El Luchador...
2
El Libre Nunca me cansaré de luchar por ella, creo vale le pena morir por ella…déjate de tantos diálogos de superhéroe, estas balas son de verdad…también mi determinación de morir. La paraestatal esta cerrando el cerco, a cada momento llegaban más y más contingentes y algunos de ellos, además de sus toletes y escudos, cargaban entre sus manos la irreversible razón de una escopeta. Miguel estaba aferrado en la esquina de Galeana y Carranza, era su primera marcha, su primer día que decía lo que se le pegaba la gana. Nunca, y ello que pase con el toda la universidad, supe de sus convicciones políticas e ideológicas hasta ahora, en un momento bastante inapropiado. Miguel, vamonos ya- le repetí bastantes veces- te van a agarrar y te van a pegar una chinga No tengo miedo- mirándome a los ojos dijo. Todo fue un pinché error desde el inicio, desde el momento en que le creímos al pendejo del Matías No tiene caso que te quedes, los del podio salieron corriendo al primer empujón; ni sus palabras quedaron – y lo jaloneaba pues veía que se acercaban- Fue hasta la clase de sociopolítica latinoamericana que empezó a cambiar Miguel, y ello fue de manera muy rápida, vestimenta, lenguaje y amistades. De juntarse con los reservados y aplicados, se fue con los rebeldes de la facultad. Carlos, el Cuervo y Maribel, los miembros del NRI (Nueva Revolución de Izquierda), lo recibieron como a un camarada cuando se les unió en una conferencia – con gente como esta ganaremos- - este es de los bueno – y salio caminando junto con ellos. Meses después vi al mismo grupo si Miguel corriendo, salieron corriendo al primer embate, ni siquiera vieron cuando se rompió la barrera de guarnición formada por sus seguidores. Habrá sido veinte minutos después cuando cayo al Miguel y ni siquiera un segundo volvió a levantarse. Los gritos de libertad fueron
description
Cuento acerca de las luchas internas contra nuestras porpias debilidades
Transcript of El Luchador...
El LibreNunca me cansar de luchar por ella, creo vale le pena morir por elladjatedetantosdilogosdesuperhroe, estasbalassondeverdadtambinmideterminacin de morir. La paraestatal esta cerrando el cerco, a cada momentollegaban ms y ms contingentes y algunos de ellos, adems de sus toletes yescudos, cargabanentresusmanoslairreversiblerazndeunaescopeta.Miguel estaba aerrado en la es!uina de "aleanay #arranza, era su primeramarcha, su primer d$a !ue dec$a lo !ue se le pegaba la gana. Nunca, y ello !ue pase con el toda la universidad, supe de sus conviccionespol$ticas e ideolgicas hasta ahora, en un momento bastante inapropiado. Miguel, vamonosya% lerepet$ bastantesveces%tevanaagarrarytevanapegar una chingaNo tengo miedo% mirndome a los ojos dijo.&odo ue un pinch error desde el inicio, desde el momento en !ue le cre$mosal pendejo del Mat$asNo tiene caso !ue te !uedes, los del podio salieron corriendo al primerempujn' ni sus palabras !uedaron ( y lo jaloneaba pues ve$a !ue seacercaban%)uehastalaclasedesociopol$ticalatinoamericana!ueempezacambiarMiguel, y ello ue de manera muy rpida, vestimenta, lenguaje y amistades. *ejuntarse con los reservados y aplicados, se ue con los rebeldes de la acultad.#arlos, el #uervoyMaribel, losmiembrosdel N+, -Nueva+evolucinde,z!uierda., lorecibieroncomoauncamaradacuandoselesunienunaconerencia ( con gente como esta ganaremos% % este es de los bueno ( y saliocaminando junto con ellos. Meses despus vi al mismo grupo si Miguelcorriendo, salieroncorriendoal primerembate, ni si!uieravieroncuandoserompi la barrera de guarnicin ormada por sus seguidores. /abr sido veinteminutosdespuscuandocayoal Miguel yni si!uieraunsegundovolvialevantarse. Losgritosdelibertadueronsustituidospor el dialogorancoysincero de las balas, uno !ue no miente.Los del N+, dieron un conerencia de prensa mas tarde en la !ue nomencionaron a Miguel, solo hablaron de unos muertos y de larepresindelgobierno, decmoel golpismoestablecidosetragabalalibertadyyomepreguntaba 0y el Miguel1 Nada escuche ni le$ de el. 2n pobre iluso !ue creyoen la libertad, !ue lucho por ella, pero no por la suya, si no por la dictada poralguien !ue ni las manos se ensucia.3so trate de decirle ese d$a !ue estbamos agazapados, !ue no tenia sentido,!ue nos estaban manipulado, !ue habr$a otra manera de cambiar el atascadero!uevivimos, !uenoeslibertadtener !ueescoger entredosbandoy!uenosotros ten$amos la capacidad de crear uno nuevo. +ecuerdo claramente lo!ue me respondi ( cobarde% &al vez lo sea, pero a partir de esa marcha camino solo, sin cargar la libertadde la demagogia.La otra vez me tope en un bar al #uervo y a Maribel, nos tomamos un par derondas,
