Post on 30-Mar-2016
description
Otoño 2013 Página 1
209
Educar En la cultura
dEl EncuEntroFrancisco
El llamado a larEsponsabilidad
civil dEl EmprEsarioStefano Zamagni
las sEis “c” dE las tEcnologías
socialEsAndreas Weigend,
Gam Davis y Anthony Chow
209
EM
PRESA
Oto
ño
20
13
EMPRESAOtoño 2013
SUMARIOEMPRESA
Tarifa ReducidaConcesión Nº 1453
Franqueo PagadoConcesión Nº 1277
Número 209Marzo / Mayo 2013
Publicación de ACDE Buenos AiresAsociación Cristiana de Dirigentes de Empresa
Afiliada a la Federación ACDEUNIAPAC de Argentina
directorEduardo Aceiro
consejo de redacciónCelso Enrique Arabetti
Gabriel AramouniPablo Bevilacqua
Carlos GaraventaHéctor Mario Rodríguez
consejo EditorialAdolfo AbláticoLuis M. Bameule
Enrique Del CarrilHoracio Diez
Gabriel Mayor
EditorEduardo Otsubo
asistente de direcciónNatalia Rosas Maruyama
colaboran en esta ediciónEnrique Federico
Gonzalo Novillo Saravia
ilustracionesLucas Meszaros
premio santa clara de asís 2002
Los artículos reflejan el punto de vista del autor y no necesariamente
el de ACDE
Registro Propiedad Intelectual 5.028.219
impresiónGráfica Pinter
Diógenes Taborda 48 (1437) CABA - Argentina
Precio del ejemplar: $25.- (S/envío postal)
suscripción por 4 números(cuatro números, incluye envío postal) Buenos Aires, Interior: $ 100.- Países Limítrofes: U$S 60.- Resto de América: U$S 70.- Europa: U$S 80.- Suscripción estudiantes: $ 50.- Suscripción donación: $ 200.-
Publicación propiedad de ACDE Buenos Aires
Bolívar 425 - (C1066AAI) Buenos Aires
República ArgentinaTel./Fax: (54 11) 4331-0251
E-mail: empresa@acde.org.arwww.acde.org.ar
2 Editorial nosotros y Francisco
4 Institucional carta del presidente Pablo Taussig
6 Doctrina Educar en la cultura del encuentro Francisco
14 Actualidad El vendaval del papa Francisco José María Poirier
16 Doctrina meditación teológica sobre una renuncia Carlos María Galli
20 Empresa El llamado a la responsabilidad civil
del empresario Stefano Zamagni
24 Opinión ley de medios: ¿Qué hiciste tú en la guerra,
papá? Enrique Szewach
27 Política la filosofía política
de Jorge luis borges Martín Krause
33 Institucional premio acdE
Enrique shaw 2012
36 Testimonios Haciendo realidad las ideas:
liderando proyectos Diego Della Barca
38 Reflexión Estrategia productiva y capital social Marcelo F. Resico
41 Tecnología las seis “c” de las tecnologías sociales Andreas Weigend, Gam Davis y Anthony Chow
47 Institucional Reconocimiento revista EMPRESA Eduardo r. alsina
E d i t o r i a l
Página 2 EMPRESA Nº209
nosotros y Francisco“Bienaventurados los pobres de espíritu,
Porque de ellos es el reino de los Cielos”.
Mt 5.3
No hay error de protocolo o afán de grandeza al nombrarnos antes que el papa Francisco, sino la intención de sabernos obligados hacia nuestro nuevo Pastor en lugar de asumir o esperar cómodamente su llamado. Nuestra decisión de ser socios de ACDE nos exige hoy a revisar y reforzar, a adaptar y adoptar un compromiso mayor, sin claudicar; para hacer y lograr esa Argentina mejor, posible, necesaria.
Francisco ha puesto énfasis en la Iglesia de y para los pobres, palabra que por un lado con-lleva escasez, necesidad, insuficiencia, y todo aquello que nos invade en el país, espiritual y materialmente; pero por otro, hace referencia a una virtud evangélica, como surge de las bienaventuranzas, que se traduce en la humildad, el desprendimiento y la solidaridad. No podemos quedarnos con un diagnostico o una opinión observadora, debemos hacer lo nuestro como dirigentes, jóvenes y mayores. Tenemos que hacer, sumar y liderar con el ejemplo y la acción para que todos nosotros, necesitados en muchos aspectos, sepamos cambiar un estatus inaceptable en una nación que se dice abierta a todas las personas de buena voluntad.
Tenemos pobres materiales que en villas y diferentes lugares del país luchan por salir de la indignidad de vivir rehenes del clientelismo o del apoyo de otros. Tenemos pobres que han perdido sus triunfos de vida y sus familias por la incoherencia de años, de dé-cadas sin poder construir empleo, sostenible para ellos, para sus descendientes y otros argentinos. La pobreza material genera desesperanza y espacios para depender de verdaderas lacras: desde el nacional “acomodo” a la falta de justicia, de la droga que ya nos devasta a la conveniencia, en lugar de las convicciones y valores. Así la pobreza se transforma en miseria.
Siempre han habido pobres materiales en el mundo, lo sabemos. No obstante, nuestra tierra no los debería tener en las proporciones y formas que buscamos ocultar.
Pero más nos debe preocupar nuestra soberbia y falta de humildad porque son fuente de egoísmos, de aislamientos, de conductas dañinas al bien y al sentido común, y nos entrega a la desesperanza. El “primero yo”, y la búsqueda del poder, debe transformarse en fer-viente deseo de cabalgar en el primer caballo hacia la batalla por mejorar la vida y espíritu de quienes dependen de nosotros. Líder o dirigente no es saber ordenar sino buscar ser-seguidos por el camino y por la obra correctos, tarea que no será nunca fácil ni descansa-da.Francisco lo ha dicho con toda claridad repitiendo palabras de Cristo: el poder solo se justifica para el servicio de los otros.
La pobreza como flagelo también la sufren quienes, pudiendo liderar o conducir cambios, se ven impedidos por lo ilógico de normas, procesos y cargas desequilibradas sobre unos
E d i t o r i a l
Otoño 2013 Página 3
pocos; de burocracia no solo estructural sino aquella que fomenta el peor interés e impide, en definitiva, el camino para la abundancia de bienes espirituales, vida y futuro de tantos argentinos. Parecería que, en la Argentina, triunfar, crecer, generar resultados por el camino ejemplar y ético que vemos en otras naciones deriva en impuestos sobre esos pocos para mantener lo parasitario, los rehenes o los fondos para el clientelismo, queriéndonos conven-cer que, de esa forma, se combate la pobreza cuando en realidad se la fomenta y utiliza.
Por eso, para poder apoyar en este momento histórico el pensamiento y determinación de nuestro nuevo papa, no debemos quedarnos en el orgullo por su nacionalidad, sino tomar conciencia de la dimensión de nuestra pobreza multidimensional y de nuestra res-ponsabilidad en saber aceptar la incomodidad de ser ese primer jinete que puede ayudar a salir del barro para retomar o crear nuevas huellas, porque siempre hay mejores caminos a construir.
Si queremos estar orgullosos de ser parte de ACDE debemos, entonces, ser actores en el cambio del silencio por la voz respetuosa, pero firme, del absurdo por la lógica, del no temor a quienes quieren que temamos, del saber erguirse un poco más cada vez. No po-demos permanecer doblados y declamando esperando que Francisco y la jerarquía de la Iglesia de Cristo lo hagan todo.
También debemos acompañarlo con nuestro ejemplo de empresarios pobres. La pobreza, como virtud cristiana del empresario que predica Francisco, se manifiesta en la inversión. En privarse de bienes para sí, aplicándolos a la producción y al trabajo.
El lema debe ser: empresarios pobres con empresas ricas y no a la inversa como, lamenta-blemente, es nuestra realidad.
En una Argentina, en la que hemos vestido la pobreza de tantas maneras, debemos ahora hacer caridad con trabajo, imaginación innovadora, compromiso, coherencia y, por qué no, paciencia para lograr los cambios.
Francisco, desde ACDE buscamos abrazarte con un compromiso fuerte de dirigentes cris-tianos de empresa. Queremos, debemos y podemos hacer algo hoy, un poco más mañana y así extender un camino largo, en lugar de triunfalismos efímeros. Haremos lo nuestro para merecer tu abrazo y tu compañía, compartiendo contigo la Cruz, la esperanza y la paciencia de lo posible; porque queremos ser pobres y hay muchos que sufren más que nosotros.
Sí, ciertamente es posible. Nosotros por y con Francisco.
Página 4 EMPRESA Nº209
Institucional
Es costumbre que, a principio de cada año,
explicitemos los objetivos principales para
poner un foco en las actividades. Este año,
tercero de la actual Mesa Directiva, lleva-
remos a cabo varias actividades que, por
supuesto, toman una nueva dimensión a
la luz del acontecimiento más relevante
de los últimos años en la Iglesia Católica
Argentina: el nombramiento de Jorge Mario
Bergoglio como Sumo Pontífice, que desde
entonces se convirtió en Su Santidad Fran-
cisco. Para los miembros de la Iglesia Cató-
lica Apostólica Romana, para los cristianos
en general, y para todos los argentinos, es
un motivo de orgullo y alegría. ACDE se une
a esa alegría y felicita a la Iglesia Argentina
por el honor recibido.
En este 2013, la propuesta es como siem-
pre ayudar a las personas, a las empresas
y a la comunidad a vivir el mensaje del
Evangelio. Nuestra comunidad de socios
participa, en su mayoría, de otras activi-
dades espirituales, de asistencia social o
de promoción cultural. Pero lo que nos
reúne es el conocimiento, la difusión y la
vivencia de los valores y principios de la
Doctrina Social de la Iglesia. El prestarnos
mutua ayuda y ánimo para enfrentar un
mundo empresario culturalmente distin-
to es un tema no menor, y nuestro rol es
darnos recíproca esperanza.
El Encuentro Anual, que se celebrará el 26
de Junio en el Auditorio Juan Pablo II, de la
Universidad Católica Argentina, estará cen-
trado alrededor de la responsabilidad de los
empresarios en la solución del problema de
la pobreza. Como todos sabemos, esta rea-
Pablo TaussigPresidente de ACDE.
Otoño 2013 Página 5
Carta del Presidentelidad vergonzosa sigue presente en nuestra
sociedad. Y como bien dijo el Prof. Steffano
Zamagni, en nuestro primer Foro Almuerzo
de este año, los empresarios estamos lla-
mados a desarrollar y consolidar el nuevo
orden social e institucional; no podemos
esperar a que esa solución venga de los po-
líticos, que por su experiencia y su vivencia
no conocen del mundo empresario.
Además seguiremos con nuestras muchas
actividades. La realización de la segunda
versión de Vivencias Compartidas, es uno
de los eventos al que, encarecidamente,
invitamos a participar; para aquellos que
lo hemos hecho el año pasado ha sido una
experiencia enormemente enriquecedora, y
no podemos menos que rogar que su efecto
se extienda. Qué ironía que esta experien-
cia, que fue pensada como una reedición de
lo que fuera la Misión Empresarial en pre-
paración del viaje de S.S. Juan Pablo II en los
años noventa, termine siendo una prepara-
ción al posible viaje de S.S. Francisco.
En este conjunto de actividades tendrán su
lugar como siempre: el programa de De-
safío Joven, el programa de Consejeros, las
actividades de Federación y la continuación
del esfuerzo en pos de la Causa de Canoni-
zación de Enrique Shaw, ahora con vientos
muy favorables.
Por último, y con su dinámica propia, la
productiva actividad de ACDE Joven -que en
septiembre tendrá su Jornada Anual- siem-
pre presente con su numerosa y vigorosa
participación en todas las otras gestiones.
Recibimos al cierre de esta edición de
EMPRESA la grata noticia de que nuestro
ex presidente, José María Simone, ha sido
designado presidente de UNIAPAC Interna-
cional, función que asumirá en el próximo
mes de octubre. Va nuestro reconocimiento,
reafirmando, de este modo, el compromiso
y la alta participación que siempre ha teni-
do la asociación en dicha institución.
Los invito a renovar nuestro compromiso y
a animarnos a participar en todas las acti-
vidades que podamos. ACDE somos todos y
cada uno de nosotros. La función del Conse-
jo Directivo, de la Mesa Directiva y del staff
es coordinar y dirigir los esfuerzos, pero la
eficacia de nuestra tarea depende de nues-
tro trabajo.
Página 6 EMPRESA Nº209
Educar en la cultura del encuentro
Francisco
En Harvard, en el frontispicio de uno de
sus edificios se lee: “¿Qué es el hombre
para que así lo cuides?”. Magnífica cues-
tión, para ser abordada por quien quiere
adentrarse en el ámbito de la educación.
Lo que allí se expresa, con toda su carga
de admiración -son palabras tomadas
del Salmo 8- no pone el énfasis en que
sea Dios -interlocutor del salmista- el
interesado en su creatura. “…Para que
así lo cuides”. El acento está puesto en el
“así” de la interrogación. Es la calidad del
cuidado que Dios dispensa al hombre, la
que sorprende al salmista. Esa suma de
atenciones, la Escritura las reúne en un
vocablo: amor.
Y después de la sorpresa, luego del impac-
to que producen las acciones del Creador
para con su obra predilecta, viene la otra
cuestión. Queda planteada la pregunta
ontológica, la pregunta por el ser de aquel
beneficiario de tantas delicadezas.
¿Qué es el hombre? ¿Qué somos los hombres?
La frase bíblica tomada en su contexto per-
mite entrever una doble vía de acceso, no
antagónicas, al misterio del hombre: la vía
teológica, o el camino del remontarnos des-
de las obras al núcleo desde donde brotan
las mismas y la vía de la filosofía, la cultu-
ra, las ciencias.
La primera senda nos conduce, sin dejar de
admirarnos como el autor sagrado, a esa
pedagogía divina para con la humanidad,
donde nos dirige su Palabra, que adquiere
tal densidad de cercanía y de presencia en
medio de la historia que se hace uno de no-
sotros: Jesucristo. Cristo revela plenamente
el hombre al mismo hombre y le muestra
su dignidad.
La pregunta cabe, porque el hombre necesita
saber lo que es – de alguna manera – para ir
De la exposición realizada en el Foro almuerzo de ACDE (1 de septiembre de 1999) como Arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina.Publicada en revista EMPRESA 140 (febrero/marzo 2000).
E m p r e s ad o c t r i n a
Hace algunos años, el entonces Mons. Jorge Bergoglio, compartió un Foro Almuerzo organizado por ACDE. El tema de la exposición en aquella ocasión -el panorama educativo en la ciudad de Buenos Aires- sirvió como disparador para alimentarnos en un pedido que incluyó a los hombres de empresa: la construcción de una cultura del encuentro.
En este número rescatamos parte de esta presentación, que fuera publicada en la revista Empresa 140, y que renovamos en esta edición especialmente. Las palabras del hoy papa Francisco abogan con énfasis por una educación que favorezca el tramado de la sociedad civil, generando una cultura que tenga al hombre como el centro de nuestros cometidos, rescatando la memoria como potencia unitiva e integradora y subrayando el valor de diálogo y el respeto por las diferencias.
Completamos esta presentación con algunos testimonios de socios de ACDE quienes -a manera de recuadro- comparten su alegría y emoción por la elección de Francisco como nuevo sucesor de Pedro.
Otoño 2013 Página 7
aprendiendo a ser lo que es. Está dado como
esencia, como naturaleza, pero debe ser aca-
bado, debe ir realizándose. Y es a este proceso
de humanización, al que llamamos educación.
El hombre, junto a los demás hombres,
pone en ejercicio sus potencialidades y, a
la vez que se auto realiza, va generando
cultura. En la cultura, el sujeto es una co-
munidad, un pueblo, que se da un estilo de
vida. La educación implica un proceso de
transmisión de la cultura.
El hombre y los pueblos se dicen con sus
obras, pero debemos agregar que también
somos aquellos que aspiramos a ser. Por
lo cual, podemos ser definidos, tanto por
nuestras aspiraciones cuanto por nuestras
realizaciones. Al fin de milenio se habla de
crisis cultural; de crisis de valores. Y todo
esto toca el núcleo de lo humano, en cuanto
persona y en cuanto sociedad.
Nos preocupa lo que pasa. No debemos ol-
vidar que el mal irrumpe y se instala solo
cuando no está lo que debería estar. Convie-
ne pues, un discernimiento.
Discernimiento cultural
En esta cultura globalizada llegan a nues-
tras orillas restos de lo que alguien tituló
“cultura del naufragio”, elementos de la mo-
dernidad que se despide y de su posteridad
que va ganando terreno.
Intentemos reconocer y caracterizar algu-
nos de sus rasgos:
• Mesianismo profano. Aparece bajo di-
versas formas sintomáticas de los enfo-
ques sociales o políticos. A veces se trata
de un desplazamiento del ethos de los
actos de la persona hacia las estructuras,
de tal modo que no será el ethos el que da
forma a las estructuras sino las estructu-
ras quienes producen el ethos. De ahí que
el camino de salvación sociopolítico pre-
fiera ir por el “análisis de las estructuras”
y de las actuaciones político económicas
que de ellas resultan. Detrás de esto sub-
yace la convicción de que el ethos es un
elemento frágil mientras que las estructu-
ras tienen valor sólido y seguro. Este he-
cho se mueve en la tensión acto – estruc-
E m p r e s ad o c t r i n a
Francisco: “Una familia sin memoria no merece el nombre de tal. Una familia que no respeta y atiende a sus abuelos, que son su memoria viva, es una familia desintegrada; pero una familia y un pueblo que se recuerdan son una familia y un pueblo de porvenir”.
Página 8 EMPRESA Nº209
tura (se considera lo activo como lo que
viene de la interioridad de la persona). En
consecuencia, el ethos se desplaza hacia
las estructuras pues son naturalmente
más estables y de más peso. Al perderse
el sentido personal de fin (el bien de las
personas, Dios) queda la fuerza de la “can-
tidad” que posee la estructura.
• El relativismo, fruto de la incertidumbre
contagiada de mediocridad: es la tendencia
actual a desacreditar los valores o por lo
menos propone un moralismo inmanente
que pospone lo trascendente reemplazán-
dolo con falsas promesas o fines coyuntura-
les. La desconexión de las raíces cristianas
convierte a los valores en monadas, lugares
comunes o simplemente nombres.
El relativismo es la posibilidad de fantasear
sobre la realidad, pensarla como si pudiera
ser dominada por una orden instrumenta-
lizada en un juego. Lleva a valorar y juzgar
solamente por una impresión subjetiva: no
cuenta con normas practicas, concretas,
objetivas.
Hay una reducción de la ética y de la po-
lítica a la física. No existen el bien y el
mal en sí, sino solamente un cálculo de
ventajas y desventajas. El desplazamiento
de la razón moral trae como consecuen-
cia que el derecho no puede referirse a
una imagen fundamental de justicia, sino
que se convierte en el espejo de las ideas
dominantes.
Este repliegue subjetivista de los valores nos
induce a un “avance mediante el consen-
suar coyuntural”. Entramos aquí también
en una degradación: ir “nivelando hacia
abajo” por medio del consenso negociador.
Se avanza pactando. Por ende, la lógica de
la fuerza triunfa.
Por otra parte, instaura el reino de la opi-
nión. No hay certezas ni convicciones. Todo
vale; de allí al nada vale, solo pocos pasos.
• El hombre de hoy experimenta el desa-
rraigo y el desamparo. Fue llevado hasta
allí por su afán desmedido de autonomía
heredado de la modernidad. Ha perdido el
apoyo en algo que lo trascienda.
• Un nuevo nihilismo que “universaliza”
todo, anulando y desmereciendo particu-
laridades, o afirmándolas con tal violencia
que logran su destrucción.
Luchas fratricidas. Internacionalización
total de capitales y de medios de comunica-
ción, despreocupación por los compromisos
socio-políticos concretos, por una real parti-
cipación en la cultura y los valores.
Queremos ilusionarnos con una indivi-
dualidad autónoma, no discriminada… y
terminamos siendo un número en las esta-
dísticas del marketing, un estimulo para la
publicidad.
• La unilateralidad del concepto moderno
de la razón: solo la razón cuantitativa (las
geometrías como ciencias perfectas), la
razon del cálculo y de la experimentación
tiene derecho a llamarse “razón”.
FErnAnDo BACh (ACDE Tucumán)
Seguramente, las acciones, la pala-bra y los múltiples testimonios que Francisco dará como Papa, de la era de la "sociedad mundial", globalizada y altamente tecnológica, permitirá a nuestra Iglesia Universal, seguir ilumi-nando a todos los hombres, para que cada uno tenga las repuestas.
Creo, que su mensaje: "Sin Cristo, la Iglesia no es más que una ONG piadosa" y conociendo su opción por los pobres y los humil-des, nos señala, particularmente, a los Dirigentes Empresarios, de la Sociedad Civil y de los Gobiernos de todos los países, que por Cristo, somos responsables, de colaborar articuladamente, para alcanzar el "Desarrollo Sustentable Universal", siendo imposible lograrlo sin vencer la pobreza.
Lo expresado no es abandonar a los que sufren hoy, el flagelo de la pobreza, por el contrario, es redoblar esfuerzos, pero en el marco señalado y con un plan de largo plazo, para superarlo en verdad.
E m p r e s ad o c t r i n a
Otoño 2013 Página 9
• La mentalidad tecnicista juntamente con
la búsqueda del mesianismo profano son
dos rasgos expresivos del hombre de hoy,
a quien bien podemos calificar de “hombre
gnóstico”: poseedor del saber, pero falto
de unidad, y -por otro lado- necesitado de
lo esotérico, en este caso secularizado, es
decir, profano. En este sentido se podría
decir que la tentación de la educación es
ser gnóstica y esotérica, al no poder mane-
jar el poder de la técnica desde la unidad
interior que brota de los fines reales y de
los medios usados a escala humana. Y esta
crisis no puede ser superada por ningún
tipo de “retorno” (de los que la modernidad
agonizante ensayó a porfía), sino que se
supera por vía de desbordamiento interno,
es decir asumiéndola en su totalidad, sin
quedarse en ella, pero trascendiéndola ha-
cia adentro.
• Falsa hermenéutica que instaura la sos-
pecha. Se usa la falacia, que es una mentira
que fascina con su estructura aparente-
mente inobjetable. Sus efectos perniciosos
se manifiestan lentamente.
O se caricaturiza la verdad o lo noble, agi-
gantando jocosa o cruelmente una perspec-
tiva y dejando en la sombra muchas otras.
Es una forma de rebajar lo bueno. Siempre
resulta fácil reírse una y mil veces, en pu-
blico o en privado de algún valor: la hones-
tidad, la no violencia, el pudor, pero eso no
lleva sino a perder el sabor por esos valores
y a favorecer la instalación de su antivalor y
el envilecimiento de la vida.
O se emplea el eslogan, que con riqueza de
lenguaje verbal o visual, utilizando los con-
ceptos más valiosos y ricos, absolutiza un
aspecto y desfigura el todo.
• Ya no aporta la posmodernidad una aver-
sión a lo religioso, y menos lo fuerza al ám-
bito de la privacidad. Se da un deísmo di-
luido que tiende a reducir la fe y la religión
a la esfera “espiritualista” y a lo subjetivo
(de donde resulta una fe sin piedad). Por
otros rincones rugen posturas fundamenta-
listas, con la que desnudan su impotencia y
superficialidad.
Esa miserable trascendencia, que no alcan-
za ni a hacerse cargo de los límites de la
inmanencia, sencillamente se da porque no
se anima a tocar ningún límite humano ni a
meter la mano en ninguna llaga.
• Muy unido a este paradigma del deísmo
existe un proceso de vaciamiento de las
palabras (palabras sin peso propio, pala-
bras que no se hacen carne). Se las vacía
de sus contenidos; entonces Cristo no en-
tra como Persona, sino como idea. Hay una
inflación de palabras. Es una cultura nomi-
nalista. La palabra ha perdido su peso, es
hueca. Le falta respaldo, le falta la “chispa”
que la hace viva y que precisamente con-
siste en el silencio.
hECTor ÁlvArEz DE IgArzÁBAl (ACDE rosario)
Estoy muy feliz y doblemente sor-prendido por la elección del nuevo papa: primero porque el elegido fue un cardenal argentino y segundo por la historia personal y la trayectoria de Mons. Bergoglio, que para mí eran desconocidas.
Me alegra ver que estamos a las puertas de una renovación espiritual de la Iglesia, basada en los valores esenciales del Evangelio. Me viene a la memoria las muchas oca-siones que en la Escritura Dios nos dice: “Hago nuevas todas las cosas”.
Creo que hay que aprovechar este impulso, esta relevancia del tema espiritual, para hacer una intensa difusión de la DS, evangelizar al indiferente y catequizar al Pueblo de Dios. Hay que poner en práctica los valores que preconizaba E. Shaw. Es necesario construir el Reino de Dios con verdad, justicia, com-promiso, compasión, alegría, perseverancia, equidad, armonía, convivencia, caridad, sensibilidad, altruismo, ternura… De esta manera, el Reino de Dios nos permitirá resolver y superar la crisis, o sea, arreglar el mundo. Y no soy iluso cuando hablo de arreglar el mundo. Porque cada hombre es un mundo, cada fa-milia es un mundo y cada institución es un mundo.
E m p r e s ad o c t r i n a
Página 10 EMPRESA Nº209
Cultura de encuentro
Me permito abrir una propuesta: necesi-
tamos generar una cultura del encuentro.
Ante la cultura del fragmento, como algu-
nos la han querido llamar, o de la no inte-
gración, se nos exige aun más en los tiem-
pos difíciles no favorecer a quienes preten-
den capitalizar el resentimiento, el olvido de
nuestra historia compartida, o se regodean
en debilitar vínculos.
• Con realismo encarnado. Nunca dejemos
de inspirarnos en los rostros sufrientes,
desprotegidos y angustiados para estimu-
larnos y comprometernos a investigar, es-
tudiar, trabajar y crear más. El hombre, la
mujer, ellos deben ser el centro de nuestros
cometidos.
El hombre de carne y hueso, con una perte-
nencia cultural e histórica concreta, la com-
plejidad de lo humano con sus tensiones y
limitaciones, no son respetados ni tenidos
en cuenta. Pero es el quien debe estar en el
centro de nuestros desvelos y reflexiones.
La realidad humana del limite, de la ley y
las normas concretas y objetivas, la siempre
necesaria y siempre imperfecta autoridad,
el compromiso con la realidad son dificulta-
des insalvables para esta mentalidad antes
descripta.
Escapemos de las realidades virtuales. Y
además del culto a la apariencia.
• No se puede educar desgajados de la
memoria. La memoria es potencia unitiva
e integradora. Así como el entendimiento
librado a sus propias fuerzas desbarranca,
la memoria viene a ser el núcleo vital de
una familia o de un pueblo. Una familia
sin memoria no merece el nombre de tal.
Una familia que no respeta y atiende a sus
abuelos, que son su memoria viva, es una
familia desintegrada; pero una familia y un
pueblo que se recuerdan son una familia y
un pueblo de porvenir.
Vemos tanta memoria enferma, desdibu-
jada, desgarrada en recuerdos incapaces
de ir mas allá de su primera evidencia, en-
tretenida por flashes y corrientes de moda,
sentimientos del momento, opiniones llenas
de suficiencia que ocultan el desconcierto.
Todos esos fragmentos que quieren oscure-
cer y negar la historia.
luIs ghIo (ACDE Pilar)
Habría muchas cosas para decir pero prefiero relatar una anécdota: En 1999 mis padres cumplen 50 años de casados, y Jorge Bergoglio celebra la misa en la Iglesia Castrense de Cabildo al 500.
Luego de la ceremonia, vamos a casa de mis padres a celebrar. A las 22:30 me dice: “Yo me voy porque a las 23 cierra la línea D del subte”.
Repuesto de mi sorpresa (ya era Cardenal), le digo que yo lo llevo y me responde: "Gordito, tu deber es festejar con tus pa-dres y no llevarme a mí"…Y se fue en subte nomás.
*El padre de Luis Ghio fue el padrino de Confirmación de Francisco.
JuAn C. sAgArDoyBuru (ACDE Buenos Aires)
No desaprovechemos el ejemplo de Francisco, un hombre de gustos sencillos, pero de acciones de gran profundidad. Hoy nos emociona con su ejemplaridad, pero siempre fue así. (Por los hechos los cono-ceréis).
De su homilía de asunción señaló: “el odio, la envidia y la soberbia en-sucian la vida…no debemos tener miedo”. A los jóvenes en la Plaza les dijo: “que no haya odios, que no haya peleas”. Nos ha pe-dido unidad para curar las heridas y las fragilidades de nuestro pueblo, y atender principalmente a dos problemáticas: la exclu-sión y la pobreza.
Lo siento como un llamado personal y también a nosotros, los de ACDE.
Humildemente, tenemos mucho por hacer.
E m p r e s ad o c t r i n a
Otoño 2013 Página 11
• Desde los refugios culturales a la tras-
cendencia que funda. Se ha de buscar una
antropología que deje de lado cualquier ca-
mino de “retorno” concebido -más o menos
conscientemente- como refugio cultural.
Al encontrarse dividido, divorciado consigo
mismo, confunde la nostalgia propia del
llamado de la trascendencia con la año-
ranza de mediaciones inmanentes también
desarraigadas. Una cultura sin arraigo y sin
unidad no se sostiene.
• Universalismo integrador a través del res-
peto por las diferencias. Hemos de entrar
en esta cultura de la globalización, desde
el horizonte de la universalidad. En lugar
de ser átomos que solo adquieren sentido
en el todo, debemos integrarnos en una
nueva organicidad vital de orden superior
que asuma lo nuestro pero sin anularlo. Nos
incorporamos en armonía, sin renunciar a
lo nuestro, a algo que nos trasciende. Y esto
no puede hacerse por vía del consenso, que
nivela hacia abajo, sino por el camino del
dialogo, de la confrontación de ideas y del
ejercicio de la autoridad.
• El ejercicio del diálogo es la vía mas hu-
mana de comunicación. Y hay que instaurar
en todos los ámbitos un espacio de dialogo
serio, conducente, no meramente formal
o distractivo. Intercambio que destruye
prejuicios y construye, en función de la bús-
queda común, del compartir, pero que con-
lleva intentar la interacción de voluntades
en pro de un trabajo en común o de un pro-
yecto compartido. Más aún en épocas donde
se dice que somos “hijos de la información
y huérfanos de la comunicación”. Requiere
paciencia, claridad, buena disposición ha-
cia el otro. No excluye la confrontación de
diversos puntos de vista, sin hacer que las
ideas se manejen como armas sino como
luz. No resignemos nuestras ideas, utopías,
propiedades ni derechos, sino renunciemos
solamente a la pretensión de que sean úni-
cos o absolutos.
• El ejercicio de la autoridad. Siempre es
necesaria la conducción, pero esto significa
participar de la formalidad que da cohesión
al cuerpo, lo cual hace que su función no
sea tomar partido propio, sino ponerse to-
talmente al servicio. ¡Qué empobrecedora
resulta para la dignidad de la convivencia
en sociedad, esa política de hechos con-
sumados, que impiden el legitimo tomar
parte, que promueven lo formal por sobre la
realidad!
El respeto por las cosmovisiones propias
que informan desde dentro los contenidos
de las más variadas áreas del saber, desde
el nivel inicial hasta la formación de los
docentes, es una obligación de quienes go-
biernan, porque hace al respeto del legítimo
pluralismo y de la libertad de enseñar y
aprender.
Para que la fuerza que todos llevamos den-
tro y que es vinculo y vida se manifieste,
es necesario que todos y especialmente
quienes tenemos una alta cuota de poder
político, económico o cualquier tipo de in-
fluencia, renunciemos a aquellos intereses
o abusos de los mismos que pretendan ir
Francisco: “No resignemos nuestras ideas, utopías, propiedades ni derechos, sino renunciemos solamente a la pretensión de que sean únicos o absolutos”.(Durante su visita a ACDE como Arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina).
E m p r e s ad o c t r i n a
Página 12 EMPRESA Nº209
mas allá del común bien que nos reúne; es
necesario que asumamos, con talante aus-
tero y con grandeza, la misión que se nos
impone en este tiempo.
• El ejercicio de abrir espacios de en-
cuentro. En la retaguardia de la superfi-
cialidad y del coyunturalismo inmedia-
tista (flores que no dan fruto) existe un
pueblo con memoria colectiva que no
renuncia a caminar con la nobleza que
lo caracteriza: los esfuerzos y emprendi-
mientos comunitarios, el crecimiento de
las iniciativas vecinales, el auge de tantos
movimientos de ayuda mutua, están mar-
cando la presencia de un signo de Dios
en un torbellino de participación sin par-
ticularismos pocas veces visto en el país.
Nuestra gente, que sabe organizarse es-
pontánea y naturalmente, protagonista de
este nuevo vínculo social, pide un lugar
de consulta, control y creativa participa-
ción en todos los ámbitos de la vida social
que le incumben. Los dirigentes debemos
acompañar esta vitalidad del nuevo vín-
culo. Potenciarlo y protegerlo puede llegar
a ser nuestra principal misión.
no sólo palabras: vida
Un pueblo que quiere conjurar la pobreza
del vacío y la desesperanza. Un pueblo
con memoria, memoria que no puede
reducirse a un mero registro. Allí está la
grandeza de nuestro pueblo. Advierto en
nuestro pueblo argentino una fuerte con-
ciencia que se ha ido moldeando en hitos
significativos.
Nuestro pueblo tiene alma, y porque
podemos hablar del alma de un pueblo,
podemos hablar de una hermenéutica,
de una manera de ver la realidad, de una
conciencia.
Hoy, en medio de los conflictos, este pueblo
nos enseña que no hay que hacerle caso a
aquellos que pretenden destilar la realidad
en ideas, que no nos sirven los intelectuales
sin talento, ni los eticistas sin bondad, sino
que hay que apelar a lo hondo de nuestra
dignidad como pueblo, apelar a nuestra
sabiduría, una verdadera revolución, no
contra un sistema, sino interior; una revo-
lución de memoria y ternura; memoria de
las grandes gestas fundantes, heroicas… y
memoria de los gestos sencillos que hemos
mamado en familia.
Ser fieles a nuestra misión es cuidar este
“rescoldo” del corazón, cuidarlo de las ce-
nizas tramposas del olvido o de la presun-
ción de creer que nuestra Patria, nuestra
Ciudad y nuestra familia no tienen histo-
ria o la han comenzado con nosotros. Res-
coldo de memoria que condensa, como la
brasa al fuego, los valores que nos hacen
grandes; el modo de celebrar y defender
EnrIQuE PrIns (ACDE rosario)
Estábamos con mi mujer expectan-tes, observando la ilustre chimenea vaticana, esperando el humo blanco. Sabía los horarios de las votaciones por la mañana y por la tarde.
Las primeras fumatas, como es lógico, fueron negras, y pensamos que segui-rían así por lo menos un día más, es decir para el 14 ó 15 de marzo.
Ese último fin de semana, justamente, tuvimos de visita en casa a un sobrino Jesuita, doctor en Filosofía, profesor del Colegio Máximo, hoy Facultad. Por supuesto, hablamos de la elección papal: ¿Y si saliera Bergoglio? Mi mujer y yo desechamos esta posibilidad, pensando que ya había renunciado a tal investidu-ra en el 2005; nuestro sobrino nos decía: “Me costaría verlo como Papa, ya que fue mi Superior cuando me preparaba para el sacerdocio”.
Luego, fumata blanca y la larga espera hasta el anuncio. Cuando el cardenal francés dijo Georgio Marius, salté y grité: ¡Bergoglioooooo! Se nos cayeron las lágrimas por largo rato... Los días posteriores fuimos viendo el Bergoglio de tantos años entre nosotros, y descubriendo sus verdaderas, humildes y austeras actitudes.
Las expectativas son enormes y no queremos, como es común en nuestra idiosincrasia, pasar de la tremenda euforia al desalien-to. Cumplamos lo que tanto él nos pide: "Recen mucho por mí".
E m p r e s ad o c t r i n a
Otoño 2013 Página 13
E m p r e s ad o c t r i n a
la vida, de acepar la muerte, de cuidar la
fragilidad de nuestros hermanos mas po-
bres, de abrir las manos solidariamente
ante el dolor y la pobreza, de hacer fiesta
y de rezar; la ilusión de trabajar juntos y
-de nuestras comunes pobrezas- amasar
solidaridad.
Todos estamos convidados a este cons-
truir la cultura del encuentro, a realizar y
compartir este fermento nuevo que -a la
vez- es memoria revivificante de nuestra
mejor historia de sacrificio solidario, de
lucha contra esclavitudes varias y de in-
tegración social.
Convenciéndonos una vez más de que el
todo es superior a la parte, el tiempo su-
perior al espacio, la realidad es superior
a la idea y la unidad es superior al con-
flicto.
Por último, solemos interrogarnos con cier-
ta preocupación: ¿Qué mundo le dejamos a
nuestros hijos? Quizá sería mejor plantear-
nos: ¿Qué hijos le damos a este mundo?
José MAríA sIMonE, nuEvo PrEsIDEnTE DE unIAPAC InTErnACIonAl
En el marco de las reuniones de
UNIAPAC (Unión Internacional
Cristiana de Dirigentes de Empresa)
Latinoamericana e Internacional,
celebradas en marzo pasado, fueron
renovadas las autoridades de ambas
instituciones.
En esta elección se destaca la
designación, como presidente de
UNIAPAC Internacional, de José
María Simone, socio y ex presidente
(2000/2003) de ACDE Argentina.
unIAPAC Internacionalpresidente: José María Simone
vicepresidente de Europa: Burkhard Leffers
vicepresidente de África: Jean Baptiste Homsi
vicepresidente de américa latina: Sergio Cavalieri
unIAPAC latinoamericanapresidente: Sergio Cavalieri
primer vicepresidente: Beltrán Macchi, ADEC Paraguay
segundo vicepresidente: Andrés Ballerino, ACE Guayaquil
tercer vicepresidente: Rolando Medeiros, USEC Chile
secretario: Luis de la Peña, USEM México
tesorero: Luis Alejandro Bameule, ACDE Argentina
asesor Espiritual: Padre Alejandro Llorente, ACDE Argentina
secretaría general: Ma. José Orellano, ACDE Uruguay
José María Simone asumirá sus nuevas responsabilidades en las
próximas reuniones del Consejo de UNIAPAC Latinoamericana y
Board Internacional, que se celebrarán en octubre del corriente
año en San Pablo, Brasil.
Página 14 EMPRESA Nº209
Actualidad
A la sorpresa de la elección como pontífice
del cardenal Jorge Mario Bergoglio, que en
cuanto arzobispo de Buenos Aires había
puesto a disposición su renuncia al cumplir
los 75 años, siguieron una serie de gestos,
palabras y decisiones que no dejan de acre-
centar su estilo esperanzador ante los ojos
del mundo. El nuevo obispo de Roma –insis-
te en esta condición tan cargada de signi-
ficación colegial y ecuménica– es un ícono
de austeridad y de compromiso con los
pobres; se trata de un hombre que rechaza
la fastuosidad vaticana y establece una
extraordinaria sintonía con la multitud, al
tiempo que se comunica con seguridad y
concisión a través de los medios de comu-
nicación. Curioso, ya que en esta ciudad lo
conocíamos como alguien de gesto adusto
y parco, poco amigo de las entrevistas, ca-
minante incansable de su diócesis, siempre
atento a la vida pastoral.
El acontecer político guarda para él un
marcado interés, así como también las
relaciones ecuménicas e interreligiosas.
Fustigado a veces por ciertos sectores del
Gobierno nacional y desconfiado ante las
intrigas palaciegas de determinados perso-
najes de la curia romana, Bergoglio tomó
distancia de los poderosos y prefirió el con-
tacto directo y paternal con los más humil-
des. Su dedicación a los sacerdotes villeros
y su predilección por las manifestaciones
de religiosidad popular son bien conocidas.
En cuanto fue Papa, luego de saludar a la
diócesis de Roma y a la Iglesia universal,
se comunicó telefónicamente con su apre-
ciado predecesor, Benedicto XVI, con quien
José María PoirierDirector de la revista Criterio
Otoño 2013 Página 15
El vendaval del papa Franciscoluego tendría un emotivo encuentro en la
residencia de Castelgandolfo. Su primer
mensaje lo dirigió al gran rabino de Roma,
Riccardo Di Segni, con quien luego inter-
cambiaron saludos con motivo de Pésaj y
Pascua. Bendijo en silencio a los seis mil pe-
riodistas reunidos en la sala Paulo VI, en se-
ñal de respeto a las creencias y sensibilida-
des de cada uno. Se reunió con el superior
de la Compañía de Jesús, el jesuita español
Adolfo Nicolás. Escogió como secretario pri-
vado a uno de los hombres más allegados
a Joseph Ratzinger, el obispo maltés Alfred
Xuereb, de 54 años. El saludo a las autorida-
des de casi todo el mundo, donde sobresalió
el encuentro con la Presidenta argentina,
la celebración de la Semana Santa y sus
breves catequesis, ya han ido delineando un
horizonte de conducción.
Bergoglio es un hombre de mando, tiene la
virtud de saber gobernar. Algunos temas
son para él prioritarios: la línea de toleran-
cia cero frente al escándalo de los abusos
sexuales de menores por parte de clérigos,
la transparencia económico-financiera de la
Santa Sede, la decisiva reforma de la curia
romana, su gabinete de gobierno de la Igle-
sia mundial. Evidentemente, entiende que
debe prestarse más oído a las conferencias
episcopales, limitar la burocracia vaticana,
favorecer la comunión entre el papa y todos
los demás obispos esparcidos en los cinco
continentes.
Un papa latinoamericano y jesuita compor-
ta un enorme cambio en la historia de la
Iglesia, hecho posible gracias a la revolucio-
naria renuncia de Benedicto XVI y al masivo
apoyo del colegio cardenalicio. El nuevo
Papa representa al continente con mayor
número de católicos y cambia cierto tradi-
cional europeísmo del catolicismo.
Ahora habrá que esperar y atender a los
hechos que seguirán a los gestos. Proba-
blemente actúe con rapidez y sin mayor
revuelo, como quien reestructura una gran
institución y le imprime dirección. La desig-
nación de su secretario de Estado es clave,
como también lo serán los nombramientos
de nuevos obispos y, más adelante, de car-
denales. Por el momento sabemos de su via-
je a Brasil en julio con motivo de la Jornada
Mundial de los Jóvenes, y de su intención de
visitar la Argentina en diciembre para no
interferir en las elecciones legislativas de
octubre.
¿Tendrá injerencia Francisco en la política
de nuestro país? Acaso de manera indirecta
y discreta, a través de la conferencia episco-
pal. Su nueva misión le impone una mirada
internacional amplísima y como tal se debe
a los más de mil millones de católicos en
todo el orbe.
Página 16 EMPRESA Nº209
E m p r e s ad o c t r i n a
meditación teológica sobre una renuncia“Su renuncia expresa una decisión creyente, inteligente, libre y generosa, hecha delante de Dios por amor a la Iglesia”, señala Carlos María Galli, al reflexionar sobre la dimisión de Benedicto XVI.
Su meditación, compartida antes de la elección del papa Francisco, se focaliza en la consonancia de Benedicto con el estilo de pensar y su teología sobre la racionalidad del acto de la fe y, sobre todo, del amor que plenifica a la fe y a la razón.
carlos maría galli
En septiembre de 1996, compartí tres días
con Joseph Ratzinger en Vallendar, Alemania,
en un encuentro sobre la teología en Améri-
ca Latina, organizado por el Consejo Episco-
pal Latinoamericano y la Congregación para
la Doctrina de la Fe. Entre nuestros pensado-
res estaban Gustavo Gutiérrez y Juan Carlos
Scannone. Los textos -tuve a cargo la ponen-
cia sobre la cultura y la "inculturización"- y
la declaración consensuada se publicaron el
libro El futuro de la reflexión teológica en Améri-
ca latina (CELAM, Bogotá, 1996).
En la convivencia, el trabajo y el debate, noté
aspectos de su personalidad solo vislumbra-
dos en sus escritos: la profunda mirada de
fe, la penetración espiritual, la delicadeza de
trato, el hábito de escuchar, la claridad de
homilía, la ponderación reflexiva, la racio-
nalidad argumentativa. Son rasgos de un sa-
cerdote y profesor que ejerció la docencia en
cinco universidades estatales de Alemania,
donde estudié en los años ochenta.
El lunes 11, cuando mi padre me llamó para
darme la noticia, no me sorprendió. El sabía
que no me sorprendería porque me había
escuchado decir, en conversaciones privadas
del último bienio, que Benedicto XVI era ca-
paz de renunciar y que podía hacerlo al con-
cluir el Año de la Fe. La novedad llegó antes
de lo previsto. Pero estaban en la lógica de
su vida, pensamiento y pontificado. En 2012
hubo varios signos elocuentes: el cansancio
posterior al viaje a México y Cuba; las som-
bras del VatiLeaks y, probablemente, del pos-
terior informe reservado; las cuatro homilías
pronunciadas durante el sínodo de obispos
sobre la nueva evangelización en octubre,
que me parecieron como un testamento pas-
toral; la creación de seis nuevos cardenales
en noviembre que, sumados a los del con-
sistorio anterior completaron el número de
electores; la ordenación episcopal de su se-
cretario el 6 de enero; el deterioro manifiesto
de su salud y de su movilidad (era llevado en
carro); la expresión de su rostro.
Benedicto XVI dejará el ministerio de obis-
po de Roma, sucesor de Pedro, pastor de la
Iglesia universal.
Amor y razón
Pero deseo concentrarme en su solo as-
pecto de su decisión, que no leo en los pri-
meros análisis, y es decisiva en este papa-
teólogo: la consonancia con su estilo de
pensar y su teología sobre la racionalidad
del acto de la fe y, sobre todo, del amor que
hace plena a la fe y a la razón. Su renuncia
expresa una decisión creyente, inteligente,
libre y generosa, hecha delante de Dios por
amor a la Iglesia. Dice que, después de exa-
minar reiteradamente su conciencia ante
Dios, alcanzó la certeza de no poder ejercer
más de forma adecuada el ministerio petri-
no. Con honestidad intelectual y conciencia
de la seriedad del acto, reconoce su fragili-
dad para seguir llevando esa pesada carga
pastoral.
Carlos galli es presbítero para la Arquidiócesis de Buenos Aires. Doctor en Teología. Asesor del Episcopado Argentino y del CElAM. Artículo publicado en la revista Vida Nueva nº 6 “La racionalidad teológica del cristianismo. Medita-ción teológica sobre una renuncia”, antes de la elec-ción del papa Francisco.
Otoño 2013 Página 17
E m p r e s ad o c t r i n a
Su decisión fue asumida con una concien-
cia ponderada y con plena libertad. Así pone
en acto la recomendación de San Bernardo
al papa Eugenio en la carta De la considera-
ción, que Benedicto comentó varias veces.
Bernardo decía que el Papa no es el sucesor
de un emperador sino un pescador y que,
en el trajín de su actividad, debe mantener
la consideratio, que es una contemplación
ponderada y una penetración clarividente
de las cuestiones y los tiempos.
El texto de renuncia expresa tres actitudes de
la conciencia cristiana: dar gracias por el amor
recibido; pedir perdón por los propios defectos
y encomendarse con confianza al Señor y a
su Madre. Con amor pastoral quiere servir a la
Iglesia en el silencio escondido: “Servir de todo
corazón con una vida dedicada a la plegaria”.
Emplea dos veces la frase “de todo corazón”,
porque el corazón es la sede simbólica de
pensamientos, sentimientos y decisiones. Su
Galli: “El Papa no es el sucesor de un emperador sino un pescador, y en el trajín de su actividad, debe mantener la consideratio, que es una contemplación ponderada y una penetración clarividente de las cuestiones y los tiempos”.
Página 18 EMPRESA Nº209
decisión audaz y humilde se corresponde con
su pensar, y debe leerse en el contexto de una
vida marcada por la fe que piensa con inteli-
gencia y obra con amor.
Con mejor tradición
cristiana, Benedicto
XVI afirmó la fecun-
dación recíproca en-
tre la fe cristiana y
la razón humana. En
el 2000, en un texto
publicado junto con
el filósofo agnóstico
italiano Paolo Flores
d’Arcais, reivindica-
ba la racionalidad
del cristianismo en los planos metafísico
y moral: “El cristianismo convenció por la
unión de la fe con la razón y la orientación
de la actuación hacia la caritas, a la ayuda
con amor a los que sufren, los pobres y los
débiles, por encima de todo límite de con-
dición. La fuerza que llevó al cristianismo
a convertirse en religión universal radicaba
en su síntesis de fe, razón y vida; precisa-
mente esa síntesis queda concretada en la
expresión religión vera (religión verdadera). La
fe cristiana es, hoy como ayer, la opción de
la prioridad de la razón y lo racional” (¿Dios
existe?, Buenos Aires, Emecé, 2008).
Corazón humano
En el famoso diálogo ético-político que
mantuvo con el filósofo Jûrguen Habermas,
en 2004, Ratzinger denunciaba las pato-
logías de una razón sin religión y de una
religión sin razón, postulando su necesaria
correlación. La misión de la Iglesia, desde
la unión entre Cristo y el hombre, consiste
en unir fe y razón. Ella abre una alternativa
superadora al racionalismo de una ilustra-
ción cientificista, y al irracionalismo de un
fundamentalismo pietista que atraviesan el
mundo globalizado y fragmentado. Su pro-
puesta prolonga lo afirmado por Juan pablo
II: “A la parresía de la fe debe corresponder
la audacia de la razón”.
La primacía del logos (razón) y la primacía
del ágape (amor) se implican nuevamente.
Para el Papa, la razón verdadera es el amor
y el amor es la razón verdadera. El cristia-
nismo surge de la fe en el logos de Dios que
se hizo hombre por amor y dio su vida en
la cruz pascual. Este tema aparece en su
magisterio pontificio después de la encíclica
“Dios es amor” (Des caritas est) hasta la refe-
rida a la enseñanza social, “La caridad es la
verdad” (Caritas in veritate). Si en la primera
destacaba la centralidad, unidad y novedad
del amor en Cristo, en la tercera desarrolló la
dimensión social de la caridad en la verdad.
El Dios revelado en el rostro de Jesús es el
pensamiento amoroso y el amor inteligente,
un pensar que incluye la entrega del amor y
un amar fundado en la luz de la razón.
Jesús nos amó con un corazón humanos
hasta la cruz y nos dignificó con su resu-
rrección. La antropología cristiana mira al
ser humano como una persona creyente
que piensa amando y ama pensando. San
Agustín decía que “no todo el que piensa
cree, pero todo el que cree piensa”. Antes
San pablo habló de la “fe que obra por me-
dio del amor”.
La renuncia es un acto de fe confiado, ra-
cional y amoroso. Hay que creer mucho en
Dios y querer mucho al pueblo de Dios para
entregar el supremo oficio del amor.
El próximo Papa puede llegar con el viento
del Sur desde África, América Latina o Asia.
Dios le conceda la razón de la fe y la fe en
la razón, le lleve el corazón con la fuerza
del amor y lo libere del amor al poder. La
humildad de Benedicto XVI, que renuncia a
la autoridad apostólica vitalicia, interpela al
que quiere perpetuarse en el poder.
Este acto conmovedor y ejemplar nos re-
cuerda la racionalidad interior a la fe (ratio
fidei) y el primado del amor que la anima y
la hace plena. Quien cree en “Dios es amor”
debe reconocer en primera persona, como
dice la primera carta a los Corintios: “Si no
tengo amor, no soy nada”.
La humildad de Benedicto XVI, que
renuncia a la autoridad apostólica
vitalicia, interpela al que quiere
perpetuarse en el poder.
E m p r e s ad o c t r i n a
Página 20 EMPRESA Nº209
El llamado a la responsabilidad civil del empresario “Tenemos que modificar el modo de hacer los negocios y, en particular, modificar la tarea, el papel de los empresarios”, citaba Zamagni durante el Foro Almuerzo organizado por ACDE en marzo pasado.
Para el economista italiano, es necesario cambiar las reglas del juego en el quehacer económico y social asumiendo el desafío de transformar las instituciones de extractivas a inclusivas. En este contexto los empresarios son los instrumentos más importantes de la civilización y artífices de este cambio. “No es suficiente, señala, que los empresarios piensen solo en su empresa, es necesario, más no suficiente”.
Este llamado a la responsabilidad civil del dirigente de empresa solo es posible con una condición básica: que los mismos empresarios puedan formar un grupo junto con otras expresiones de la sociedad civil para convencer u condicionar a los políticos a modificar su forma de hacer política.
stefano Zamagni
Creo que hoy en día, la responsabilidad
social de la empresa es necesaria, más no
suficiente, para afrontar los riesgos y, en
particular, los desafíos que plantea este
tiempo. Y que están ligados a tres fenóme-
nos típicos de la historia:
• El primero es el fenómeno de la globali-
zación, un acontecimiento que se inicia en
los últimos treinta y cinco años. Sé que
algunos economistas afirman que siempre
existió, más no es verdad. Las personas
confunden la globalización con la inter-
nalización de las relaciones económicas.
La internalización siempre existió, desde
el tiempo de Adam Smith y antes. Pero la
globalización es mucho más específica.
La diferencia es que en el tiempo de la
internalización, el objeto de las relaciones
internacionales fueron cosas, lo que se
producía. En el tiempo de la globalización,
el objeto de comercio internacional son
también los inputs, particularmente el tra-
bajo y el capital.
El proceso de globalización que ha producido
como consecuencia inmediata el fenómeno
de la "financiarización" de la economía, que
se aleja del concepto tradicional de finanzas,
existente desde el siglo XIV. Financiarización
es una particular forma de actividad finan-
ciera, hoy dominante en la economía real. El
volumen de las transacciones financieras es
aproximadamente diez veces el volumen de
las transacciones reales.
• El segundo fenómeno es el de la III Revo-
lución Industrial, basada en el conocimiento.
Las nuevas tecnologías tienen la capacidad
de vehicular el conocimiento de un tipo o
del otro, a la velocidad de la luz, y de articu-
lar el conocimiento como un bien común.
• El tercer hecho de este período histórico
es la dominación de la cultura de la filosofía
del individualismo libertario. ¿Cuál es la tesis
de este tipo de individualismo? Que cada
uno tiene que pensar en sí mismo y ligar su
futuro, su destino, a su capacidad. Que cada
E m p r e s aE m p r e s a
stefano zamagni es Decano de la Facultad de Economía de la universidad Bologna, Italia. Director Asociado de la universidad John hopkins.Versión periodística de la exposición realizada en el Foro Almuerzo de ACDE (marzo de 20013).
Otoño 2013 Página 21
uno tiene que considerar a los otros, a los
demás, como instrumento, lo que significa
que con los demás se hacen contratos pero
no se entablan relaciones interpersonales.
El individualismo ha destruido las relacio-
nes interpersonales y, como consecuencia
inmediata, el principio de reciprocidad.
Incertitud radical, cortoplacismo y pérdida de confianza
Considerar estos tres hechos nuevos de este
periodo histórico, nos permite entender por-
qué vivimos en lo que se da en llamar un
estado de incertitud. Que explica que hoy
en día el futuro no es percibido como una
oportunidad, sino más bien como una ame-
naza. Hoy, los jóvenes tienen miedo de que
el futuro vaya a disminuir las condiciones
del presente.
Esta sociedad de la incertitud ha provocado
otro fenómeno ligado: el cortoplacismo. Con
la consiguiente conclusión: si tengo incerti-
tud sobre el futuro, tengo que maximizar el
ingreso del presente. Y este círculo vicioso
va a deteriorar la perspectiva de futuro.
Desde un punto de vista cristiano, esto se
traduce en la pérdida de la confianza.
El papel de los empresarios
En este contexto, ¿qué puede hacer un gru-
po de personas como los empresarios?
Y es aquí donde toma importancia la Encí-
clica Caritas in veritate, de Benedicto XVI, un
verdadero himno a la importancia estraté-
gica de las empresas. La palabra empresa
(empresarios y actividad empresarial) está
mencionada en este documento papal, y de
manera inédita, más de cincuenta veces.
Sin ir más lejos, en Centesimus annus, solo
está citada cuatro veces.
El mismo Michael Porter, el gurú de la
Harvard Business School y economista de
las empresas más importante del mundo,
señaló que el papel de los empresarios hoy
en día no es el de maximizar el profit (las ga-
nancias), sino de maximizar los sharedvalue
(el valor compartido).
El año pasado, Douglas Kruse y Richard
Freeman publicaron Capitalismo compartido,
donde afirman: “Tenemos que modificar el
modo de hacer los negocios y, en particular,
modificar la tarea, el papel de los empre-
sarios”. Nunca en el pasado, economistas
americanos habían incursionado en esta
temática.
Finalmente, dos profesores de Harvard,
Daron Acemoglu y James Robinson, en un
último libro, Por qué fracasan las naciones,
apuntan: “La causa principal de por qué las
naciones fracasan, desde el punto de vista
social y económico, es la pérdida de sentido
de los empresarios”.
El llamado a la responsabilidad civil
Estas citas sirven para entender que hay
una convergencia de opinión, y sobre esta
vigilia de que algo va a mutar podemos po-
ner el foco en qué hacer.
Como he dicho al iniciar la reflexión, la res-
ponsabilidad social ya no es suficiente. Hoy
E m p r e s aE m p r e s a
Zamagni: “Debemos dejar el concepto de Welfare State para dar paso a una nueva visión encarnada bajo el paraguas del Welfare Society”.
Página 22 EMPRESA Nº209
tenemos la necesidad de elaborar una nue-
va ley de los mercados. Porque los fenóme-
nos de la globalización y de la III Revolución
han modificado completamente las relacio-
nes económicas, y las reglas que tenemos
en existencia son obsoletas. Esa es la razón
por la cual las cosas no van bien.
Ahora bien, ¿quién tiene que escribir las
nuevas reglas del juego? ¿Cómo hacer,
crear, un equipo o un ensamble de equipos
en diversas partes del mundo, para arribar
a las nuevas reglas del juego?
Frente a estos cues-
tionamientos, es
donde toma presen-
cia el concepto de la
responsabilidad civil
de la empresa. Civil
viene del latín civitas
que significa civili-
zación. Hoy en día
los empresarios son
los instrumentos
más importantes de
la civilización y artí-
fices de este cambio.
En este sentido, no
es suficiente que los
empresarios piensen solo en su empresa, es
necesario, más no suficiente.
Acemoglu y Robinson distinguen entre insti-
tuciones económicas extractivas e inclusivas y
agregan: “Cuando en un país, las instituciones
económicas extractivas son dominantes sobre
las inclusivas, el país va a fracasar”.
¿Cuál es el ejemplo de una estructura ex-
tractiva? Por ejemplo, la burocracia. La buro-
cracia es una institución extractiva, porque
no produce nada. Para ser productivo tengo
que producir más de lo que he utilizado, más
el burócrata no hace eso. Otro ejemplo es la
actividad financiera especulativa.
Pero si aceptamos esta idea de la respon-
sabilidad civil empresaria, ¿cuáles son los
pasos a seguir? En calidad de empresarios,
¿cómo podemos modificar las actuales ins-
tituciones económicas?
El proceso de transformación requiere de
paciencia, porque no se pueden hacer todas
las cosas de una vez. Solo los revolucionarios
van a cambiar las cosas en un día, pero ya
sabemos lo que pasa con ellos. Con pacien-
cia hay que transformar las instituciones de
extractivas a inclusivas. Y esto es posible con
una condición básica: que los empresarios
puedan formar un grupo junto con otras
expresiones de la sociedad civil para conven-
cer u condicionar a los políticos a modificar
su forma de hacer política. Por una simple
razón: finalmente, la modificación de las
instituciones económicas siempre exige una
modificación de la ley. Y en este punto son
los políticos quienes tienen que cooperar.
Política privada versus política pública
¿Cómo hacer para que los políticos, los go-
bernantes nos escuchen para que, por fin,
acepten las nuevas reglas del juego? Depen-
derá de cada país, con su historia a cuestas,
su particularidad, etc.
En términos un poco más teóricos, podemos
decir que hay dos formas de hacer política:
• Una llamada privatepolitics o política pri-
vada. Es una forma de política ligada a un
líder carismático. Y entre el gobernador -el
que legisla- y el pueblo, no hay cuerpos in-
termedios en el medio; no hay la posibilidad
de que grupos de personas vayan a organi-
zarse para hacer propuestas en una direc-
ción. Esta forma es quizá la más dominante
en América Latina.
• La otra llamada publicpolitic o política públi-
ca, es lo opuesto. El que gobierna no decide
porque es elegido; es más, tiene el imperati-
vo y la necesidad de dialogar. Un diálogo de-
liberativo que pueda permitir intercambiar
opiniones y creencias sobre la reglas de jue-
go que tenemos necesidad de cambiar.
Si tengo incertitud sobre el futuro,
tengo que maximizar el ingreso del
presente. Y este círculo vicioso va a
deteriorar la perspectiva de futuro.
Desde un punto de vista cristiano, esto
significa la pérdida de la confianza.
E m p r e s aE m p r e s a
Otoño 2013 Página 23
Un empresario me dijo durante mi visita a
la Argentina: “En este país los empresarios
tienen miedo de hablar en la esfera pública
porque los gobernantes pueden hacer efec-
tivas las amenazas con las que intimidan”.
Obviamente, si los empresarios se unieran,
entonces, el gobierno no podría amenazar,
como sí puede hacerlo con sectores aisla-
dos. Y este es un punto que una asociación
como ACDE puede jugar.
Tenemos que hablar, explicar que el mundo
está cambiando. Que de ahora en adelante,
el rol de los empresarios tiene que exterio-
rizarse como en el pasado. ¿Quién hizo la
Revolución industrial? La hicieron los em-
presarios, que tenían que combatir con los
latifundistas, la rentseeking, la búsqueda de
la renta, etc. ¿Por qué si ellos vencieron, no
van a vencer aquí? La clave es buscar la es-
trategia de acción adecuada a la situación.
El Welfare society y la subsidiariedad circular
Debemos dejar el concepto de Welfare State
para dar paso a una nueva visión encarnada
bajo el paraguas del Welfare Society. En Italia,
por ejemplo, y siguiendo esta reformulación,
estamos trabajando con un grupo de em-
presarios en el principio de subsidiariedad
circular, donde los empresarios, los entes pú-
blicos y la sociedad civil organizada (asocia-
ciones, etc.) se posicionan en los vértices de
los ángulos de un triángulo, en una relación
circular de diálogo permanente. Cada uno
con su capacidad y calidad específica.
En mi ciudad, Bolonia, los empresarios
cooperan entre ellos y con asociaciones de
ciudadanos, con voluntarios, con fundacio-
nes para organizar áreas como la salud, la
escuela, la universidad, la asistencia. Y su-
brayo: son empresarios, no son filántropos.
El caso de los encarcelados en un ejemplo
muy claro: los empresarios han creado den-
tro de la cárcel de la ciudad un laboratorio
mecánico, donde los presos trabajan en una
parte del proceso productivo, que luego se
termina en las fábricas, y se les remunera
por su tarea.
¿Qué ha surgido de esta experiencia?
• Que a través del trabajo, los encarcelados
son tratados como seres humanos, digni-
ficándolos como personas y renovando en
ellos la esperanza de un futuro posible.
• Se pudo disminuir la tasa de delincuencia,
porque cuando un encarcelado deja la cár-
cel, tiene un poco de dinero y, sobre todo, ha
aprendido un trabajo. Las empresas van a
reclutarlo.
Este es el sentido de la recuperación huma-
na, un proyecto que viene de la subsidiarie-
dad circular.
Del mismo modo
apuntamos a la
problemática de la
familia y su armoni-
zación con el mundo
del trabajo. Porque
cuando tú, empre-
sario, defiendes a la
familia, tu produc-
tividad aumenta.
Si los trabajadores
son tratados como
personas que tienen
hijos, hijas, maridos,
mujeres, etc., van a producir mucho más que
si tú lo consideras como un individuo sepa-
rado del mundo.
Quisiera concluir con un pensamiento de San
Ambrosio, que fuera obispo de Milán en el si-
glo IV, en tiempos del fin del Imperio Romano,
con todo lo que ello provocaba y movilizaba.
Durante una homilía dominical, Ambrosio
señaló: “Feliz el desplome si la reconstrucción
hará más lindo el edificio”. Hoy en día podría-
mos repetirnos en este deseo: feliz esta crisis,
feliz este problema de la turbulencia, si la
reconstrucción que va a darse a corto plazo
va a hacer más lindo el edificio de nuestra so-
ciedad y de nuestra comunidad.
E m p r e s aE m p r e s a
La modificación de las instituciones
económicas siempre exige una
modificación de la ley. Y en este punto
son los políticos quienes tienen que
cooperar.
Página 24 EMPRESA Nº209
Opinión
A estas alturas, argumentar en
torno a las bondades o “malda-
des” de la Ley de Medios se ha
convertido en un deporte inútil,
dado que lo único que está en
discusión hoy, respecto de dicha
ley, son dos artículos que invo-
lucran derechos de propiedad
y de igualdad ante la ley de
algunos operadores de servicios
audiovisuales y de cable.
Y esto es así porque mientras
esta discusión se llevaba a cabo
en los estrados judiciales, el go-
bierno fue avanzando, sin prisa
pero sin pausa, en el control de
los contenidos periodísticos, verdadero obje-
tivo detrás de la ley. Por un lado, se consolidó
un conjunto de medios de propiedad del
Estado y se desarrollaron redes y sistemas
de televisión digital financiados con fondos
públicos. Por el otro, importantes conglome-
rados de medios audiovisuales privados fue-
ron adquiridos por amigos transitorios del
gobierno, que gozan, por ahora, entre otros
favores, de ingresos extraordinarios prove-
nientes de la publicidad oficial.
En el medio, los objetivos de democratización,
pluralidad y federalización de contenidos, es-
pacios para manifestaciones culturales diver-
sas, etc., han avanzado en forma despareja y
casi al margen de lo dispuesto por la ley.
Por su parte, los artículos todavía cuestio-
nados legalmente, tienden a reducir el po-
der económico del principal grupo de me-
dios del país, y mantener a raya, por escala
económica inviable, a muchos medios me-
nores, condenándolos a depender también
de fondos públicos o de fondos privados,
“apretados” y “condicionados” por el poder.
En ese sentido, entonces, la “ley de control
directo o indirecto de los contenidos de los
medios de comunicación” se encuentra, en
la práctica, casi totalmente vigente. Y lo se-
guirá estando, aun cuando la Corte Supre-
ma de Justicia declare inconstitucionales
los artículos mencionados.
lA rEAlIDAD DEl EsPECTro AuDIovIsuAl ProDuCTor DE ConTEnIDos
En ese hipotético caso, el espectro audiovi-
sual productor de contenidos quedará divi-
dido, como está ya hoy, en tres partes bien
desiguales:
• El mencionado gran grupo oficial y parao-
ficial.
• Algunos grupos privados con escala y
capacidad económica para enfrentar la
presión oficial.
• Un conjunto numeroso y variado de peque-
ños medios independientes, sin margen de
maniobra económica, por tamaño y, por lo
tanto, con limitaciones claras para difundir
sus ideas. (No solo hace falta buena produc-
ción de contenidos, son necesarios, asimis-
mo, medios técnicos y de publicidad y mar-
keting para respaldarlos y darlos a conocer
al gran público, y éstos son muy onerosos).
Alternativamente, en el caso de la ratifica-
ción de la constitucionalidad de dichos artí-
Enrique SzewachEconomista y periodista. Presidente de Evaluadora Latinoamericana S.A.. Asesor y Consultor de Empresas y Organismos Internacionales. Una versión previa fue publicada en el diario La Nación: “Sólo la política podrá garantizar la liber-tad de prensa” (8.1.2013).
Otoño 2013 Página 25
Ley de Medios: ¿Qué hiciste tú en la guerra, papá?culos, quedarán, solamente, el grupo oficial
en sentido amplio y, como se mencionara,
empresas pymes, con escaso poder econó-
mico para operar libremente.
Finalmente, los medios gráficos ya tienen
encima la espada de Damocles, con el con-
trol de importaciones y precios del papel
prensa. A lo que se ha sumado, reciente-
mente, la prohibición de publicar avisos a
grandes cadenas de comercialización mino-
rista y mayorista, en los diarios nacionales
de mayor circulación.
En síntesis, con plena o parcial vigencia de
la ley, el objetivo central del gobierno se ha-
brá cumplido: como ningún contenido pue-
de ser “impuesto” a la audiencia, se habrá
logrado, al menos, confinar a los producto-
res de contenidos que son independientes
de los grandes grupos, a zonas marginales
o poco potentes del espectro radioeléctrico.
Mientras se intenta ahogar financieramente
a los medios gráficos no alineados y de ma-
yor respeto de la sociedad.
A su vez, se busca, por otros mecanismos
legales, imponer limitaciones a la infor-
mación y opinión que se difunde en los
ultramodernos medios electrónicos como
Internet y las redes sociales.
Entiéndase bien, es probable que el ordena-
miento regulatorio de los medios en la Ar-
gentina requiriera un replanteo de muchos
temas, incluyendo el poder de los multime-
dios para fijar “agenda”, y la separación de
“continentes” de “contenidos”; pero bajo ese
paraguas conceptual, lo que se está hacien-
do es silenciar a la sociedad e impedir la li-
bre discusión de las ideas. Verdadero motor
del desarrollo y el progreso.
Ante todos estos hechos, es un error supo-
ner que la llave de la libertad de expresión
y prensa la tiene hoy la justicia. Esa libertad
-definida como la capacidad de un medio
independiente de tener la escala necesaria,
no sólo para expresarse sino, fundamen-
talmente, para hacer llegar esa opinión a
la mayor cantidad de audiencia posible, en
calidad aceptable- se ha perdido ya. (Un
ejemplo para clarificar: yo tengo la libertad
de expresarme como quiera en un medio de
comunicación, pero si figuro en una lista de
“no invitables” a los programas de radio y
televisión, del 80% del espectro audiovisual,
mi libertad es sólo declamatoria, y limitada.
Y, judicialmente, no puedo “obligar” a un
medio a sacarme al aire, ya sea como con-
ductor o invitado).
PolíTICos y EMPrEsArIos, gArAnTEs DE lIBErTAD DE ExPrEsIón y PrEnsA
Con todo lo expuesto, la garantía de la
libertad de expresión y prensa, en su ver-
dadero sentido, vuelve a la política y a los
empresarios.
Empiezo por los políticos. Los mismos res-
ponsables del actual desastre legal tendrán
que ser los encargados de corregirlo en el fu-
turo. Es por ello que propongo que, así como
los legisladores de la oposición se compro-
metieron a no facilitar una eventual reforma
Página 26 EMPRESA Nº209
Opinión
constitucional que incluya la reelección in-
definida, los mismos firmantes presenten un
compromiso en torno a restituir la libertad
de prensa perdida. Dicho compromiso debe-
ría incluir, como mínimo, tres pilares.
En primer lugar, la reducción de los medios
públicos a un sistema mínimo y federal, con
un esquema de pluralidad controlado por
un organismo independiente que conforme
un ámbito estatal y no gubernamental de
medios, con contratos públicos y transpa-
rentes, de los involucrados, como si fueran
funcionarios públicos -que lo son-. En el
resto del sistema, hoy público, habrá que
introducir el capital y control privado, me-
diante capitalismo popular o métodos simi-
lares. Por ejemplo, tanto el sistema de Tele-
visión Digital Terrestre, como la Empresa de
comunicaciones satelital, y otras empresas
subsidiarias que no producen contenidos
audiovisuales sino son hardware, podrían
convertirse en sociedades anónimas con
participación privada accionaria, y manage-
ment independiente (al estilo de la YPF de
Estenssoro).
En segundo lugar, una ley que establezca
parámetros explícitos, públicos y transpa-
rentes de asignación de publicidad oficial,
la que debería limitarse a información útil
para los ciudadanos, autorizadas por un co-
mité técnico designado por concurso.
Y, en tercer lugar, la introducción seria de
competencia en dónde es posible y necesa-
ria, permitiendo la multiplicidad de ofertas
de servicios para empresas de cable, tele-
fónicas, satelitales, de Internet, etc. Con
separación entre oferentes de hardware de
oferentes de contenidos.
Paso ahora a los empresarios. No resulta
razonable exigirle a nadie comportamientos
heroicos o de mártires. Eso está reservado a
muy pocos elegidos. Pero, entre el heroísmo
y el servilismo incondicional, existe un am-
plio espectro de comportamiento y respon-
sabilidad ciudadana sobre lo que muchos
empresarios deberían reflexionar.
Afortunadamente, no están en juego, en
este caso, como en otros momentos de la
historia, sus vidas o las de sus familias. Es
solo un poco de dinero, que podrían cana-
lizar a los medios y voces independientes,
con bajo riesgo. Varios empresarios argen-
tinos respaldados por sus accionistas son
una prueba clara de que “se puede”.
Insisto, el daño actual sobre la libertad de
prensa ya está hecho, cualquiera sea el des-
tino final de los artículos 45 y 161 de la Ley
de medios, En un caso será más grave que
en otro, pero no va a revertir lo que se ha
destruido en estos años.
Recordemos, sin embargo, que todo período
oscuro de la historia termina. Tarde o tem-
prano, la verdadera historia se cuenta como
corresponde, y las responsabilidades colec-
tivas e individuales se explicitan.
A mediados de la década de los sesenta,
un director de cine norteamericano, Blake
Edwards, presentó una parodia bélica que
llevaba por título ¿Qué hiciste tú en la guerra,
papá?
En algún momento, tendremos, cada uno de
nosotros, una vez más, que responder esa
pregunta.
Otoño 2013 Página 27
E m p r e s ap o l í t i c a
la filosofía política de Jorge luis borges
“Si me dicen que todo mi pasado ha sido fatal, ha sido obligatorio, no me importa; pero si me dicen que yo, en este momento, no puedo obrar con libertad, me desespero”.
Esta cita de Jorge Luis Borges es una de las tantas seleccionadas por Martín Krause para sustentar su convicción de que, más allá de decisiones y opiniones políticas
diversas, muchas veces contrapuestas por parte del escritor, existe en el escritor una clara filosofía política -asociada con matices a la representada por el liberalismo
clásico- que se mantuvo firme y constante a lo largo de su vida.
Patria, país y Estado; la política y la democracia; el concepto de libertad son algunos de las cuestiones que se recorren en este artículo y que,
independientemente de las divergencias o coincidencias con lo expresado por Borges, nos invitan a pensar y a reflexionar.
martín Krause
Borges y la política han dado mucho que
hablar, pero la atención que sus opiniones
generaran se ha centrado generalmente
en la anécdota de aquél personaje que
poca atención le prestaba a las noticias
diarias, que basaba buena parte de su
consideración en criterios estéticos y en
particular épicos: desde su admiración
por los militares patrios, y su lucha por
la independencia y libertad argentinas,
hasta su afiliación al Partido Conservador
porque solo los caballeros se suman a las
causas perdidas.
Lamentablemente, estas opiniones polí-
ticas le costaron el premio Nobel, negado
por quienes prefirieron dar prioridad, en la
entrega de un premio literario, a lo “política-
mente correcto” en lugar de lo literariamen-
te extraordinario.
Sin embargo, y pese a que pueden encon-
trarse en su historia decisiones y opiniones
políticas diversas, y hasta contrapuestas,
es opinión de quien escribe que existe una
clara filosofía política en Borges, consistente
y reconocida, la que se mantuvo durante
el transcurso de su larga vida sin modifica-
ciones; y es intención de este artículo pre-
sentarla. ¿Cómo puede una filosofía política
consistente conducir a decisiones políticas
que no lo son e incluso a algunas que con-
tradijeran a esa misma filosofía? La res-
puesta que se propone es que si la primera
era consistente, las segundas se basaban en
esos otros criterios que las llevaron, lamen-
tablemente, a diferir de los principios.
Los elementos centrales de la filosofía po-
lítica de Borges se ajustan en forma muy
clara a principios filosóficos asociados con
el liberalismo clásico e incluso con un ses-
go de lo que ahora se ha dado en llamar
“libertarianismo”, el que, a diferencia del
primero, no propone un Estado limitado
sino que cuestiona hasta su misma existen-
cia sin que esto signifique caer en el anar-
quismo, entendido éste como “ausencia de
normas”. Algo más cercano a lo que ahora
suele denominarse “anarco-capitalismo”,
que propone la eliminación del “monopolio”
del Estado y la provisión de sus servicios
en competencia. Estos elementos son los
siguientes:
Martín Krause es Director de CIIMA/EsEADE. Al presente artículo se le han omitido las citas.
Página 28 EMPRESA Nº209
libre albedrío e individualismo
Sorprendía a muchos el escepticismo de
Borges sobre la existencia del libre albedrío,
sin el cual no podría haber moral ni libertad
individual, pero esto nunca significó que
cayera en las redes del determinismo. Su
posición podría sintetizarse de la siguiente
forma: el ser humano no existe fuera de
las relaciones causa-efecto que rigen el
Universo; está determinado por ellas, pero
le resulta imposible saber qué es lo que lo
determina entre las innumerables causas
existentes. En sus palabras:
“Uno siente que el
Universo responde a
un dibujo. Las cosas
no son absoluta-
mente arbitrarias:
hay cuatro estacio-
nes, nuestra vida va
pasando por etapas:
nacimiento, niñez,
juventud… Podrían
ser indicios de que
hay una trama, de
que este mundo
no es caótico sino
laberíntico. Es como
el libre albedrío. Po-
siblemente no exista, pero uno no puede
pensar que en este momento no es libre,
¿no?”.
Y también:
“… si me dicen que todo mi pasado ha
sido fatal, ha sido obligatorio, no me im-
porta; pero si me dicen que yo, en este
momento, no puedo obrar con libertad,
me desespero”.
Esta capacidad de accionar libremente se
complementa en Borges con lo que en las
ciencias sociales se denomina individua-
lismo metodológico, el cual basa todo su
análisis en la acción humana que no puede
ser sino individual, y descarta de plano la
“hipóstasis” de ciertos conceptos; es decir,
hacer sujetos de existencia real a ideas tales
como “la sociedad”, “el pueblo”, “la nación”,
“la clase obrera” y otros:
“…la muchedumbre es una entidad
ficticia, lo que realmente existe es cada
individuo”.
“Yo creo que solo existen los individuos:
todo lo demás, las naciones y las clases
sociales son meras comodidades intelec-
tuales”.
“Las masas son una entidad abstracta y
posiblemente irreal. Suponer la existen-
cia de la masa es como suponer que to-
das las personas cuyo nombre empieza
con la letra ‘b’ forman una sociedad”.
Inclusive tiene una página literaria específi-
ca sobre el tema: “Tú”, que comienza:
“Un solo hombre ha nacido, un solo
hombre ha muerto en la tierra. Afirmar
lo contrario es mera estadística, es una
adición imposible. No menos importante
que sumar el olor de la lluvia y el sueño
que anoche soñaste”.
Este enfoque se extiende a su idea de “pa-
tria”, más venerada por Borges por la epo-
peya histórica que como concepto social
de “nación”. Así, en la “Elegía de la Patria”
culmina:
“Cifras rojas de los aniversarios,
pompas de mármol, arduos monumentos,
pompas de la palabra, parlamentos,
centenarios y sesquicentenarios,
son la ceniza apenas, la soflama
de los vestigios de esa antigua llama”.
Patria, País, Estado
Borges tuvo muchas patrias, si bien nunca
pensó en desprenderse de ésta, llevando la
concepción individualista también a este
campo. Le preguntan: “¿Cuántas Argentinas
hay? ¿Más de una?”.
Sorprendía a muchos el escepticismo
de Borges sobre la existencia del libre
albedrío, sin el cual no podría haber
moral ni libertad individual, pero esto
nunca significó que cayera por eso en
las redes del determinismo.
E m p r e s ap o l í t i c a
Otoño 2013 Página 29
A lo que contesta: “Muchas, tantas como
individuos. Los países son falsos, los indivi-
duos quizás no lo sean –si es que el indivi-
duo es el mismo al cabo de muchos años”.
Gustaba de “coleccionar” patrias (Argentina,
Uruguay, Suiza, Inglaterra, entre otras) y
descreía de las fronteras y los países:
“Desdichadamente para los hombres,
el planeta ha sido parcelado en países,
cada uno provisto de lealtades, de que-
ridas memorias, de una mitología parti-
cular, de derechos, de agravios, de fron-
teras, de banderas, de escudos y mapas.
Mientras dure este arbitrario estado de
cosas, serán inevitables las guerras”.
“Soy un cosmopolita que atraviesa fron-
teras porque no le gustan”.
El libre albedrío y el individualismo le per-
mitían desplegar una preocupación ética,
individualista, como no puede ser de otra
forma:
“… creo que si cada uno de nosotros
pensara en ser un hombre ético, y trata-
ra de serlo, ya habríamos hecho mucho;
ya que al fin de todo la suma de las con-
ductas depende de cada individuo”.
Y al pretender buscar lo máximo de indi-
viduo, inevitablemente chocaba contra el
Estado, del que descreía profundamente
“El más urgente de los problemas de
nuestra época (ya denunciado con profé-
tica lucidez por el casi olvidado Spencer)
es la gradual intromisión del Estado
en los actos del individuo; en la lucha
contra ese mal, cuyos nombres son co-
munismo y nazismo, el individualismo
argentino, acaso inútil o perjudicial
hasta ahora, encontrará justificación y
deberes”.
“…se empieza por la idea de que el
Estado debe dirigir todo; que es mejor
que haya una corporación que dirija las
cosas, y no que todo ‘quede abandonado
al caos, o a circunstancias individuales’;
y se llega al nazismo o al comunismo,
claro. Toda idea empieza siendo una her-
mosa posibilidad y luego, bueno, cuando
envejece es usada para la tiranía, para la
opresión”.
Sin por ello dejar de ser optimista, pensan-
do que algún día esos Estados ya no exis-
tirían más. Pregunta el personaje Eudoro
Acevedo:
“¿Qué sucedió con los gobiernos? Según
la tradición fueron cayendo gradualmen-
te en desuso. Llamaban a elecciones, de-
claraban guerras, imponían tarifas, con-
fiscaban fortunas, ordenaban arrestos y
pretendían imponer la censura y nadie
en el planeta los acataba. La prensa dejó
de publicar sus colaboraciones y sus
efigies. Los políticos tuvieron que buscar
E m p r e s ap o l í t i c a
Borges: “… creo que si cada uno de nosotros pensara en ser un hombre ético, y tratara de serlo, ya habríamos hecho mucho; ya que al fin de todo la suma de las conductas depende de cada individuo”.
Página 30 EMPRESA Nº209
oficios honestos; algunos fueron buenos
cómicos o buenos curanderos. La reali-
dad sin duda habrá sido más compleja
que este resumen”.
Y dice Borges:
“…para mí el Esta-
do es el enemigo
común ahora; yo
querría -eso lo he
dicho muchas ve-
ces- un mínimo de
Estado y un máximo
de individuo. Pero,
quizá sea preciso
esperar… no sé si
algunos decenios
o siglos –lo cual
históricamente no
es nada-, aunque
yo, ciertamente no
llegaré a ese mundo
sin Estados. Para eso se necesitaría una
humanidad ética, y además, una huma-
nidad intelectualmente más fuerte de lo
que es ahora, de lo que somos nosotros;
ya que, sin duda, somos muy inmorales
y muy poco inteligentes comparados con
esos hombres del porvenir, por eso estoy
de acuerdo con la frase: ‘Yo creo dogmá-
ticamente en el progreso’.”
“Creo que con el tiempo mereceremos
que no haya gobiernos”.
Política y democracia
El descreimiento del Estado no podía sino
estar acompañado por una baja considera-
ción de la política, algo que comparten mu-
chos de los argentinos de hoy. Le dicen que
no tiene una buena opinión de los políticos,
y contesta:
“No. En primer lugar no son hombres
éticos; son hombres que han contraído
el hábito de mentir, el hábito de sobor-
nar, el hábito de sonreír todo el tiempo,
el hábito de quedar bien con todo el
mundo, el hábito de la popularidad…
La profesión de los políticos es mentir.
El caso de un rey es distinto, un rey
es alguien que recibe ese destino, y
luego debe cumplirlo. Un político no,
un político debe fingir todo el tiempo,
debe sonreír, simular cortesía, debe
someterse melancólicamente a los cóc-
teles, a los actos oficiales, a las fechas
patrias”.
“Creo que ningún político puede ser
una persona totalmente sincera. Un
político está buscando siempre electo-
res y dicen lo que esperan que diga. En
el caso de un discurso político, los que
opinan son los oyentes, más que el ora-
dor. El orador es una especie de espejo
o eco de lo que los demás piensan. Si
no es así, fracasa”.
“…yo diría que los políticos vendrían a
ser los últimos plagiarios, los últimos
discípulos de los escritores. Pero, general-
mente con un siglo de atraso, o un poco
más también, sí. Porque todo lo que se
llama actualidad es realmente… y, es
un museo, usualmente arcaico. Ahora
estamos todos embelesados con la demo-
cracia; bueno, todo eso nos lleva a Paine,
a Jefferson, a aquello que pudo ser una
pasión cuando Walt Whitman escribió
sus Hojas de Hierba, en 1855. Todo eso es
la actualidad; de modo que los políticos
serían lectores atrasados, ¿no?, lectores
anticuados, lectores de viejas bibliotecas”.
Su acendrado individualismo lo llevaba
hasta dudar de la posibilidad de la re-
presentación, y de la misma democracia,
pero no por promover las dictaduras o las
monarquías sino porque pensaba que lo
importante no eran los sistemas políticos
sino los individuos y sus valores. Abordan-
do literariamente lo que en economía se
llama “teoría de la agencia”, la que trata
sobre el problema de fondo que se presen-
ta entre el contratante y el contratado, el
representante y el representado, teniendo
En sus propias palabras, Borges se
consideraba un anarquista, si bien
pacífico: “Actualmente yo me definiría
como un inofensivo anarquista; es decir
un hombre que quiere un mínimo de
gobierno y un máximo de individuo”.
E m p r e s ap o l í t i c a
Otoño 2013 Página 31
en cuenta que por definición han de tener
cada uno sus propios intereses, plantea el
dilema fundamental de la representación.
Un grupo de personas se propone organi-
zar un Congreso que represente a toda la
humanidad:
“Twirl, cuya inteligencia era lúcida, ob-
servó que el Congreso presuponía un
problema de índole filosófica. Planear
una asamblea que representara a todos
los hombres era como fijar el número
exacto de los arquetipos platónicos,
enigma que ha atareado durante siglos
la perplejidad de los pensadores. Sugirió
que, sin ir más lejos, don Alejandro Glen-
coe podía representar a los hacendados,
pero también a los grandes precursores
y también a los hombres de barba roja
y a los que están sentados en un sillón.
Nora Erfjord era noruega. ¿Representaría
a las secretarias, a las noruegas o sim-
plemente a todas las mujeres hermosas?
¿Bastaba un ingeniero para representar
a todos los ingenieros, incluso los de
Nueva Zelanda?”.
Es la misma opinión que se encuentra en
la obra magna del economista austriaco
Ludwig von Mises, La acción humana -tratado
de economía, respecto a las acciones indivi-
duales y a la pertenencia de un individuo a
muy diferentes grupos.
La opinión de Borges sobre la democracia
más citada es: “Me sé del todo indigno de
opinar en materia política, pero tal vez me
sea perdonado añadir que descreo de la
democracia, ese curioso abuso de la esta-
dística”. Nuevamente, creyendo más en los
individuos que en los gobiernos:
“Tengo la sospecha de que la forma de
gobierno es muy poco importante, de
que lo importante es el país. Vamos
a suponer que hubiera una república
en Inglaterra o que hubiera una mo-
narquía en Suiza: no sé si cambiarían
mucho las cosas; posiblemente no
cambiarían nada. Porque la gente se-
guiría siendo la misma. De modo que
no creo que una forma de gobierno
determinada sea una especie de pa-
nacea. Quizá les demos demasiada
importancia ahora a las formas de go-
bierno, y quizá sean más importantes
los individuos”.
Borges libertario
En sus propias palabras, Borges se consi-
deraba un anarquista, si bien pacífico: “Ac-
tualmente yo me definiría como un inofen-
sivo anarquista; es decir un hombre que
quiere un mínimo de gobierno y un máximo
de individuo”.
“Soy anarquista. Siempre he creído fer-
vorosamente en el anarquismo. Y en
esto sigo las ideas de mi padre. Es decir,
estoy en contra de los gobiernos, más
aún cuando son dictaduras, y de los es-
tados”.
E m p r e s ap o l í t i c a
Krause: “Su acendrado individualismo lo llevaba hasta dudar de la posibilidad de la representación, y de la misma democracia, pero no por promover las dictaduras o las monarquías sino porque pensaba que lo importante no eran los sistemas políticos sino los individuos y sus valores”.
Página 32 EMPRESA Nº209
Pero esa definición de “anarquista pací-
fico” era presentada para diferenciarse
del anarquismo violento de fines del siglo
XIX y principios del XX. En la actualidad,
su posición sería clasificada como de “li-
bertario”, ya que el ideal de su admirado
Spencer ha sido recreado en este siglo
por pensadores que sostienen la idea de
un Estado pequeño y limitado, tal el caso
de los filósofos Karl Popper y Robert No-
zick y los economistas Ludwig von Mises,
Friedrich von Hayek o Milton Friedman; y
también una variante que incluso cues-
tiona el monopolio de la fuerza de ese
Estado aunque sea mínimo, tal el caso de
Murray Rothbard o David Friedman.
El diccionario define la anarquía como
“falta de todo gobierno en un estado”, o
“desorden, confusión, por ausencia o fla-
queza de la autoridad política”. Teniendo
en cuenta esto, Borges no sería estricta-
mente “anarquista”, si interpretamos el
término como el que pretende la falta
completa de normas y orden, sino un “li-
bertario”, palabra que define actualmente
a un rango amplio de posiciones como las
mencionadas antes.
Dicha filosofía política coloca a Borges a
contrapelo de la sociedad argentina, la que
ante la bancarrota del Estado demanda más
acciones de su parte. Borges pensaba que
el argentino es contradictoriamente indivi-
dualista:
“El argentino hallaría su símbolo en el
gaucho y no en el militar; porque el va-
lor cifrado en aquel por las tradiciones
orales no está al servicio de una causa
y es puro. El gaucho y el compadre son
imaginados como rebeldes; el argentino,
a diferencia de los americanos del Norte
y de casi todos los europeos, no se iden-
tifica con el Estado. Ello puede atribuirse
al hecho general de que el Estado es una
inconcebible abstracción; lo cierto es
que el argentino es un individuo, no un
ciudadano”.
Pero un individuo contradictorio porque
demanda del Estado servicios “suizos”, sin
estar dispuesto a pagar impuestos “sui-
zos”. El espíritu del gaucho ha cambiado,
porque éste era rebelde y no demandaba
ni esperaba nada del Estado, solamente
que lo dejara tranquilo. El gaucho estaba
más cerca del pensamiento político bor-
giano de lo que está el ciudadano argenti-
no de hoy.
E m p r e s ap o l í t i c a
Borges: "En el caso de un discurso político, los que opinan son los oyentes, más que el orador. El orador es una especie de espejo o eco de lo que los demás piensan. Si no es así, fracasa”.
Otoño 2013 Página 33
E m p r e s ainstitucional
premio acdE Enrique shaw 2012
El pasado 24 de octubre de 2012, tuvo lugar
en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires la
entrega de los premios ACDE Enrique Shaw
2012, dirigido a grandes empresas y a pe-
queñas y medianas empresas. La finalidad
era la de reconocer y premiar aquellos pro-
yectos, programas, políticas y prácticas que
faciliten la inclusión laboral de personas
que, por causas diversas, estén excluidas de
la actividad productiva y de una vida plena-
mente digna en la sociedad
El pasado mes de marzo, el Dr. Stefano Za-
magni nos recordaba, en el Foro de ACDE,
la necesidad de cambiar las reglas del juego
en el quehacer económico y social para que
la sociedad haga un viraje hacia la inclu-
sión (se incluye la versión periodística en
esta edición). Para que se dé este cambio
en las formas de crear riqueza, la figura del
empresario es fundamental, aparece como
el principal garante y líder para aunar com-
promisos y responsabilidades comunes jun-
to a otros actores sociales y políticos.
Como asociación cristiana es importante
pensar qué implica crear un mundo más
humano desde la empresa; es decir, desde
la creación de puestos de trabajo, riqueza y
desarrollo para el país. Para los cristianos,
Dios se compromete en la historia creando
amorosamente desde su libertad. Amor y
libertad son los dos atributos que permiten
que la asunción de riesgos, la imaginación y
el sacrificio puedan cambiar las realidades
sociales y de vida de mucha gente a través
del trabajo organizado en una empresa. Un
empresario con un proyecto inclusivo llama
a otras personas para que sean y se desa-
rrollen. Un empresario con un proyecto in-
clusivo sostiene en el tiempo y ante muchas
vicisitudes la existencia de una empresa
solidaria. Un empresario con un proyecto
inclusivo es fuente de esperanza para un
país. En definitiva, un empresario actúa a
imagen y semejanza de Dios, el cual llama a
los seres que no son para que sean, sostiene
a las criaturas en la existencia y las condu-
ce hacia la plenitud.
Página 34 EMPRESA Nº209
los premiados
En esta octava edición del premio, se pre-
sentaron trece empresas dando lugar a cua-
tro premios y una mención especial.
En la categoría de grandes empresas:Primer premio para la empresa COMAU, del
sector automotriz, que presentó el progra-
ma Inclusión Eficiente, dentro de la categoría
de personas excluidas socioeconómicamen-
te. El objetivo del programa; lograr que per-
sonas con capacidades diferentes y vulne-
rables en sus posibilidades puedan acceder
a puestos de trabajo, con el firme propósito
de lograr su adaptación, crecimiento y per-
manencia dentro de la empresa.
Segundo premio para la empresa Globant,
del sector de las tecnologías de la infor-
mación, que presentó el programa TesteAR,
dentro de la categoría de inclusión de em-
pleo joven. Se trata de un proyecto educati-
vo para la inserción laboral, que tiene como
foco capacitar a jóvenes de grupos vulnera-
bles en materias de tecnología. El objetivo:
lograr, al final del curso, la inserción laboral
en IT de un sector marginado ofreciéndo-
les la oportunidad de desarrollarse en este
mercado.
Tercer premio para la empresa Odebrecht,
del sector de ingeniería e infraestructuras,
que presentó el programa Obras que dejan
huella, dentro de la categoría de personas
con discapacidad. El objetivo: desarrollar a
jóvenes, dentro de la organización, para que
adquieran las características y competen-
cias adecuadas a un cargo de Jefe, Encarga-
do o Supervisor de Obra en la especialidad
en que se hayan formado. En todo este
proceso, los jóvenes son acompañados con
evaluaciones de seguimiento cada seis me-
ses, capacitaciones institucionales y cursos
especializados, según el perfil, y desafíos
crecientes en cuanto a la envergadura del
área y del proyecto.
Mención especial para la empresa Securi-
tas Argentina, del sector servicios de segu-
ridad, que presentó el programa Seguridad
inclusiva, dentro de la categoría de personas
con discapacidad. El objetivo: mejorar la
calidad de vida de las personas con disca-
pacidad a través de la inclusión laboral,
basándose en los principios de igualdad
de oportunidad y de trato, de integración y
En el rubro “Inclusión laboral de personas
con discapacidad” en la categoría Pymes, la empresa Discapanch
fue reconocida con el 1º Premio.
Izq.: Globant recibió el 1º Premio ACDE Enrique Shaw en el rubro “Inclusión laboral a través del Empleo Joven”.
Der.: La empresa Comau fue distinguida con el 1º Premio en el rubro “Inclusión laboral de personas excluidas
socioeconómicamente”.
E m p r e s ainstitucional
Otoño 2013 Página 35
participación en la comunidad de trabajo,
creando puestos de trabajo para guardias
con discapacidad, con las mismas condi-
ciones laborales de igualdad que el resto de
personal de seguridad.
En la categoría de pequeñas y medianas empresas:Primer premio a la empresa Discapanch,
del sector de la restauración, por la cadena
laboral de Emprendimientos Argentinos Solida-
rios, dentro de la categoría de personas con
discapacidad. El jurado valoró su trayectoria
empresarial en mantener su misión princi-
pal para crear, generar y gestionar Empleos
Formales para Personas con Discapacidad.
En los parlamentos, Cristiano Rattazzi,
presidente de COMAU y de FIAT Argentina,
agradeció muy especialmente la iniciativa
de ACDE y subrayó el compromiso común
entre las empresas para generar trabajo y
así poder incluir a todos aquellos que quie-
ran trabajar.
Por su parte Guillermo Willi, director ge-
neral de personas de Globant, nos animó a
pensar en grande desde los inicios de la em-
presa en aras de un país mejor y más pro-
ductivo, y enfatizó la estrategia de Globant
en ofrecer empleo donde está el talento en
lugar de que el talento tenga que desplazar-
se a los centros de trabajo habituales como
puede ser la ciudad de Buenos Aires.
El director comercial de Odebrecht, Pablo
Brottier, señaló que el círculo virtuoso en su
empresa pasa por confiar y hacer crecer al
ser humano. Este círculo virtuoso empieza
con la autodisciplina en el trabajo y en lo
que uno hace en la vida para así ganar el
respeto propio y ajeno, que es la fuente de
la confianza y el crecimiento personal; si la
persona crece también lo hará la empresa.
El presidente de Securitas, Luis Vecchi,
nos hizo ver también lo importante que es
pensar en grande partiendo de valores po-
sitivos. Su experiencia es que, gracias a una
buena comunión en valores, la empresa
crece, da trabajo, se integra en el mundo e
incluso logra modificar las reglas del juego,
en el sentido que nos decía Zamagni.
Finalmente el presidente de Discapanch,
Saúl Macyszyn, cerró los parlamentos con
una emotiva exposición que tocó el corazón
de todos los presentes. Habló de su expe-
riencia personal como discapacitado y como
empresario que sabe generar puestos de tra-
bajo continuamente. El éxito en su empresa
es que los propios trabajadores ya no hablan
del lugar de trabajo, sino de su hogar de
trabajo. Finalmente haciendo referencia a la
Madre Teresa de Calcuta, recordó que uno es
una gotita de agua en un mar inmenso, pero
el mar no sería lo mismo si faltara esa gotita.
Los cambios son posibles con empresarios
responsables y comprometidos. Escuchán-
dolos y viendo lo que, podemos reconocer
en ellos la fuente de la sabiduría bíblica,
creadora de mundos dignos del hombre
(Sb.11, 24-26).
Izq.: El 2º Premio en el rubro “Inclusión laboral de personas con discapacidad” fue para la compañía Oderbrecht.
Der.: Securitas recibió una Mención Especial en el rubro “Inclusión
laboral de personas con discapacidad”.
E m p r e s ainstitucional
Página 36 EMPRESA Nº209
E m p r e s atestimonios
Haciendo realidad las ideas: liderando proyectos
diego della barca
Liderar proyectos es una de las tareas que
más me apasiona dentro de mi profesión;
sin embargo, muchas veces me he pregun-
tado qué ha significado esta tarea. Para
responder a este interrogante, me gustaría
compartir una experiencia. En una oportu-
nidad fui seleccionado para llevar adelante
uno de los principales proyectos de una
compañía; todas las miradas apuntaban a
cumplirlo exitosamente y, por ende, tam-
bién apuntaban a mí.
El día de inicio, realizo mi presentación
formal como responsable del proyecto
ante la organización, definiendo el equipo
de trabajo, identificando los proveedores
necesarios y demás acciones imprescin-
dibles que, en conclusión, eran: diseñar
y crear el proceso que llevaría adelante
para alcanzar los objetivos propuestos
por el sponsor, principal interesado de
cumplirlos exitosamente.
También comencé seriamente a preguntar-
me si esto era algo positivo o podría llevar-
me a comandar una de las más grandes ca-
tástrofes de gestión que pondrían en riego
no solo el proyecto sino mi reputación.
No es menor, y fue parte del desafío, encon-
trarme con una organización que carecía
de todo tipo de proceso de gestión, con una
cultura de trabajo verticalista y muy mar-
cada por la jerarquía, como así también
alejada de ser eficiente. Mi primer desafío
fue tratar de empezar a hablar el idioma de
mi equipo de trabajo, dado que las diferen-
cias generacionales eran muy marcadas y,
si bien debo reconocer que los comienzos
fueron turbulentos, luego pude disipar las
diferencias y como líder, potenciar las valio-
sas experiencias de las personas.
Los días comenzaron a pasar; el equipo, ya
afianzado, tenía claramente comunicado el
objetivo de hacia adonde se quería ir para
cumplir con el proyecto. Finalizada esta eta-
pa de inicio, comencé a planificar, a crear
lo que sería el plan de tiempo, gastos, per-
sonas y recursos que se necesitarían para
llevar adelante la gestión. Es allí cuando
uno se encuentra con un nuevo reto: lograr
la aprobación por parte del cliente. Luego
de algunas reuniones de “coordinación”, ha-
bíamos logrado definir un plan en conjunto
y ambas partes contábamos con el tiempo
que llevaría desarrollar el proyecto, cuánto
dinero se gastaría en cada etapa y, por sobre
todo, cuántas personas y en qué momento
iban a ser necesarias.
El proyecto ya evolucionaba, sin embargo, el
“cliente” día a día cambiaba el objetivo final
y, cada vez más frecuentemente, acudían
a verme los miembros del equipo, provee-
dores y demás involucrados manifestando
sus fundadas quejas. Dentro de mí, se dis-
paró, nuevamente, la sensación de si estaba
haciendo lo correcto. Convencido de ello,
procedí a realizar unas de esas tareas críti-
cas que fue lograr que tanto “cliente” como
espónsor pudieran tener bien en claro qué
es lo que se pretendía del proyecto y cuál
debía ser el resultado final y, para sorpresa
de muchos, las visiones eran totalmente
distintas. Della Barca es miembro del grupo ACDE Joven.
Otoño 2013 Página 37
Lo que suponía y alertaba al principio del
proyecto se hizo realidad y me fueron solici-
tadas las primeras grandes modificaciones.
Implementar cambios durante la ejecu-
ción del proyecto no fue una tarea sen-
cilla, requería aplicar mis conocimientos
teniendo siempre presente que debía
cumplir con el proceso de gestión ade-
cuado, dado que cualquier error en esta
fase podría tener grandes consecuencias
en el futuro. Para ello, decidí controlar
continuamente el desarrollo y acompa-
ñar al equipo día a día, “codo a codo”,
promoviendo un liderazgo servicial que
brindó soluciones a inconvenientes que
surgieron durante su ejecución. Establecí
algunos parámetros mínimos de calidad
que necesitábamos cumplir, tanto el equi-
po como los proveedores, asegurando en-
tregarle al cliente no solo lo que ideó sino
algo que funcionara en el tiempo.
Asimismo, y en varias oportunidades, el
espónsor, ante los cambios presupuestarios,
me exigía constantemente acciones que
ponían en riesgo algunos valores que, como
persona y profesional, no estaba dispuesto
a ceder. Creo que la clave del éxito, en éste
como en muchos proyectos, fue mantener
firme mis convicciones y valores. Promulgué
y logré que el equipo adopte valores claves
que sirvieron para llevar adelante el plan
definido.
Es así que, ya sin darme cuenta, me en-
contraba en la etapa final. Muchas cosas
habían pasado, los inicios turbulentos,
una planificación difícil de ser aprobada,
además de una ejecución con muchísimos
cambios troncales a las ideas iniciales; sin
embargo, al mismo tiempo, observaba los
primeros indicadores de la aceptación del
cliente. Por lo tanto, consideré necesario
darle un “cierre” al proyecto. Para ello, y to-
mando algunas buenas prácticas, creí con-
veniente anotar algunas lecciones aprendi-
das que, a futuro, le servirían a la organiza-
ción para afrontar nuevos proyectos de este
tipo de envergadura.
Concluida esta etapa, ya con todo el ma-
terial entregado al cliente y al espónsor, y
una felicitación recibida y trasladada a mi
equipo y proveedores; me encontré con la
respuesta a mi interrogante inicial: ges-
tionar proyectos es mucho más que tomar
acciones para alcanzar un objetivo. Final-
mente, fue adoptar un proceso, seguir cada
una de sus instancias, cumplir con cada
una de sus métricas.
Apegarse lo más posible a esos procesos
de gestión fue lo que me ayudó a operar
de una manera metodológica y obtener
buenos resultados; además me permitió
incrementar el nivel de profesionalismo en
mis tareas.
Invité a mis colaboradores a seguir un pro-
ceso de gestión y les recordé siempre que
realizar proyectos no es más ni menos que
“Hacer realidad las Ideas”.
E m p r e s atestimonios
Della Barca: "Realizar proyectos no es más ni menos que 'Hacer realidad las Ideas'".
Página 38 EMPRESA Nº209
Reflexión
Si levantamos la vista hacia el futuro, a
corto plazo, este es un año de elecciones
importante. Si intentamos mirar más lejos
y más ampliamente, el contexto internacio-
nal muestra el ascenso económico de Asia,
que marca una serie de tendencias que, de
un modo u otro, condicionará los años por
venir. Al mismo tiempo el desafío de los
países avanzados es impulsar la innovación
y el cambio tecnológico para sostener su
liderazgo, lo que está impactando en diver-
sas áreas. Dentro de estas, las más promi-
sorias para la Argentina son la biotecnolo-
gía y las tecnologías aplicadas a ahorrar o
sustituir energía e insumos no renovables.
Este escenario es muy alentador para nues-
tro país a medida que comenzamos el nue-
vo siglo; sin embargo, la incertidumbre, la
profundidad y la velocidad de los cambios
están generando un escenario al mismo
tiempo volátil. Estamos atravesando una
era de incertidumbre y transición a medida
que este nuevo contexto se traslada a la
organización de las instituciones interna-
cionales y cambia el tejido de relaciones de
todo tipo (económicas, políticas, de seguri-
dad, etc.) e impacta sobre la cultura.
En este contexto realizaremos algunas
reflexiones generales sobre la base de lo
que destacan las ideas más recientes de la
economía referidas a las políticas produc-
tivas y el capital social. Las tendencias ac-
tuales del pensamiento sobre el desarrollo
económico han superado la antigua visión
del mismo como mero proceso de “indus-
trialización,” ampliándose a concebir este
proceso como la integración de un conjunto
Marcelo F. ResicoProf. de la Escuela de Economía Francisco Valsecchi, de la UCA
Otoño 2013 Página 39
Estrategia productiva y capital socialde actividades productivas, organizativas
y tecnológicas que requieran trabajadores
cualificados, salarios crecientes y mayores
niveles de valor agregado.
Esta visión implica un avance, sin dudas, y
resulta un aporte para nuestro debate in-
terno puesto que, por lo menos en varios de
sus actores relevantes, sigue girando alrede-
dor del viejo conflicto entre el campo frente
a la industria, o viceversa. La consecuencia
de esta división de ideas e intereses ha
conducido lamentablemente, en la historia
nacional, a una capacidad limitada para
lograr nichos de valor agregado creciente
en mercados globales, y para desarrollar un
patrón productivo con mayores grados de
propiedad local y de relaciones domésticas.
Esto, en otras palabras, significa que no
hemos avanzado lo suficiente en el desa-
rrollo a partir de estos carriles, por lo que
se impone un cambio de mentalidad y del
enfoque.
Según los nuevos avances en la investi-
gación de casos, no es tan relevante el
sector productivo específico, sino el valor
agregado, la tecnología incorporada, la
competitividad, el capital humano, etc.
En este sentido nuestro debate local, por
lo menos en su mayor parte, ha quedado
obsoleto. La antigua división entre los
partidarios de las ventajas comparativas
que terminaban reforzando la “primariza-
ción” de las exportaciones -desentendién-
dose de la generación de empleos- contra
los partidarios que se centraban en la
agregación de valor y generación de em-
pleo -pero sin competitividad, calidad, ni
avance tecnológico- parece estar llegando
a su fin.
Desde este punto de vista, sería importante
desarrollar una estrategia para hacer com-
patible la competitividad de algunos sec-
tores con un proceso propio de desarrollo.
Para ello no alcanza con conseguir aislada-
mente la “competitividad” o la “agregación
de valor” sino con la reunión de ambas
Para esto se requiere una visión de estrate-
gia productiva y de especialización para la
competitividad.
Actualmente, se plantea con evidencia una
oportunidad muy importante para nuestro
país a partir de la demanda sostenida a ni-
vel mundial de los productos alimenticios y
de la agroindustria. De este modo es impor-
tante articular una estructura productiva
estratégica para el desarrollo de distintos
sectores con potencialidad que, por un lado,
se base en la agregación de valor a partir de
las ventajas comparativas de la producción
agropecuaria y extractiva, lo que implica
avanzar potenciando la agroindustria.
También se ha avanzado en la competitivi-
dad y en la integración intra-industrial de
varias cadenas que son importantes para la
economía del país, lo que debe ser apoyado.
En tercer lugar, es recomendable impulsar
la exportación de servicios con alto valor
agregado en conocimiento como el
software, diseño, productos culturales,
turismo, etc. Como puede apreciarse la
diversidad productiva de nuestro país es
una riqueza que, si se convierte de eje de la
Página 40 EMPRESA Nº209
Reflexión
discordia en complementariedad, será una
ventaja extraordinaria en el futuro.
Uno de los elementos centrales del cambio
de mentalidad o de cultura necesarios para
enfrentar este proceso pasa principalmente
en nuestro caso por el sistema de organiza-
ción. Esto implica, en los estudios más re-
cientes, en la red de relaciones sociales que
combinan adecuadamente la cooperación,
la competencia y la autoridad. Algunos
autores hablan en este sentido de “capital
social”. Los países o sectores productivos
que tienen una trama de relaciones sociales
de cooperación, competencia y autoridad
sanas, son los países o sectores que se desa-
rrollan, mientras que los que no los poseen
o se basan en prácticas corrompidas perma-
necen en el subdesarrollo.
Asimismo, los principales estudios distin-
guen dos enfoque principales: el enfoque
de las “cadenas productivas” y el enfoque
de los “distritos regionales” o “agrupamien-
tos” (clusters). Las cadenas productivas se
caracterizan por una gran especialización y
vinculación estrecha entre distintas etapas.
Son similares a los sistemas de producción
en masa, presentando posiciones altamente
especializadas e integradas en cada esla-
bón, por lo que es difícil encontrar susti-
tutos cuando se produce un cambio. Las
cadenas están desplegadas geográficamente
pero se administran y dirigen desde un cen-
tro de decisiones. En este caso existen, a su
vez, dos tipos de organización: las “centra-
das en el producto” -en las cuales el actor
principal es el que maneja la tecnología y
el proceso organizativo para producirlo- y
las “centradas en los consumidores” -en las
que el actor principal de la cadena es el que
consigue identificar y asegurar los merca-
dos para los bienes producidos.
Los distritos locales o agrupamientos son
más bien redes de productores medianos y
pequeños independientes y especializados.
Se basan sobre todo en la innovación, tanto
de los productos, como de las formas de or-
ganización y dependen de un capital huma-
no altamente capacitado. Estas formaciones
productivas dependen de las relaciones so-
ciales del grupo. Suelen ser más estables, no
dependen tanto de diferenciales de salarios
relativos, y son más flexibles y autónomas
que las cadenas. Otra característica es que
su relación se reconfigura permanentemen-
te en relación a cambios en la demanda, la
organización y la tecnología de producción.
Ahora bien, para aprovechar las oportuni-
dades que se presentan al país en el esce-
nario actual y en el futuro cercano, no solo
se requieren buenas ideas técnicas sino un
cambio de organización que implica al mis-
mo tiempo un cambio cultural. Ya sea que
esa estrategia se apoye más en un tipo de
organización u otra, tendremos que desa-
rrollar una nueva cultura del trabajo, de la
organización productiva y del auto-gobierno
que permitan al país aprovechar su poten-
cialidad en las próximas décadas.
Otoño 2013 Página 41
E m p r e s ate c n o l o g í a
las seis “c” de las tecnologías sociales
La Fundación de la Innovación Bankinter celebró hace dos años en Madrid el XVII Future Trends Forum. Esta conferencia reunió a unos cincuenta participantes de
múltiples sectores, ansiosos por saber más acerca del impacto de las tecnologías sociales en sus empresas.
En esta edición extractamos el prólogo del informe presentado en la ocasión, titulado: Tecnologías Sociales. El poder de las conversaciones en red.
Según esta investigación entramos en una nueva fase de la evolución donde se conjugan no tres, sino seis “C”: contenido, comunidad, comercio, conversación,
contexto y conexiones, que nos llevarán e impulsarán hacia adelante. Un nuevo entorno que no solo incluye nuevos modelos de comportamiento on-line, sino que
además ofrece una gama completamente nueva de posibilidades tecnológicas.
andreas Weigend, gam davis y anthony chow
El poder de los datos sociales reside en
convertir lo implícito en explícito. Esta
lúcida declaración al respecto de los da-
tos la hizo Joshua Schachter, el fundador
de Delicious, una web social donde alma-
cenar y compartir marcadores de webs
favoritas.
Durante siglos, los hilos que conforman el
entramado de la sociedad han permaneci-
do ocultos a la vista. A través de nuestras
tarjetas de crédito, de Facebook, de Twitter,
de reservas en restaurantes, de los teléfo-
nos móviles y de muchísimos medios más,
hemos contribuido activamente a crear
una representación externa de nosotros
mismos. Los detalles más escabrosos de la
vida personal de cada uno se pueden de-
ducir de una búsqueda furtiva en Google,
una calumnia fortuita en un foro on-line o
de aquella compra que hace tiempo había
olvidado haber hecho en Amazon. Al unir
todos estos datos, se ha creado una imagen
que, podría decirse, es una versión mejor de
uno mismo. Y, a pesar de todo, hasta hace
poco no se ha materializado el potencial de
los datos sociales.
La sed de información siempre ha estado
en tensión con el deseo de ocultarla y la
tragedia resultante ha sido la asimetría de
la información. Ahora estamos en posición
de deshacer el entuerto. Entre en Airbnb,
un mercado colectivo global que permite
publicar y alquilar bienes inmuebles; la
propuesta de valor consiste en emparejar
a cualquier dueño de una propiedad, que
tenga espacio disponible, con viajeros que
quieran evitar la uniformidad de las habita-
ciones de hotel.
A principios de 2011, a tras solo tres años de
su inicio, Airbnb registró su reserva número
un millón. A través de comentarios, deja-
dos por los usuarios para otros usuarios, se
habían creado perfiles de confianza. Estos
perfiles son los que han permitido que el
visitante y el propietario filtren con faci-
lidad las parejas incompatibles, se genere
confianza y, en última instancia, se aplaque
el miedo de dejar entrar a un desconocido
en casa.
Quisiéramos mencionar también la tecno-
logía social que tiene impacto en un sector
Andreas Weigend es fundador de social Data revolution; gam Dias es fundador de First retail Inc. y Anthony Chow es Profesor de la standford university. Informe presentado en diciembre de 2011.
Página 42 EMPRESA Nº209
que ha sufrido de
esta crisis de infor-
mación: el mercado
laboral. BranchOut
es una aplicación de
Facebook que busca
atajar este proble-
ma, empezando por
mejorar el proceso
de contratación. En
un espacio cada vez
más concurrido.
BranchOut fue el primero en darse cuen-
ta de que la información incluida en la
identidad social de una persona es mucho
más amplia de lo que se desprende de un
currículum o una entrevista. Los detalles
acerca de la ubicación de una persona,
su educación, historial laboral, amigos y
comportamientos nutren los algoritmos
inteligentes de BranchOut para emparejar
oportunidades laborales, que de verdad le
importan a la persona, con personas que
importan a la empresa. No es ninguna sor-
presa que ahora haya más de diez millones
de usuarios activos en la web, deleitándose
de la novedosa libertad de acceso a infor-
mación tanto para el que ofrece como para
el que busca trabajo.
El trío “C” de principios de siglo: contenido, comunidad y comercio
Las tecnologías sociales son muchas más,
pero estamos observando un cambio
radical en la escala del flujo de informa-
ción dentro y entre las sociedades en que
vivimos. Esto era simplemente impensa-
ble hace tan solo ocho años. En 2004, los
equipos de estrategia on-line, reconociendo
el valor de la web de lectura-escritura, de-
fendían el marco de las tres “C”: contenido,
comunidad y comercio. Estas tres palabras
definen conceptos que las tres empresas
dominantes del momento habían abande-
rado: contenido a través de Google, comu-
nidad a través de Facebook y comercio a
través de Amazon. Juntas crearon, enton-
ces, un nuevo ecosistema on-line para las
empresas y las personas.
El predominio de Google en la búsqueda de
contenido se basaba en una estrategia para
redefinir dónde encontrar y compartir con
facilidad las unidades de conocimiento. A lo
largo de este período, Google ha engendrado
y adquirido una serie de servicios adicio-
nales basados en el conocimiento (Maps,
Gmail, Android,Wallet, Google+...; llegando
incluso al concepto de los autos que se
conducen solos), diseñados para ponerlo a
disposición de todos en cualquier lugar del
mundo, a través de cualquier dispositivo.
Independientemente de la vara de medir
que se utilice, sea por culturas, empresas o
países, Google está acumulando contenido
vasto y detallado. Facebook es LA red social,
con mil millones de usuarios que le dedican
el 20% del tiempo que destinan a Internet.
El sitio no solo registra acontecimientos
del mundo real, sino que ha pasado a ser
también el conducto a través del cual se
interactúa con ese mundo real. Esto ya de
por sí es un cambio de paradigma colosal: el
punto en el que la frontera entre lo virtual y
lo físico empieza a desdibujarse.
Las posibilidades que ofrece una identidad
on-line de confianza han sido el gran des-
cubrimiento de Facebook. Gracias a él, se
han generado vínculos auténticos y sin ar-
tificios, creando a su vez comunidades que
han facilitado el diálogo y la creación con-
junta, dando así alas a la rápida construc-
ción de un ecosistema de sectores comple-
tamente nuevos, con aplicaciones que van
desde juegos hasta utilidades prácticas,
manteniendo y expandiendo las fronteras
de la conectividad.
A la vanguardia del comercio se encuentra
Amazon, una empresa que ha conquistado
todas y cada una de las categorías de venta
al por menor en las que ha entrado. Ade-
más, por el camino, ha reinventado otros
sectores a través de Amazon Web Services,
Mechanical Turk, Marketplace y Kindle,
La web de datos sociales se convierte
en una fiesta ensordecedora
donde las personas se buscan entre sí
para compartir intereses y
objetivos comunes.
E m p r e s ate c n o l o g í a
Otoño 2013 Página 43
llegando más lejos de lo que podíamos ima-
ginar: es una tienda con más de cincuenta
millones de usuarios activos que se extien-
de prácticamente por medio mundo. En un
período breve de tiempo, se ha convertido
de facto en el proveedor de compras de
contenidos, independientemente del obje-
tivo. Básicamente, Amazon ha cambiado
la forma en que las personas descubren y
compran productos, así como el comercio
en general.
Este ecosistema creado por el trío “C” de
principios de siglo no se ha mantenido está-
tico. En los últimos años, hemos empezado
a observar desarrollos completamente nue-
vos en la infraestructura técnica como el
cloud computing, el software as a service y un
sistema de distribución para aplicaciones
móviles.
Según la definición que hacía Tim O’Reilly,
de la Web 2.0, este fenómeno supuso un
cambio radical en el modelo de participa-
ción on-line de organizaciones punteras,
pasando del paradigma de “publicar” al de
“participar”. Por tanto, a pesar de haber sido
consideradas en algún momento el santo
grial de la estrategia on-line, nuevas ideas
están suplantando ahora las tres “C”.
Tres “C” que definen los nuevos modelos de negocios: contexto, conexión y conversación
Si examinamos de cerca las tendencias más
recientes, se pueden añadir tres “C” más:
contexto, conexión y conversación. Estos
conceptos, firmemente enraizados en los
datos sociales, están definiendo ahora los
nuevos modelos de negocio; y la evidencia
de su éxito es creciente.
Súbase al transporte público o siéntese en
un restaurante en cualquier lugar del mun-
lo QuE lAs EMPrEsAs DEsCuBrEn En los PErFIlEs En rEDEs soCIAlEs
Positivo
18%de los empleadores encuentra en los sitios sociales contenido que les influye a la hora de contratar a un candidato
50% Una buena impresión de la personalidad delcandidato
39% Confirmación sobre las cualificaciones profesionales del candidato
38% Creatividad
35% Habilidades de comunicación sólidas
33% Formación amplia y equilibrada
19% Buenas referencias del candidato por parte de otras personas
15% Premios y elogios obtenidos por el candidato
negativo
35%de los empleadores encuentra en los sitios sociales contenido que les influye a la hora de contratar a un candidato
53% Fotografías o información inapropiados o provocativos
44% Contenidos sobre el candidato consumiendo alcohol o drogas
35% Comentarios negativos sobre jefes, compañeros o clientes anteriores
29% Habilidades de comunicación pobres
26% Comentarios discriminatorios
24% Mentiras sobre sus titulaciones
20% Información confidencial sobre el anterior empleador del candidato
Fuente: Mindflash.com
E m p r e s ate c n o l o g í a
Página 44 EMPRESA Nº209
do. Verá que la gente está casi permanen-
temente conectada entre sí a través de los
servicios on-line, quizá llegando al extremo
de que si quitáramos estos aparatos ahora,
se produciría un síndrome de abstinencia
psicológico.
Los servicios móviles han proliferado, per-
mitiendo a la gente registrar voluntaria-
mente todo lo que hace en cada momento
y el lugar en que lo hace, creando así millo-
nes de check-ins, subiendo millones de fotos
y registrando millones de “Me gusta” por se-
gundo. La actividad está creando un contex-
to físico muy rico para los datos on-line. Esto
permite lanzar ser-
vicios de tecnología
social, tanto explíci-
tos como implícitos,
para hacer la vida
más fácil. Explícita-
mente, los servicios
conocedores de la
ubicación en tiempo
real, como GoGuide
y Highlig.ht, permi-
ten que las personas
encuentren a miembros de su red social en
el mundo real e, implícitamente, pues las
empresas de tarjetas de crédito son capaces
de emparejar un check-in con una transac-
ción de pago, ofreciendo así una forma más
de autenticar una transacción.
Ahora las personas se conectan entre sí
a escala global: socialmente, profesional-
mente e implícitamente, a través de un
sinfín de redes y con gran flexibilidad de
motivos, tiempos y trascendencia. Como
sociedad, hemos aprendido mucho a lo
largo de los últimos ocho años sobre la
autenticidad de estas conexiones. Aun así,
sistemáticamente somos ingenuos, pues
permitimos que se den comportamientos
maliciosos.
Las tecnologías sociales desempeñarán
un papel en la gestión y autenticación de
la identidad, puesto que el rastro de datos
que deja una persona supone una forma
de verificación más eficaz que otras for-
mas tradicionales disponibles hoy.
El Manifiesto Cluetrain, publicado en 1999,
empezaba con la frase: “Los mercados son
conversaciones”. Exigía que las empresas
hicieran más caso a sus clientes, cuyas opi-
niones se expresaban de forma clara y cris-
talina a través de Internet. El concepto del
feedback de clientes dio vida a Ebay Seller
Ratings, las críticas y rating de Bazaar Voice
y la recogida directa de feedback de Opinion-
Labs, frente a las técnicas de investigación
de mercado tradicionales. En 2012 vivimos
la transformación de las conversaciones en
mercados: servicios como Facebook Market-
place, Twitter y Zaarly empiezan con el diá-
logo y después permiten asociar a los par-
ticipantes según preferencias personales,
identidad y datos de la red más elaborados.
una nueva fase de evolución donde se conjugan las seis “C”
Así entramos en una nueva fase de la evo-
lución donde se conjugan no tres, sino seis
“C”: contenido, comunidad, comercio, con-
versación, contexto y conexiones, que nos
llevarán e impulsarán hacia adelante.
Este nuevo entorno no solo incluye nuevos
modelos de comportamiento on-line, sino
que además ofrece una gama completa-
mente nueva de posibilidades tecnológicas.
A partir de esto, prevemos la aparición de
un conjunto de tecnologías que lo hagan
posible, como sensores, servicios de iden-
tidad y mercados, sustentados respectiva-
mente por los nuevos paradigmas del con-
texto, las conexiones y las conversaciones.
Los sensores en objetos, lugares y posicio-
nes serán los ojos y oídos de la Web: per-
mitirán que las personas den y reciban un
contexto para sus datos móviles. Un sen-
sor en una tienda física permitirá regis-
trar de forma pasiva las visitas de clien-
tes. Sin embargo, una vez registradas, la
tienda podrá reconocer a la persona como
Los conceptos de contexto, conexión
y conversación, firmemente enraizados
en los datos sociales, están definiendo
ahora los nuevos modelos de negocio.
E m p r e s ate c n o l o g í a
Otoño 2013 Página 45
E m p r e s ate c n o l o g í a
IDEnTIDADEs MúlTIPlEs¿Qué identidades on-line están empleando más las personas para registrarse en la Web?
En todos los sitios en generalLos usuarios han dejado una cosa clara: cuando se trata de utilizar una identidad en Internet, quieren contar con varios proveedores para elegir.
2%
7%
13%
14%
1%
46%
sitios de entretenimientoDe los deportes a los reality shows, pasando por la música y las películas, el 90 % de quienes inician sesión en sitios on-line de entretenimiento lo hace con su usuario de red social. Estos sitios tienden a incorporar características sociales como chat en vivo y encuestas de opinión que animan a los usuarios a interactuar con su red de amigos ya existente.
sitios de B2BMientras Facebook sigue dominando la masa de los negocios, los usuarios de sitios B2B prefieren utilizar sus identidades de Google o Yahoo. LinkedIn también muestra una gran presencia en este grupo de sitios.
sitios de noticiasPara comentar o compartir las últimas noticias, los lectores escogen Twitter, para conectarse antes que cualquier otro proveedor de identidad. Google y Yahoo juntos engloban a más de un cuarto de los lectores de noticias on-line.
52%45%
25%
1%
1%otros
Otros
1%
16%
15%
11%
14%
7%
1%
37%19%
18%
18%3%
3%1%
1%
Página 46 EMPRESA Nº209
un cliente fiel o un cliente nuevo, y po-
drá ofrecer una experiencia diferente en
función de ello. Los sensores permitirán
que las personas creen más datos sobre sí
mismas de forma pasiva y a través de un
proceso más práctico.
Las nuevas formas de autenticar la iden-
tidad asociando a las personas con sus
datos complementarán y hasta sustitui-
rán los controles físicos actuales. Un sis-
tema de identidad basado en el análisis
de datos sociales podría ser más difícil de
poner en peligro que un servicio de repu-
tación centralizado. Este pilar, arraigado
en diálogos e interacciones, será necesa-
rio para generar la red de confianza que
posibilite una economía propulsada por
los datos.
Conforme las per-
sonas se expresen
on-line, dando
a conocer más y
más opiniones,
aficiones y vicios
propios, la web de
datos sociales se
convierte en una
fiesta ensordece-
dora donde las personas se buscan entre
sí para compartir intereses y objetivos
comunes. Conforme se conecten, inte-
ractuarán y dilucidarán cómo negociar
en beneficio mutuo, convirtiendo de he-
cho las conversaciones en mercados. Los
servicios que faciliten esas conexiones
evolucionarán: hoy, una persona puede
decirle qué necesita a un vendedor con
un inventario publicado.
En el futuro, un vendedor que ofrezca un
producto o servicio dirá que necesita un
cliente y un sistema encontrará clientes
desde un inventario de necesidades. Los
espacios de venta serán realmente bidirec-
cionales y evolucionarán para hacer que
conversaciones ya de por sí valiosas sean
mucho más productivas.
Desde lo sublime hasta lo ridículo, de los
pronósticos al presente. La verdad es que
reconocemos que hacer pronósticos, a
fin de cuentas, es muy complicado, sobre
todo cuando se hacen en referencia al
futuro, como dijo el famoso físico Niels
Bohr. Por eso, más allá de los meros pro-
nósticos, quisiéramos en cambio preparar
a las personas ante lo que está por llegar.
Para ello, primero deben aceptar con los
brazos abiertos la idea de que la revolu-
ción de los datos sociales ha llegado para
quedarse y que las ramificaciones de las
tecnologías sociales empaparán todos los
sectores que existen.
Abierto a las posibilidades que ofrece el futuro
Hemos recogido nuevos inventos tecno-
lógicos, ideas que crean tendencia y qui-
meras que nos atraen, todas alentadas
por el crecimiento sin precedentes de las
tecnologías sociales. Sin embargo, antes
de leerla, le rogamos a usted, estimado
lector, que pondere los paradigmas pre-
sentes.
Reflexione sobre la arraigada visión del
mundo respecto a la privacidad y la pro-
piedad, visión que ha mantenido usted
con empeño por una mezcla de lamento
nostálgico y cómoda inercia. Deje que la
defensa de las posibilidades, que ofrecen
las seis “C” de las tecnologías sociales, le
fascine. Y, lo que es más importante, le in-
vitamos a unirse a nosotros y dejarse lle-
var para dar la bienvenida a las amplias
posibilidades que ofrece el futuro.
Google, Facebook y Amazon crearon
un nuevo ecosistema on-line para las
empresas y las personas.
E m p r e s ate c n o l o g í a
Otoño 2013 Página 47
Eduardo r. alsina reconocimiento revista EmprEsa
Fue por julio o agosto de 1996, cuando Eduardo R. Alsina dio sus primeros pa-sos en la Comisión de EMPRESA.
Y en este ámbito, fuimos conociendo a este hombre respetuoso, cuidadoso de las formas y defensor del buen decir, con una cordialidad que no desdibujaba la fuerza de sus convicciones. Eduardo aceptaba este desafío editorial que lo obligaba gustoso a una mayor rigurosidad por la lectura y a despuntar el vicio de escribir. Poco a poco, su compromiso y dedicación lo fue convirtiendo en un referente de la Comisión.
Un trabajo minucioso de clasificación de los artículos lo encontraba llegando a las reuniones quincenales con carpetas voluminosas y con todo el material di-vidido y marcado con comentarios. Su generosidad le permitía compartir entre nosotros -sus compañeros más desordenados- colaboraciones o notas traspa-peladas u olvidadas en nuestros propios escritorios.
Supo, en este tiempo de encuentros, construir lazos con todos lo que fueron participando de este proyecto de comunicación de ACDE. “Los gratos amigos
E m p r e s ainstitucional
EMPRESA reconoce cada año a quienes han aportado su reflexión, pensamiento y compromiso en el contenido y la producción editorial de la revista.
El año pasado, el Premio EMPRESA fue otorgado a Eduardo R. Alsina, quien fuera miembro de los Consejos de Redacción y Editorial, ejerciendo luego la dirección de
nuestra publicación.
Eduardo Alsina recibe el Premio EMPRESA 2012, rodeado de amigos que han participado y participan de la vida de la revista.
Página 48 EMPRESA Nº209
que aparecen y te sorprenden en la etapa madura de la vida”, suele decir Luis Riva, haciendo referencia a su persona.
Justamente con Luis, Horacio Bolaños y Ro-berto Martínez Nogueira, en el año 2000, lograron consolidar un Consejo Editorial que marcó la impronta de los editoriales de EMPRESA
En 2002, luego de dirigir el número especial por los 50 años de ACDE, Eduardo asumió como Director de la revista hasta junio de 2003.
Su exigencia para que cada edición saliera de la mejor manera, nos encontró una vez en plena madrugada, aprobando los pliegos de ese número aniversario; una anécdota que, con el paso del tiempo, recordamos y festejamos.
Con el ejercicio de la redacción que le demandaba EMPRESA, su pluma fue tomando vuelo; una seguridad que lo animó a cumplir un sueño muy preciado: convertir un cuento para chicos en una publicación editada para sus nietos, con ilustraciones propias gracias a otra de su pasiones: el dibujo. Quizás Eduardo na-ció como dibujante…
Su familia siempre ha sido y es el centro de su vida, y su papel de padre gene-roso y abuelo presente le ha permitido ver con su mujer, Elisa, el crecimiento de los Alsina.
Dicen que segundas partes no son buenas, pero la de Eduardo fue una excep-ción. Hace unos años volvió al Consejo de Redacción, compartiendo ese tiem-po dedicado con las responsabilidades propias en la empresa. Pero los tiempos modernos demandaron otras exigencias, lo que lo obligó dar un definitivo paso al costado.
Estimado lector; Eduardo ha cumplido un papel destacado para que hoy EM-PRESA llegue a sus manos. De allí este merecido reconocimiento.
Para los que más lo conocemos, nos queda el placer de recibir en las Fiestas Navideñas, casi en silencio, una tarjeta dibujada y confeccionada por él, con el saludo de una amistad que se renueva año tras año.
Eduardo otsubo
E m p r e s ainstitucional
Eduardo R. Alsina, recibiendo el Premio
Santa Clara de Asís 2002 otorgado a la revista
EMPRESA.