normal, lo que acarrea la muerte de su floema. En algunas variedades de Peral existe un inhibidor de la enzima que descompone la Prunasina y son compatibles con los Membrilleros. Factores anatómicos, como ocurre en algunas combinaciones de

Peral/Membrillero, en las cuales se ha encontrado falta de lignina arriba y abajo del injerto con los cual sus tejidos solamente están unidos por fibras de celulosa resultando una unión poco resistente que se rompe con facilidad.

Como hemos apuntado, en el caso de algunas combinaciones de Membrillero/Ciruelo Mirabolan se ha encontrado falta de translocación de azúcares hacia las raíces.

6.2.2 Proximidad:Para que los cambiumes de patrón y variedad queden juntos es suficiente con

ejecutar el injerto siguiendo alguna de las recetas que veremos en el tema siguiente y que son fruto de muchos años de experimentación.

Los injertos se pueden clasificar en tres grupos: De yema, cuando la porción de la variedad es una o dos yemas y una pequeña

cantidad de corteza. De púa, cuando es un trozo de ramo con una o varias yemas. De aproximación, cuando los dos individuos se aproximan entre si, con sus

respectivos sistemas radiculares, cortándose las raíces de la variedad y la parte aérea del patrón cuando se comprueba que el injerto ha prendido.

Con los injertos ocurre algo similar a lo que ocurre con las estacas: deben prender con rapidez, para evitar que la yema o púa se desequen antes de haber podido conectar sus vasos con los del patrón. La ventaja que presentan, en este sentido, los injertos de aproximación es la misma que la de los acodos: al seguir conectada la variedad a sus raíces, dispone de todo el tiempo necesario para que el injerto agarre. No obstante, son injertos mucho más costosos que los otros dos, por lo que solamente se realizan cuando no hay más remedio.

6.2.3 Época:45

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En invernadero, los injertos se pueden realizar en cualquier época del año, en principio. Por el contrario, al aíre se pueden realizar:

Desde finales de invierno a principios de verano: estos injertos se denominan “a ojo velando”, lo cual significa que las yemas, al estar en fase de predormición, brotan si se elimina la dominancia del patrón.

Y desde finales de verano a principios de otoño, y se llaman “a ojo dormido”, ya que las yemas han entrado en fase de dormición y no brotan hasta al año siguiente.

Cada especie responde mejor a una época concreta y, por ejemplo, el Melocotonero se puede injertar muy pronto, en primavera, mientras que los Cítricos hay que esperar a finales de primavera-principios de verano.

6.2.4 Protección:Los injertos es preciso protegerlos, por tres razones: Para tapar las heridas producidas en el patrón y evitar la desecación de las

células expuestas al aíre. Para apretar y conseguir un mejor contacto entre variedad y patrón. Para evitar que la variedad se mueva, lo que pondría en peligro la soldadura del

injerto.Para proteger los injertos se usan diferentes materiales: Tiras de láminas de PVC. Rafia. Bandas de caucho. Tiras de láminas de estaño. Bandas de caucho con grapa. Pinzas. Mastiks, para cubrir injertos que dejan grandes superficies al descubierto.

6.2.5 Cuidados posteriores:Los cuidados posteriores que requieren los injertos, en especial los de “yema”, consisten en: La eliminación de las ligaduras, cuando no son autodestructibles, como las

bandas de caucho. La supresión del patrón por encima de punto de injerto, para eliminar la

dominancia de este y provocar la brotación de la yema de la variedad. Esto se puede hacer de dos modos: Cortando en cuanto se comprueba que el injerto ha prendido ( 20-25 días );

este sistema funciona bien, por ejemplo, en los Frutales de Hueso y Pepita. La eliminación gradual del patrón; en los Citricos o en los Rosales, por

ejemplo, la yema del injerto necesita que haya por encima un “tirasavias” para brotar, de forma que si se corta todo el patrón de una vez la yema no brota, mientras que si se va quitando fuerza al patrón con despuntes o doblando se va derivando la fuerza hacia la yema de la variedad; cuando el nuevo brote alcanza un cierto tamaño, se elimina por completo el patrón.

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6.3 Tipos de plantones:En la actualidad, en el caso concreto de los Frutales de Hueso, y más concretamente

en el Melocotonero, se confeccionan tres tipos de árboles: “De un año de injerto”, en los que la variedad se ha criado durante una

campaña o algo menos, ya que proceden de injertos realizados la campaña anterior ( a ojo dormido ) o en la misma campaña ( a ojo velando ).

“De injerto de Junio”, que se han injertado en la misma primavera, muy pronto. De tamaño inferior a los anteriores pero interesantes, ya que se pueden hacer por encargo, con importantes descuentos.

“A yema dormida”, que solo tienen la yema del injerto, como porción de variedad, ya que se han injertado a finales del verano. También se prestan a la fabricación por encargo y con descuentos interesantes.

RESUMEN Recordar que:

Para que un injerto tenga éxito: Debe haber suficiente afinidad entre las dos maderas. Deben quedar los tejidos afines muy próximos. Deben ejecutarse en una época propicia. Se tienen que proteger de las inclemencias del tiempo. Hay que cuidarlos durante algún tiempo.

En la actualidad, y en el Valle del Guadalquivir, se pueden producir tres tipos de plantones: De un año de injerto. De injerto de Junio. A yema dormida.

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