5487-11925-1-PB

6
Volumen 6, Número 6 , 2012 7 [p. 7 – p. 11] PRESENTACIÓN PRESENTATION Diego Soto En el marco del proyecto Una contribución para el estudio de lo re- ligioso en Costa Rica presentamos esta revista. En este documento se reúnen siete artículos que, desde distintas perspectivas e in- gresos, intentan afrontar u ofrecer algunas líneas para abordar dos objetivos del proyecto: Evidenciar los elementos constitutivos del campo religio- so en Costa Rica. Reconocer los factores que intervienen en la determina- ción de la dinámica religiosa actual y las pautas de rela- ción que siguen. Avanzar en la línea de tales objetivos supone, al menos en prin- cipio, dos consideraciones básicas. Primero, parece sugerir como

Transcript of 5487-11925-1-PB

  • Volumen 6, Nmero 6 , 2012 7

    [p. 7 p. 11]

    pResenTacinpReSeNTaTIoN

    Diego Soto

    en el marco del proyecto Una contribucin para el estudio de lo re-ligioso en Costa Rica presentamos esta revista. en este documento se renen siete artculos que, desde distintas perspectivas e in-gresos, intentan afrontar u ofrecer algunas lneas para abordar dos objetivos del proyecto:

    Evidenciarloselementosconstitutivosdelcamporeligio-so en costa Rica.

    Reconocerlosfactoresqueintervienenenladetermina-cin de la dinmica religiosa actual y las pautas de rela-cin que siguen.

    avanzar en la lnea de tales objetivos supone, al menos en prin-cipio, dos consideraciones bsicas. primero, parece sugerir como

  • 8 Volumen 6, Nmero 6, 2012

    axiomtico asumir la categora campo religioso, pensada desde pie-rre bourdieu1. esto supone asumir los procesos religiosos como sistemas sociales dinmicos, atravesados y conformados por tensiones y luchas entre agentes y sistemas de agentes con sus fuerzas constitutivas, en procura de transferencias (efectivas o virtuales) de capitales (econmicos, simblicos, etc.); es decir, al igual que otros campos (econmico, poltico, artsticos, educa-tivo, etc.) el religioso est conformado por relaciones de domi-nacin, as como por transacciones y concentracin del capital. asimismo, y esto se deriva de la misma teora, si bien cada campo presenta una autonoma propia, sus lgicas y capitales interac-tan e incluso soportan, legitiman o lesionan las lgicas de otros campos, y viceversa. hablar de campo religioso en costa Rica, entonces, comporta considerar dos dimensiones mutuamente in-terrelacionadas: 1. pensar a los actores y fuerzas religiosas como partcipes de luchas y tensiones socio-polticas ms amplias; y por otro lado, 2. pensar los procesos religiosos como espacios internamente conformados por disputas internas entre los dis-tintos agentes que intentan transferencias favorables de capital simblico religioso.

    esto nos lleva al segundo aspecto: un tal reconocimiento de los factores que intervienen en la determinacin de la dinmica religiosa actual y las pautas que siguen en costa Rica; debera, primeramente, pensarse como un rasgo fundamental de los ele-mentos constitutivos del campo. es decir, el segundo objetivo participa necesariamente del primero. Si se pretende lograr una distancia entre ellos, entonces tendramos que sealar un pro-blema bsico de la propuesta: hablar de reconocer elementos y

    1 Ver Capital cultural, escuela y espacio social. Sexta ed. mxico: siglo xxi; 2005. Resulta valioso el texto: ana Tereza martnez. Pierre Bourdieu: razones y lecciones de una prctica sociolgica. Del estructuralismo gentico a la sociologa reflexiva. buenos aires: manatial; 2007 (en particular para esta discusin: del espacio social al campo; pp. 191-218 y campo de fuerzas, campo de luchas; pp. 241-262).

  • Diego SotoPresentacinPresentation 9

    factores presentes en algo denominado campo religioso o di-nmica religiosa supone, al menos como indicador, que tales nociones estn previamente definidas o dotadas de algn sentido o ubicacin terica de modo que delimitan, en un primer mo-mento epistemolgicamente, un tal objeto conformado por unos elementos y movilizado, ocupado, dinamizado o problematizado por unos factores, ya sean stos internos o externos (demarca-cin por dems especificada en la misma definicin del objeto).llegados a este punto, las discusiones producidas al interior del equipo de investigacin muestran que el problema, sin embargo, no se reduce ni resuelve con dotar o definir previamente algo como campo religioso, ya sea que se adopte la teora bourdieu2 o se piense a partir de ella un posible acercamiento, esto por dos razones bsicas. la teora del socilogo francs, en lo que respec-ta a los procesos religioso, permite superar la tendencia a recu-rrir a definiciones universales de religin como punto de partida para un estudio, en tanto una tal definicin viene a obstaculizar cualquier intento analtico de procesos particularizados que se ubican temporal y socialmente. Sin embargo, parafraseando a bourdieu, no puede pretenderse obtener un pensamiento sin lmites de un pensamiento limitado. hay aspectos que, al menos en una de las tradiciones que ha pensado los procesos religiosos en amri-ca latina3, quedan por fuera de la teora.

    2 Ver gnesis y estructura del campo religioso. disponible en: http://www.colmich.edu.mx/relaciones/108/pdf/pierre%20bourdieu.pdf.

    3 hacemos referencia al conjunto de reflexiones que se han ubicado en el nombre genrico Teologa latinoamericana de la liberacin. para una ubicacin breve y bsica ver: enrique dussel. Teologa de la liberacin. Un panorama de su desarrollo. mxico: potrerillos; 1995. Jonathan pimentel chacn. Teologas latinoamericanas de la liberacin. en Jonathan pimentel (ed). Teologas latinoamericanas de la liberacin: pasin, crtica y esperanza. heredia: SebIla; 2010: 7-46; helio gallardo. Trabajo poltico y teologa latinoamericana de la liberacin. en Jonathan pimentel. Ibdem., pp. 47-80. helio gallardo. Crtica social del evangelio que mata. Introduccin al pensa-miento de Juan Luis Segundo. heredia: eecR; 2009. michael lwy. Guerra de dioses. Religin y poltica en Amrica Latina. Trad. Josefina anaya. mxico: siglo xxi; 1999. Jonathan pimentel. el espejo roto (I): michael lwy y los cristianismos liberacio-

  • 10 Volumen 6, Nmero 6, 2012

    a modo de ejemplo, si asumimos con alguna validez la crti-ca que realiza philippe corcuff4, segn la cual el sesgo domino-cntrico que caracteriza a la teora de bourdieu impedira captar otras dinmicas sociopolticas caracterizados no como anti-do-minadoras (las cuales participan tambin la dominacin) sino como no-dominadoras: liberadoras, nos veramos limitados en una comprensin de la capacidad efectiva de una tal liberacin como proceso social, que han asumido algunos cristianismos en amrica latina.

    pero ms all de sta y otras crticas posibles (y necesarias) al pensamiento de bourdieu, se suma otra consideracin funda-mental: el carcter multidisciplinario que constituye al equipo investigador posibilita, y asume como necesario, incorporar, bajo una perspectiva crtica de sus capacidades y limitaciones tericas o metodolgicas, otros mbitos del conocimiento as como otros intereses acadmicos. esto con el fin de abordar, desde un marco mucho ms amplio y abarcador, aquello que sealan los objeti-vos expuestos; e incluso, con el fin de colaborar a precisar mejor aquello que dichos objetivos no sealan u obstaculizan sealar. de esta forma, a pesar de la pluralidad, los cuatro ingresos aqu reunidos, procuran discutir y pensar en torno a las dos dimen-siones que sealan los objetivos propuestos, de modo que sirven como punto de partida comn y como afinidades en cuanto a las intenciones de los textos.

    los textos que conforman este nmero, asumen los objetivos planteados desde los mbitos disciplinares: sociologa y religin (paula Sequeira); antropologa y religin (carolina Quesada);

    nistas latinoamericanos. en Siw (1), 2008. heredia: SebIla; pp. 217-266.4 Ver pierre bourdieu (1930-2002) ledo de otra manera. crtica social post-marxista

    y el problema de la singularidad individual. en Sociologa. Cultura y representaciones sociales. ao 4, Nm. 7; Setiembre 2009: pp. 9-26.

  • Diego SotoPresentacinPresentation 11

    religin y economa (gustavo gatica); psicoanlisis y teologas la-tinoamericanas de la liberacin (diego Soto). cada uno, asume el problema terico de lo religioso y la ubicacin social en costa Rica a partir de diferentes problemticas e intereses acadmicos. de esta manera, los artculos aqu reunidos pretenden ofrecer un espacio para la crtica, el debate y la reflexin sobre la presencia, lugar, posibilidades y retos para los actores, agentes, sistemas y procesos religiosos en costa Rica. asimismo, el compendio de-sea facilitar un lugar que permita e invite a otros sectores (acad-micos, populares, religiosos, etc.) a una discusin sobre un tema complejo.