COMENZÓ LA CAMPAÑA ELECTORAL, VAMOS A LA VICTORIA EL 21 DE ...

COMENZÓ LA CAMPAÑA ELECTORAL, VAMOS A LA VICTORIA EL 21 DE NOVIEMBRE

CARACAS, 29 DE OCTUBRE DE 2021

Sumario:

01. COMENZÓ LA CAMPAÑA ELECTORAL. VAMOS A LA VICTORIA.

02. CARGOS, MILITANCIA Y PODER, EN EL NUEVO PARADIGMA SOCIALISTA.

03. EL 31 DE OCTUBRE, ALÍ PRIMERA Y SU CANCIÓN “EL DESPERTAR DE LA HISTORIA”

04. LECTURAS PARA LA BATALLA DE IDEAS: CARABOBO BAJO PALABRA. EARLE HERRERA.

05. CARABOBO 200:. EL GOBIERNO MEJICANO REAFIRMA EL PROYECTO INTEGRACIONISTA INICIADO POR BOLÍVAR EN SU CAMPAÑA LIBERTADORA DEL SUR EN 1821.

06. CHÁVEZ HOY: INTERVENCIÓN PARCIAL DEL COMANDANTE PRESIDENTE HUGO CHÁVEZ EN LA RUEDA DE PRENSA CON MEDIOS NACIONALES E INTERNACIONALES, HOTEL ALBA CARACAS. CARACAS, 09/07/2012.

“ Hoy #28Oct, comienza la campaña electoral como lo establece las normativas del CNE, y de nuestra parte las candidatas y candidatos revolucionarios se despliegan a lo largo y ancho del territorio nacional, en cada parroquia, municipio y estado del país, construyendo con el pueblo la gran victoria del #21Nov”.

¡Venezuela Tiene Con Qué!

NICOLÁS MADURO MOROSPresidente de la República Bolivariana de Venezuela.

Publicación en su cuenta Facebook: @NicolasMaduro28 de Octubre de 2021

BOLETÍN N° 273DEL PARTIDO SOCIALISTA UNIDO DE VENEZUELA

LECTURAPARA LA

BATALLADE IDEAS

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COMENZÓ LA CAMPAÑA ELECTORAL. VAMOS A LA VICTORIA

Acaba de comenzar formalmente la campaña electoral para la mega elección del 21 de noviembre. Las fuerzas del chavismo junto a nuestro pueblo, llegamos a esta instancia victoriosas, digna y de pie, luego de resistir años de agresión del imperialismo en todos los terrenos. Llegamos unidos, organizados, llenos de conciencia patriótica y revolucionaria y con una importante capacidad de movilización. Mientras tanto, las oposiciones llegan dispersas, divididas, descuadernadas, sin proyecto propio y con una escasa capacidad de movilización, derivadas de los años de engaños a los que sometieron a sus seguidores. Hoy el liderazgo de la derecha carece de credibilidad, aun entre las bases que los siguieron hasta hace poco.

Las elecciones del 21 de noviembre van a determinar quiénes serán nuestros gobernadores, alcaldes, legisladores regionales y concejales para los próximos cuatro años. Pero son mucho más que eso, ellas determinarán el rumbo de la sociedad venezolana los próximos 10 años, por lo menos. Son las primeras elecciones de la nueva época que comienza a abrirse paso, evidenciados en los avances en la economía durante este año, en el proceso de diálogo que permitió traer al redil electoral a sectores de la derecha que hasta hace poco estaban desarrollando el proyecto insurreccional y golpista diseñado por las élites imperialistas y en los avances que hemos tenido en la lucha contra la Covid-19, entre otros aspectos. Todos ellos determinados por la resistencia heroica del pueblo venezolano.

Con la victoria del PSUV y el GPP el 21 de noviembre, se abrirán los espacios para profundizar la construcción de nuestro socialismo, el Socialismo Bolivariano, en los años que nos conducen al 2030 –hito marcado por el Comandante Supremo Hugo Chávez- y más allá. El enemigo toma nota de nuestros avances y de estas proyecciones y actuará en consecuencia; así que la profundización de la Revolución Bolivariana en los años por venir, la haremos en medio de la lucha contra el enemigo imperialista, sus aliados y lacayos, que tratarán de detenernos y destruirnos. Pero no podrán con nuestra moral, dignidad y voluntad de vencer. En ese contexto, el proceso revolucionario demanda una gran capacidad de renovación, de rectificación, demanda que nos dotemos –todos, pueblo y dirigentes- de una gran voluntad de creación, para desatar las fuerzas de la innovación y la inventiva de nuestro pueblo en todos los ámbitos, pero sobre todo en el económico-productivo, en el político, en el social y en la cultura. La victoria estratégica, que se concretará en la irreversibilidad de la revolución, sólo será posible si nos dotamos de ese espíritu.

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Entonces, el 21 de noviembre de este año no nos jugamos solamente unos gobernadores, alcaldes, legisladores regionales y concejales; ese día nos estaremos jugando la Patria y su futuro, nos estaremos jugando el Proyecto Nacional Simón Bolívar en esta fase de la Revolución Bolivariana, nos estaremos jugando los sueños de Bolívar y Chávez. Por eso estamos obligados a ganar etas elecciones de manera contundente e inapelable. Vamos a la victoria.

EDUARDO PIÑATE R.SECRETARIO EJECUTIVO DE LA PRESIDENCIA DEL PSUV

BOLETÍN N° 273 DEL PARTIDO SOCIALISTA UNIDO DE VENEZUELA

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CARGOS, MILITANCIA Y PODER,EN EL NUEVO PARADIGMA SOCIALISTA.

1era Parte.

TAREAS DE LA REVOLUCIÓN BOLIVARIANA PARA LA TRANSICIÓN AL SOCIALISMO, LA TAREA CENTRAL: La tarea central de la Revolución Bolivariana es desmontar el poder constituido al servicio de la burguesía y el imperialismo y refundar un poder radicalmente distinto, al servicio del pueblo venezolano y los demás pueblos del mundo, es decir, la construcción del poder popular y revolucionario. Todas las tareas políticas están dirigidas a su consolidación como la única garantía de la victoria definitiva de la Revolución Bolivariana.

ARTÍCULO 13: COMPROMISO DE LUCHA CONTRA LA CORRUPCIÓN, LIBRO ROJO; DOCUMENTOS FUNDAMENTALES PSUV. (Abril 2010)

Las revoluciones en el mundo, tienen que ver necesariamente con la toma del PODER político y económico que rige la estructura del Estado; eso es una característica común entre todos los procesos de transformación político-social en los diferentes países que componen el sistema-mundo en el cual convivimos y luchamos. Ahora bien, ¿cuál sería entonces la diferencia principal entre todos estos procesos? la respuesta es sencilla, y tiene que ver, el uso que se le da a esa categoría denominada PODER, una vez se asume. El proceso es mucho más complejo que la respuesta per se.

En el artículo denominado, La descolonización de la política; puerta necesaria para la concreción del Socialismo. Publicado el 22 de octubre pasado, en nuestro Boletín Informativo N° 272, pudimos abordar algunas categorías normalizadas por las élites burguesas con la finalidad de garantizar la permanencia de su hegemonía, algunas de ellas, son: La indolencia, La corrupción, consumismo, olvido de clase, egoísmo. Y desde

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luego, La Idolatría por el poder individual, he allí, en esa última expresión del poder, donde encontramos uno de los retos fundamentales de una revolución y principalmente de NUESTRA REVOLUCIÓN BOLIVARIANA. Nuestro proceso transformador se ha caracterizado por ser profundamente colectivista por ello, nuestro máximo producto social, viene expresado a partir de una categoría denominada por nuestro Comandante Chávez, como “EL ESPÍRITU DE LAS COMUNAS”.

Cualquier expresión del poder, incluso aquellos aspectos o espacios considerados como “micro-poderes”, debe estar amarrada, encaminada, destinada, al logro del objetivo fundamental de nuestra revolución, lograr la felicidad del pueblo. El Pueblo no como un abstracto, un tumulto necesario para una elección de cada 4 años y después “chao”. Por ello, “EL PODER” en cualquier dimensión o alcance, debe ser empleado para que su ejercicio sea un instrumento de emancipación popular, para ello es imprescindible lograr el desblindaje que a menudo y por tradición burguesa, vemos sometido este instrumento, como evidencia de ello es cotidiano escuchar que en tal o cual espacio de nuestra revolución, “el poder fue secuestrado por fulana o fulano de tal”, esta realidad particular, presente aun en algunos espacios concretos, refleja que todavía los esbozos del capitalismo como filosofía, siguen presentes en la praxis que debemos vencer las y los revolucionarios en todas las aristas de nuestro proceso. La tarea colectiva es vencer los vicios individuales o de pequeños grupos que atentan contra la democratización del poder.

¿Poder para qué? Según la visión neocolonial, el capitalismo requiere del poder, para controlar las masas y asegurar el crecimiento y plusvalía de sus capitales e intereses. Para los revolucionarios bolivarianos, el poder solo debe ser asumido para garantizar el acceso del pueblo a la administración y reformulación del mismo, es decir, controlar el poder, para asegurar la emancipación popular, esto lo vemos reflejado en la Ley Orgánica del Plan de la Patria (2019/2025) particularmente en sus grandes objetivos históricos 1 y 2, donde la esencia vital de nuestro proyecto, se orienta a la transformación y manejo del poder para consolidar nuestra independencia y fortalecer nuestro modelo socialista, lo cual genera como resultado, el bienestar social del pueblo. Aquí la gran diferencia en el manejo del poder, por ello una vez seamos cualificados con alguna cuota del mismo, sea cual sea su alcance, debemos preguntarnos, ¿poder para qué? y nuestra respuesta personal, permitirá que nos ubiquemos en un lado de la disputa entre los modelos históricos de dominación o emancipación.

Como militantes de la Revolución Bolivariana, no todos hemos luchado desde los mismos espacios. A algunos les ha tocado pelear desde el gran monstruo burocrático de las instituciones del Estado, a otros nos ha tocado batallar desde las calles y sus bellas formas de lucha, pero siempre como militantes, hemos tenido un espacio y un ámbito de acción.

Pero como militantes todos y todas hemos tenido una tarea que va más allá de la responsabilidad concreta o la tarea que se nos designa, nos toca combatir a máxima fuerza, para fortalecer la unidad popular de los patriotas y así derrumbar los vicios y vencer las sombras de la dominación, en este sentido, sigue siendo una obligación militante, luchar contra los vestigios de la administración burguesa y los vicios que quedaron enquistados en las aristas del poder, en ello es importante recordar lo que nos dice el “Libro Rojo” (documentos fundamentales PSUV) en su ARTÍCULO 13: COMPROMISO DE LUCHA CONTRA LA CORRUPCIÓN:

“Las y los militantes socialistas de Venezuela que por voluntad del pueblo Bolivariano ejerzan cargos de elección popular o de administración del Estado, asumirán la ética de servir y no servirse del pueblo y una permanente vigilancia y lucha contra la corrupción; una conducta diferente será asumida como un acto contrarrevolucionario”

Contrarrevolucionario, una categoría cuyo significado refiere traición, una delgada línea separa el buen actuar del cuadro revolucionario y la nefasta existencia de aquellos que, incluso sin notarlo o a sabiendas de ello,


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cumplen el rol de ser servidores a los intereses que históricamente nos han oprimido. Por ello, debemos tener clara la idea de cuál debe ser el uso revolucionario del Poder, y esto, lo explica muy bien el Comandante Chávez cuando habla de un modelo obediencial, mandar obedeciendo ya no a una corporatocracia internacional, sino por el contrario, mandar obedeciendo al soberano al cual nos debemos, el pueblo heroico del cual venimos y hemos decidido no traicionar.

Así mismo, ese gran documento de lectura cotidiana y discusión obligada dada su vigencia, (Libro Rojo-Estatutos del PSUV) EN SU ARTÍCULO 9: DEBERES DEL O LA MILITANTE; nos refiere:

“Toda y todo militante está obligado a cumplir con los siguientes deberes: 1. Defender la Patria, la Revolución y su líder y el PSUV. 2. Cumplir con los valores éticos-morales, formación, autoformación, disciplina, solidaridad y amor revolucionario. 3. Cotizar para el financiamiento del partido de acuerdo a las reglas de progresividad y proporcionalidad. 4. Acatar y cumplir los lineamientos e instrucciones, emanadas de las distintas instancias de dirección del partido. 5. Estar a la disposición de las estructuras de Dirección del Partido para cumplir cualquier actividad en la que sea requerida o requerido. 6. Ejercer acciones permanentes de trabajo voluntario direccionado por el partido. 7. Luchar incansablemente contra el flagelo de la corrupción. 8. Enfrentar el burocratismo en cualquiera de sus expresiones. 9. Formarse y autoformarse dentro del Sistema de Formación del PSUV”.

El ejercicio del poder, en los espacios institucionales, se materializa a través de cargos burocráticos que dan forma a la expresión de diversas instituciones del Estado, la mayoría de ellas aún son reflejo innato del pasado modelo cuarto republicano y sin duda, muchas han sido conservadas intencionalmente por algunos funcionarios que han comprendido, que la democratización revolucionaria de esos espacios, fragmentaría en gran medida o hasta incluso eliminaría por completo, el modelo que le permite gritar a los cuatro vientos, que él o ella es el jefe o la jefa suprema de todo cuanto se concibe, por ello nos ha costado tanto cumplirle a nuestro Comandante Presidente Nicolás Maduro Moros, con la creación e implementación de los gobiernos obreros en muchos espacios administrativos, dificultando así, el avance de la dirección colectiva que exigen las diversas coyunturas en el marco de la producción y la prestación de servicios. La fórmula perfecta, sigue siendo la organización obrera en el marco de la lucha de clases, la consolidación de la fuerza a través de los movimientos sociales y los CPTT que correspondan en cada espacio, y por ende, el avance organizativo que permita derrumbar los poderes individualizados y la consolidación del poder colectivo.

Nuestro Comandante Eterno Hugo Chávez tuvo siempre una claridad meridiana del poder. Él estaba convencido de la necesidad de la organización popular para detentar el poder a través de las diferentes estructuras sociales y colectivas. Asimismo, nuestro Presidente Obrero Nicolás Maduro ha sido persistente para que como pueblo nos organicemos para consolidar el poder en todas las expresiones de la sociedad venezolana.

Hoy, cuando nuestra nación está asediada como nunca antes en la historia, por la prepotencia imperial, se abren varios frentes de lucha por el poder para el pueblo: a) El Presidente Nicolás Maduro está impulsando con fuerza las acciones de diálogo en múltiples espacios, no sólo con la oposición sino con factores políticos revolucionarios para fortalecer la democracia. Así, nos encaminamos a las próximas mega elecciones, donde participarán gran cantidad de sectores políticos del país, b) El Presidente está trabajando para impulsar el poder económico para fortalecer los emprendimientos productivos, dirigidos fundamentalmente a la juventud venezolana, c) Se están fortaleciendo las fuerzas sociales y laborales en las empresas del Estado y las empresas mixtas con la participación de trabajadores y trabajadoras organizadas, d) El Estado venezolano está impulsando la recuperación de las instituciones educativas y de salud de la nación para garantizar el poder de la vida.


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Así, el poder se constituye como un fin que permitirá la consolidación de nuestro proceso revolucionario. Un fin que posibilitará la transformación de la sociedad y el Estado burgués en una sociedad y un modelo socialista, que nos emancipa durante y después de los procesos históricos que estamos viviendo.

Hoy, el poder en Venezuela no es un medio para enriquecerse, como ocurrió durante décadas con las cúpulas de las derechas en el poder político. Nuestra revolución reivindica el poder como fin para liberarnos de las amarras del capitalismo e impulsar los vientos de lucha por el vivir bien. Así como reconocemos el poder como un fin en el sentido de la capacidad que tiene y tendrá nuestro pueblo venezolano para defender nuestra democracia, nuestro socialismo y nuestra tierra de cualquier amenaza que procure maniatarnos.

Venezuela se convirtió, con la llegada de la revolución, en un faro de construcción del poder. La nueva geometría del poder esbozado por Nuestro Comandante Eterno, en su proyecto político, es hoy una realidad. La geometría del poder está expresada en la satisfacción de nuestras propias necesidades con nuestras capacidades, independientes y soberanos.

Nosotros, los militantes del PSUV, tenemos plena conciencia de esta concepción del poder. Por ello, estamos convencidos que nuestro propósito será consolidar ese poder en todos los espacios de lucha. Desde las expresiones más sencillas, hasta las estructuras más complejas. Por ello, no cedemos a chantajes, a manipulaciones ni a ofertas engañosas que pretendan comprar nuestra conciencia. Ya sabemos que el poder es para la libertad, no para hacernos ricos a costa del pueblo. La derecha, por su parte, se quedó anquilosada en la vieja concepción del poder. Desean tener el poder político para apoderarse de las riquezas de la nación, porque pretenden entregar al país a las fuerzas imperiales.

Nuestra tarea fundamental es seguir consolidando el poder, para tener una mejor vida, educación, salud, una economía estable, una democracia sólida y una sociedad socialista. Poder transformar este mundo de injusticias y brechas sociales. Sólo la Revolución Bolivariana y el poder del pueblo podrán lograrlo. Por ello, nuestro poder es colectivo y no parte de la individualidad y el egoísmo. Es un poder social con la dirección de nuestro líder revolucionario Nicolás Maduro, quien también es pueblo. Así que hoy gritamos con mayor fuerza la consigna de nuestro Comandante Eterno Hugo Chávez….

¡TODO EL PODER PARA EL PUEBLO!


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El 31 DE OCTUBRE, ALI PRIMERA Y SU CANCION,“EL DESPERTAR DE LA HISTORIA”

“Alí Primera. El gran bolivariano que rescató con su canto la lucha y los sueños del pueblo humilde y excluido durante años. En cada hombre y mujer que resiste con rebeldía, está presente el coraje de Alí con su canción necesaria”.

Nicolás Maduro Moros Presidente de la República Bolivariana de Venezuela

Vía Tweeter 31/10/2020

Todo un tesoro musical y poético, repleto del más profundo amor por la humanidad, por los niños, por la mujer, por el hombre, por la tierra y la naturaleza, pero también lleno de historia, de rebeldía y de luchas, lo constituyen, las letras del invalorable repertorio de canciones que nuestro eterno Panita, Alí Primera, le ofrendara y dejara como legado, a la humanidad y, muy especialmente, a sus compatriotas de su amada Patria, Venezuela.

Una de esas letras maravillosas, poéticamente, Alí la transforma en canción, en el tema, “El Despertar de la Historia”, que nos invita a no olvidar el pasado. Tal invitación, también nos las hacía de manera permanente y reiterada, nuestro gran líder de la Revolución Bolivariana y, Eterno Comandante Chávez, cuando citando el libro de Eduardo Galeano, “Las Venas Abiertas de Latinoamérica” y, recordando al escritor chileno, Luis Sepúlveda, nos resaltaba, la importancia de conocer el pasado para comprender el presente e imaginar el futuro.

“Un tropel de caballos - La historia dormía -Y se despertó - Estirando los brazos - Abrió su boca de siglos - Y nos preguntó, preguntó; - ¿Cuál es la lucha, de Los hombres, para - Lograr la paz? - ¿Y cuál paz? - Si quieren dejar - Al mundo como está. Ayúdenla, ayúdenla - Que sea humana, La humanidad”. Esta valiente, desafiante y aguerrida estrofa que está en la canción, “El Despertar de la Historia”, de nuestro panita , Allí Primera, es

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ideal para traer a nuestras memorias y, para que, quienes no saben, sepan y conozcan, dos hechos históricos que se sucedieron en nuestra Venezuela contemporánea, un 31 de Octubre, en distintos momentos, a saber, uno ocurrió en el año 1941, hace ya 80 años y, 17 años después, el otro hecho,, que ocurrió en el año 1958, hace, 63 años.

Comencemos por rememorar entonces el acontecimiento ocurrido el 31 de Octubre de 1958, hace 63 años, se trata de la firma del Pacto de Punto Fijo. Luego de la insurrección popular del 23 enero de 1958, que produjo el derrocamiento de la dictadura militar que por un espacio de tiempo, que duró 10 años, impuesta en Venezuela por el General Marcos Pérez Jiménez, ante el temor de perder el control político y lograr “la gobernabilidad en Venezuela”, los partidos políticos, Acción Democrática (AD), representada por Rómulo Betancurt, el partido Social Cristiano (COPEI), en la persona de Rafael Caldera y, el partido de la Unión Republicana Democrática (URD), a través de Jovito Villalba, se pusieron de acuerdo, después de sostener varias conversaciones en la ciudad de Nueva York, USA, para firmar dicho acuerdo y hacerlo un pacto político.

Pero la historia nos dice, que de ese Pacto de Punto Fijo, fue excluido el Partido Comunista, que se convirtió en un pacto en el que se garantizarían estos tres partidos políticos, la alternabilidad en el gobierno, aunque luego, URD quedó por fuera y solo Acción Democrática y COPEI, mantuvieron el pacto.

También, esa historia que despertó, nos cuenta que el Pacto de Punto Fijo, se tradujo en una nueva traición al pueblo venezolano, al espíritu emancipador del 23 Enero del 58 y, la muerte de la esperanza que ese pueblo abrazó, cuando, pagando con persecuciones, detenciones, torturas y vidas humanas, enfrentaron a la dictadura militar de Marcos Pérez Jiménez, con el sueño de alcanzar una democracia verdadera en Venezuela.

El Pacto de Punto Fijo, es conocido también, por esa historia que está prohibida olvidar, como el período de gobiernos de Acción Democrática y de COPEI, de manera alterna, como el Puntofijismo, donde, durante ese oprobioso, oscuro y nefasto período, que duró un poco más de 40 años, se instauró en Venezuela, la última cruel y sangrienta dictadura disfrazada de democracia de la cual fue víctima el pueblo venezolano.

El aparato represivo sobre el cual se erigió el Pacto de Punto Fijo, durante los cuarenta años de la IV República, que se dedicó a perseguir, encarcelar, torturar salvajemente, desaparecer y asesinar a todo el que considerara su enemigo político, dejó entre cinco mil y ocho mil muertos, entre los cuales, aún permanecen cientos de desaparecidos.

La ultima masacre cometida por ese Pacto de Punto Fijo, aún está fresca en la memoria y en la conciencia del pueblo , cuando el puntofijismo, utilizando a la fuerza militar venezolana, asesinó a no menos de 3.000 (tres mil) personas, entre los días 27 y 28 de Febrero de 1989, cuando el pueblo venezolano, en lo que luego fue conocido y denominado como “El Caracazo”, se insurreccionó tomando las calles de Venezuela, en lo que fue la primera manifestación de rechazo, en todo el mundo, contra el neoliberalismo que desde Washington, el imperialismo norteamericano, a través del Fondo Monetario Internacional (FMI), nos pretendía imponer.

Es por todo eso, que a propósito de la conciencia y el nivel político alcanzado por el pueblo venezolano, gracias al Despertar de la Historia que refería el panita Alí Primera en su canción y, al llamado que nos hiciera nuestro Comandante Eterno Hugo Chávez, cuando nos conminaba a conocer el pasado, para entender el presente, e imaginar el futuro, tal como lo refería el escritor Luis Sepúlveda , es que debemos consolidar la unidad entre los revolucionarios y nuestra Revolución Bolivariana, llevándole y dándole a conocer a nuestro noble y valiente pueblo, esa historia, para no correr el riesgo y el peligro de que hechos como el Pacto de Punto Fijo, jamás se repitan en el sagrado suelo de nuestra Patria venezolana y, muchos menos ahora que estamos a las puertas de unas mega elecciones, donde solo, con la disciplina militante, la organización y la movilización de


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las masas, mediante la gran maquinaria electoral que hemos podido construir y que es legado imperecedero de nuestro Comandante Eterno, garanticemos la victoria perfecta y aplastante el 21 de noviembre, convirtiendo en contundente realidad, la consigna ,!NO VOLVERAN!.

El otro gran hecho ocurrido en suelo venezolano un 31 de Octubre, pero 17 años antes que el primero a que hicimos referencia y que, por siempre debemos recordar, conmemorar y celebrar, esta vez en modo positivo, es el que, en ese día, el día 31 de Octubre del año 1941, en el estado Falcón, nació nuestro siempre recordado Cantor del Pueblo, Alí Primera.

Alí Primera, con su poseía y su canto revolucionario y necesario, como el mismo lo denominó, porque según él, tenía una connotación superior que iba más allá, en contra posición de lo que se conocía, como canción de protesta. En la canción de título, “Canción Panfletaria”, planteaba esto, cuando en una de sus estrofas cantaba: ”Sera panfletaria (refiriéndose a su canción), pero milito con ella, ¿hasta cuándo esa mariquera, de canción disque protesta? y dejan bajo e’ la mesa, el meollo del problema”. Sus canciones fueron construidas y compuestas desde la realidad cotidiana de la Venezuela nuestra, desde donde desnudaba las condiciones de pobreza, miseria y de abandono, en que el puntofijismo sumergía a la nación convirtiéndose en uno de los principales denunciantes, acérrimo enemigo y luchador revolucionario, que enfrentó al puntofijismo, hasta el último segundo de vida.

Este 31 de Octubre, cuando se cumplen 80 años de su natalicio, allá en el otro plano, a donde Alí voló, con su guitarra y su cuatro, seguramente rodeado espiritualmente por quienes como él, dejaron huellas imborrables en nuestra historia y que él ayudo a despertar, estarán Bolívar, Chávez, Robinson, Zamora, Sucre, Aristóbulo, Darío, El Chino Khan, e incorporándose nuestro camarada David Nieves, entre muchos otros, cantando sus canciones y construyendo unidad revolucionaria.

Mientras tanto, nosotros , quienes crecimos oyendo sus canciones, muchos influenciados por el contenido y sentimiento de sus letras y poesías, que cada día están presentes en nuestro quehacer cotidiano, por ejemplo, cuando cantaba la canción, “La Guerra del Petróleo”, donde le reclamaba a los gobernantes de la IV República, “Ahora que el petróleo es nuestro viva la soberanía, que tal señor presidente si se convierte en comía”, bueno, el Comandante Chávez y el Presidente Obrero Nicolás Maduro, con un petróleo, ahora verdaderamente de los venezolanos y para los venezolanos y venezolanas, han saldado esa deuda social y hoy, un porcentaje importantísimo de la renta petrolera, a pesar del bloqueo, las medidas arbitrarias y coercitivas y, los sabotajes a nuestra principal industria, está destinada a satisfacer las necesidades sociales del pueblo venezolano, incluyendo , como lo reclamaba el camarada Alí, la “comía”, para muestra un botón , allí está como ejemplo, el CLAP.

También nos mueve, el impulso de su canto, en la canción, “Dispersos”, que entraña su sentido y profundo llamado a la unidad, al cantar, “Juntemos nuestros brazos - La Patria lo reclama - La lucha es de todo el que la quiere liberada - ¿Por qué no unirnos? - Y luchamos como hermanos - Por la Patria que está herida - Nuestra Patria la que amamos - Pregunto, pregunto - ¿Por qué nos dividimos? - Si sólo alegramos - A nuestros enemigos - ¿Por qué nos empeñamos - En aislar nuestras luchas? - Las luchas que nos deben llevar - A la victoria final”. En este sentido, el partido político que nos legara el Comandante Chávez, el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), tiene presencia estructural en cada rincón, calle, vereda, barrio, urbanización, parroquia, municipio y ciudad, a lo largo y ancho de la geografía nacional, además de, mantener, fortalecer y cuidar la alianza que hemos podido construir, con diferentes partidos y movimientos electorales y sociales, que hoy representa el Gran Polo Patriótico.

Otra canción, que nos marca el camino y nos da líneas para la acción política, es “La Patria Buena”, donde


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con su agudeza, invita a la construcción y transformación de la Patria, al igual que lo hizo y, en ello consagró su vida, el Comandante Eterno, Hugo Chávez, donde claramente se entiende en la siguiente estrofa: “Dale que el camino es largo - pero lo acorta el poeta - cuando se acerca al labriego - y surcan juntos la tierra - y aunque la estrella sea grande - siempre se mira pequeña - y es de todos la tarea - de hacer una patria buena - buena pa´ que vivan todos - con bienestar y sin quejas - buena pa´que la miseria - se aleje de Venezuela - buena para que los ríos no los seque la candela”. En esta tarea estamos empeñados, con la guía valiente y digna de nuestro camarada Presidente, Nicolás Maduro, a no permitir que el imperio pose su bota insolente en nuestro suelo patrio y nos arrebate la dignidad, la soberanía, la libertad y, mucho menos la Patria y, haremos de ella, más temprano que tarde, esa Patria Buena que soñaste y por la que luchaste.

Una última canción para cerrar con ella, porque el repertorio es extenso e infinito, nos permite decirte, Alí, panita, Alí, cantor del pueblo, hoy, en el 80 aniversario de tu glorioso natalicio, sigues entre nosotros, alimentando con tu Canción Necesaria, la conciencia y el espíritu combativo y libertario, que hoy corre por la venas de las y los venezolanos, Alí, tú sigues entre nosotros, porque, LOS QUE MUEREN POR LA VIDA, NO PUEDEN LLAMARSE MUERTOS. Hasta la victoria siempre panita.

¡PROHIBIDO OVLVIDAR!¡NO VOLVERAN!

¡LOS QUE MUEREN POR LA VIDA, NO PUEDEN LLAMARSE MUERTOS!


LECTURAPARA LABATALLADE IDEAS

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Nicolás Maduro@NicolasMaduro

Aprovechemos estos días de Cuarentena Radical, consciente y voluntaria, para leer en casa un excelente libro, parte de la Colección Bicentenario Carabobo, y que tiene como autor a nuestro querido Earle Herrera: “Carabobo bajo palabra”.

11:27 AM · Jun 28, 2021·Twitter for Android

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LINK PARA DESCARGA:https://drive.google.com/file/d/1RMppr_WPZ8GE4ba1gWTegDBGaKXPswyg/view?usp=sharing

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“CARABOBO BAJO PALABRA” Por: Earle herrera

El más autorizado para describir esta obra inserta en la Colección Batalla de Carabobo y recomendada el pasado 28 de junio por nuestro presidente Nicolás Maduro para su lectura, es su propio compilador y autor, Earle Herrera, quien a través de su presentación durante la Feria Internacional del Libro, hace análisis exhaustivo de su contenido y su relevancia.

Se trata de un ensayo como él mismo lo define, de siete capítulos y que compila el valioso aporte de poetas, cuentistas, dramaturgos, novelistas, compositores en su compresión de Carabobo, visto desde las letras. Revisa la literatura de lo que se escribió antes y luego de este acontecimiento. En esta obra la canta popular Carabobo está presente.

El primer capítulo se titula “Carabobo, verbo y letra”, el segundo “Carabobo cantada y fabulada”, el tercero “Carabobo en la narrativa Venezuela heroica, Eduardo Blanco”, el cuarto “Carabobo en el teatro. Esa espiga sembrada en Carabobo, César Rengifo, el quinto “Carabobo en la poesía «Después de Carabobo», por Fernando Paz Castillo; el sexto “Carabobo, las metáforas «Rememorando la Batalla de Carabobo», Vicente Gerbasi y el octavo “Carabobo: laurel de letras”.

Earle Herrera nos dice cómo vieron desde la perspectiva de las letras los narradores, los cantores, los cuentistas, los poetas a la batalla de Carabobo en esta distancia de doscientos años. En este sentido, “Carabobo bajo palabra” recoge la esencia popular desde las letras, la poesía, el teatro. Se consiguen coplas que se manifestaban de cada lado, tanto del ejército realista como patriota. El primer capítulo que se titula “Verbo y Letra” tiene que ver con lo que hacemos. La obra teatral “Una Espiga sembrada en Carabobo” de César Rengifo mete a Guaicaipuro, Tupac Katari en esta esplendida batalla.

Fernando Paz Castillo con el poema “Carabobo en la poesía”, nos presenta el Bolívar después de Carabobo. Cómo lo vieron sus contemporáneos. Vicente Gerbasi nos escribe un poema que titula “Rememorando la Batalla de Carabobo” en donde le habla a Bolívar a través de los campesinos de su pueblo natal Canoabo, al decirle “nosotros lo vimos pasar por aquí. En el capitulo séptimo “Laurel de Letras”, Carabobo es visto por los poetas Rubén Darío, Ernesto Luís Rodríguez, Andrés Eloy Blanco.

Podemos afirmar que es el pueblo invisibilizado, es ese ejército anónimo, el que plasma este libro de colección, tan importante para encontrarnos con Carabobo y reafirmar la idiosincrasia y la identidad venezolana.


Carabobo200

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Con la aguda visión geopolítica que lo caracterizaba Simón Bolívar no solo perfila su proyecto de emancipación en las antiguas colonias españolas ubicadas al Sur del continente sino que también incluye la liberación de México.

A pesar de que se cuenta con una documentación incuestionable, la historiografía tradicional ha pasado desapercibido este hecho. Algunos de los pocos historiadores que han fijado su atención en este importante suceso, solo se dedican a la narración epopéyica, reduciendo su amplia dimensión geopolítica, la cual contemplaba un despliegue militar pero también diplomático, en aras de crear las bases de una anfictionía perpetua en el hemisferio.

Lo de México no fue improvisado ni tampoco se le

puede considerar un hecho circunstancial, sino que forma parte de su visión libertaria e integracionista en los países de “un mismo origen, una lengua y una religión” tal como lo había expuesto en su célebre Carta de Jamaica el 6 de septiembre de 1815.

El plan de operaciones ideado y expedido por Simón Bolívar el 17 de septiembre de 1821 en la ciudad de Maracaibo para la campaña libertadora de América, especificaba en su artículo 17° “fomentar las insurrecciones en la Nueva España y hacerlas extender bajo la esperanza de ser protegidos, y amparados, si es posible” y de igual manera “informarse exactamente del estado de Méjico y la opinión pública que allí reine, fuerzas del enemigo en el país y fuerzas patriotas, etc.” (Memorias del General O’Leary. Tomo XVIII. 1983, p. 535).

EL GOBIERNO MEJICANO REAFIRMA EL PROYECTO INTEGRACIONISTA INICIADO POR BOLIVAR EN SU

CAMPAÑA LIBERTADORA DEL SUR EN 1821

Por: William García: Decano del Centro de Altos Estudios e

Investigación Bolivariano del PSUV en Cojedes (CEIBA).


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Sin embargo, la situación para la toma de Panamá y los acontecimientos en Guayaquil, hicieron concentrar los esfuerzos militares sobre estos territorios. Esto se puede evidenciar en el oficio que Bolívar escribe el 15 de noviembre de 1821 desde Bogotá a San Martín, en donde revela lo siguiente: “El último desagradable acontecimiento de Guayaquil en que los enemigos han obtenido algunas ventajas, exije (sic) un remedio pronto y eficaz. El Gobierno de Colombia activa los medios de poner en perfecta seguridad aquella Provincia, y de libertar el resto de las del Sur que aún están subyugadas. Yo marcho con un gran ejército a ejecutar esta operación, mientras que otra división sigue a ocupar el Itsmo de Panamá” (Ibídem. O’Leary, p.577).

Al referirse a la nación azteca en la citada comunicación señala: “los acontecimientos de Méjico van a dar un nuevo aspecto a la revolución de América. Según las últimas noticias que tenemos, el General Iturbide, y el nuevo Virrey General O’Donojú han concluido un tratado el 24 de septiembre de este año en que entre otros artículos comprende: que Fernando VII deberá trasladarse a Méjico, en donde tomará el título de Emperador con independencia de España y de otra potencia: que la ciudad de Méjico será evacuada por las tropas reales y ocupada por el General Iturbide con las imperiales, habiendo entre tanto un armisticio. De antemano había preparado el General Iturbide este acontecimiento con el plan que publicó, y de que incluyo a V.E. un ejemplar” (Ibídem. O’Leary, p.577).

No obstante, las posibles repercusiones de lo suscitado en México las expone en el siguiente fragmento “Este nuevo orden de cosas me hace creer con fundamento que si el Gabinete Español acepta el tratado hecho en Méjico entre los Generales Iturbide y O’Donojú, y se traslada allí Fernando VII u otro príncipe europeo se tendrán iguales pretensiones sobre todos los demás Gobiernos libres de América, deseando terminar sus diferencias con ellos bajo los mismos principios que en Méjico” (Ibídem. O’Leary, p.577).

Su intuición le permite pintar el panorama de lo que pudiera ocurrir y en este sentido le previene que al ser “trasladados al nuevo mundo estos príncipes europeos, y sostenidos por los Reyes del antiguo,

podrán causar alteraciones muy sensibles en los intereses y en el sistema adoptado por los Gobiernos de América. Así que yo creo más que nunca, es indispensable terminar la expulsión de los españoles de todo el continente, estrecharnos y garantizarnos mutuamente para arrostrar los nuevos enemigos y los nuevos medios que pueden emplear” (Ibídem. O’Leary, p.577-578).

Una semana después, el 22 de noviembre de 1821 escribe al gobierno del Departamento de Venezuela, específicamente al Vicepresidente general Carlos Soublette, para ponerlo en cuenta que “el aspecto que ha tomado la revolución en Méjico en estos últimos días deja ver claro su resultado. Una monarquía a que son llamados príncipes europeos de la casa de Borbón, se establecerá allí, y cuando contra todas las probabilidades no venga alguno de ellos, la corona recaerá necesariamente sobre el que tenga más audacia y resolución en México”. Bolívar muy claro de los objetivos de una monarquía le alerta que “el trono de México tendrá constantemente pretensiones sobre su limítrofe Colombia, cuyo sistema debe alarmarlo. El gobierno de México establecerá el más riguroso espionaje en el nuestro, para volar aprovecharse de la primera ocasión que se le presente de invadirnos con suceso” (Simón Bolívar. Obras Completas. Vol. II, 1984, p. 114).

Así que simultáneo a esos planes militares, el Libertador ordenaba y desplegaba las primeras misiones diplomáticas para establecer acuerdos bilaterales entre los gobiernos de México y Colombia. Conforme a lo reseñado por Indalecio Liévano Aguirre en su obra “El Congreso de Panamá: Bolivarismo y Monroísmo” (1968: 194), en los meses de octubre y noviembre de 1821 se designa a Miguel Santa María para adelantar las negociaciones en México y Don Joaquín Mosquera de llevarla a efectos en Lima, Santiago y Buenos Aires”.

Agrega Liévano Aguirre que Pedro Gual es a quien Bolívar le asigna en 1821 la tarea como Ministro de Relaciones Exteriores de la República de Colombia de emplear a fondo todos los esfuerzos y prestigio para celebrar una serie de tratados bilaterales con las principales repúblicas de Hispanoamérica y que dentro de las instrucciones impartidas a los plenipotenciarios por el Gual decían: “Nada interesa


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tanto en estos momentos como la formación de una liga verdaderamente americana. Pero esta confederación no debe formarse simplemente sobre los principios de una alianza ordinaria para ofensa y defensa; debe ser mucho más estrecha que la que se ha formado últimamente en Europa contra la libertad de los pueblos. Es necesario que la nuestra sea una sociedad de naciones hermanas, separadas por ahora y en el ejercicio de su soberanía por el curso de los acontecimientos humanos, pero unidas, fuertes y poderosas para sostenerse contra las agresiones del poder extranjero”. (1968: 194).

Pero tal como lo había señalado Bolívar, Agustín de Iturbide da su histórico zarpazo sobre el trono mejicano y se hace proclamar emperador, “acontecimiento nada grato para Santa María, quien profesaba, lo mismo que Bolívar, una visible hostilidad a la instauración de monarquías en suelo americano”. En consecuencia, al serle solicitado el reconocimiento del Imperio, se negó a hacerlo, pretextando que carecía de instrucciones para pronunciarse sobre esta situación completamente nueva” (Ibídem. Liévano Aguirre. 1968, p. 197).

Sin embargo, una revolución derroca a Iturbide y su campante Imperio del criollismo mejicano se viene abajo. Por lo que “el gobierno provisional que entonces se organizó en México no sólo se pronunció en favor de la república sino que solicitó a Santa María su inmediato regreso a la Capital” (Ibídem. Liévano Aguirre. 1968, p.p. 197, 198).

Así se inicia una fructífera relación diplomática entre Santa María y el canciller mejicano Lucas Alamán, siendo propicia “la oportunidad y trascendencia del proyecto de Bolívar -proyecto que calificaba de idea grandiosa-, se apresura a firmar el Tratado de Liga y Confederación propuesto por el ministro colombiano, cuyas cláusulas obligaban a las partes signatarias a trabajar en favor de la pronta reunión del Congreso de Plenipotenciarios del istmo y consagraban los principios generales que, en concepto del Libertador, debían informar la futura Liga de Naciones hispanoamericanas” (Ibídem. Liévano Aguirre. 1968, p. 199).

No obstante, el canciller Alamán “no se contentó con otorgar su decisivo apoyo al ideal bolivariano,

sino que le propuso a Santa María, enseguida, la celebración de un convenio de comercio entre Colombia y México, cuya importancia se fundaba en que las partes se concedían un tratamiento preferencial, en la calidad de miembros de la gran hermandad hispanoamericana”. (Ibídem. Liévano Aguirre. 1968, p. 200).

Este extraordinario convenio fue efectivamente firmado pero boicoteado por la injerencia norteamericana, quien maniobra a través de sus enlaces diplomáticos y hace que por instrucciones del traidor Santander, el Congreso de Colombia lo rechace, porque ya se “había firmado sendos tratados de comercio con los Estados Unidos y Gran Bretaña, en los cuales se les otorgó, sin reservas, el privilegio de la nación más favorecida. En estas circunstancias, Colombia no podía convenir en el régimen de preferencias establecido en el Tratado Santa María-Alamán, porque ello implicaba el otorgamiento automático de idénticos favores a los países anglosajones. (Ibídem. Liévano Aguirre. 1968, p. 200).

La dura confrontación que se inicia en este contexto marca un episodio de la lucha antagónica entre la visión unionista del Bolivarianismo y la hegemonía de la Doctrina Monroe. Un hecho pasado desapercibido de manera intencional para ocultar el papel injerencista de los Estados Unidos. De esto Simón Bolívar estaba bien claro y por medio de una carta fechada el 9 de febrero de 1822 desde Popayán a Santander le dice al respecto: “Los Estados Unidos siempre han estado con esos paños calientes” (Ibídem. Bolívar. 1984, p. 134).

Lo cierto es que mientras Alamán abrazaba el ideal Bolivariano de la unidad Latinoamericana y caribeña “su presencia en la Cancillería mejicana condujo a una lucha implacable entre el vigoroso estadista y el ministro norteamericano, Joel Poinsett” ” (Ibídem. Liévano Aguirre. 1968, p. 199).

Durante el proceso de celebración del convenio comercial se genera una ardua confrontación en donde “el ministro Poinsett, se negó rotundamente a aceptar el tratamiento de excepción previsto para los países hispanoamericanos, y las agrias disputas a que este desacuerdo dio origen sirvieron para que el


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diplomático norteamericano ejecutara nuevas y más insólitas intervenciones en la política interna del país ante el cual estaba acreditado. Alamán fue víctima de las más injustas y malévolas sugerencias, difundidas por los agentes de Poinsett y las logias yorkinas, y hasta se llegó a sindicar su política contraria a los Estados Unidos (Ibídem. Liévano Aguirre. 1968, p.p. 200, 201).

Las consecuencias de la conducta traidora de la oligarquía Latinoamericana en este momento que marcó una lamentable trascendencia, la sintetiza Liévano Aguirre (1968: 201) al describir que la “virtud nobilísima de que carecieron sus adversarios, quienes a título de liberales a la norteamericana y de instrumentos dóciles e inconscientes del monroísmo y de las logias yorkinas, tanto contribuyeron a crear las condiciones indispensables para que se cumpliera impunemente el robo de medio territorio de la República de México” (Ibídem. Liévano Aguirre. 1968, p. 201).

Tal arrebato ocurrido entre 1846 y 1848 y que ya estaba previsto en los planes expansionistas de los norteamericanos, afianzados en su doctrina imperial del “Destino Manifiesto” hubiera sido imposible con la concreción del “Contingente Militar” de “fuerzas marítimas y terrestres, planteada por el proyecto Bolivariano para la defensa de una contraofensiva española o ante cualquier otra amenaza extranjera.

Sin embargo, ese proyecto integracionista y antimperialista resurge doscientos años después, al ser retomado por el comandante Hugo Chávez y trascendido a las esferas del continente lo soñado por Bolívar. Durante su discurso en la conmemoración del 238 Aniversario del natalicio del Libertador, el 24 de julio de 2021 en el castillo de Chapultepec, el presidente de México Manuel López Obrador expone al mundo que “el acto para homenajear al Libertador Simón Bolívar, recrea su proyecto de unidad entre los pueblos de América Latina y el Caribe y apoyarnos en la historia para enfrentar el presente y el porvenir” (Discurso en el 238 Aniversario del Natalicio de Simón Bolívar. 24 de Julio de 2021. Disponible en You Tube).

Sostiene López Obrador que “la lucha por la integridad de los pueblos de Nuestra América sigue

siendo un bello ideario” y admite que “no ha sido fácil volver realidad ese bello propósito”, ya que “sus obstáculos principales han sido el movimiento conservador de las naciones de América y las rupturas en las filas del movimiento liberal”, pero sobre todo resalta “el predominio de Estados Unidos en el continente”.

El presidente mejicano plenamente consciente de lo ocurrido hace ya doscientos años nos dice que no olvidemos que así al mismo tiempo que nuestros países se fueron independizando de España y de otras naciones Europeas fue emergiendo en este continente la nueva metrópolis de dominación hegemónica”.

Aclara además que “durante el difícil período de las guerras de Independencia inaugurado por lo general alrededor de 1810, los gobernantes estadounidense con óptica enteramente pragmática, siguieron los acontecimientos con sigiloso interés. Estados Unidos maniobró en diferentes tiempos conforme a un juego unilateral”. El traumático episodio que se vivió hace ya 200 años lo describe de manera sucinta al señalar que “la consigna de América para los Americanos terminó por desintegrar a los pueblos de nuestro continente y destruir lo edificado, lo material por Bolívar. A lo largo de casi todo el siglo XIX se padeció de constantes ocupaciones, desembarcos, anexiones y a nosotros nos costó la pérdida de la mitad de nuestro territorio con el gran zarpazo de 1848”.

Pero en torno a ese momento crucial pasado inadvertido por la historiografía en obediencia a los intereses de los Estados Unidos, puntualiza el líder de la nación azteca que “es ya nada inaceptable la política de los últimos dos siglos caracterizada por invasiones para poner o quitar gobernantes al antojo de la superpotencia y solicita que “digamos adiós a las imposiciones, las injerencias, las sanciones, las exclusiones y los bloqueos. Apliquemos en cambio los principios de no intervención, autodeterminación de los pueblos y solución pacifica de las controversias”

El presidente de esta república que ha retomado y reafirmado el sueño integracionista del Libertador, dice también que está “consciente que se trata


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de un asunto complejo que requiere de la visión política y económica. La propuesta es ni más ni menos que construir algo semejante a la Unión Europea, pero apegado a nuestra historia, a nuestra realidad y a nuestras identidades. En ese espíritu no debe descartarse la sustitución de la OEA por un organismo verdaderamente autónomo, no lacayo de nadie sino mediador”.

Claramente consciente de la fuerza política e ideológica del ideal bolivariano, finaliza diciendo que “debe considerarse que sin el horizonte de los ideales no se llega a ningún lado y que en consecuencia vale la pena intentarlo ¡Mantengamos vivo el sueño de Bolívar”.

Desde la campaña de Liberación del Sur y los acuerdos bilaterales gestados a partir de 1821, la lucha por la unidad de los pueblos hermanos no se ha detenido y 200 años después nos encuentran precisamente en México, en la VI Cumbre de un organismo diplomático ideado por Hugo Chávez sobre las bases de la visión unitaria de Simón Bolívar, la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños: CELAC.


ChávezHoy

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Intervención Parcial del Comandante Presidente Hugo Chávez en la rueda de prensa con medios nacionales e internacionales, Hotel Alba Caracas. Caracas, 09/07/2012.

(…)Simón Bolívar y su persistente batalla, lucha por darle legitimidad a las estructuras nacientes después de la guerra larga de independencia, que más que una guerra fue una revolución, sólo que una revolución que no logró cristalizar en otras revoluciones, para decirlo con el gran Simón Rodríguez.

Simón Rodríguez escribía en los años finales de aquella jornada, aquella epopeya suramericana, decía Simón Rodríguez: “Los americanos meridionales han hecho ya una revolución política que las circunstancias han producido, pero si quieren que sea de alguna utilidad esa revolución política, hagan ahora una revolución económica, y comiéncenla por los campos, decía él, y luego vayan a las industrias, a las fábricas, a las ciudades.”

Y escribió mucho él sobre esa idea, él desarrolló mucho ese proyecto a lo largo de los años que vivió.

Simón Rodríguez murió, miren, a los 80 años, sobrevivió largo la tragedia de Bolívar, el gran Simón Rodríguez.

Entonces, esa revolución, esa revolución que en estas páginas todavía vibra, arde, porque viva está, viva está a pesar de los dos años transcurridos, no pudo cristalizar en una revolución más profunda, económica, social, cultural; pero Bolívar luchó mucho para tratar de que cristalizara en una revolución plena, no pudo, no se pudo más, no pudieron, en verdad los padres y las madres de esta Patria y de estas Patrias, creo que hicieron, al menos Bolívar y un grupo grande de ellos, hicieron supremos esfuerzos a veces sobrehumanos, pudiéramos decirlo, Bolívar el primero, sin duda.

(…)Hoy estamos de nuevo ante una idéntica coyuntura, el 7 de octubre será un día de esos en los que se despejará el horizonte político, el horizonte nacional para los próximos años y sabremos si habrá Patria, si seguirá habiendo Patria o se acabará la Patria de nuevo. He allí el grandísimo -no dilema- compromiso ante el cual estamos nosotros los que amamos esta Patria que resucitó después de muchos años: Venezuela, la Patria venezolana, “La patria es el hombre” diría Alí Primera, “La patria es el hombre, la mujer”.

(…)Bueno, arrancó la campaña pues, esta campaña es una más de aquella, aquella que Bolívar arrancó en 1830. Es la continuidad, venimos de campaña en campaña estos casi 200 años, venimos de batallas en batallas estos dos siglos que han transcurrido. Esta es sólo una más, nosotros los bolivarianos y bolivarianas, nosotros los hijos y las hijas de Bolívar, y allá enfrentados a nosotros: la burguesía.

(…)Un poco más acá cuando comienzan a surgir otras categorías políticas o sociopolíticas surgen entonces la burguesía como categoría pero es lo mismo, es lo mismo. La burguesía y bueno, algunas personas a los que ellos logran captar, manejar, manipular o convencer de alguna manera sin que sean burgueses, muchos de sus seguidores. En lo que es la batalla de las mentes, la manipulación, así como muchos venezolanos se alistaron en las filas realistas para pelear contra Bolívar en la Guerra de Independencia, sabemos, pero es la misma larga jornada para determinar si hay Patria o no hay, y eso debe, deben tenerlo claro al menos la mayoría de los venezolanos y las venezolanas y yo tengo certeza objetiva de que afortunadamente a éstas alturas la mayoría de nosotros tenemos esto claro.

Pero esta campaña que comienza nos debe permitir compañeros y compañeras, camaradas, para consolidar la conciencia y la claridad de los que estamos claros y para seguir avanzando a otros estratos donde por distintas razones pudiera no haber claridad, donde hay ciertas confusiones y de esas confusiones se vale la burguesía para pescar incautos,


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para engañar, para manipular, cosa que siempre han hecho a través de la mentira.

(…)Así que esos métodos que hoy siguen usando no son nada nuevos, son viejos, viejas mañas burguesas, centradas en la estrategia del engaño, la manipulación, el ocultamiento de la verdad, el eclipse, vamos a eclipsar a ocultar la verdad, pero lo que está por detrás, la mano peluda, huesuda y maloliente de la más rancia burguesía de la extrema derecha fascista de este país, de este continente y del imperio yanqui, es la verdad verdadera y en esta campaña una de mis tareas será ayudar a desenmascararlas, quitar máscaras, rasgar esos velos, esos mantos mantuanos detrás de los cuales quieren esconderse quienes están detrás haciendo la trama antipatria, apátrida, hay que señalarlos para que el pueblo escoja, para que el pueblo vea la verdad. Aquí nosotros los patriotas allá la nada, la independencia o nada, la Patria o la nada, escojan los venezolanos pues el futuro, ya no es de nosotros [es] de nuestros hijos, de nuestros descendientes.

(…)Lula tiene razón hasta matemáticamente, todos los años hay elecciones en Venezuela y cuando no tocan, Chávez las inventa. ¿Esto qué indica? Muchas cosas, muchas cosas. Esto indica entre otras, la maduración de un proceso verdaderamente democrático en Venezuela. Además en estas elecciones, en algunas de ellas, se ha roto o se rompieron records histórico de participación. Yo recuerdo los últimos años de la IV República, la abstención llegaba hasta el 80 por ciento. Eran aquellos días, aja yo estaba haciendo una maestría de Ciencias Políticas allá en la Simón Bolívar, trabajaba allá en el Palacio Blanco y recuerdo que analizábamos allá en el salón con los profesores que teníamos y compañeros de estudio, bueno el sistema político venezolano y su decadencia, su decadencia; y cómo aquella democracia había quedado reducida a pequeños espacios y realmente había perdido su carácter, su naturaleza democrática.

Bueno, madurez, una nueva democracia, la importancia que se le da a la opinión pública y al poder nacional, al Poder Popular que se expresa en repetidas elecciones para tomar grandes decisiones no solo para elegir gobernantes o representantes

sino para tomar grandes decisiones, como bueno como esta, imagínense ustedes, aquí nunca antes se había hecho algo parecido, consultar al pueblo en referéndum, jamás. Y las hemos ganado casi todas. De todas estas campañas, bueno, todas menos una, que perdimos por un pelito chiquitico así pero fuimos los primeros en salir, yo fui el primero en salir: Reconocemos que no se aprobó la reforma. Y perdimos creo que por un punto o menos, menos de un punto. Salimos a reconocer de inmediato y con ello a fortalecer la institucionalidad democrática.

(…)El imperialismo sacó de nuevo sus garras y sus dientes, y allí está, invadiendo pueblos, bombardeando, matando inocentes, niños, mujeres, pueblos enteros, amenazando a países, áreas completas, desestabilizando el mundo. Eso no podemos, nosotros dejarlo de considerar en el tablero de la geopolítica de hoy, y sobre todo menos nosotros los venezolanos, país que tiene una serie de consideraciones de mucha importancia, una revolución en marcha, grandes riquezas en nuestro suelo, posición geográfica envidiable y otra serie de consideraciones políticas, económicas, energéticas, ambientales, etc.

(…)Sin embargo, como no todo es malo, tenemos un Continente latinoamericano y caribeño donde hay, donde está en marcha una revolución cultural, política, económica, unos pueblos que han despertado, y América Latina y el Caribe se perfila como la esperanza de este mundo, la esperanza, y estamos convirtiendo este continente en una plataforma de paz, de democracia, de respeto, y estamos avanzando en Unasur, en el ALBA, la Celac, con mecanismos muy novedosos para enfrentar los problemas graves que aquejan a nuestros pueblos; cada uno de nuestros países ha hecho aportes muy importantes, cada uno de los líderes.

(…)Como diría el padre Bolívar: “Por la ignorancia nos han dominado más que por la fuerza...” “Un pueblo ignorante, dice Bolívar, es instrumento ciego de su propia destrucción...” En medio de esta dinámica de un mundo que se mueve, de un continente que se mueve están las elecciones venezolanas, está la Patria venezolana dando ejemplo, y reconocida en todas


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las coordenadas de este continente y más allá, por la labor que hemos hecho no sólo hacia adentro de nuestro país, como Lula lo dice en su mensaje tan hermoso: Nunca antes, de éste nuestro gobierno (¿cómo es que dice Lula?) el pueblo venezolano fue tratado con tanta dignidad, con tanto amor, respeto.

(…)La burguesía y los burgueses en tiempo electoral vienen a ofrecerle de todo a ese pueblo, y a comer arepas en un rancho, y a dar brincos, y andar en bicicleta. “Ese hombre si camina...” ¿ves? Ese es el clásico, la clásica campaña burguesa de engaño, de engaño, y por debajo la daga escondida por si acaso; por debajo la daga escondida de la violencia, de la agresión si es que no se cumplen sus deseos. Ante eso hay que estar alerta también, y estamos muy alertas.

(…)Nosotros vamos a luchar muy duro compañeros y compañeras, pueblo venezolano, Gran Polo Patriótico, Partido Socialista, patrullas, patrulleros, patrulleras, bases de patrulla, movimientos sociales, sectores sociales del país, vamos a luchar muy duro estos tres meses que quedan, un poco menos, para ampliar esa brecha, consolidar esos millones de votos declarados a favor de la revolución y con ello ampliando incluso, repito, esa brecha, esa masa de conciencias en base a un proyecto, no a una mentira, un proyecto, a unas ideas claras y transparentes, a un liderazgo, a una propuesta, lograr el 7 de octubre una grandísima victoria política, moral, además de política moral, porque será la victoria contra la trampa, contra el engaño, contra la manipulación, contra la burguesía, contra los que pretenden convertir a Venezuela de nuevo, como hemos dicho ya, en una colonia del imperialismo, entregar nuestras riquezas y de nuevo excluir a las mayorías populares.

(…)La campaña arrancó ofensiva general, nosotros tenemos una organización, una gran maquinaria que

está moviéndose por todas partes y bueno y seguirá creciendo como efecto bola de nieve, ocupando todos los espacios, patrullas, patrulleros, visitas, caravana, 1 X 10, etc. El programa: difusión de las ideas, discusión de las ideas, discusión de los grandes lineamientos, los grandes objetivos históricos, la estrategia que, como decía ayer el sabio teniente que tomó la palabra, un muchacho sabio, el teniente Chapellín de los graduados número uno de ellos, del ejército, tremendo discurso dio ese muchacho de 20 años es lo que tiene, Chapellín, entonces nos recomendaba en tiempos de revolución no hay que ser cuadrados, él trajo eso de un viejo aforismo, sino combinar lo cuadrado con el círculo, la flexibilidad pues. Así será nuestra campaña: cuadrada, circular y de distintas formas, muy flexible.

(…)Yo estoy entrando en una etapa apasionante como candidato y bueno como jefe pues de esta organización que me toca liderizar, un candidato que estará recorriendo el país y exponiendo nuestras ideas que no son mías, nuestro proyecto que no es mío y que no está escondido por aquí ¡esconda eso! Ni escondemos cuáles son nuestros aliados o los partidos que nos apoyan, no, no, están de cara al país, de cara al viento, de cara al sol, nuestras ideas de cara al sol, transparentes, nuestros propósitos transparentes no pretendemos engañar a nadie, todo lo contrario, sacar del engaño a quiénes pudieran estar confundidos y engañados.

Arrancó pues esta otra campaña y como dice Jacqueline Farías ¿no es? Vamos con todo. Con todo el amor, con toda nuestra pasión, con toda nuestra capacidad estratégica, con toda nuestra fuerza moral, material, espiritual, popular, rumbo a esa gran victoria del 7 de octubre: la Campaña de Carabobo del 2012.

Instituto de Alto Estudios Hugo Chávez Fuente: www. todochavezenlaweb.gob.ve


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