Caracas, 09 de julio del 2014Universidad Central de VenezuelaEscuela de ArtesTaller de expresión oral y escritaÁlvaro Rojas: 23.607.793Sección: “B”

El naturalismo del periodo de Ekhenaton

Una de las cosas que los artistas han aprendido de Amenofis IV y de lo que han de

agradecerle, es el nuevo amor a la verdad, la nueva sensibilidad e inquietud que reflejan un

estilo impresionista en el arte egipcio. Amenofis IV, es el primer hombre que hace del

naturalismo un programa consciente y lo opone como una conquista al estilo arcaico.

Se eligen motivos nuevos y se fomenta la representación de nuevas situaciones,

presentando también una vida espiritual e individual, bastante profunda, en el arte. Esta

superación se nota al ver intentos de perspectivas en sus dibujos, mayor coherencia en la

representación de grupos, un interés más vivo por el paisaje y una inclinación hacia la

pintura de escenas y eventos cotidianos, además de un gusto por las delicadas y graciosas

formas de las artes menores. A pesar de todas estas innovaciones, el arte aún mantiene su

aristocracia y las proporciones que van de acuerdo al rango social.

Se consigue a Amenofis IV en situaciones cotidianas acompañado de su familia, lo que

proyecta situaciones de intimidad que rompe los esquemas anteriores del arte, y aunque no

se le pinta como un dios, sigue viéndose como figura importante de la Corte.

El naturalismo dejó su huella en el arte egipcio, de hecho, se desarrolló tanto que los

medios expresivos del Imperio Nuevo era muy ricos y sutiles.

Con respecto a las clases sociales se puede decir que las obras mejor elaboradas estaban

destinadas para la Corte, mientras que la clase media alta, la cual todavía no estaba bien

definida, se conformaba con las obras más modestas. Los artistas y artesanos realizaban las

obras, las cuales nunca se aislaban del estilo oficial de las clases altas ya que estaban

estrictamente bajo la influencia de la Corte, generando una falta de interés por las mismas.

Según Heinrich Schäfer, la nobleza era representada de manera frontal y en estado de

reposo, mientras que el pueblo se representaba de manera activa y operante en todo

momento.

Las obras de gran importancia siempre provenían de la Corte real, mientras que las obras

que se realizaban en las provincias no eran tomadas en cuenta y eran consideradas como

decadentes para las altas clases sociales. Hubo un proceso de separación proveniente de la

Corte que produjo el surgimiento de la Nobleza Provincial, a las cuales estaba destinado el

arte realizado por el pueblo.