Comparación y superación de las cosmogonías nahualt y polinesia por gn 1y2

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    ATENEO PONTIFICIO REGINA APOSTOLORUM

    Facolt di Teologa

    Comparacin y Superacin de las

    cosmogonas Nhuatl y Polinesia por

    Gnesis 1 y 2

    Professore: Pedro Barrajn

    Studente: lvaro Salvador Gutirrez Flix

    Matrcula: 00009872

    FE1001 Elaboratum para el 1er ciclo

    Roma, 16 aprile 2010

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    Introduccin

    A lo largo de esta investigacin trataremos de explicar la verdadera

    naturaleza y contenido de los mitos cosmognicos, cual es el mensaje profundo

    que est oculto en el fondo de los relatos y que es lo que quiere comunicarnos.

    Comparando los primeros dos captulos del libro del gnesis con la mitologa

    Nhuatl y una tradicin de la Polinesia, trataremos de extraer los elementos

    comunes que unen a todas las cosmogonas. Finalmente, explicaremos, como el

    gnesis, en su calidad de libro inspirado por Dios y a la vez de relato mtico,

    recoge y supera los relatos de la mitologa universal, dndoles la nueva luz de la

    revelacin del Dios verdadero.

    Capitulo I: Definicin y carcter Gnoseolgico del Mito

    En este captulo buscaremos definir los parmetros bajo los que

    compararemos los mitos, tomando atencin a lo que los que se dedican al estudio

    de los mitos advierten, La mayora de los discursos acerca del mito han

    adolecido de no determinar de antemano la nocin fundamental que se va a

    manejar por no hacerlo, se ha venido tergiversando la nocin de mito hasta lo

    inverosmil, y tratndose de ellos en sentido coloquial ha llegado a significar

    patraa, fantasa y resultado de una propaganda engaosa1.

    1. Definicin de Mito

    Para comenzar debemos decir que el mito tiene un lenguaje propio, icnico y

    concreto, donde los smbolos sustituyen a las palabras y en cierto sentido las

    supera, pues el lenguaje siempre pierde algo de su significacin cuando se traduce

    a algn otro lenguaje. el valor del mito como mito, por el contrario, persiste a

    despecho de la peor traduccin. La sustancia del mito no se encuentra en el estilo,

    ni en el modo de la narracin, sino en la historia relatada. El mito es lenguaje,

    1 L. CENCILLO,Los Mitos, sus mundos y su verdad, BAC, Madrid 1998, 3.

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    pero lenguaje que opera a en nivel muy elevado y cuyo sentido logra despegar del

    fundamento lingstico sobre el cual haba comenzado a deslizarse2.

    En cuanto a la nocin de la invencin, el mito, en su propia dimensin, es

    capaz de plasmar verdades sobre la realidad y las estructuras que ordenan a esta,

    esta capacidad no es exclusiva de la filosofa. Los mitos no se diferencian de la

    reflexin filosfica porque esta tienda a descubrir verdades y los mitos se

    centren en ficciones, sino por el tipo y calidad de los elementos formalizadotes y

    expresivos que una y otros emplean: icnicos y concretos en los mitos, abstractos

    y generalizadores en la filosofa y en las ciencias-3.

    Otro aspecto importante sobre el mito, es su carcter colectivo, los mitos no

    tienen un autor, no le pertenecen a un sujeto, sino que, son parte de la

    cosmovisin de un pueblo que responde profundamente al deseo natural del

    hombre de entender la realidad que lo rodea. Gracias a esta colectivizacin

    tradicional e inconsciente del mito se logra una genuina va de conocimiento, tal

    vez privilegiado, para realidades o relaciones poco inasequibles a la vida

    consciente y abstractamente reflexiva de este modo se captan unas constantesque de algunas maneras son reales, pero que a la reflexin racional de entonces, al

    menos, jams se le hubiera ocurrido4.

    He aqu la definicin de mito que propone Luis Cencillo: Formaciones

    cognitivo-expresiva de lo que un grupo (o la especie entera) supone actuar en el

    trasfondo de las manifestaciones paradjicas de su entorno natural o social, en

    calidad de causas, condiciones, o determinantes, como poderes metahumanos denaturaleza psquica5.

    As pues, viendo que el mito es un tipo particular de lenguaje, que busca dar

    respuesta a las inquietudes del hombre sobre la realidad que lo rodea, que es un

    producto de la colectividad y que su modo de comunicar no es abstracto, sino

    2 C. LEV-STRAUSS,Antropologa Estructural, Paidos, Barcelona 1995, 248.3 L. CENCILLO,Los mitos, 83.4

    Ibid., 14.5 Ibid., 11.

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    concreto e icnico; definiremos el mito como una explicacin filosfica y

    colectiva de la realidad, plasmada por medio de signos tradicionales concretos.

    Ahora, el tipo de mito en el que concentraremos nuestra atencin es el mito

    cosmolgico, que viene a ser dentro de todo el cuerpo de una mitologa, la parte

    donde se relata todo lo relacionado al origen y el orden del universo y la aparicin

    del hombre dentro de l.

    2. El Mitologema

    Ahora, sobre el modo de cmo se constituye un mito. Todo el tejido que dalugar a un mito est formado por lo que llamamos el mitologema. As pues, como

    en la biologa, las clulas son las unidades mnimas de los rganos, en la

    mitologa, el mitologema vendra a ser la unidad mnima del mito.

    Un ejemplo de ello venda a ser el elemento agua caos viento turbulento

    que son distintos mitologemas, que llevan de fondo el mismo significado en

    distintas mitologas. As pues el mitologema no funciona de modo aislado, tomasu verdadero significado al combinarse con otros y puede varias de regin a

    regin, siendo sin embargo, el mismo mensaje de fondo en una mitologa como en

    la otra. Los mitologemas son llamados smbolos mticos6 el mitologema,

    necesita de otros mitologemas para comunicar un mensaje, al igual que sucede

    con el lenguaje7.

    El mitologema surge de la vida cotidiana de un pueblo, no puede ser inventadode antemano, forma parte integral y profunda de la cosmovisin de un pueblo y se

    va elaborando poco a poco con el pueblo mismo, es por eso que puede comunicar

    de un modo tan profundo. Le mitologema se va elaborando cuando En el seno de

    la praxis colectiva se van determinando, identificando y localizando los objetos

    en cuanto tales y entre ellos los conjuntos estimulares sensibles que, por

    6

    Cf. L. CENCILLO,Los mitos, 53.7 Cf. Ibid., 66.

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    repeticin y asociacin, acabaron por convertirse en signos [] de ah resultaban

    mitologemas bsicos ypalabras8.

    En este sentido, los mitologemas en conjunto, vendran a ser el modo de

    lenguaje del mito de cada cultura que, para poder interpretarse de modo justo,

    necesitan tomarse como una unidad y leerse a travs de la ptica y la vida

    cotidiana del pueblo que les dio vida; Cuando consideramos un sistema de

    creencias, la pregunta que planteamos es sin duda: Qu significa todo esto? , y

    para responder a ella nos esforzamos por traducir a nuestro lenguaje reglas

    dadas primitivamente en un lenguaje distinto9.

    Otro aspecto a explicar al respecto es que un mitologema comn en una regin

    del planeta puede ser totalmente desconocido en otra regin. A este respecto,

    cuando falta un mitologema, surge otro, que siendo distinto, viene a encarnar el

    mismo smbolo, es lo que llamaremos un equivalente regional, pues Dada la

    creatividad y multivalencia de los cultos y las mitologas, un signo puede seguir

    en sustancia siendo el mismo, pero combinar cdigos diferentes10.

    Un ejemplo bastante claro al respecto es que en gnesis, el hombre viene

    formado del barro, cuando en la mitologa nahuatl viene formado del maz y en

    los pueblos celtas del roble. Mitologemas distintos que explican la misma

    realidad, el hombre, en su parte corprea pertenece al mundo material, est ligado

    al universo que lo rodea ntimamente, y curiosamente, el mitologema est siempre

    unido a la fuente de subsistencia del hombre.

    3. Las Constantes Mticas

    Una comparacin simple a vuelo de pjaro deja claro que hay una increble

    similitud entre los mitos cosmognicos, el tratar de dar respuesta a esta similitud

    8 L. CENCILLO,Los mitos, 69.9

    C. LEV-STRAUSS,Antropologa, 27.10 L. CENCILLO,Los mitos, 55.

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    es lo que ha impresionado a tantos estudiosos de las religiones antiguas y de los

    mitos. Por ejemplo, Lev-Strauss comenta:

    S el contenido del mito es enteramente contingente, Cmo comprender que,

    de un extremo al otro de la Tierra, los mitos se parezcan tanto? Slo si se toma

    conciencia de esta antinomia fundamental, que pertenece a la naturaleza del mito,

    se puede esperar resolverla11.

    Luis Cencillo se hace la misma pregunta:

    Si los mitos fuesen un intento fallido de explicaciones desinformadas, de loque no se sabe, Cmo es posible que, en todo el mundo y a lo largo de milenios,

    etnias muy diferentes hayan manejado las mismas unidades de significado,

    cuando esto ni siquiera sucede en el fenmeno de las lenguas y los lenguajes?12.

    Y tomando esto como un argumento a favor del contenido de verdad de los

    mitos afirma que Esta sistematicidad [] es una garanta de que los mitos no son

    invenciones caprichosas sino formaciones expresivo-comprensivas necesariasde la vida psquica de la especie humana, cuando todava no dispona ni de

    reflexin filosfica formalizada ni de modernizaciones cientficas13.

    A este tenor podemos ver como la mitologa universal es tan unitaria, y donde

    a grandes rasgos, dentro de la similitud de extraen tres grandes grupos de mitos:

    1) un numen ordenador a partir de la palabra o poder, 2) presencia del huevo

    csmico (o elemento redondo como una concha o crneo), 3) origen del cosmos apartir de las partes del cuerpo de un numen.

    Hay que decir tambin que el mito no es una explicacin aislada de las

    culturas y que por casualidad se parecen en algo, sino que todos los mitos tengan

    una fuente comn que seguramente sea que el mito, por ser una explicacin de la

    11 C. LEVI-STRAUSS,Antropologa..., 231.12

    L. CENCILLO, los mitos, 143.13 Cf. Ibid., 16.

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    realidad tan antigua, pertenece a los primeros grupos humanos. Es ms factible

    que hayan heredando la misma tradicin desde las primeras comunidades Esto se

    llama monofilesis, es decir, un principio comn de todos los hombres

    Hay una explicacin suplementaria conocida como la de la revelacin

    adamtica, que la revelacin dada a los primeros progenitores humanos de modo

    directo, dio a los seres humanos algunas aspiraciones y explicaciones comunes de

    la realidad que se fueron transmitiendo a las generaciones posteriores y por lo

    tanto a todas las culturas humanas14. Sin embargo la menciono mas como una

    curiosidad que como ncleo del tema

    En conclusin la constante mtica es un hecho que no se puede negar y que a

    la vez requiere una explicacin, pero elimina toda posibilidad de azar. Esta

    adems le da a los mitos una solidez y coherencia que deja adivinar que algo de

    verdadero hay al fondo de todos ellos.

    4. El Mito como Fuente de Conocimiento

    Es necesario ahora explicar el modo y las condiciones por las cuales el mito es

    capaz de comunicar verdades de carcter profundo, sea existencial o metafsico.

    En primer lugar, sabemos que las lenguas arcaicas suelen carecer de muchos

    trminos abstractos que hay en las lenguas elaboradas, sin embargo, esto no

    elimina del hombre antiguo la capacidad de conocer estas realidades y la

    tendencia natural de su inteligencia de conocer y comunicar la verdad. De hecho

    Que el hombre todava no posea los elementos para expresar una idea, como elnio que an no habla, no quiere decir que lo que intenta comunicar carezca de

    verdad o sea una fantasa. El nio es capaz de constelar una serie de posibilidades

    y de hiptesis aun antes de pronunciar y de construir correctamente frases15.

    14 B. Amore, Mito e Metafisica, inPensiero mitico, metafisica, anlisis Della esperienza,

    Brescia 1969, 281.15 L. CENCILLO, los mitos, 61-62.

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    De la misma manera el hombre de pocas antiguas, si bien quiz no tuvo un

    lenguaje tan elaborado o un conocimiento filosfico, pero no careca de medios,

    distintos de los nuestros para penetrar la verdad, as lo afirma Maritain: En el

    hombre primitivo el intelecto est, de un modo general, implicado y dependiente

    de la imaginacin y de su mundo salvaje. A esta clase de rgimen mental

    corresponde un conocimiento de la naturaleza experimentado y vivido con una

    intensidad tal que no podemos imaginar fcilmente16. Es decir un modo de

    conocimiento, distinto pero no menos til para conocer la realidad. Quiz en ese

    sentido esta fue la funcin del mito: penetrar en las causas ltimas. Si bien, no an

    a la luz de la razn pura, sino auxiliada por la imaginacin, la cual no es sinnimo

    de fantasa o invencin pura.

    Esto refleja que el mito busca responder a una pregunta profunda del hombre,

    es decir que il mito, in quanto radicato nel mistero e considerato non come

    semplice fantasticare a vuoto, corrisponde allesigenza dalluomo, in ogni epoca,

    della presentazione per imagini dellessere o del mistero e, in ultima anlisis

    dellassoluto.17. alle volte il mito precede il ragionamento offrendosi come

    intuizione di una verit rezionale Della quale constituisce come un abbozzo. Il

    mito oltrepassa il racionamiento presentandosi come intuizione di una verit

    superiore18. il nucleo di una verit che non si dimostra ma si mostra19.

    En este sentido, el mito no puede darse el lujo de la mera invencin, sino que

    se apega a las leyes naturales de la razn y exige un orden a la hora de explicar la

    realidad, si bien de modo icnico y simblico, con todo el rigor y coherencia de la

    misma filosofa. A esto puede darnos luz la siguiente cita:

    esta exigencia de orden se encuentra en la base del pensamiento que llamamos

    primitivo, pero slo por cuanto se encuentra en la base de todo pensamiento

    cada cosa sagrada debe estar en su lugar, observaba con profundidad un

    pensador indgena. Inclusive, podramos decir que es esto lo que la hace sagrada,

    16 J. MARITAIN,Filosofa de la Historia, Troquel, Buenos Aires 1971, 93.17 G. MASI, Ragione del mito e mito de la ragione, inPensiero mitico, 203.18

    Ibid., 206-207.19 Ibid., 209.

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    puesto que al suprimirla, aunque sea en el pensamiento, el orden entero del

    universo quedara destruido; as pues, contribuye al ocupar el puesto que le

    corresponde20

    Siguiendo esta misma lnea, no podemos distinguir entre las facultades

    intelectivas del hombre primitivo y el hombre moderno, los mtodos son distintos

    pero las facultades son las mismas. De igual modo el deseo de conocer la verdad

    fue igual de exigente en la antigedad como lo es hoy en da. As lo explica Lev-

    Strauss: la lgica del pensamiento mtico nos ha parecido tan exigente como

    aquella sobre la cual reposa el pensamiento positivo tal vez un da descubramos

    que en el pensamiento mtico y en el pensamiento cientfico opera la mismalgica, y que el hombre ha pensado siempre igual de bien.21 Y en el mismo tenor

    de este podemos concluir que il mito ha difatti il compito di conferire un senso

    alla essistenza umana, e lesigenza di questo senso non oggi meno intensa di

    quella dei tempi primitiviin cui luomo cercava di giustificare la stessa situazione

    propia nel mondo Della natura.22

    De este modo concluimos que el mito es capaz de comunicarnos unaexplicacin verdadera de la realidad, aun a nivel metafsico y antropolgico, que

    es una respuesta para el hombre de la cultura en que fue elaborado, para la

    respuesta fundamental de la existencia.

    Captulo II: Comparacin de las Cosmogonas

    20 C. LEV-STRAUSS,El Pensamiento Salvaje, FCE , Mxico 1975, 25-26.21

    C. LEVI-STRAUSS,Antropologa, 252.22 G. MASI, Ragione del mito e mito de la ragione, inPensiero mitico, 214.

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    Ahora, antes de continuar la lectura recomendamos leer las mitologas de las

    que nos basaremos, las colocaremos al final del trabajo en el apndice. De esta

    comparacin hemos concluido nueve elementos comunes que expondremos a

    continuacin:

    1. Estado Catico del universo

    Este es el elemento comn por excelencia de las cosmogonas, en este caso Gn.

    habla de que todo era caos y confusin y del espritu que aleteaba sobre las

    aguas, los nhuatls hablan de que al inicio se estancaron la tierra y el cielo,dando a entender un estado anterior donde todo estaba confuso, una cosmogona

    afn a esta habla del ao de la oscuridad; por su parte la cosmogona polinesia

    habla de que la oscuridad exista desde siempre.

    Los tres en conjunto hablan de un mitologema que significa indeterminacin,

    confusin, algo carente de toda forma u orden. Esto podramos traducirlo a la

    nocin de materia prima que nos ensea la metafsica. Y en este sentido estotalmente coherente que el elemento a partir del que todo se ordena y toma forma

    sea la materia prima, aunque venga expresado en otros smbolos.

    2. Una realidad temporal distinta

    Este apartado viene un poco entre lneas, Gn. Habla de que en el principio, y

    bien sabemos, que en este estado, el mundo y el hombre estaban en una situacintotalmente distinta a la actual. Algunos textos nhuatls hablan del tiempo nahual,

    distinto al tiempo tonal, que es el que rige nuestro mundo, sin embargo en el texto

    estudiado habla claramente de soles que indican realidades temporales

    totalmente distintas. En cuanto a la mitologa polinesia, llama al periodo de la

    creacin, tiempo de los sueos haciendo la divisin de los tiempos en el

    momento en que Papa y Rangi son separados de su abrazo y su descanso.

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    Traducido a lenguaje filosfico, sabemos que antes de la creacin todo est en

    un momento atemporal, pues el tiempo es la medida del movimiento y tiempo y

    mundo inician a existir en el mismo instante. As pues, antes de que los seres

    reciban forma, no puede hablarse de cambio y por lo tanto tampoco de tiempo.

    3. La presencia de un numen animado que contrasta con el caos

    En Gn Dios crea, pero su espritu ya se mueve sobre las aguas; para los

    polinesios, Areop-Enap, la araa antigua, coexiste desde siempre junto a la

    oscuridad; y en la mitologa nahuatl, si bien no es explcita al respecto,deja claro

    que cada sol es un Dios que ha decidido iluminar y dar lugar a la existencia y porlo tanto, los Dioses son anteriores al orden, pero coexisten con esa tierra y cielo

    que aun no se ha estancado.

    A este respecto cabe decir que junto a la materia prima, que es potencia pura,

    es necesario que halla un acto puro que la actualize y la informe; y como sabemos,

    uno de los atributos de Dios es el ser acto puro de ser23, un primer motor que

    ponga en movimiento el mundo que se halla en total indeterminacin y confusin.Las mitologas solo llegan a poner en paralelo el numen al caos, mas delante

    hablaremos de la precedencia.

    4. El ordenamiento del Caos por parte del Numen

    Este punto es demasiado obvio, el orden del universo, en ninguna de las tres

    mitologas se da por si solo, siempre por parte de la divinidad que coexiste alcaos, ya sea Yahv en Gn. o los distintos soles con los nhuatls, o Areop-

    Enap con los polinesios

    Este punto gira en torno a dos principios, la relacin de acto y potencia y la

    tesis el orden es seal de inteligencia. Continuando la lnea del postulado

    anterior el caos/potencialidad no puede ponerse en acto por s mismo, por razn

    23 S. THOMAS AQUINAS, S. Th. I, q.2, a.3

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    del principio de razn suficiente, nada puede producir un efecto superior a su

    naturaleza, la materia prima no tiene modo de actualizarse por s misma, es por

    eso que se necesita de un numen/acto puro que actualice la potencialidad que en

    ella se encuentra. El universo, que es orden, no puede comenzar a moverse por s

    mismo, pues los seres materiales que lo componen no tienen en su naturaleza un

    principio suficiente para ordenarlo; es necesario que el principio de su orden se

    situ fuera de l, fuera del caos original.

    5. El Acto ordenador es primordialmente antagnico al Caos

    El primer acto del creador en Gn. Es el sea y mas en concreto, sea la luzcomo oposicin a la oscuridad primordial. Tambin para los nahualt, el primer sol

    es el sol de agua, Atonatiuh, ligado al mitologema primordial del agua. Y para

    los polinesios, el acto primordial de Areop-Enap es el hacer espacio es una

    realidad donde todo estaba mezclado con todo y no poda existir.

    En este sentido, metafsicamente al darse la creacin se dan dos movimientos

    simultneos que se distinguen slo de modo lgico: primero, es numen ordenador,pasa la materia como tal de la potencia al acto, pero en segundo momento

    especifica el acto dndole una forma especfica dotada de gnero y especie. En

    este primer momento, slo en sentido lgico, el numen, pasa la materia de la

    potencialidad pura al acto, pero an no especifica la forma dada en el acto.

    6. El Orden es Secuencial24

    Este elemento de igual modo es evidente, en las tres cosmogonas la creacin

    de las creaturas animadas presupone la creacin de otras realidades donde estas se

    sostienen, la tierra, el firmamento, etc. as en Gn se inicia por la luz y por la

    sucesin de da y noche para seguir con la tierra y los seres animados. Siendo

    unos seres, causas de los siguientes.

    24 Cf. CEC 337.339

    12

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    En este sentido, las tres mitologas sealan que el numen es si causa primera

    del orden, pero en un segundo momento, las mismas realidades creadas son causas

    segundas para la aparicin de las dems, la especificacin del orden en formas

    concretas se va dando de modo natural a partir del movimiento y el ordenador se

    vale de las creaturas para poder informar a las siguientes25.

    7. Enumeracin, generalmente gradual, de las realidades creadas

    En consonancia al punto anterior las creaturas adems de ser causas las unas

    para las otras, van apareciendo gradualmente segn el grado de perfeccin, as,

    toda la creacin siempre culmina en la aparicin de la creatura mas perfecta, elhombre. el grado de perfeccin se explica por la capacidad de actualidad de una

    esencia, as entre mas acto y menos potencia tiene una creatura, mas perfecta

    resulta. La presencia del numen sin embargo sigue siendo necesaria pues cada ser

    no puede causar perfecciones mayores a su propio ser por si mismo, esto se llama

    principio de razn suficiente, as, a partir de los entes anteriores, el ordenador,

    va causando perfecciones mayores a travs de los seres ya existentes.

    As es como vemos que en la mitologa polinesia todo empieza por hacer

    espacio y luz y luego la tierra, el cielo y los mares, despus las plantas y seres

    animados y por ltimo el hombre, las otras dos mitologas son igual de claras al

    respecto y siguen mas o menos el mismo orden, hasta terminar las tres con la

    creacin del mayor grado de perfeccin del mundo material, el hombre.

    8. Creacin del Hombre por Intervencin directa del numen

    Aqu vemos como en Gn. Dios ya no dice sea sino hagamos, y el mismo da

    forma y da su espritu al hombre, hacindolo a imagen y semejanza suya. Los

    nhuatls por su parte, muestran la preocupacin de un ser que pueda habitar la

    tierra y para crearlo se sirve de huesos (realidad perecedera) y de su misma

    sangre y el sacrificio de los dioses, ya no simplemente de un sol y llevar al final la

    25 Cf. CEC 340

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    destruccin de los seres. Los polinesios pos su parte en esta tradicin no

    especifica como viene a ser el hombre, pero este surge de la unin de Papa y

    Rangi, es decir, una creatura de linaje celeste y no un simple producto mas del

    proceso de orden de la araa antigua

    Ahora, en lenguaje metafsico esto nos manifiesta primero, que el hombre, en

    su aspecto corpreo, comparte la misma naturaleza del universo (materia prima),

    pero en su modo de ser profundo, su alma le viene dada directamente del numen y

    comparte con el una afinidad (forma sustancial). as el hombre viene a ser un

    compuesto de cuerpo y alma, donde, el alma le viene dada directamente por Dios

    y el cuerpo del mundo material26.

    9. Delimitacin de la propiedad y sustento del hombre

    Este tema, si bien ser ausente en la mitologa polinesia, en Gn est bien

    delineado, Dios bendice al hombre, le da un jardn para habitar (propiedad) y le da

    por alimento los animales y las plantas (un sustento). Los nhuatls sealan como

    los dioses luego de crear al hombre se preocupan por su sustento, Qu comernlos hombres, oh dioses?, la propiedad, esta insinuada en la preocupacin de

    alguien que habite la tierra, no en el sentido que ya lo hacan los animales y las

    plantas, sino alguien que la habite y la posea.

    La esencia del hombre se delimita por la materia, la forma y la cuantidad

    signada, pero la esencia, es decir, lo que hace que una cosa sea lo que es, a su vez

    limita al acto de ser a la potencialidad especfica de dicha esencia y esto determinaque tipo de perfecciones puede o no puede recibir dicho ser. As un ente se

    determina por su esencia y esta se define con los conceptos de gnero y especie.

    El gnero es una nota general del modo de ser del este, pero que puede ser

    compartida con otros entes y la especie es la nota caracterstica que distingue al

    ente de todos los dems. As en este caso, el hombre se define, por su gnero y

    especie como un animal racional.

    26 Cf. CEC 355

    14

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    Precisamente esto es lo que delimita esta parte de la cosmogona, al presentarle

    al hombre un sustento determinado, esta determinando sus perfecciones, le otorga

    un gnero. Al leer:

    Ved que os he dado toda hierba de semilla que existe sobre la haz de toda la

    tierra, as como todo rbol que lleva fruto de semilla; para vosotros ser de

    alimento. Y a todo animal terrestre, y a toda ave de los cielos y a toda sierpe de

    sobre la tierra, animada de vida, toda la hierba verde les doy de alimento27.

    La cosmogona se est refiriendo principalmente a las funciones corpreas de

    la naturaleza humana, se decir, su gnero animal. As el numen que primero leinfunde un alma tambin determina por su esencia su gnero al momento de

    otorgarle un sustento.

    Del mismo modo al otrgale una propiedad est determinando sus funciones

    espirituales pues la propiedad es un vnculo psquico que slo pueden lograr los

    hombres, a esto se refiere el pasaje: Sed fecundos y multiplicaos y henchid la

    tierra y sometedla; mandad en los peces del mar y en las aves de los cielos y en

    todo animal que serpea sobre la tierra28

    Les da propiedad y autoridad29, que son relaciones psquicas en primer grado y

    corpreas en segundo, por esto entendemos que el numen est delimitando la

    facultad racional del hombre.

    Estos son los nueve puntos comunes que con mitologemas distintos, se hallan

    presentes en las tres cosmogonas estudiadas, y en las cosmogonas en general.

    Como se puede observar son sorprendentemente afines a la metafsica clsica yestudiados desde esa ptica, se podra afirmar que son una respuesta elaborada

    colectivamente por el hombre a la pregunta del sentido de la existencia propia y

    del mundo. Una explicacin, quiz, tan antigua que en smbolos distintos ha

    permanecido inmutada a lo largo de siglos y distancias tan lejanas. Pero a su vez

    27 Gen 1,2928

    Gen 1,2829 Cf. CEC 358

    15

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    como afirmbamos en el primer captulo, una respuesta que si bien simblica, no

    carece de rigor lgico.

    Captulo III: Superacin de la revelacin sobrenatural de Gnesis

    respecto a las otras cosmogonas

    Ahora estudiaremos los mismos nueve puntos desde una ptica distinta; el

    gnesis es un libro inspirado y contiene, adems de la revelacin natural, o

    adamtica que le confiere su origen mtico, las verdades que le han sido

    transmitidas por la revelacin sobrenatural. En este sentido, Gn. Estando an en

    armona con el resto de las cosmogonas como ya qued demostrado, las supera y

    da luz a puntos cruciales del modo de entender la realidad. Puntos que, ya sea que

    le dan su justo sentido al modo de entender el creado, o nos hacen entender el plan

    original de Dios para el hombre y su relacin con el universo.

    En este apartado nos separaremos un poco de slo lo que dice Gn. y tendremos

    en mente tambin, las nociones o explicaciones que la tradicin de la Iglesia y los

    dems libros de la S.E. han hecho sobre el misterio que encierra el primer libro de

    la Biblia. De igual modo, algunas explicaciones de las otras cosmogonas las

    haremos a partir de la cosmovisin y no solo del texto de la cultura.

    1. La Nada como estado inicial de la materia

    Las otras mitologas siempre presentan el caos, el agua u otro smbolo comoestado original del mundo, pero ninguna logra llegar a la nocin de la nada, es

    decir, concebir la idea de que nada puede coexistir o preceder a la divinidad. As

    lo vimos en la mitologa polinesia y azteca, donde la oscuridad o la tierra y el

    aguas aun sin estancarse coexisten a la divinidad como estado de las cosas.

    Tenemos que ser justos y decir que en Gn 1 no se habla explcitamente de

    creacin ex nihilo, sin embargo el la frase que abre el relato de la creacin lo

    16

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    deja insinuado en una manera bastante clara para la mentalidad hebrea, as lo

    explica el catesismo: "En el principio, Dios cre el cielo y la tierra": tres cosas se

    afirman en estas primeras palabras de la Escritura: el Dios eterno ha dado

    principio a todo lo que existe fuera de El. Slo El es creador (el verbo "crear" -en

    hebreo "bara'"- tiene siempre por sujeto a Dios). La totalidad de lo que existe

    (expresada por la frmula "el cielo y la tierra") depende de Aquel que le da el

    ser.30 El catesismo es claro al explicar, como el trmino el cielo y la tierra es

    anterior aun a la mencin del caos y confusin, por lo que Yahv precede aun a

    este caos primordial de las cosmogonas. Otro apartado ya tocado es del uso del

    verbo ar"B', (Br) que es atribuido slo a Dios y que explcitamente

    significa crear no fabricar o dar forma.

    Por ltimo queremos hacer mencin al texto de (2Mc 7,28) donde ya se hace

    mencin explcita de la nocin de la nada como estado de proveniencia de la

    creacin. Pues si bien Gn 1,1 no especifica esto, este pasaje demuestra que la

    nocin de la nada era un elemento comn de la cosmovisin hebrea.

    2. Un estado de atemporalidad y de gracia original

    Como vimos las mitologas presentan la nocin de un tiempo mtico distinto

    al tiempo cronolgico en el que vivan cotidianamente. En este sentido Gn

    presenta a Yahv anterior haciendo eco en las palabras de Pablo l existe con

    anterioridad a todo y todo tiene en l su consistencia (Col 1, 17). Y s, como

    dejamos claro arriba, Gn. Presenta a Yahv anterior a la realidad creada, Yahv

    tiene que haber existido en un estado de atemporalidad o eternidad, pues el tiempoel la medida del cambio y en l no existe cambio alguno.

    En cuanto al estado original del creado31, si bien no puede estar inmerso en la

    atemporalidad ni en la eternidad, el relato del segundo y tercer captulo de gnesis

    nos dejan claro que la realidad del mundo era distinta. El hombre tenia una

    30

    CEC 29031 Cf. CEC 375

    17

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    relacin estrecha con Dios y con el mundo y no haba sufrimiento ni fatiga32, en

    decir, lo que conocemos como el estado de gracia original, no un tiempo esttico y

    sin cambio, sino un mundo donde la caducidad del pecado no haba roto las

    relaciones del hombre con Dios, con l mismo y con su entorno.

    3. Yahv antecede al caos y confusin

    En lnea con lo explicado ya anterior mente, mientras las otras cosmogonas

    presentan al numen paralelo al caos primordial, Yahv la precede, l, repitiendo la

    frase de (Col 1,17) existe con anterioridad a todo si Dios es, en nuestras

    nociones metafsicas, acto puro de ser, no deja lugar a la existencia de cualquiertipo de potencialidad que le coexista. En este sentido Yahv no es un numen que

    contrasta y ordena el caos sino que lo antecede y lo crea

    4. Creacin y luego ordenamiento por parte de Yahv

    Aunque pudiera parecer idntico al tema anterior, hay un ligero matiz diverso,

    las mitologas presentan el orden de la accin divina como una secuencia deorden; en cambio Yahv, primero crea, luego ordena33. No en un sentido de

    secuencia, pues la materia prima no puede existir sin formas concretas, sino de

    modo lgico pues primero da lugar a la materia prima, a la que individa dndole

    formas determinadas. La importancia de este punto es precisamente esa, que

    Yahv no es un simple ordenador, sino que tambin es la causa originaria del

    mundo material.

    5. El acto primordial de Yahv es antagnico al no-ser

    Tanto Nhuatls como polinesios resaltan que el primer acto ordenador es hacer

    luz sol de agua, atonatiuh o hacer espacio y luego poner un ser que ilumine.

    32

    Cf. CEC 377-37833 Cf. CEC 337

    18

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    Es decir el acto antagnico a la oscuridad o la confusin que deriva de esta. En

    cambio en Gn es acto, antes que este, que tambin viene explicado es el de dar ser

    al no-ser sea la luz es decir, que venga al ser la luz, pero antes que nada, que

    venga al ser lo que antes era no-ser, es decir sea34.

    Luego de este momento primordial de das el ser se contina con el

    ordenamiento del cosmos, pero es importante resaltar el profundo matiz

    metafsico que distingue a Gn del resto de las cosmogonas a este respecto. Antes

    de ser esto o lo otro, se necesita que algo sea.

    6. Particularidad de la secuencia creadora de Gn 1

    Las tres mitologas presentan una secuencia, bastante parecida de las cosas

    creadas, sin embargo, la secuencia de Gn tiene una particularidad pues pone en el

    cuarto da la creacin de los astros, cosa que en las dems constituye uno de los

    primeros actos del orden del cosmos.

    La respuesta es simple pero importante, las mitologas conciben a los astroscomo divinidades, por eso deben de ser de las primeras cosas que vienen a

    diferenciarse del caos, como la babosa que la araa antigua convierte en la luna

    para que de luz, o la necesidad de los Nhuatls de un sol que ilumine para que

    todo pueda venir a ser. En cambio en Gn. El sol y la luna son vistos como simples

    creaturas, por eso se les da un lugar posterior a la luz, las tinieblas, las aguas y el

    firmamento, porque tambin ellos, en su condicin de simples creaturas necesitan

    de estos har existir. Indirectamente Gn. Tambin quiere resaltar que estos astrosno son dignos de culto, sino instrumento para las fiestas en las que se da culto al

    Dios verdadero.

    7. La creacin est finalizada a la aparicin del hombre35.

    34

    Cf. CEC 33835 Cf. CEC 342

    19

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    En la mitologa polinesia se narra la creacin del mundo y luego el origen del

    hombre, pero no se hace un nexo necesario entre ambos, en la cosmogona nhuatl

    se crea el mundo y luego se hacen la pregunta sobre la necesidad de que alguien lo

    habite, pero tampoco se deja como una intencin desde el principio.

    En Gn 1 en cambio desde de tercer da empieza a insinuar una intencin en la

    creacin, pues si bien haba dado nombre al cielo y a la tierra, a las creaturas las

    deja sin nombre, es decir, que piensa entregar su dominio a algn otro. Esto se

    reafirma en la expresin de Dios al final de cada acto creador vio que era

    bueno, pero al crear al hombre exclama vio que era muy bueno, el colocarlo al

    final de la creacin junto a este gesto deja claro que l es a finalidad de lacreacin36, pues de nada sirve un mundo si no hay en es un ser con espritu que lo

    conozca. El otro hecho que reafirma esto es que Yahv le entrega los seres para

    darles nombre, es decir, para ser su seor; este acto deja a entender que no piensa

    crear mas creaturas despus del hombre, pues no le dara el seoro a una creatura

    de una obra si no esta terminada.

    8. Creacin del hombre en un estado de amistad y alianza

    Los polinesios no sealan, fuera de que los hombres vienen de la unin de Papa

    y Rangi, una relacin especial entre estos y los dioses. Los Nhuatls tienen una

    narracin particularmente bella, pues los hombres vienen de la sangre del

    miembro del dios y los dioses hacen sacrificio para que los hombres existan, sin

    embargo entre ellos no hay una relacin de amistad, sino de necesidad, los

    hombres necesitan ofrecer sangre a los dioses para que estos tengan fuerza y losdioses buenos, necesitan de los sacrificios humanos para poder seguir

    prevaleciendo al mal, mas que amistad es una relacin de necesidad. Otras

    mitologas narran como el hombre es creado para la esclavitud, para servir a los

    dioses, como la babilonense, o que el hombre no escapa a la voluntad de los

    dioses como la griega.

    36 Cf. CEC 443

    20

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    En los dos relatos del gnesis se deja ver como Dios entabla una relacin de

    amistad con el hombre pasea por el jardn y habla con el hombre y es muy claro

    en el modo en el que crea al hombre a imagen y semejanza. Tambin comparte

    con l el dominio sobre la creacin, hacindolo partcipe de su autoridad.

    A diferencia de todas las cosmogonas conocidas el hombre goza de una

    amistad estrecha con Dios, y este crea al hombre para amarle37. La posterior cada

    tiene lugar a causa del hombre y no por miedo o envidia de los dioses cono en

    otros relatos, el plan original de Dios es vivir en esa amistad y para ese fin crea al

    hombre.

    9. Participacin del hombre en la bendicin y seoro de Yahv

    Como veamos en el relato de los soles, el hombre surge de los huesos del

    inframundo y de la sangre y el sacrificio de los dioses, sin embargo a este, no se le

    otorga ninguna participacin del mundo divino, o algn otro beneficio.

    En Gn. El hombre, adems de ser creado en amistad y a imagen de Dios, este leparticipa la potestad de dominio sobre los dems seres de la tierra mandad en los

    peces del mar y en las aves de los cielos y en todo animal que serpea sobre la

    tierra (Gn 1,28), es decir que el hombre participa en cierta medida del poder de

    Dios38.

    De igual modo le bendice, Y bendjolos Dios, y djoles Dios: Sed fecundos y

    multiplicaos y henchid la tierra y sometedla (Gn 1,28), al bendecirlos dejamanifiesta la relacin de amistad y de amor que Dios desea para con el hombre,

    no lo ve como un esclavo o como una amenaza, sino como un igual con el que

    quiere relacionarse y compartir sus privilegios. El hombre imagen y semejanza

    esta invitado a participar de todos los beneficios que Dios le participa y de la

    misin de gobernar y someter a las creaturas.

    37

    Cf. CEC 35838 Cf. CEC 374.377

    21

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    Conclusin

    Hemos visto pues como Gn y las otras dos cosmogonas son muy similares

    entre s si se interpretan sus elementos mticos en un lenguaje metafsico, y cabe

    decir, que estas slo son una muestra de la coherencia que muestran todas las

    cosmogonas entre si.

    Concluimos que las cosmogonas, de modo icnico y concreto presentan una

    explicacin metafsica de la constitucin del universo para dar respuesta a la

    pregunta del sentido del hombre y del cosmos. Pero tambin hemos llegado a la

    conclusin de que Gn, si bien tambin esta permeado del bagaje mtico universal,

    tambin se despega totalmente de l dando una luz mas profunda a la pregunta de

    la existencia, luz que le viene de la revelacin sobrenatural. As pues, las

    mitologas comparten todas una tradicin comn transmitida muy probablemente

    desde la primera comunidad humana, sin embargo Gn, enriquece esta tradicin

    comn con los elementos que le ha regalado la revelacin sobrenatural de Dios.

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    Apndice

    1. Cosmogona Israelita, Tradicin Yavista

    En el principio cre Dios los cielos y la tierra. La tierra era caos y confusin y

    oscuridad por encima del abismo, y un viento de Dios aleteaba por encima de las aguas.

    Dijo Dios: Haya luz, y hubo luz. Vio Dios que la luz estaba bien, y apart Dios la

    luz de la oscuridad; y llam Dios a la luz da, y a la oscuridad la llam noche. Y

    atardeci y amaneci: da primero. Dijo Dios: Haya un firmamento por en medio de las

    aguas, que las aparte unas de otras. E hizo Dios el firmamento; y apart las aguas de por

    debajo del firmamento, de las aguas de por encima del firmamento. Y as fue. Y llam

    Dios al firmamento cielos. Y atardeci y amaneci: da segundo.

    Dijo Dios: Acumlense las aguas de por debajo del firmamento en un solo conjunto,

    y djese ver lo seco; y as fue. Y llam Dios a lo seco tierra, y al conjunto de las aguas

    lo llam mares; y vio Dios que estaba bien. Dijo Dios: Produzca la tierra vegetacin:

    hierbas que den semillas y rboles frutales que den fruto, de su especie, con su semilla

    dentro, sobre la tierra. Y as fue. La tierra produjo vegetacin: hierbas que dan semilla,

    por sus especies, y rboles que dan fruto con la semilla dentro, por sus especies; y vio

    Dios que estaban bien. Y atardeci y amaneci: da tercero.

    Dijo Dios: Haya luceros en el firmamento celeste, para apartar el da de la noche, y

    valgan de seales para solemnidades, das y aos; y valgan de luceros en el firmamento

    celeste para alumbrar sobre la tierra. Y as fue. Hizo Dios los dos luceros mayores; el

    lucero grande para el dominio del da, y el lucero pequeo para el dominio de la noche, y

    las estrellas; y psolos Dios en el firmamento celeste para alumbrar sobre la tierra, y para

    dominar en el da y en la noche, y para apartar la luz de la oscuridad; y vio Dios que

    estaba bien. Y atardeci y amaneci: da cuarto.

    Dijo Dios: Bullan las aguas de animales vivientes, y aves revoloteen sobre la tierra

    contra el firmamento celeste. Y cre Dios los grandes monstruos marinos y todo animal

    viviente, los que serpean, de los que bullen las aguas por sus especies, y todas las aves

    aladas por sus especies; y vio Dios que estaba bien; y bendjolos Dios diciendo: sed

    23

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    fecundos y multiplicaos, y henchid las aguas en los mares, y las aves crezcan en la

    tierra. Y atardeci y amaneci: da quinto.

    Dijo Dios: Produzca la tierra animales vivientes de cada especie: bestias, sierpes yalimaas terrestres de cada especie. Y as fue. Hizo Dios las alimaas terrestres de cada

    especie, y las bestias de cada especie, y toda sierpe del suelo de cada especie: y vio Dios

    que estaba bien.

    Y dijo Dios: Hagamos al ser humano a nuestra imagen, como semejanza nuestra, y

    manden en los peces del mar y en las aves de los cielos, y en las bestias y en todas las

    alimaas terrestres, y en todas las sierpes que serpean por la tierra. Cre, pues, Dios al ser

    humano a imagen suya, a imagen de Dios le cre, macho y hembra los cre. Y bendjolos

    Dios, y djoles Dios: Sed fecundos y multiplicaos y henchid la tierra y sometedla;

    mandad en los peces del mar y en las aves de los cielos y en todo animal que serpea sobre

    la tierra. Dijo Dios: Ved que os he dado toda hierba de semilla que existe sobre la haz

    de toda la tierra, as como todo rbol que lleva fruto de semilla; para vosotros ser de

    alimento. Y a todo animal terrestre, y a toda ave de los cielos y a toda sierpe de sobre la

    tierra, animada de vida, toda la hierba verde les doy de alimento. Y as fue. Vio Dios

    cuanto haba hecho, y todo estaba muy bien. Y atardeci y amaneci: da sexto39.

    2. Cosmogona Israelita, Tradicin Sacerdotal

    No haba an en la tierra arbusto alguno del campo, y ninguna hierba del campo

    haba germinado todava, pues Yahv Dios no haba hecho llover sobre la tierra, ni haba

    hombre que labrara el suelo. Pero un manantial brotaba de la tierra, y regaba toda la

    superficie del suelo. Entonces Yahv Dios form al hombre con polvo del suelo, e insufl

    en sus narices aliento de vida, y result el hombre un ser viviente. Luego plant Yahv

    Dios un jardn en Edn, al oriente, donde coloc al hombre que haba formado. Yahv

    Dios hizo brotar del suelo toda clase de rboles deleitosos a la vista y buenos para comer,

    y en medio del jardn, el rbol de la vida y el rbol de la ciencia del bien y del mal40.

    3. Cosmogona Polinesia

    39

    Gen 140 Gen 2,5-9

    24

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    In the mythology of Oceanic peoples, Forever has always existed. So has Darkness,

    and so, too, the Sea. Soaring over the endless sea, The Old Spider fond a giant clam and

    opened it and crawled inside. It was totally dark, and cramped inside but she found asnail, whom she asked to open the shell a bit so she could have more room.

    The snail obliged. Then the Old Spider took the snail and placed it in the west and

    made it into the Moon, shedding some light into the darkness. With the help of another

    snail, The Old Spider pushed very hard on the top of the shell, raising it up, and it became

    the Sky, called Rangi.

    With great effort, the Old Spider then pushed down on the lower part of the clam shell,

    and it widened and became the earth. The earth was called Papa, or Mother Earth.

    At any rate, heavens, earth, sea are created in the beginning, together with Papa Earth

    and Rangi Sky, in a very tight space. This tight space is enlarged either by the deity

    (Tangaroa, Tanaoa, etc.) or by Rangi and Papa. Light is let in, the clam is widened and

    creation proceeds.

    First, Papa and Rangi produce plants and flowers, trees and shrubs; then animals of

    every sort, with birds and butterflies in the air and fish in the sea around them. On some

    islands, the mythology recounts that the earth was created from the sea - by a butterfly.

    On others, a rock fell from the sky into the sea, and created the earth.

    Papa Earth was a goddess, and Rangi Sky, a god, sister and brother. They cohabited

    and produced the first ancestors of all mankind. They also produced the principal gods.

    Chiefs throughout Polynesia and Oceania trace their ancestry today to the bloodlines of

    Papa and Rangi.

    It was still very crowded in the clam shell, what with all the animals, plants, and

    offspring. Their children knew it would be next-to-impossible to separate Papa Earth

    from her beloved Rangi Sky, but they were desperate. They called upon Kane, the gentle

    god of the forests to do the pushing, and with great effort Kane was able to do so, and the

    25

    http://www.pantheon.org/articles/r/rangi.htmlhttp://www.pantheon.org/articles/p/papa.htmlhttp://www.pantheon.org/articles/p/papa.htmlhttp://www.pantheon.org/articles/t/tangaroa.htmlhttp://www.pantheon.org/articles/t/tanaoa.htmlhttp://www.pantheon.org/articles/t/tanaoa.htmlhttp://www.pantheon.org/articles/k/kane.htmlhttp://www.pantheon.org/articles/r/rangi.htmlhttp://www.pantheon.org/articles/p/papa.htmlhttp://www.pantheon.org/articles/t/tangaroa.htmlhttp://www.pantheon.org/articles/t/tanaoa.htmlhttp://www.pantheon.org/articles/k/kane.html
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    whole inhabitants, plants, people and gods were finally released from the crowded clam

    shell. They rejoiced at the new spaciousness, providing room to flourish41.

    4. Cosmogona Nhuatl, tradicin de los soles

    Segn los viejos, la tierra y el cielo se estancaron en el ao 1 tochtli (uno-conejo).

    Tambin saban que cuando esto sucedi haban vivido cuatro clases de gentes, es decir,

    que haban sido cuatro las vidas. As tambin saban que cada una fue un sol. Decan que

    su dios los hizo y los cri de ceniza, y atribuan a Quetzalcoatl, signo 7 ehcalt (siete-

    viento), el haberlos hecho y criado.

    El primer sol que hubo al principio, bajo el signo de 4 atl (cuatro-agua), se llama

    Atonatiuh (sol de agua). En este sucedi que todo se lo llev el agua; todo desapareci; y

    las gentes se volvieron peces.

    El segundo sol que hubo, estaba bajo el signo 4 ocelotl (cuatro-tigre) y se llamaba

    Ocelotonatiuh (sol de tigre)- en l sucedi que todo se hundi el cielo; entonces el sol no

    caminaba de donde es medioda y luego se oscureca; y cuando se oscureci, las gentes

    eran comidas []

    El tercer sol que hubo, bajo el signo de 4 quiauhuitl (cuatro-lluvia) se dice

    Quiauhtonatiuh (sol de lluvia). En el sucedi que llovi fuego sobre los moradores, que

    por eso ardieron. Y dicen que en l llovieron piedrezuelas y que entonces se esparcieron

    las piedras que vemos; que hirvi el tezontle; y que entonces se enroscaron los peascos

    que estn enrojecidos.

    El cuarto sol, bajo el sigo de 4 ehcatl (4-viento) es Ehecatonatiuh (sol de viento).

    En este todo se lo llev el viento. Todos los hombres se volvieron monos y fueron

    esparcidos por los bosques.

    El quinto sol, bajo el signo 4 ollin (cuatro-movimiento), se dice Ollintonatiuh (sol

    del movimiento), porque se movi caminando. Segn dejaron dicho los viejos, en este

    habr terremotos y hambre general, con que hemos de perecer.

    41 ANONIMO,Mitos de la creacin polinesia, in

    http://www.pantheon.org/articles/o/oceania_polynesia_creation_myths.html

    26

    http://www.pantheon.org/articles/o/oceania_polynesia_creation_myths.htmlhttp://www.pantheon.org/articles/o/oceania_polynesia_creation_myths.html
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    27/29

    Cuando los cuatro dioses vieron cmo el medio sol, que haban creado; alumbraba

    poco, dijeron, que se hiciese otro medio sol, para que pudiese alumbrar bien toda la tierra.

    Y viendo esto Tezcatlipoca se hizo sol para alumbrar []

    Despus de haber levantado el cielo, se consultaron los dioses y dijeron: El cielo ha

    sido construido, pero quines, oh dioses, habitarn la tierra?. Se ocuparon en el negocio;

    luego fue Quetzalcoatl al inframundo; lleg al seor y a la seora del reino de los muertos

    y dijo: He venido por los hueso precioso que t guardas. Aquel contest: Qu hars

    t con ellos Quetzalcoatl? Otra vez dijo este: Los dioses tratan de hacer con ellos quin

    habite sobre la tierra [].

    Luego los recogi, los junt he hizo unlo, que inmediatamente llev a Tamoanchan.

    Despus que los hizo llegar, los moli la diosa Cihuacatl-Qui-laztli, que a continuacin

    los ech en una vasija preciosa. Sobre l se sangr Quetzalcoatl su miembro; y en seguida

    hicieron penitencia todos los dioses. Se dice, que despus nacieron los hombres, puesto

    que los dioses haban hecho el sacrificio de su sangre sobre ellos.

    Otra vez dijeron los dioses: Qu comern los hombres, oh dioses? Ya que todos

    buscan el alimento. Luego fue la hormiga roja a coger maz desgranado que se

    encontraba dentro del cerro de la subsistencia42.

    42

    W. KRICKEBERG,Mitos y leyendas de los aztecas, incas, mayas y muiscas, Mxico 1995, 23.25-26.

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    ndice

    Comparacin y Superacin de las cosmogonas Nhuatl y Polinesiapor Gnesis 1 y 2.............................................................................................................1

    Introduccin1

    Capitulo I: Definicin y carcter Gnoseolgico del Mito1

    5. Definicin de Mito...16. El Mitologema..37. Las Constantes Mticas.48. El Mito como Fuente de Conocimiento6

    Captulo II: Comparacin de las Cosmogonas9

    1. Estado Catico del universo..92. Una realidad temporal distinta..93. La presencia de un numen animado que contrasta con el caos...104. El ordenamiento del Caos por parte del Numen.105. El Acto ordenador es primordialmente antagnico al Caos116. El Orden es Secuencial117. Enumeracin, generalmente gradual, de las realidades creadas.128. Creacin del Hombre por Intervencin directa del numen.129. Delimitacin de la propiedad y sustento del hombre..13

    Captulo III: Superacin de la revelacin sobrenatural de Gnesisrespecto a las otras cosmogonas..15

    1. La Nada como estado inicial de la materia..152. Un estado de atemporalidad y de gracia original163. Yahv antecede al caos y confusin174. Creacin y luego ordenamiento por parte de Yahv...175. El acto primordial de Yahv es antagnico al no-ser..186. Particularidad de la secuencia creadora de Gn 1.187. La creacin est finalizada a la aparicin del hombre.198. Creacin del hombre en un estado de amistad y alianza.19

    9. Participacin del hombre en la bendicin y seoro de Yahv20Conclusin..21

    Apndice.22

    1. Cosmogona Israelita, Tradicin Yavista222. Cosmogona Israelita, Tradicin Sacerdotal233. Cosmogona Polinesia.244. Cosmogona Nhuatl, tradicin de los soles25

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