Doctrina del shock en España

2
La “doctrina del shock” consiste en esperar a que se produzca una situación de crisis económica o una situación de shock, para después vender a los agentes privados que más ofrezcan los “trozos” de un país, donde la población se encuentra traumatizada y asume sin protestar unas “reformas inmediatas”. El economista Milton Fridman fue el primero en ponerla en práctica y según él, solo una crisis, bien sea real o bien sea percibida, puede dar lugar a un cambio verdadero, donde unos pocos suelen ser los interesados. En el caso de España el impacto que ha provocado la crisis en el conjunto social de nuestro país ha originado un vacío y una confusión que pueden ser aprovechados para dar un paso más en la privatización de muchos servicios públicos hasta ahora en manos del Estado, limitando nuestro precario estado de bienestar. En una situación de inseguridad y caos es mucho más fácil imponer soluciones poco consensuadas por la población que en épocas de prosperidad. Los objetivos, simplificando mucho, son claros: 1. Traspasar todo el poder económico a las grandes corporaciones y entidades financieras 2. Debilitar el poder de los ciudadanos 3. La desaparición de Estado del Bienestar, para conseguir una privatización en servicios que hasta ahora habían sido de uso público. La estrategia: 1. Desprestigiar el Estado del Bienestar, acusándolo de ser el causante de la crisis económica. Es decir, que nos olvidemos del origen real de la crisis. 2. Crear más paro a corto plazo para que se asuman las reformas como inevitables. El gobierno sería el único beneficiado de esto. 3. Enfrentar a los ciudadanos: parados-no parados; funcionarios-no funcionarios; españoles-inmigrantes; etc. De esta manera la población se encontraría en una situación donde solo vería enemigos.

Transcript of Doctrina del shock en España

Page 1: Doctrina del shock en España

La “doctrina del shock” consiste en esperar a que se produzca una situación de crisis económica o una situación de shock, para después vender a los agentes privados que más ofrezcan los “trozos” de un país, donde la población se encuentra traumatizada y asume sin protestar unas “reformas inmediatas”. El economista Milton Fridman fue el primero en ponerla en práctica y según él, solo una crisis, bien sea real o bien sea percibida, puede dar lugar a un cambio verdadero, donde unos pocos suelen ser los interesados.

En el caso de España el impacto que ha provocado la crisis en el conjunto social de nuestro país ha originado un vacío y una confusión que pueden ser aprovechados para dar un paso más en la privatización de muchos servicios públicos hasta ahora en manos del Estado, limitando nuestro precario estado de bienestar. En una situación de inseguridad y caos es mucho más fácil imponer soluciones poco consensuadas por la población que en épocas de prosperidad.

Los objetivos, simplificando mucho, son claros:

1. Traspasar todo el poder económico a las grandes corporaciones y entidades financieras

2. Debilitar el poder de los ciudadanos3. La desaparición de Estado del Bienestar, para conseguir una

privatización en servicios que hasta ahora habían sido de uso público.

La estrategia:

1. Desprestigiar el Estado del Bienestar, acusándolo de ser el causante de la crisis económica. Es decir, que nos olvidemos del origen real de la crisis.

2. Crear más paro a corto plazo para que se asuman las reformas como inevitables. El gobierno sería el único beneficiado de esto.

3. Enfrentar a los ciudadanos: parados-no parados; funcionarios-no funcionarios; españoles-inmigrantes; etc. De esta manera la población se encontraría en una situación donde solo vería enemigos.